radial, el cuerpo se despliega en diversas direcciones, dando
El cuerpo se fragmenta en territorios para conquistar, transformar,
paso a infinidad de perspectivas, de las cuales Hacer del cuerpo
en una constante refabricación de su geografía. Es de esta forma
es solo una mirada parcial.
que, en la mayoría de los casos, el cuerpo se lleva como cordero
Actualmente, el cuerpo se expone de múltiples maneras: se
al matadero. El cuerpo yacente, muerto en el cruel escenario de la
muestra públicamente vivo, muerto, mutilado y muchas veces,
guerra, es cargado en medio del anonimato por campesinos o mi-
mediante la ausencia y el vacío que dejan los cuerpos al desapa-
litares, tal como sucede en la blanca, poética y cruda instalación
recer (ya sea con la muerte o el olvido), se manifiesta por la huella
Silencios II de José Luis Quessep o en la descriptiva fotografía Fal-
que ha dejado. En estos parámetros sociales en donde el “cómo es”
sos positivos del Colectivo Bi-Infrarrojo (María Isabel Aguirre,
es menos importante que el “cómo debe ser” y en donde la apa-
Rafael y Christian Barraza Roca). Así mismo, es recordado como
riencia rige los cánones tanto de belleza como de moral, se expo-
chivo expiatorio con nombre propio, mediante la conjuración del
ne el cuerpo a una carnicería sin precedentes. Es en este afán de
olvido y de la impunidad, como en el caso de las intervenciones
satisfacer el gusto a los demás donde se violenta y se trepana el
que hace Gabriel Acuña con Matarratón - La deuda, en los lugares
cuerpo prefabricándolo y refabricándolo, para satisfacer el gusto
que representan las instituciones que permitieron dejar en la im-
y las necesidades de los otros.
punidad el asesinato de su hermano. Es un cuerpo mutilado, “cor-
Es bien sabido (o tal vez sea un estereotipo infundado) que en
tao con tijera’e palo” en pedacitos, que a su vez es morbosamente
el Caribe colombiano los cuerpos son bien dimensionados y que es
sobrevalorado, vendido y mediatizado como si fuera un objeto en
motivo de orgullo mostrar sus partes: las nalgas de 14 quilates que
venta, consumible, comestible, una fila de huesos producidos en
se cultivan, los falos enormes, el garbo al caminar, las piernas lar-
serie y comercializados, como lo hace Manuel Castro del Colec-
gas, “hasta el suelo”, el desarrollo corporal precoz y muchas otras
tivo NN, con su chaza funeraria, maqueta de fosa común llena de
características son motivo de admiración, burla, comercio, frus-
Despojos, de pequeños huesos-palitroques de queso y yuca, sua-
tración y violencia. Es curiosa también la manera como se alar-
ves al paladar.
dea de ello, pero a la vez como se encubre y se censura, en medio
La muerte violenta, a manera de expiación, también puede
de una mojigatería que atenta contra el arte mismo. La gran serie
elevar al hombre hacia lo sagrado, vertiendo un aura de santidad
de blancos índices, en El dedo acusador de Irma Pinzón y Katty
sobre el cuerpo profano. La pasión sufrida por el ciudadano común,
Coronado, del Colectivo NN que señala al espectador, debería
en medio del martirio de la guerra que banaliza la vida, se pierde
estar apuntando acuciosamente a aquellas personas que, disfra-
en la fina línea de lo sacro, donde la imagen que solo muestra car-
zadas de un pudor retrógrado, tratan de esconder, censurar o mu-
ne sucumbe en lo icónico. La Piedad de Dayro Carrasquilla no es
tilar la libre expresión que expone simple y llanamente lo que en
más que el día a día de la clase marginal cartagenera (o de cualquier
medio de la diversidad es válido. Por ejemplo, Camografías (serie
ciudad), donde habitualmente las madres-madonas lloran la muer-
del joven fotógrafo Camo) con la obra titulada Oh Sailor! la cual
te de sus hijos (mártires o demonios) asesinados en medio de una
exhibe un flácido pene costeño de generosas proporciones jun-
sociedad que se corrompe y degrada cada vez más. Esas mismas
to a un prototípico marinero, cliché de la mariconería universal.
madres que en algunos casos solo con el instinto del amor logran
Es una lastimosa paradoja que en ciudades como Cartagena, que
rescatar de la enfermedad y la muerte a sus hijos, recurriendo a lo
ostentan ante el mundo una pluralidad cultural gracias a sus fies-
ancestral, a lo endógeno, en un proceso de Sanación, como lo su-
tas y sus carnavales, aún haya gente que se escuda en hipócritas
giere la obra de Edgardo Gutiérrez Bossio que, más que una video-
y retrógrados principios moralizantes, demostrando a su vez una
instalación, es un autorretrato y un homenaje a su progenitora.
completa ignorancia de las prácticas artísticas contemporáneas y rechazando lo que es natural: el cuerpo humano y su fisonomía, como si se tratase de algún demonio sacado de una caja de Pandora y, lo que es peor, desconociendo al cuerpo como elemento
El cuerpo, desde el punto de vista religioso (incluso dentro de la
comunicador y provocador de relaciones.
sociedad Caribe, donde la fe se ha edificado por medio del sincretismo), es considerado como el templo donde reposan los dioses (Kualekn, Ñiankúa, Kalakshé, Jehová, Caragabí, Yavhé, Alá, Pulowi,
REGIÓN CARIBE
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