La gruta 476

La Gruta

Agosto de 2016

nº

476

BOLETÍN del SANTUARIO NACIONAL de La Gruta de Lourdes Avda. de las Instrucciones 2223. MONTEVIDEO - Uruguay. Tel.: 2222 3532 grutadelourdes@interware.org www.umbrales.edu.uy

Jubileo de la Misericordia Misericordia y juicio No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados. Den, y se les dará... Porque la medida con que ustedes midan también se usará para ustedes”... El discípulo no es superior al maestro; cuando el discípulo llegue a ser perfecto, será como su maestro. ¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no ves la viga mque está en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, deja que te saque la paja de tu ojo”, tú, que no ves la viga que tienes en el tuyo? ¡Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la paja del ojo de tu hermano.

La Gruta n.476

Lucas 6,37-421

Actualidad JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD Del 26 al 31 de julio se celebró en Cracovia (Polonia) la Jornada Mundial n.31 de la Juventud con el Jubileo de los Jóvenes. El lema fue: “Bienaventurados los misericordiosos” (Mt 5,7). Hubo jóvenes provenientes de 187 países. Cracovia es la ciudad donde hay 220 mil estudiantes universitarios; es la ciudad de Karol Wojtyla donde fue estudiante universitario, obrero, actor y poeta, sacerdote, docente universitario, obispo y cardenal.

Durante la semana hubo catequesis todos los días por parte de los obispos, en distintos idiomas. Además del Festival de la Juventud, hubo un musical dedicado a los cristianos perseguidos, titulado: “Por causa de mi nombre”. Se celebró además de un solemne Vía Crucis, una extraordinaria vigilia de oración la noche del sábado en el “Campo de la Misericordia”. En la multitudinaria misa de clausura el Papa vistió una casulla cosida por chicas refugiadas iraquíes. Hubo cerca de un millón de jóvenes europeos: 80 mil los polacos, 63 mil los italianos, 30 mil los españoles... De Estados Unidos llegaron 40 mil. Desde América Latina los más numerosos fueron los brasileños (15 mil), los que hace tres años habían celebrado el anterior Encuentro Mundial en Río de Janeiro; 7 mil fueron los argentinos. Uruguay participó con 350 jóvenes, acompañados por el Arzobispo Daniel Sturla.

El Papa Francisco visitó el Santuario de la Divina Misericordia y rezó sobre la tumba de santa Faustina Kowalska. Ella, junto a san Juan Pablo II y al beato Pier Giorgio Frassati cuyos restos mortales estaban presentes, fueron los patronos de la semana. El Papa también visitó la basílica de la Virgen de Czestochowa. Hace 25 años, en este mismo santuario, se celebró otra Jornada Mundial de la Juventud cuando los jóvenes del este y del oeste se abrazaron por primera vez después 2

de la caída del muro de Berlín. Ahora son otros los muros con alambre de púa que impiden a los prófugos de Oriente Medio entrar en Europa.

El 60% de los peregrinos fueron alojados en domicilios privados y el 40% en edificios públicos.

Los delegados juveniles de las 41 diócesis polacas, llevaban para cada una de las diócesis un nombre bíblico distinto: Galilea, Getsemaní, Jordán, Betania, Tabor, Gólgota, etc. Estos jóvenes organizaron la campaña “Un boleto para tu hermano” para pagarles el viaje a los jóvenes que venían de países en guerra.

Participaron unos doscientos jóvenes iraquíes que durante la celebración del Vía Crucis, rezaron el Padre Nuestro en arameo, el dialecto que hablaba Jesús. Había muchos jóvenes de Ucrania. Como signo concreto de misericordia Cáritas y los jóvenes polacos levantaron un centro de rehabilitación y esparcimiento para ancianos y un almacén llamado “Casa del pan” con comida destinada a los pobre más pobres.

El 29 el Papa visitó también AuschwitzBirkenau. Se trata del más grande campo de exterminio nazi, el anti-signo de lo que es la misericordia que predicó el Papa. El Papa rezó en la celda de san Maximiliano Kolbe en el 75 aniversario de su muerte. Este sacerdote entregó voluntariamente su vida en lugar de un padre de familia y murió en el bunker del hambre.

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Jubileo de la Misericordia ¡Cuánto mal hacen las palabras * cuando están motivadas por sentiMisericordia y juicio mientos de celos y envidia! Hablar

No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados.

Den, y se les dará. Les volcarán sobre el regazo una buena medida, apretada, sacudida y desbordante. Porque la medida con que ustedes midan también se usará para ustedes.

Les hizo también esta comparación: ¿Puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en un pozo?

