Kindle (online PDF) Su alianza de la venganza (Bianca) (Spanish Edition) for ipad
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El agua de las tranquilas fuentes flu237a suavemente sobre las piedras redondeadas, acumul225ndose cristalina sobre el granito pulido. Una peque241a r225faga de viento sopl243 desde el alto edificio y una de las suaves columnas de agua se agit243 ligeramente, un diminuto roc237o de gotas invisibles se pos243 sobre Rachel mientras pasaba.Sent237a el frescor en la piel.Y eso era lo que ten237a que ser. Fresca, tranquila y serena. Sin ning250n rastro de emoci243n. Estaba all237 para llevar a cabo un acuerdo comercial. Eso era todo.Porque si pensaba en lo que estaba a punto de hacer bajo cualquier otra luz...161No! No pienses. No sientas. As237 podr225s superar esto. Y, sobre todo, no recuerdes...Se activ243 un interruptor en su cerebro, cortando la l237nea de pensamiento.Otra neblina de agua parpade243 sobre su piel.Absorbi243 la serena tranquilidad de la ingeniosa fuente que adornaba la entrada del reluciente nuevo bloque de oficinas. Como correspond237a a la sede en el Reino Unido de uno de los conglomerados industriales m225s grandes y exitosos de Europa, Farneste Industriale, era el m225s prestigioso de todos los bloques de este nuevo y ostentoso parque empresarial, situado en el l237mite de uno de los pueblos m225s antiguos de Londres, Chiswick, convenientemente ubicado para la autopista M4 y el aeropuerto de Heathrow.Sigui243 caminando, con sus tacones altos elevando sus caderas y haci233ndola balancearse elegantemente en su traje caro a medida. Se hab237a sentado con mucho cuidado en el taxi de camino aqu237, asegur225ndose de no aplastar la falda color lavanda ni enganchar sus costosas medias transparentes.Quer237a lucir impecable.Le hab237a llevado m225s de dos horas prepararse. Dos horas lav225ndose y pein225ndose, aplic225ndose delicadamente un maquillaje y un esmalte de u241as perfectos, poni233ndose con cuidado ropa interior sedosa, medias transparentes, una blusa de color crema suave y, finalmente, deslizando la estrecha falda l225piz sobre sus esbeltas caderas ymetiendo los brazos en la chaqueta entallada con cuello redondo y forrada de sat233n que acentuaba sutilmente el volumen de sus pechos y la planicie de su est243mago.Se hab237a calzado unos zapatos de suave piel italiana, exactamente del mismo tono que el traje, al igual que el bolso de mano de cuero a juego que llevaba, y su atuendo estaba completo.Le hab237a llevado m225s de dos semanas encontrarlo. Despu233s de recorrer todas las tiendas y boutiques de lujo desde Chelsea hasta Knightsbridge, desde Bond Street hasta Kensington. Ten237a que ser exactamente el adecuado.Despu233s de todo, la persona a la que ten237a que impresionar ten237a unos est225ndares exigentes.Excepcionalmente exigentes.Deber237a saberlo.Una vez les hab237a fallado. De manera lamentable. Abyecta. Humillante.No deb237a fallar esta vez.Y ahora, mientras se acercaba a las enormes puertas dobles que se abr237an