Nunca vamos a permitir que se repitan más jueves negros:

Ngu

Mensaje del Senador Napoleón Gómez Urrutia, durante el 17 aniversario luctuoso de los compañeros Héctor Álvarez Gómez y de Mario Alberto Castillo, asesinados por las fuerzas federales y estatales de Vicente Fox Quesada y el entonces gobernador Lázaro Cárdenas Batel, durante el “jueves negro” de 20 de abril de 2006, al atacar la legítima huelga minera en contra de la empresa Sicartsa, en Lázaro Cárdenas, Michoacán. Abril 20 de 2023.

Muchas gracias, compañeras y compañeros, amigos, hermanos, miembros de las secciones 271, 272, 273, 274, 331, 336 y 337 e integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Minero.

Quiero saludar también y dar la bienvenida a todos mis hermanos, compañeros, camaradas de los United Steelworkers, que cada año están aquí con nosotros, que cada año traen su solidaridad, la unidad, presencia y la fuerza que siempre nos ayuda mucho para seguir en la lucha sindical.

Les agradezco mucho compañeras y compañeros, y en nombre de todos los mineros de México les pedimos que le transmitan un saludo muy especial a nuestro presidente internacional, a Tom Conway, a todo el cuerpo directivo y a todos sus directores.

Muchísimas gracias y qué bueno que están acá, que como todos los años siempre han estado para recordar y rendir homenaje a nues- tros hermanos mártires que cayeron en la lucha sindical, Héctor Álvarez Gómez y Mario Alberto Castillo.

Es un honor y un gusto tenerlos aquí compañeros, muchas gracias, Steelworkers. Por supuesto, a nuestra querida amiga, la presidenta municipal de Lázaro Cárdenas, María Itzé Camacho, muchas gracias por estar aquí con nosotros. Al representante del señor gobernador, Juan Manuel Manzo Rodríguez, gracias por su presencia y transmítale un saludo de solidaridad al señor gobernador amigo nuestro y también de la clase trabajadora. Y, por supuesto, mis amigos

Rick, Erick, gracias también por sus palabras.

Quiero en este día, primero, decirles que siempre es un gusto, una gran satisfacción estar aquí con ustedes, el compañerismo, la hermandad, la pasión, la fuerza, la unidad que siempre nos han guiado aquí se refleja siempre y se hace presente en Lázaro Cárdenas, Michoacán.

En esta ocasión rendirles homenaje a nuestros mártires, mi profundo respeto en nombre de mi esposa Oralia, que hoy también nos distingue con su presencia. Gracias, Oralia, por acompañar-

Compañero Francisco Nava Reyes, Secretario General de la Sección 271

En nombre de la sección 271 y de las demás secciones del estado de Michoacán, como son la sección 272, 273, 274, 331, 336 y 337, les damos la más cordial bienvenida para conmemorar el 17 aniversario luctuoso de nuestros mártires Héctor Álvarez Gómez y Mario Alberto Castillo Rodríguez, abatidos aquel 20 de abril del año 2006 en un intento de desalojo de la puerta dos por parte del gobierno federal, encabezado por el presidente de ese entonces Vicente Fox, que pasará al libro negro de la historia con su conciencia manchada de sangre minera.

me, siempre has estado en la lucha, es una guerrera. Nunca me dejó solo en los peores momentos, al contrario, siempre me dio la fuerza, el apoyo, el cariño y todo este acompañamiento que se necesitaba, igual a mis hijos.

Ese día 20 de abril de 2006 sufrimos mucho, tuvimos un sentido de rabia, de impotencia y de indignación que un estúpido gobierno, como el de Vicente Fox, hoy un mercader de la marihuana, a qué ha llegado este tipejo, verdaderamente fascista, quien vino y se atrevió a reprimir a los trabajadores en huelga legítimamente hablando. ¿Cómo llegó a la presidencia un sujeto de esta naturaleza? Y luego lo siguió otro igual o peor, alcohólico, con una serie de delitos, como Felipe Calderón y, a Peña Nieto, ni lo mencionamos porque la verdad su pasividad y su superficialidad fueron totales.

Creo que esto que sufrimos ese 20 de abril, esa represión, es producto de la irresponsabilidad de estos presidentes y del gobierno del estado, y del gobernador en particular, que en ese momento también condujo y envió a las fuerzas públicas estatales y policiales para que reprimieran a nuestros compañeros en una huelga legítima.

Esto que acabamos de ver, este testimonio en este video nos debe de llenar de indignación a todos, pero también de una fuerza para seguir adelante, no los vamos a olvidar jamás, nunca vamos a permitir que se repitan estos hechos; yo, desde el Senado de la República, como dirigente sindical al lado de ustedes y en cualquier lugar de México y del mundo, vamos a tener la solidaridad de nuestros amigos para defender la vida y la lucha sindical.

