La gruta 463

La Gruta

Julio de 2015

nº

463

BOLETÍN del SANTUARIO NACIONAL de La Gruta de Lourdes Avda. de las Instrucciones 2223. MONTEVIDEO - Uruguay. Tel.: 2222 3532 grutadelourdes@interware.org www.umbrales.edu.uy

2015

Sínodo familia de los obispos sobre la

Acompañar a los más frágiles ...Los escribas y los fariseos le trajeron a una mujer que había sido sorprendida en adulterio...: “Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio.

Moisés, en la Ley, nos ordenó apedrear a esta clase de mujeres. Y tú, ¿qué dices?”.

Decían esto para ponerlo a prueba, a fin de poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, comenzó a escribir en el suelo con el dedo...: “El que no tenga pecado, que arroje la primera piedra”. E inclinándose nuevamente, siguió escribiendo en el suelo. Al oír estas palabras, todos se retiraron, uno tras otro, comenzando por los más ancianos. Jesús quedó solo con la mujer...: “Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Alguien te ha condenado?”. Ella le respondió: “Nadie, Señor”. “Yo tampoco te condeno, le dijo Jesús. Vete, no peques más en adelante”.

Juan 8, 1-11 La Gruta n.463

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Actualidad La Carta del papa Francisco El 24 de mayo pasado el Papa firmó una carta “encíclica”, dirigida a toda la Iglesia universal y las personas de buena voluntad con el título: “Laudato si’” sobre el cuidado del ambiente.

“Laudato si’, mi’ Signore”, son las primeras palabras en italiano del Cántico de las Criaturas: “Alabado seas mi Señor con todas tus criaturas…”. Este Cántico ha sido escrito por san Francisco, del cual el Papa actual es muy devoto: el día después de su elección, Bergoglio afirmó haber elegido el nombre de Francisco en honor a éste santo, por su preocupación por la paz, los pobres y la Creación, con los cuales quiere comprometerse en su misión.

La encíclica habla del tema de la “ecología”; esta es una palabra que viene del griego y significa discurso sobre la casa común (la tierra).

El Papa lanza un grito para que se preserve la creación, que es obra de Dios, de una progresiva destrucción. Esta se da a través de la deforestación, la contaminación del aire y del agua, los gases tóxicos en la atmósfera, el achicamiento de la capa de ozono, los residuos industriales, la extinción de las especies vegetales y animales, la dilapidación del agua, la desertificación, el derroche de bienes necesarios para todos...

Actualmente se producen cientos de millones de toneladas de residuos por año; el Papa dice: “La tierra, nuestra casa común, puede convertirse cada vez más en un depósito de basura”.

Por otra parte se desperdicia aproximadamente un tercio de los alimentos que se producen.

Advierte el Papa: “el alimento que se desecha es como si se robara a la mesa del pobre”. En muchos países se derrocha el agua potable cuando hay casi dos millones de personas en el mundo que sufren su escasez permanente.

El Papa interviene invitando a un cambio pro2

fundo en la política y en la economía consumista que se olvida, en pos de la ganancia, de la persona humana y su ambiente de vida. Pide limitar supuestas “necesidades que nos atontan”, atraídos por un exasperado consumismo.

La espiritualidad cristiana propone un crecimiento económico con solidaridad y una capacidad de “saber gozar con poco, con lo más simple”. Hace falta educar desde la escuela, desde los medios, desde la catequesis y sobre todo desde la familia a un nuevo estilo de vida, que trate el ambiente y la creación como “hermanos” y no como objeto de explotación en vista de la ganancia.

El Papa invita a responsabilizarse en este cambio. Los ciudadanos han de controlar el poder político y económico. “La decisión comunitaria de no adquirir determinados productos, podría modificar el comportamiento de las empresas”.

El Papa valora los pequeños grupos (asociaciones, cooperativas, movimientos) que implementan nuevos estilos de vida y sugiere también “pequeñas acciones” diarias que todos pueden llevar a cabo y que son muy importantes: no exagerar en la calefacción, evitar el uso de material plástico y de papel, reducir el consumo de agua, clasificar los residuos, reciclar y reutilizar, cocinar lo necesario, utilizar trasporte público, plantar árboles, apagar luces y aparatos eléctricos… La encíclica es más que un documento en defensa del ambiente. Es un grito en defensa de la humanidad y sobre todo de los más pobres.

