Con ella la afectividad aparecía ella era como mi madre cuando la volví a ver lloraba con facilidad y yo solo la acariciaba y era placentero hacerlo me nacía espontáneamente era mágico me gustaba mucho esa cercanía que ocasionaba y yo por eso podía ir a verla cruzar kilómetros y a veces decepcionarme cuando no sucedía aquello la cercanía afectiva me mataba y aún lo haría pero los peros surgieron y uno creció como la mala hierba lo hace…