Quiero recordar una cosa muy importante que sucedió en esos días y que desafortunadamente sufrimos después porque ya habíamos salido del país, bajo la sugerencia, bajo la mano hermana y amiga que me tendieron los compañeros Steelworkers y luego toda la Federación del Trabajo de Estados Unidos y de Canadá, el Con- greso del Trabajo de Canadá, para proteger mi vida y la de mi familia porque estábamos totalmente amenazados.

Y unos días después de que sucedió esa tragedia, esta represión indigna, absurda, inmoral, me enteré que hubo unos días antes una reunión del Gabinete de Seguridad de Fox, en la cual se discutió si venía a reprimir o no ante la solicitud que habían hecho los hermanos Villarreal Guajardo, gerentes y dueños aparentes de esta empresa, ustedes le llamaban los Villarratas y creo que siguen siendo Villarratas, en la que discutieron y un tonto irresponsable secretario de Trabajo, Francisco Javier Salazar, se atrevió a decir, cuando dudaban, si deberían usar la fuerza pública para reprimir o no, decía: “Presidente, tenemos que hacerlo, –totalmente entregado y corrompido por la empresa–, pero no se preocupe no va a haber nada, ningún incidente, porque los mineros cuando vean la fuerza pública que usamos van a salir corriendo como cobardes”.

Hijo de p..., no sabía con quién se metía, no sabía con qué gente, qué clase de compañeros, qué clase de lucha y de trabajo hemos dado toda la vida, cómo pueden tomar decisiones a ese nivel irresponsable, y ellos provocaron esta tragedia, este asesinato cobarde que vinieron a cometer aquí a Lázaro Cárdenas, Michoacán.

Me enteré unos días después y le hice un reclamo muy fuerte con quienes pude tener contacto y, desde luego, el gobernador Lázaro Cárdenas, me decía: “Ayúdame”, y le dije: En qué te voy a ayudar, has manchado el nombre de tu abuelo, de tu padre, del pueblo de Lázaro Cárdenas, cómo permitiste esto.

Y dijo: “Me engañó Fox”, no te engañó, te dejaste engañar por los hermanos Villarreal Guajardo, de los que se decía que tenían intereses y complicidades, y muchas otras cosas que sucedieron. Creo que es algo que debemos de tener ahí guardado en la historia, porque nosotros podemos olvidar, pero no perdonar esto que cometieron.

Y desde aquí les rindo un profundo homenaje, como dije, mi esposa, mi familia, mis compañeros del comité nacional y lo haré siempre que esté en esta tribuna a su familia, a toda su familia de nuestros grandes y héroes compañeros del sindicalismo, Héctor Álvarez Gómez y Mario Alberto Castillo.

M Xico Ha Cambiado Con L Pez Obrador

Hoy estamos viviendo tiempos diferentes, desde hace cuatro años y medio, cinco años, que fue electo el Presidente Andrés Manuel López

Obrador el país cambió, nos abrió una perspectiva diferente, terminó con un periodo de más de 80 años probablemente, donde no había habido un presidente nacionalista que buscara defender las causas más nobles del país, acabar con la corrupción, disminuir la desigualdad y ayudar, como siempre ha dicho él: a los pobres primero.

Ese cambio ha sido muy importante. Hemos logrado avanzar y gracias a eso, en parte, regresé yo y fui electo como senador de la República y después presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, para hacer las reformas y cambios necesarios en la ley y proteger los derechos de los trabajadores como lo hemos venido haciendo, cambios en los que ahora tenemos en la nueva ley la libertad y la democracia sindicales, el voto libre, secreto, directo, de los trabajadores.

Tenemos prohibido el sistema de subcontratación o de outsourcing, está prohibido, porque era un sistema de explotación y de simulación laboral en contra de los trabajadores y del sindicalismo.

Tenemos nuevos derechos, como las vacaciones dignas, la igualdad salarial entre hombres y mujeres: a trabajo igual, salario igual, y dijimos, no más marginación y discriminación en contra de las mujeres que tienen la misma capacidad profesional para desempeñar un trabajo igual que los hombres.

Le dimos los derechos a las trabajadoras y trabajadores del hogar, y muchas reformas más; aprobamos el convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo, (OIT), que nos da el derecho a la contratación colectiva y el derecho a la sindicalización.

Estamos viviendo tiempos nuevos y diferentes, sé que todavía y, estoy consciente, hay muchos problemas en el país, hay muchas injusticias, hay asuntos todavía y leyes que se siguen violando, o por la falta de supervisión o por la falta de inspección, o por la falta de voluntad política de algunas autoridades para corregirlos, pero eso no nos desamina, al contrario, seguimos trabajando.