Sínodo de los obispos sobre la familia

2015

Acompañar a los más frágiles ...Los escribas y los fariseos le trajeron a una mujer que había sido sorprendida en adulterio...: “Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. Moisés, en la Ley, nos ordenó apedrear a esta clase de mujeres. Y tú, ¿qué dices?”. Decían esto para ponerlo a prueba, a fin de poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, comenzó a escribir en el suelo con el dedo...: “El que no tenga pecado, que arroje la primera piedra”.

E inclinándose nuevamente, siguió escribiendo en el suelo. Al oír estas palabras, todos se retiraron, uno tras otro, comenzando por los más ancianos. Jesús quedó solo con la mujer...: “Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Alguien te ha condenado?”.

Ella le respondió: “Nadie, Señor”. “Yo tampoco te condeno, le dijo Jesús. Vete, no peques más en adelante”.

Juan 8,1-11

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En el texto de este mes, le presentan a Jesús un problema familiar muy complejo: una mujer sorprendida en flagrante adulterio. Esto implica una situación errónea de la mujer, del hombre con el cual estaba pecando y, tratándose de adulterio, un momento difícil para la familia de este hombre.

Se trata de uno de los temas al orden del * día en el próximo Sínodo sobre la Familia que se llevará a cabo en Roma en el mes de octubre: la fragilidad de la familia con motivo de la traición, la dificultad de enfrentar cristianamente estos momentos de crisis familiar.

La Gruta n.463

Los que presentan a la mujer, proponen a * Jesús también la solución del problema a través de la Ley, la cual “ordenó apedrear a esta clase de mujeres”. Jesús con su silencio y luego con sus tajantes palabras, se declara en desacuerdo con esa medida.

*

No se pueden solucionar o enfrentar cristianamente los problemas familiares y sus fragilidades simplemente apelándose a la Ley, aunque sea el Derecho Canónico. Sin desconocer la gravedad del pecado, en primer lugar, Jesús pone siempre las personas: en este caso la mujer adúltera y también los escribas y fariseos, llamados a encontrar en lo más profundo de sus corazones la respuesta que buscaban.

Jesús no da respuestas, como ellos se es* peraban. Ellos mismos tienen que discernir.

Y ésto a partir de sus experiencias de vida: “todos se retiraron, uno tras otro, comenzando por los más ancianos”.

Preguntas La protagonista del relato no niega su error ¿cuán importante es una actitud similar ante las faltas que cometemos?

Luego de reconocer el pecado (como de hecho, los acusadores, al retirarse) ¿a quién acudes para obtener el perdón? ¿al ofendido? ¿a Jesús?

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“Yo tampoco te con* deno”, es la Buena Noticia que se necesita anunciar en todo caso de fragilidad familiar, en cada situación compleja en la cual se pueda encontrar una familia o algunos de sus integrantes. Una buena noticia que Dios pronuncia gracias a su recepción por parte nuestra: “Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Alguien te ha condenado?”. Ella le respondió: “Nadie, Señor”.

“Yo tampoco...”

*

Vemos un largo camino por parte de nuestra Iglesia en volver a la Buena Noticia de Jesús: lamentablemente por mucho tiempo lo que

se invocó frente a la fragilidad de la familia fue la Ley y el conformarse a ella como única solución de los problemas familiares (separaciones, divorcios, concubinatos...).

Nuestro Santuario * por su estructura abierta, al aire libre, siempre ha representado esta apertura universal, que no mira a la condición moral de los peregrinos: la Virgen (refugio de los pecadores) es y será siempre amada como la Madre de todos y los que viven situaciones más complicadas no dudan de encontrar en ella un seguro amparo. Jesús su Hijo es su maestro en esta cristianísima sensibilidad.

Del Salmo 103

B

endice al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga a su santo Nombre; bendice al Señor, alma mía, y nunca olvides sus beneficios.

El perdona todas tus culpas y cura todas tus dolencias; rescata tu vida del sepulcro, te corona de amor y de ternura; él colma tu vida de bienes, y tu juventud se renueva como el águila.

El Señor hace obras de justicia y otorga el derecho a los oprimidos...

El Señor es bondadoso y compasivo,

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lento para enojarse y de gran misericordia; no acusa de manera inapelable ni guarda rencor eternamente; no nos trata según nuestros pecados ni nos paga conforme a nuestras culpas.

Cuanto se alza el cielo sobre la tierra, así de inmenso es su amor por los que lo temen; cuanto dista el oriente del occidente, así aparta de nosotros nuestros pecados.

Como un padre cariñoso con sus hijos, así es cariñoso el Señor con sus fieles; él conoce de qué estamos hechos, sabe muy bien que no somos más que polvo.

