Projecte La llum a les ones Treballs seleccionats Col·legi Casp, curs 2012-‐2013 http://bit.ly/llao_Casp
1r de batxillerat
Senzilla complexitat Tot i alhora res. Escolta-‐la, sent-‐la i assaboreix-‐la, imperceptible menys pels ulls, la llum és la música del silenci. Com una persona guarda un secret la llum amaga l’arc de Sant Martí: una cursa de colors, refraccions i desviacions. Miralls, ombres i jocs infinits. Viatjant sempre en línia recta les ones t’acaricien. Quina veu més dolça! T’imagines un món sense llum? La veu de l’univers silenciada: el regne de l’obscuritat: la presó d’un món sense sentit.
Luces cegadoras Nos encontramos en el desván lúgubre de una mansión, ocho pequeñas ventanas y ningún tipo de decoración en aquellas enormes paredes, me acerco al pequeño foco de tenue luz que emana de una de las ventanas. La SRA. BLANCO, el ama de llaves, junto con el SR. PRADO y la SRTA. AMAPOLA esperan pacientes en el amarillento sofá mientras que la SRA. CELESTE y el PROFESOR MORA intentan apaciguar a sus empleados, quienes parecen muy alterados por los variopintos rumores que han estado corriendo durante la semana, y el CORONEL RUBIO da vueltas sobre sí mismo, algo alejado del grupo. Todos esperan a que diga algo, y, aunque no sé muy bien cómo empezar, lo hago: YO: Parecía un crimen perfecto, el más perfecto que jamás me había encontrado, pero el asesino, como ocurre en todas las novelas, ha cometido un error: no haber caído en que yo investigaría el caso. Todos los presentes, incluso el nervioso CORONEL RUBIO, clavan en mí su mirada. La tensión crece de forma exponencial. Noto que el asesino se está mordiendo el labio superior y tiene los ojos extremadamente abiertos, parece que su serenidad zozobra. YO: Todos ustedes tenían motivos suficientes para matar al mayordomo. Por ejemplo, usted, Sra. Blanco, le tenía un gran odio después de que él matara accidentalmente a su gato. SRA. BLANCO: ¡Yo jamás habría matado a nadie por esa frivolidad! YO: No estoy diciendo que sea así. Todos ustedes, al igual que la Sra. Blanco, tenían un móvil que les podría haber impulsado a llevar a cabo este asesinato: la venganza. CORONEL RUBIO: (gritando vehementemente) ¡¿Quiere dejarse de discursos y decirnos ya quién es el canalla que mató al mayordomo?!
YO: Paciencia, aquí el detective soy yo, ¿me permite proceder? (el coronel retrocede en silencio, obediente y exhausto, espero unos instantes y me dispongo a continuar) Como decía, todos ustedes tenían motivos para acabar con su vida, pero solo una persona tenía los medios... (advierto varios cambios significativos en el semblante del criminal, su tez palidece y su mirada se vuelve lejana, como si estuviera a quilómetros de distancia)… sólo uno sabía cómo conseguir que pareciera un triste accidente. Es increíble lo que se puede hacer con un pequeño y sencillo artilugio, ¿verdad? (noto como sus ojos me miran furtivamente). Cuando llegué a esta habitación por primera vez para realizar una rápida inspección ocular, pensé que la clave del asesinato fue la poca iluminación que esta tiene. Fue usted muy agudo, señor, pero yo lo soy más. El pasado miércoles, mientras la Señora Blanco me enseñaba toda la casa, me llamó la atención una sala con estanterías llenas de lentes de diferentes tamaños. Mi padre había sido fotógrafo y durante toda mi infancia no hubo día en que no me enseñara algo sobre ellas. Los recuerdos que afloraron en mí me hicieron imposible resistir la tentación de entrar a contemplarlas y entonces fue cuando lo vi todo claro: la clave del asesinato no estaba en la oscuridad de la sala, sino en una de las pequeñas ventanas... y en las lentes. En ese mismo momento recordé un detalle que me había sorprendido cuando visité el desván para hacer la rápida inspección: todos los cristales de los ocho tragaluces que hay aquí son planos. Todos excepto uno, este de aquí (señalo la ventana que está a mi lado). Esta pequeña ventana tiene, al contrario que las otras siete, una lente biconvexa, más conocida como lente convergentes (advierto cómo el asesino traga saliva e intenta mantener la calma, la gente de su alrededor empieza a mirarlo con sospecha). Supongo que no todos ustedes conocen las propiedades de este tipo de lentes. En resumidas cuentas: proyectan los rayos de luz que las atraviesan en un punto llamado foco. El asesino escogió la lente de tal manera que su foco se encontrara exactamente a una altura de un metro y setenta centímetros del suelo.
