LA NUEVA EDAD DEL CONOCIMIENTO
A FONDO
Lino Perea Flores Análisis Económico Para Vance Packard, connotado sociólogo estadounidense de los años sesenta del siglo pasado, las compañías de publicidad y los publicistas en general, habrían encontrado la manera de manipular a la opinión pública, como lo muestra en su obra clásica The Hidden Persuaders.
La nueva edad del conocimiento Que a través de la investigación motivacional, afirmaba que entonces ya se comenzaban a emplear nuevas técnicas subliminales, que inducían a los consumidores a adquirir los bienes y servicios, que en la etapa de la post guerra al accionarlas provocaban la modificación de la conducta de los mismos, pero además que esas nuevas técnicas de persuasión también funcionaban para otros propósitos, como el ser ya utilizadas para inducir a los electores, para votar por las candidaturas de determinados políticos. Todo mundo recuerda, la histeria colectiva provocada por la sugestión inducida por el anuncio en el radio en la sociedad estadounidense, de una supuesta invasión de seres de otro planeta, que comenzaban a invadir el planeta Tierra. Era la época anterior y posterior a la Segunda Guerra Mundial, cuando la afluencia de la población estadounidense alcanzaba visos de una suficiencia que no parecía contentarse con lo básico, por lo que ya se establecían las bases de un prototipo de sociedad que según el autor, estaba siendo orientada al consumismo, emergiendo victoriosa del trauma de una guerra y detentándose como la potencia indiscutible en el mundo de entonces. Producto también del trauma de la guerra y en contra de regímenes totalitarios es la Sociedad Abierta y sus Enemigos, del profesor austriaco Karl. R. Popper que para exponer sus ideas de libertad, distingue entre los orígenes de una sociedad dirigida “cerrada” de origen tribal y una “sociedad abierta” producto de la necesidad del hombre de ser libre, donde destaca las razones primigenias del hombre para discernir sin ataduras sus derroteros de vida, mientras no se le sojuzgue. De esta manera se podría decir que era asombroso como se podían lograr ciertos efectos impactantes en los individuos, a través de la lectura y el profundo análisis reflexivo; sin embargo, al establecer ciertos parámetros de lo que estaba ocurriendo también se provocó que se aprendiera de estos efectos de sugestión colectiva y la ampliación de su difusión, por lo que habrían de pasar algunas décadas antes de que se contara con nuevos instrumentos y nuevas formas de comunicación, que cambiaran la forma de vida de la humanidad. Es así como de pronto, nos asalta por sorpresa otro fenómeno que tiene que ver también ahora y desde finales del siglo pasado, con el significado de la “nueva” comunicación, prototipo de la era de la comunicación alámbrica e inalámbrica digital, o lo que conocemos actualmente como la era del conocimiento o la comunicación virtual.
de diversos comportamientos, que están conduciendo a la humanidad hacia nuevos derroteros y propiciando que a esta era se le proponga como de la sociedad de la información o del conocimiento, donde el impacto en el ámbito político, social, cultural, económico y social, apenas se columbra. La historia del hombre ha sido testigo de los cambios fundamentales en el quehacer humano, que han permitido por ejemplo la transformación de los procesos de producción de los bienes y servicios que consumimos cotidianamente el día de hoy, lo que ha permitido entre otros cambios, que haya incrementos espectaculares en los niveles de productividad, que han provocado que se multiplique la capacidad de fabricación de lo que en el pasado, se iniciaron como procesos artesanales pero que con el tiempo llegaron a convertirse en talleres y posteriormente en fábricas. Pero ahora lo que comenzamos a atisbar, son “fábricas del conocimiento” que impactan todos los confines del mundo en un momento. Si bien la Revolución Industrial del Siglo XIX significó el advenimiento de la era industrial como la conocimos hasta fines del siglo pasado, lo que estamos testificando en la actualidad no es sólo el advenimiento de otra nueva era, si no el cambio no solo en la forma como se fabrica en las fábricas, si no la manera como nos comunicamos con nuestros semejantes y con las máquinas que fabrican de todo, de una manera que hace solo un par de décadas era impensable. Así vemos como inclusive los procesos de comercialización están estrechamente relacionados con los procesos de producción, ya que mientras se está efectuando la compra de un libro en la tienda, las computadoras ya están enviando la orden para que éste se imprima de inmediato sin necesidad de tenerlo en un inventario físico, pues con un solo clic de la tecla de un tablero electrónico, se ejecuta la orden de su impresión. Es la era de la Revolución Digital que se abre paso en la era industrial, dando lugar a la sociedad del conocimiento. Comentarios: perealino@yahoo.com.mx(*) Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.
Bajo estas premisas el día de hoy, con el advenimiento de la era digital se han acelerado los procesos que generan las tecnologías de la información, que nos comienzan a transportar a un nuevo mundo donde los acontecimientos en materia de comunicación, manejo masivo de datos, voz, videos y otros, son manipulados y transportados a velocidades antes inimaginables, lo que ha derivado en la manifestación
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