Ha sido un cambio muy importante que no ha resuelto todos los problemas, sin duda, lo sabemos, la corrupción de años o siglos en México no se acaba en un sexenio, menos en cuatro años y medio que lleva este gobierno.

Pero se ha avanzado mucho y en la legislación hemos cambiado mucho y hoy, por ejemplo, hoy estamos discutiendo allá en el Congreso de la Unión un proyecto de una nueva reforma a la Ley Minera de México, un proyecto que en buena medida propuse, junto con ustedes, recogiendo todo lo que necesitábamos en el sector, y con otras autoridades que también trabajaron en este proyecto, porque ya basta de que los recursos naturales del país, la mano de obra la sigan explotando unas cuantas empresas privadas, las más grandes de México y unas cuantas empresas extranjeras y que se apropien de la riqueza y de la concentración de la tierra a través de las concesiones que se les otorgaban con hasta 100 años de duración, cuando todos sabemos que los yacimientos y los depósitos mineros a veces no duran 15 ni 20 o cuando mucho un poco más de años; pero ya no se regresa la tierra, que es propiedad de la nación, como está en la Constitución en el artículo 27 constitucional.

Es un honor para los Steelworkers estar aquí con ustedes esta mañana en solidaridad hermanas y hermanos. En nombre de nuestro director Mike Millsap, quiero darles las gracias por todo lo que hacen y pide una disculpa por no estar aquí esta mañana con ustedes. Héctor y Mario nunca serán olvidados.

El director quería enfatizar especialmente la solidaridad entre Los Mineros y los Steelworkers, tenemos luchas incansables entre las dos organizaciones y nunca vamos a claudicar. Es muy importante que nunca olvidemos los sacrificios que han hecho nuestros compañeros y nunca olvidarlos, y es el hacer un mejor futuro para todos. Hermano Napoleón, nuestro hermano, es un gran líder, un especial reconocimiento por todo lo que haces. Recordemos, todos ustedes, esto es lo que hace un sindicato fuerte, ustedes son importantes, ustedes son la fuerza, ustedes son la unidad. Juntos vamos a ser fuertes. Recuerden esto: en nuestras fuertes y constantes luchas, nunca caminarán solos, caminaremos juntos. ¡Qué vivan los mineros! ¡Viva la unidad!

Todo esto lo estamos cambiando, ha habido mucha oposición, todos los días la Cámara Minera de México, que es la agencia de protección de los intereses empresariales del sector minero, la asociación de ingenieros, de geólogos y mineros de México, y otras más, las propias empresas, los medios de comunicación, senadoras y senadores, y diputados queriendo que no se apruebe esta ley.

Y están manejando la misma actitud casi como cuando lo del Instituto Nacional Electoral, que decían: “El INE no se toca” y así casi creo que quieren decir: “La Ley Minera no se toca”. ¿Y saben por qué? Porque atrás hay un nido de corrupción enorme que ha saqueado a este país, en el INE lo había y ahora que ya se abrió lo vemos, la forma en que se liquidaron, lo sueldos que pagaban, los privilegios que tenían, pero también en el sector minero.

Y por eso hoy nos explicamos, los cinco empresarios más ricos de este país, todos son mineros, todos tienen intereses en la minería, han recibido un tratamiento fiscal favorable, les han permitido hacer lo que sea y esto tenemos que cambiarlo y eso está en la nueva ley. Espero que de aquí a la próxima semana se apruebe esta nueva ley.

Pero esta es una medida que le va a dar al Estado mexicano, al gobierno, la capacidad de regir y conducir la explotación racional y moderna de la minería en favor del pueblo de México, en favor del crecimiento nacional y es necesario, esta ley no se había modificado desde hace más de 25 años y se habían quitado una serie de restricciones, prácticamente tenían libertad absoluta para concentrar tierras, para venderlas, para explotar, incluso, minerales estratégicos como el mercurio, el uranio, el litio, que ahora lo controla el Estado.

Yo creo que si lo logramos, compañeras y compañeros, de hecho, me tengo que regresar hoy en la tarde porque tenemos las discusiones y seguimos, y el periodo del Congreso de la Unión se termina el 30 de abril y queremos que salga antes, porque se reinicia hasta septiembre y en septiembre probablemente ya estemos en otro momento político del país, quizá hasta ya con candidatos a la Presidencia destapados, como se dice, o seleccionados o electos por el tipo de mecanismo que se utilice, si de encuestas o cualquier otro, entonces creo que es el momento.