Además, conocía perfectamente la hora exacta en que los rayos del Astro Rey incidirían sobre dicha lente. Quedó aquí con el mayordomo unos y se encargó de entretenerlo con una larga charla hasta el instante concreto en que los rayos del sol, focalizados por la lente, lo cegaron. El pobre infeliz se movió bruscamente, para apartarse del exceso luminoso, y tropezó con la escoba, que había sido colocada meticulosamente para que el asalariado resbalara y se golpeara con el mueble. Sé que esta hipótesis puede parecer un poco forzada, pero tengo pruebas de ello. Encontré una factura de hace un par de semanas en que se detalla la colocación de un cristal convergente como vidrio para la ventana. Resulta sospechoso que en una habitación con siete ventanas con vidrios planos se coloque uno con una lente convergente, ¿verdad? En la inspección ocular me di cuenta de este detalle y me dijeron que el niño había roto el anterior cristal de esa ventanita de un balonazo. Le pregunté al chaval si lo había hecho, pero él lo negó. Después de mi visita a la habitación de las lentes, mis sospechas se acrecentaron. Supe que lo que me habían dicho no era verdad cuando vi que en el patio exterior había unos trozos de cristal del mismo grosor que el de las ventanas. Eso me dio a entender que se había roto el cristal desde dentro y no desde fuera (noto que el asesino respira de forma rápida y violenta). Dicen que muchos criminales quieren que los identifiquen para que se reconozca su trabajo, quizás eso hizo que el asesino no se deshiciera de los cálculos que realizó para saber en qué punto estaría el foco que cegaría al mayordomo. Además, la hora de la muerte de éste coincide con el momento de mayor incidencia de los rayos del sol sobre esta ventana. Por lo tanto... PROFESOR MORA: No... YO: Está usted detenido. Es una idea tan meticulosamente preparada que resulta evidente que fue suya. PROFESOR MORA: Pero... ¿cómo lo ha sabido? ¿Cómo ha sabido lo de las lentes y los cálculos? YO: Profesor, yo también soy físico.
Vuit minuts dinou segons Calor. Explosions solars. Petons irrefrenables sobre la sorra. Nuclis d’hidrogen en reacció de fusió. Deler imparable d’unió. Xocs atòmics i desintegracions. Mans cercant arrelar en cabell aliè. Heli i energia nounats al món. Gemecs llençats a l’aire nocturn. Radiacions emeses a l’infinit buit. Mirades capaces de fondre. Infraroigs que escalfen àtoms en solitud. Sang repicant en les oïdes. Rajos movent-‐se al límit de la realitat. Calor febril sota capes de roba. Poder Fulgurant apropant-‐se a una roca rodona. Cors bategant a velocitats insospitades. Brou d’energia i gasos atmosfèrics. La romàntica Eos esperant els amants. Primerenca energia en forma de llum solar, espectre visible per l’ull nu. Mans unides i enamorades, parpelles obertes cap al mar. Lux i Iris junts al final.