El discípulo no es superior al maestro; cuando el discípulo llegue a ser perfecto, será como su maestro. ¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no ves la viga que está en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, deja que te saque la paja de tu ojo”, tú, que no ves la viga que tienes en el tuyo? ¡Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la paja del ojo de tu hermano.

Lc 6,37-42

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mal del propio hermano en su ausencia equivale a exponerlo al descrédito, a comprometer su reputación y a dejarlo a merced del chisme.

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No juzgar y no condenar significa, en positivo, saber percibir lo que de bueno hay en cada persona y no permitir que deba sufrir por nuestro juicio parcial y por nuestra presunción de saberlo todo. Sin embargo, esto no es todavía suficiente para manifestar la misericordia. Jesús pide también perdonar y dar. Ser instrumentos del perdón, porque hemos sido los primeros en haberlo recibido de Dios. Ser generosos con todos sabiendo que también Dios dispensa sobre nosotros su benevolencia con magnanimidad.

No es bueno creer que podemos valorar * las acciones y las condiciones por las que pasan nuestros hermanos y emitir opiniones o juicios, porque no tenemos autoridad sobre ello, y por otra parte, para que los demás no lo hagan con nosotros de igual forma. Perdonen dice Jesús, esto es, libremos de la pena que le causa dolor, daño, molestia o castigo a un hermano.

Preguntas ¿Te sientes superior a los demás? ¿Cuándo te resulta imposible no juzgar? ¿Con quién logras ser gratuito en tu don? ¿Cuándo te parece mal ser gratuito?

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Den y se les dará. Dar es regalar, ceder voluntaria y gratuitamente, y sin pensar en pedir retribución, es poner en manos de otra persona lo que ella necesita, jamás lo que nos sobre o no nos sirve. Es proporcionar, proveer, asignar o adjudicar según lo que corresponde.

Pero también es sugerir, indicar, otorgar o conceder como una gracia. Nuestros actos de amor al prójimo son dar, perdonar una ofensa es dar. Y luego nos agrega esta advertencia: “Porque la medida con que ustedes midan también se usará para ustedes".

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¿Puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en un pozo? Hay muchos tipos de ceguera: es ciego el que esta ofuscado o incapacitado para pensar con claridad, y el que esta poseído o dominado por un sentimiento o por una inclinación fuerte, un resentimiento que lo tiene ciego de ira. Es bueno reconocer nuestro grado de ceguera, pero mejor es si admitimos que ansiamos la luz, la luz de la verdad, la luz para llegar a Jesús.

Dice Jesús: El discípulo no es superior al * maestro; cuando el discípulo llegue a ser per-

fecto, será como su maestro. Porque el discípulo es la persona que aprende y recibe la enseñanza del maestro, sigue y defiende las ideas del maestro.

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Finalmente con la comparación de la viga y de la paja, Jesús consigue dar gran realce a las ideas y a las imágenes mentales, gracias a la fuerza expresiva con que las manifiesta. Estas palabras de Jesús son moniciones clásicas en nuestros labios, incluso, parece que disfrutamos al emplearlas. Entendamos que ellas indican cómo debemos ejercer la crítica para con los hermanos. Jesús no se refiere a una crítica indiscriminada del prójimo, sino a la que se debe ejercer en el seno de la comunidad, a la que un hermano hace a otro hermano, dando por supuesto que se trata de corregirlo para llevarlo al buen camino. La crítica o corrección fraterna debe hacerse desde una actitud de amor, desde el conocimiento de uno mismo y la comprensión del otro. Cualquier otro tipo de crítica que no se base sobre estos presupuestos agrandará las diferencias entre hermanos y romperá los lazos con el prójimo.

¡D

en gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterno su amor! ¿Quién puede hablar de las proezas del Señor y proclamar todas sus alabanzas? ¡Felices los que proceden con rectitud, los que practican la justicia en todo tiempo!

Acuérdate de mí, Señor, por el amor que tienes a tu pueblo; visítame con tu salvación, para que vea la felicidad de tus elegidos, para que me alegre con la alegría de tu nación y me gloríe con el pueblo de tu herencia.

Se acordó de su alianza en favor de ellos

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y se arrepintió por su gran misericordia; hizo que les tuvieran compasión los que los habían llevado cautivos.

Sálvanos, Señor y Dios nuestro; congréganos de entre las naciones, para que podamos dar gracias a tu santo Nombre y gloriarnos de haberte alabado. ¡Bendito sea el Señor, Dios de Israel, desde ahora y para siempre!