Sínodo de los obispos sobre la familia

2015

Acompañar a los más frágiles

Crisis en las familia y respuesta de la Iglesia Como en cada número del Boletín, publicamos en estas páginas algunos extractos del Documento Final del Sínodo de 2014, para que podamos conocer la reflexión de nuestros obispos y seguir con ellos en la oración y en la vida un camino de renovación en la atención de la Iglesia a las familias. En estos números los obispos se acercan a los problemas familiares de nuestro tiempo, los interpretan y tratan inspirar un apoyo por parte de la Iglesia.

6. Una de las mayores pobrezas de la cultura actual es la soledad, fruto de la ausencia de Dios en la vida de las personas y de la fragilidad de las relaciones. Asimismo, hay una sensación general de impotencia frente a la realidad socioeconómica que a menudo acaba por aplastar a las familias. Esto se debe a la creciente pobreza y precariedad laboral que a veces se vive como una auténtica pesadilla, o a una fiscalidad demasiado alta que ciertamente no alienta a los jóvenes a contraer matrimonio.

Con frecuencia las familias se sienten abandonadas por el desinterés y la poca atención de las instituciones.

Las consecuencias negativas desde el punto de vista de la organización social son evidentes: de la crisis demográfica a las dificultades educativas, de la fatiga a la hora de acoger la vida naciente al sentir la presencia de los ancianos como un peso, hasta el difundirse de un malestar afectivo que a veces llega a la violencia.

pre ayuda a los sujetos a alcanzar una mayor madurez. Preocupa una cierta difusión de la pornografía y de la comercialización del cuerpo, favorecida entre otras cosas por un uso desequilibrado de Internet, al igual que hay que denunciar la situación de las personas que se ven obligadas a practicar la prostitución. En este contexto, a menudo los cónyuges se sienten inseguros, indecisos y les cuesta encontrar los modos para crecer. Son numerosos los que suelen quedarse en los estadios primarios de la vida emocional y sexual. La crisis de los esposos desestabiliza la familia y a través de las separaciones y los divorcios puede llegar a tener serias consecuencias para los adultos, los hijos y la sociedad, debilitando al individuo y los vínculos sociales. Asimismo, el descenso demográfico, debido a una mentalidad

10. En el mundo actual no faltan tendencias culturales que parece que impongan una afectividad sin límites de la que se quieren explorar todos los aspectos, incluso los más complejos. De hecho, la cuestión de la fragilidad afectiva es de gran actualidad: una afectividad narcisista, inestable y cambiante que no siemLa Gruta n.463

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antinatalista y promovido por las políticas mundiales de salud reproductiva, no sólo determina una situación en la cual el sucederse de las generaciones ya no está asegurado, sino que se corre el riesgo de que con el tiempo lleve a un empobrecimiento económico y a una pérdida de esperanza en el futuro. El avance de las biotecnologías también ha tenido un fuerte impacto sobre la natalidad.

28. Conforme a la mirada misericordiosa de Jesús, la Iglesia debe acompañar con atención y cuidado a sus hijos más frágiles, marcados por el amor herido y extraviado, dándoles de nuevo confianza y esperanza, como la luz del faro de un puerto o de una antorcha llevada en medio de la gente para iluminar a quienes han perdido el rumbo o se encuentran en medio de la tempestad. Conscientes de que la mayor misericordia es decir la verdad con amor, vayamos más allá de la compasión. El amor misericordioso, al igual que atrae y une, transforma y eleva. Invita a la conversión. Así entendemos la enseñanza del Señor, que no condena a la mujer adúltera, pero le pide que no peque más (cfr. Jn 8,1-11).

29. El diálogo sinodal se detuvo en algunas cuestiones pasto-

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rales más urgentes que encomendar a la concretización en cada una de las Iglesias locales, en la comunión cum Petro et sub Petro.

El anuncio del Evangelio de la familia constituye una urgencia para la nueva evangelización.

La Iglesia está llamada a darlo con ternura de madre y claridad de maestra (cfr. Ef 4,15), en fidelidad a la kenosi misericordiosa de Cristo.

La verdad se encarna en la fragilidad humana no para condenarla, sino para salvarla (cfr. Jn 3,16 -17).

45. En el Sínodo resonó con claridad la necesidad de opciones pastorales valientes.

Reconfirmando con fuerza la fidelidad al Evangelio de la familia y reconociendo que separación y divorcio siempre son una herida que provoca profundos sufrimientos para los cónyuges que los viven y para los hijos, los Padres sinodales señalaron la urgencia de caminos pastorales nuevos, que partan de la realidad efectiva de las fragilidades familiares, sabiendo que con frecuencia más bien son “soportadas” con sufrimiento que elegidas en plena libertad. Se trata de situaciones diversas por factores tanto personales como culturales y socioeconómicos. Hace falta una mirada que discierna bien las situaciones, como sugería san Juan Pablo II (cfr. Familiaris Consortio, 84).