Atrapats en la polarització Necessito arribar-‐hi. Necessito que no m’aturi ningú. Ja no sé què fer, què pensar. No puc desviar la meva trajectòria. Si torna a passar, si realment me la torno a trobar, no crec que surti d’aquesta. I ho necessito. He de sobreviure i arribar al final del meu destí. N’érem moltes, provant d’arribar al final del camí. Moltes, totes diferents. Totes corríem en diferents direccions, diferents angles, diferents camins, però només un objectiu: arribar-‐hi. Només quedo jo. Estic sola. Tinc por. Si ha passat un cop, pot passar una altra vegada. No sobreviuré. Ho sé. Totes consumides, totes devastades, cap va poder passar la barrera. El mur. El gran mur que s’estenia davant nostre. Tenia por. Totes en teníem. Tanco els ulls, i continuo impertorbable el meu camí. Potser això em va salvar. L’esperança. A elles no. Les van fer desaparèixer a totes. No. El veig. Un altre. Està girat. Perpendicularment. No és el mateix mur. No sé què fer. No puc escapar. No vull escapar. Estic sola. Jo i el meu destí. Jo i les meves ambicions. Jo i el meu objectiu. Tanco els ulls, i continuo impertorbable el meu camí. Potser això em salvarà. L’esperança. Quelcom m’està absorbint. No puc parar-‐ho. Intento travessar aquest mur que s’estén majestuós davant meu. No puc. Quedo reduïda a res. És claustrofòbic. No hi podré arribar. Mai. Algú l’ha posat allà. Un filtre. No volen que hi arribi. Em filtren. Estic atrapada. Vull sortir. Ja no sé què fer. Ja no hi ha esperança. Només angoixa. I claustrofòbia. Mica en mica, vaig complementant-‐me amb el mur que em mata. Mica en mica vaig inserint-‐me en ell. No podré sortir-‐ne mai. Ja ho sé. Ja sé el que sentien totes. Totes les ones que hi van xocar. No sóc res. Estic enmig de dos murs que m’insereixen dins seu. Absorbida. Reduïda. Atrapada. En menys d’una mil·lèsima de segon, em trobo atrapada en la polarització.
Sol en una habitació buida La llum que s'escola per la finestra dibuixa ombres i tenyeix les parets de color. Paquets d'energia que passen per l'habitació sense mobles. Només hi passen, no s'hi queden. La llum sempre està de pas. Parpellejo i ja no hi és. Respiro i és ben lluny, fora del meu abast per sempre. Es mou, però sembla que es quedi quieta. No percebo ni el més mínim indici del seu moviment, però tanmateix sé que res a l'Univers pot ni tan sols provar de perseguir-‐la. Partícules que viatgen i xoquen i reboten. O ones que es propaguen i es reflecteixen i es difracten. Tant se val. Agafo les pintures. La llum és blanca i alhora plena de colors. Primer esbosso les formes de l'habitació. Les cantonades abruptes impedeixen a la llum arribar a tots els racons de la sala. Les ombres s'oposen a la llum, però sense llum no hi hauria ombres. S'exclouen i es complementen al mateix temps. Com l'ona i el corpuscle. Com la nit i el dia. Com la calor i el fred. Com l'amor i l'odi. Recordo el principi d'aquell llibre: "Mai no som infinitament lluny d'aquells qui odiem. Per la mateixa raó, doncs, podríem creure que mai no serem absolutament a prop d'aquells qui estimem”. La idea m'esgarrifa. Començo a barrejar els colors. Groc i ocre, i una mica de negre. La tela blanca brilla davant meu. Hi ha poques coses millors que una tela blanca, inert, esperant que algú l'ompli de vida amb un pinzell. A poc a poc, començo a transformar la tela. És només quan pinto que sento alguna cosa semblant a la felicitat, o a la no-‐tristesa. El meu braç llisca per la tela talment com una ballarina, àgilment i lleugera.