Y todo el pueblo diga: ¡Amén! ¡Aleluya! del Salmo 106

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Jubileo de la Misericordia Misericordia y juicio Retomamos en este boletín la homilia del papa Francisco al abrir la Puerta Santa en Roma el pasado 8 de diciembre, inicio del Jubileo extraordinario de la Misericordia. En esa oportunidad el Papa afirmó con fuerza que la Misericordia de Dios ha de ser anunciada porque siempre prevalece sobre el Juicio.

Queridos hermanos y hermanas: En unos momentos tendré la alegría de abrir la Puerta Santa de la Misericordia.

Llevamos a cabo este acto, tan simple pero tan altamente simbólico, a la luz de la palabra de Dios que acabamos de escuchar. Esa palabra destaca la primacía de la gracia. Una y otra vez estas lecturas nos hacen pensar en las palabras con las que el ángel Gabriel le dijo a una asombrada jovencita acerca del misterio que estaba a punto de envolverla: "Alégrate, llena de gracia" (Lc 1,28).

La Virgen María fue llamada a alegrarse, sobre todo, por lo que el Señor realizó en ella. La gracia de Dios la envolvió y la hizo digna de convertirse en la Madre de Cristo. Cuando el ángel Gabriel entró en su casa, incluso los más profundos e impenetrables misterios, se convirtieron para ella en un motivo de alegría, fe y abandono en el mensaje revelado. La plenitud de la gracia puede transformar el corazón humano y puede hacer algo tan grande como cambiar el curso de la historia humana.

María concebida sin pecado original La fiesta de la Inmaculada Concepción expresa la grandeza del amor de Dios. No sólo le perdona el pecado, sino que a María, incluso, le evita el pecado original presente en cada hombre y mujer que viene a este mundo. Este La Gruta n.476

es el amor de Dios que precede, anticipa y salva.

El comienzo de la historia del pecado en el Jardín del Edén cede a un plan de salvación de amor. Las palabras del Génesis reflejan nuestra propia experiencia diaria: estamos constantemente tentados a la desobediencia, una desobediencia expresada en el deseo de ir sobre nuestras vidas sin tener en cuenta la voluntad de Dios.

Esta es la enemistad que mantiene golpeada a la vida de las personas, poniéndolos en la oposición al plan de Dios.

Sin embargo, la historia del pecado sólo puede entenderse a la luz del amor y el perdón de Dios. Si el pecado fuese lo único que importara, nosotros seríamos las criaturas más desesperadas. Pero el triunfo prometido del amor de Cristo envuelve todo en la misericordia del Padre.

María es testigo del amor La palabra de Dios que acabamos de escuchar no deja ninguna duda sobre esto. La Virgen Inmaculada se nos presenta como un testigo privilegiado de esta promesa y su cumplimiento.

El año de la misericordia es un encuentro personal con Dios Este extraordinario Año Santo, es en sí mismo, un don de la gracia. Pasar a través de la 5

Puerta Santa significa redescubrir la infinita misericordia del Padre que da la bienvenida a todos y va personalmente a encontrarse con cada uno de ellos. Este será un año en el que creceremos cada vez más convencidos de la misericordia de Dios. ¡Cuánto mal le hacemos a Dios y a su gracia cuando hablamos de pecadores siendo castigados por su juicio antes de hablar de su "ser perdonado por su misericordia"! (cf. San Agustín, De Praedestinatione Sanctorum, 12, 24) Pero esa es la verdad.

Tenemos que poner la misericordia antes que el juicio, y en todo caso el juicio de Dios será siempre a la luz de su misericordia. Al pasar a través de la Puerta Santa, entonces, que podamos sentir que nosotros mismos somos parte de este misterio de amor.

Hagamos a un lado todo temor y espanto, porque esto no beneficia a hombres y mujeres que son amados. En su lugar, vamos a experimentar la alegría de encontrarnos con que la gracia que transforma todas las cosas.

Dejar atrás el auto-encierro Hoy en día, al pasar a través de la Puerta Santa, también queremos recordar otra puerta, que hace cincuenta años los Padres del Concilio Vaticano II abrieron al mundo. Este aniversario no puede ser recordado sólo por el legado de documentos del Concilio, que dan testimonio de un gran avance en la fe. Ante todo, el Concilio fue un encuentro. Un encuentro genuino entre la Iglesia y los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Un encuentro marcado por el poder del Espíritu, que impulsó a la Iglesia a salir de los bancos de arena que durante años habían mantenido su auto-encierro de manera que se establece una vez más, con entusiasmo, en su viaje misionero. Fue la reanudación de un viaje para encontrarse con las personas donde viven: en sus ciudades y casas, en sus lugares de trabajo.

