Revista 13 edicion

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Maternidad

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Evite retener la orina por mucho tiempo, esto hace que la vejiga se sobre distienda, especialmente hacia abajo, por tanto la mujer debe miccionar las veces que su cuerpo se lo solicite. Cuando tenga que miccionar o defecar, permita que la vejiga y la ampolla rectal se vacíen solos, evitando pujar con los abdominales contraídos ya que éstos aumentan la presión intraabdominal distendiendo el piso pélvico. Beba al menos dos litros de agua al día. La higiene perineal no tiene que ser “exhaustiva” ni tampoco se deben introducir gasas o paños jabonados con la intención de quedar “más limpias”, debido a que estos procedimientos pueden barrer la flora natural de la vulva y de la vagina facilitando entonces infecciones urinarias e infección vaginal.

Evitar el sobrepeso así como el estreñimiento mediante técnicas de ejercicios y dieta baja en calorías, rica en fibras con frutas y verduras y no olvidar realizar ejercicios moderados. De someterse a tratamientos para bajar de peso, éstos deben realizarse en forma paulatina sin excesos, acompañados de ejercicios moderados, de lo contrario los órganos internos se podrían descolgar. El embarazo, el parto y la menopausia de no ser manejados adecuadamente pueden dañar el piso pélvico, por tanto, póngase en manos de expertos que la ayuden a llevar estos acontecimientos de la forma más natural y medicar sólo en casos necesarios. Para mantener un piso pélvico firme y vigoroso le recomendamos realizar los ejercicios de Kegel, ejercicios que se pueden realizar mientras hace sus actividades diarias sin alterar la respiración

y sin que nadie más que usted lo perciba. Consiste primero tener la vejiga vacía, imaginar que está orinando y luego cortar el chorro a voluntad, esta contracción lo puede hacer hasta por 10 segundos, unas toleran más, otras menos, sin llegar a la fatiga muscular. Se debe realizar 10 contracciones por la mañana, 10 a mediodía y otras 10 por la noche, de esta manera y sin ir al gimnasio reforzaremos la musculatura del piso pélvico. El cuidado del piso pélvico no solo debe ser durante el embarazo o el parto sino para toda la vida.

Por: Jorge R. Calderon Cornejo Ginecología, Obstetricia Estética Ginecológica www.rosmed.pe

Mamá por Tres 39


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