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III.- PARA ANTES DE CANTAR Una actitud de entusiasmo alegría y disposición, tanto del maestro como de los niños. La relajación corporal es necesaria para tener una buena voz y poder manejarla con libertad y soltura. Siempre que haya tensión en alguna zona de tu cuerpo, mueve la articulación correspondiente. El movimiento suave atenúa las tensiones. Antes de empezar a calentar tu voz y la de los pequeños, conviene practicar algunos ejercicios físicos suaves, que tonificarán tus músculos y relajarán tu cuerpo, la mayoría han de hacerse necesariamente de pié. # 1
Presentación
# 2
Antes de cantar
Iniciaremos con mover la cabeza lentamente, de un lado y hacia el otro y de arriba hacia abajo. Para el cuello, girar la cabeza muy lentamente formando un círculo hacia los dos lados. Los hombros, elevarlos hacia arriba y bajarlos, alternar subir uno y el otro, echar los hombros hacia atrás y hacia adelante. Los brazos, extenderlos hacia los lados y hacia el frene, arriba y abajo
hacer
movimientos suaves siguiendo la música. Para los músculos de la cara, realizar ejercicios faciales alzando las cejas, inflando los cachetes, abriendo la boca lo más grande que se pueda como para morder, hacer todo tipo de caras, bostezar, succionar cachetes, aventar besos, sacar y meter la lengua, hacer trompetillas, girar la lengua con la boca cerrada a manera de juego. No se pretende que el maestro sea un especialista, pero sí que esté atento a las formas fundamentales para cantar correctamente.