Dondequiera que haya gente, la Iglesia está llamada a llegar a ellos y llevar la alegría del Evangelio. Después de estas décadas, volvemos a tomar este impulso misionero con la misma potencia y entusiasmo.

El Jubileo nos desafía a esta apertura, y exige que no descuidamos el espíritu que surgió del Concilio Vaticano II, el espíritu de la samaritana, como el Beato Pablo VI lo expresó al concluir el Concilio.

Que nuestro pasar por la Puerta Santa de hoy nos comprometan a hacer nuestra propia misericordia del buen samaritano

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Parábolas de HO Y - Me voy o me comprometo HOY Lo vi pasar con sus tres hijos de 8, 6, 4 años. “¿De dónde venís?” - “¡Del club “Las ardillas!”. “¿Dónde queda?”. “Está en pleno barrio Boston. Lástima que hay que tomar dos ómnibus. Es lindo, tiene pileta, y… es otra cosa”. “¿Otra cosa cómo? ¿Qué tiene de nuevo?”.

“Mirás, nosotros nos vamos todas las semanas. La gente “bien”, los chicos “educados”, los padres “acompañan” a los chicos a la piletas. En fin, “otro” barrio, “otra” gente, “otra” cosa… ¿Qué vas a “esperar” de este barrio… por los chicos te digo… qué puede salir de este barrio. Está bien… tenemos escuelas, ahora liceo, una policlínica nueva, una plaza de lujo… están mejorando el centro del barrio con unas pistas para patines… pero con estos asentamientos… ¿Qué puedes “esperar”?”. “¿Cómo, “qué puedes esperar”? Aquí, no hay nada que esperar, sino, ¡Hay que hacer… Y mucho que hacer!”. “¡Nooo! Esto no lo arregla nadie!”. “¡Cierto que esto no lo arregla nadie, porque nosotros, que somos del barrio, nos borramos, y cuando nos borramos, no queda nadie. ¡No es que nos borren, sino que, nos borramos. Nuestros chicos están… “huérfanos, digamos. Entonces vamos a otros barrios en busca de “padrinos”. Se trata de dos posturas. O nosotros nos ponemos a sanear el barrio o emigramos en busca de “barrios padrinos”, que nos adopten. Nos declaramos padres “discapacitados, en situación crítica… de calle… de riesgo… y emigramos.

Terminamos como los refugiados de Siria o de Libia.

Salimos a buscar algún país tranquilo. ¿Por qué no nos ponemos los pantalones y arreglamos nuestro barrio?… ¡A vos, no te importan los vecinos! El barrio se pudrió porque cada uno se mira para adentro. Quedó huérfano de amor solidario, fraterno, familiar. Hoy nos damos cuenta que allí, en la puerta de mi casa, en la cuadra está el peligro”. “¡Esto ya no tiene arreglo!”. “¿Ya firmaste la rendición?”. “¡No! Imagínate vos!... Hace unos meses se mataron en la esquina; la semana pasada, un vecino, se suicidó. El otro día le desvalijaron la casa al K. … ¿A vos te parece que podemos sacar adelante a los hijos entre tanta m.?

Cuando hablamos de que hicieran limpieza de las bocas de venta de la droga… nos dijeron que esperaban, para ver si agarraban algún pescado gordo… mientras tanto se nos echan a perder nuestros hijos. Claro, para ellos, son pescados chicos… para mi, son todo lo que tengo”. “¿Viste? Sos igual que ellos. Para vos los hijos del vecino no existen; el barrio no te importa; te metiste para adentro borrándote del barrio, y hoy… te escapás como un refugiado… ¿Después? Chillarás porque te discriminan y tus hijos sufrirán, con el desarraigo, la fatiga de reacomodarse en el nuevo ambiente y nuevos amigos … ¡Vaya repecho!”.

“Bueno, pero si nosotros queremos salvar a nuestros hijos y esa es nuestra misión, porque ellos son nuestros pescados gordos, ¿Qué podemos hacer?”. “¡Cambiar!”. “¿Cambiar qué? Cambiar ¿cómo? ¿Por dónde empezar?”. “Empecemos por mirar las cosas de otro modo! Hay que darse cuenta que la familia comienza a crecer y están tus hijos, los hijos de la cuadra, los hijos del barrio, del país y del mundo. Hoy el mundo se achicó La Gruta n.476

y tu hijo quizás se case con una canadiense y tu hija con un japonés. Tenés que agrandar tu paternidad, tu responsabilidad paterna y asumir que somos ciudadanos del mundo, pero que tenemos por comenzar por el barrio a “hacernos cargo del barrio” para no terminar siendo refugiado”. “Bueno, pero ¿Como empezamos?”. “Yo pienso que si el problema es que “cada unos está en lo suyo…” tenemos que poner en común nuestras expectativas y nuestras dificultades.