Parábolas de HO Y - Los cinco dedos…

HOY

¡No sé si era un sueño, o qué!

Parece que los dedos de la mano comenzaron a sentirse molestos. Habían trabajado todo el día y en la tardecita a la hora del descanso, no faltaron esas palabritas que son como los fosforitos: un roce, una chispa, una llama… cuando no: un incendio. Y ardió el tiempo libre. Los tonos se levantaron y comenzaron a verse cada uno víctima del otro, marginado por el otro y más atareado que el otro. Todos encontraban sus méritos desvalorizados y los méritos ajenos sobre valorizados. El pulgar veía que siempre le tocaban todos los trabajos más pesados. Tenía que estar en todas y jamás le tocaba ningún privilegio, mientras que el meñique trabajaba poco y estaba cargado de anillos… el anular vivía luciendo joyas… y pocos esfuerzos. Y así, después de una larga discusión, decidieron separarse y cada uno por su cuenta, a rebuscarse. Cada uno se metió en un bolsillo. Se habían cansado de estar juntos y siempre dependientes de los demás… ¡Ufa! Al tiempo, ya descansados, les nació la curiosidad. ¿Cómo les había ido a los demás? También los recuerdos influyeron… Tantas aventuras juntos, tantos sufrimientos pero tantas experiencias vividas y compartidas… y, de una vez, salieron de esos bolsillos, oscuros y solitarios.

Se habían aburrido. Era como si no existieran. El colmo. ¿Nadie, pero nadie nos llama para nada?

Parece que todos tenían la misma experiencia. ¿Cómo si no existieran? ¡No puede ser! El

meñique llamó al anular, éste al medio, y éste al índice y éste al pulgar con quien más estaba en comunión…Todos tenían la misma respuesta: “¡Como si no existiera!” se dijeron, un poco molestos. “¡Como si no existiera!”. Así en la tardecita todos estaban informados de que, solos, era “como si no existieran”. Así fue como rápidamente se enteraron de que la mano los había estado buscando, porque ella también se había encontrado en la misma situación. Decidieron entonces volver a reunirse y cada uno en su lugar, aceptando sus privilegios, pero también sus limitaciones, y, sin más perder tiempo echando culpas o cortando cabezas.

Después de una “larga jornada de trabajo”, un poquito de descanso y a ponernos nuevamente juntos como los dedos de una mano, dejando recelos, envidias, prejuicios y sospechas de lado. El país llama: “¡Dame una mano!”

Rodolfo Bonci

La Gruta n.463

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Oración a los pies de La Gruta cántico de las criaturas de san Francisco, que inspira la encíclica papal

A ltísimo y omnipotente buen Señor, tuyas son las alabanzas, la gloria y el honor y toda bendición.

Jueves 9 de julio de 2015 a las 18 hs. en el despacho parroquial:

formación de los voluntarios del día 11.

A ti solo, Altísimo, te convienen y ningún hombre es digno de nombrarte.

Alabado seas, mi Señor, en todas tus criaturas, especialmente en el Señor hermano sol, por quien nos das el día y nos iluminas.

Y es bello y radiante con gran esplendor, de ti, Altísimo, lleva significación.

Alabado seas, mi Señor, por la hermana luna y las estrellas, en el cielo las formaste claras y preciosas y bellas.

Alabado seas, mi Señor, por el hermano viento y por el aire y la nube y el cielo sereno y todo tiempo, por todos ellos a tus criaturas das sustento.

Alabado seas, mi Señor por la hermana Agua, la cual es muy humilde, preciosa y casta.

Alabado seas, mi Señor, por el hermano fuego, por el cual iluminas la noche, y es bello y alegre y vigoroso y fuerte.

Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sostiene y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas.

Alabado seas, mi Señor, por aquellos que perdonan por tu amor, y sufren enfermedad y tribulación; bienaventurados los que las sufran en paz, porque de ti, Altísimo, coronados serán.

Alabado seas, mi Señor, por nuestra hermana muerte corporal, de la cual ningún hombre viviente puede escapar.

Ay de aquellos que mueran en pecado mortal.

Bienaventurados a los que encontrará en tu santísima voluntad porque la muerte segunda no les hará mal.

Alaben y bendigan a mi Señor y denle gracias y sírvanle con gran humildad...

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Amén.