Pero lo digo también como ejemplo de algo, por lo que hemos estado luchando para ayudar a cambiar a México y ha sido la fuerza moral que tenemos los mineros, la unidad, yo siempre he dicho y eso lo aprendí de mi amigo, mi hermano, mi compañero Leo Gerard, el presidente internacional de los Steelworkers, que ya se retiró, y él decía mucho: “La unidad nos da la fuerza y la fuerza nos da el poder para cambiar las cosas”, y eso es lo que tenemos que seguir luchando siempre.

No permitamos más abusos, ni violaciones, no permitamos más tragedias irresponsables y cobardes, como la que sucedió en Lázaro Cárdenas, Michoacán, el 20 de abril de 2006, ni aquí, ni en ningún lugar de México, ni del mundo.

Luchemos juntos para transformar a nuestro país, para hacer un país más justo, más digno, con mayor justicia, con mayor respeto para todos. Y en eso estamos unidos, en eso estamos trabajando juntos, en eso vamos a seguir siempre unidos, es lo que nos va a dar la fuerza para cambiar las cosas.

Hoy estamos luchando también por lograr que las utilidades se paguen y sean justas para los trabajadores, y ya en un principio aquí se deben de pagar con lo que ustedes demostraron, el 10 por ciento como está en la ley, y no vamos

Compañera María Itzé Camacho Zapiain, Presidenta Municipal de Lázaro Cárdenas, Michoacán.

Antes que nada, quiero darles la bienvenida, de verdad, les digo, tenemos que esperar un año para volverlos a tener aquí y ahora viene con una gran sorpresa, una gran mujer: licenciado Napoleón Gómez Urrutia es un gusto y un honor tenerlo en esta tierra. Bienvenido sea. Y a la señora Oralia, que ya la considero mi amiga, la señora Casso de Gómez, hermosa, bienvenida aquí, la gente te quiere mucho. Bienvenidos sean todos, representantes, pero sobre todo ustedes, gracias porque ustedes estuvieron en el campo de batalla.

Un día como hoy, hace 17 años, el pueblo de Lázaro Cárdenas fue traicionado ante el levantamiento de una lucha justa, ante la imposición y el sometimiento a la clase trabajadora. Y digo traición al pueblo de Lázaro porque todos tenemos a un hermano, a un padre, a un amigo, que es minero en esta tierra. Pero hay una palabra secreta atrás de la palabra traición, compañeros, y se llama miedo, miedo a perder el poder, miedo que les da de perder el control, miedo que les da de perder el dinero y el miedo corrompe y destruye los valores humanos, la deslealtad destruye la honradez y destruye hasta la humildad de una persona. Hace 17 años este miedo se convirtió en el asesino arrebatándonos a los compañeros Héctor Álvarez y Mario Alberto Castillo, la lucha seguirá y desde aquí les decimos a los que sienten este miedo que somos los más valientes, que el pueblo seguirá defendiendo sus derechos laborales y democráticos, que somos un pueblo que a través de la lucha hemos despertado, un pueblo que somos ya parte de la transformación de este país y desde aquí les decimos, al pueblo no se le impone, al pueblo se le respeta y, señores, al pueblo no se le traiciona.

a permitir que se eche para atrás, compañeros.

Otra cosa importante y se la quiero decir a nuestra compañera

Secretaria General de la Sección 337, nosotros vamos a luchar y tiene todo nuestro apoyo en el Comité Ejecutivo Nacional para lograr su contrato colectivo, ha habido resistencias, pero vamos a tener una sección de mujeres ya constituida con un comité electo que encabeza la compañera, con la firma de un contrato colectivo y lo vamos a hacer pronto.

Ya sé que lo platicó también con mi esposa Oralia, que, como les dije, es una guerrera. Yo siempre les decía a todos, oye, y tú que diriges el sindicato muy bien, sí, yo dirijo un sindicato allá afuera, pero vengo a mi casa y tengo otro sindicato, y ahí el líder yo no soy, ahí pregúntenle acá a la jefa, pero la verdad ha sido una compañera extraordinaria. Gracias, Oralia, gracias por acompañarnos.

Y para terminar nada más quiero de nuevo agradecerles esta unidad, no se nos olvide, nunca la soltemos, no caigamos en provocaciones, que nadie venga y nos confunda por intereses extraños o de corrupción, los mineros somos de una sola pieza, de un solo material, lo hemos demostrado a lo largo de la historia, el próximo 11 de julio cumplimos 89 años de la fundación de nuestro Sindicato Nacional y estamos muy orgullosos cada vez más de pertenecer a él y seguir a la vanguardia de la lucha sindical en nuestro país y con nuestros hermanos los Steelworkers y de otros sindicatos del mundo entero en la lucha sindical.

Gracias, compañeras y compañeros, mi cariño, mi respeto a las familias de Héctor Álvarez Gómez y de Mario Alberto Castillo, y estamos en solidaridad con ustedes y estaremos siempre. ¢

A

86 años de su sacrificio