Para eso tenemos que reunirnos”. “¡Sí!… para tener más problemas…”. “Si no nos sacamos de la cabeza ese pesimismo, no vamos a ninguna parte. ¿No querés que hablemos con el cura? Mirás. Una palabra más es siempre útil. Tiene lugar para las reuniones y… ¡Dale!”.

El cura nos citó para el martes a las 19,30 hs. Ye tenía un grupito de gente. Empezó a hablar del Bautismo, de que todos somos hermanos porque hijos del mismo Padre, de que la ley de la familia cristiana es la del amor, de que nuestra misión no termina en nuestra casa, que entre todos tenemos que hacernos responsables de la convivencia del barrio y que cada uno debe sentir que su paternidad se debe extender más allá de sus hijos, de los amigos y, participando en la vida y en la gestión de todos los centros comunitarios debe hacer del barrio una familia, una escuela, un país. Si la droga y la violencia ganan el barrio la culpa no la tienen los colombianos ni los mejicanos, sino las avestruz que lo caminan. Explicó lo del avestruz. Nos dijo que hay tener una formación profunda que llegue a las consciencia. Las personas deben tener principios claros desde la primera infancia.

Serán su defensa sus anticuerpos. El vacío interior es el mejor amigo del narcotraficante. Los mayores nos volvemos cómplices si nos aislamos cediendo territorio.

Cuando a los hijos les presentamos ideales lindos, aún exigentes, ellos se entusiasman y superan muchas dificultades especialmente la de la droga y la violencia.

Un barrio de individualistas, dividido y atomizado es el mejor caldo de cultivo de todos los vicios. La fuerza más necesaria es la que nace desde adentro de la persona, por eso la fe es necesaria. Jesús es nuestra fuerza…

“Muchas otras cosas dijo el cura y yo iba a preguntarle algo pero, una señora, dijo que era tarde y nos fuimos…

Pero entendí que hay que aprovechar de todos los recursos para construir una comunidad con proyectos e ideales. La próxima vez me gustaría que se tratara del “asentamiento”. Se han hecho muchas cosas lindas, pero ninguna “obra bandera” puede obviar los problemas propios y cotidianos de un asentamiento. Estoy agradecido por las mejoras pero, hay que estar…, apretados y acosados por el espacio, los gritos, las amenazas, las peleas, y las violencias frecuentes. El “asentamiento” desgasta los buenos propósitos, agota la paciencia, provoca al desafío y termina con las amenazas, y, cuando no, a peor. Y cuando tenés chicos… “¡Pa’ dentro ya!” Y no hay programa que te saque del contexto “pelea”. Vamos a ver si juntos… pero juntos, y entre todos, nos mejoramos, lo mejoramos”. “Por los hijos… sí, por los hijos”. Me decía uno: tres “D” contra la droga: Dios, Decisión, Diálogo.

Rodolfo Bonci

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Oración a los pies de La Gruta

viernes 9 de setiembre de 2016 a las 18 hs. en el despacho parroquial: formación de los voluntarios del día 11.

Padre Santo, hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo. Crea en nosotros aquella disponibilidad propia del Corazón de tu Hijo: “Aquí estoy, mi Dios, para hacer tu voluntad”. Danos la gracia de descubrir tu voluntad en todas las circunstancias de la vida, siempre abiertos a todos tus hijos en espíritu de fraterno servicio. ¡Que tu Hijo Jesús viva en nosotros y su luz resplandezca en nuestro espíritu! Acepta nuestra humilde colaboración hasta el sacrificio y la entrega total para que venga un mundo más humano.

Amén.

Jornada Diocesana de la Juventud y de los adolescentes Será el próximo 3 y 4 de setiembre. Los jóvenes se enJMJ Cracovia 2016 contrarán el sábado 3 a las 18 en Clara Jackson (hasta las 23); el domingo 4 en Tacurú a las 10: se culmina con la misa en la parroquia de Guadalupe, del Barrio Borro (13,30 hs) celebrando la Canonización de Madre Teresa y los 26 años de la muerte de p. Cacho. Los adolescentes se encuentran en la Gruta el domingo 4 a las 9 y culminan también con la Misa en Guadalupe. ¡TODOS ESTAMOS INVITADOS A LA MISA! 8