La buidor de l'habitació em neguiteja. No aconsegueixo deixar de pensar que l'habitació no és res més que un reflex de la meva ànima. Fa anys que la buidor va apoderar-‐se de mi. Com si fos un forat negre que va empassar-‐se tota la llum que tenia dins. Aixeco el cap i miro el Sol. Dos nuclis incandescents que es repel·leixen i s'atrauen. Una força que supera l'altra. I els dos es converteixen en un de sol. Vuit minuts després, la llum il·lumina la meva tela. El procés es repeteix durant mil·lennis. Dos que es tornen un de sol i donen sentit al meu món. Contemplo el quadre acabat. La buidor torna a omplir-‐me. Agafo una d'aquelles píndoles per dormir que em va receptar el metge. Me la prenc sense aigua. Corro a la finestra i baixo les persianes. La foscor m'acull, em reconforta com una mare quan abraça el seu fill que plora. Jo no ploro. Fa temps que vaig deixar de plorar. Plorava quan alguna cosa es movia dins meu. Però ja no hi tinc res, a dins. Només un forat negre que s'ho empassa tot: les ganes d'estimar, de riure, de veure aquella pel·lícula que tant m'agradava. I es va fent més i més gros, com si també s'empassés la llum de cada dia. Tanco els ulls. Ara, la llum no pot atrapar-‐me.
Llums, ulls, memòries La recull, la refracta, de còrnia a humor i cristal·lí. Projecta la imatge a la retina i el que m’envolta ja és a dins. Espectre revelador que, com un intrús esperat, més enllà de les convexes portes és doblement intercanviat. Raigs que convergeixen es transformen en imatge. I d’aquí a la memòria: transcendent viatge. Què se’n faria de les memòries? Solsticis, crepuscles, aurores, tempestes. L’absència d’ella és l’obscur abisme. I tot i així, modesta S’estén en front meu. El seu reflex: un miratge de la seva perfecció, un simple rastre.
Per ella conec l’entorn, puc gravar amb la mirada, conèixer tots els colors del món, longituds d’ona anhelades. Tots som observadors errants, però, amb el desgast dels anys, com a màquines temporals impassibles en patirem els danys. La recull, la refracta, de còrnia a humor i cristal·lí. Projecta la imatge a la retina: és un cicle sense fi.
4t d’ESO
Alba -‐On vas? Per què fuges de mi? No corris!-‐ Mai podré jugar amb ella, sempre s’escapa de mi. Potser no vol jugar, potser l’espanto quan li crido, o potser, simplement, no li agrado. La mare no em creu quan li dic que la meva “petita amiga” vola i se’n va per un forat del sostre i no torna fins l’endemà. A casa tothom pensa que són coses de la meva edat, que m’he creat una amiga imaginària només per passar-‐hi l’estona, però no és així. Se ben bé que la Blanca és real i algun dia l’agafaré i li demostraré a la gent que no són coses de nenes petites. Un cop vaig estar a punt de tocar-‐la, però va tan ràpida que és gairebé impossible. Mai havia vist una cosa com la Blanca, depèn del dia brilla més o menys, és preciosa. Avui és un nou dia i vull tornar a veure-‐la, així que m’afanyo a vestir-‐me i surto de casa. Llavors, em trobo amb la mare i em diu que haig d’anar amb el pare a treballar, així que agafo la pala i segueixo el pare. Al poblat ens passem gran part de la vida excavant el terra perquè diuen que hi ha un altre lloc on fa temps els nostres avantpassats hi vivien, l’anomenem Terra de Llum. La llegenda diu que aquest món es troba sota els nostres peus i que conté una cosa única, es diu Llum. Segons ma mare, la Llum no té forma i es propaga per tot arreu sense aturar-‐se. Diuen que et fa veure coses al·lucinògenes com per exemple mil i un colors estesos per tot el sostre, o com antigament li deien en l’altre món, el Cel. Jo de colors només en conec quatre: el negre, el marró, el gris i el de la Blanca. Com no hi ha res com ella no se quin és el seu color, no té nom. Només puc dir que es tot el contrari al negre, que quan més a prop estic més clares veig les coses, és com si fos una bola d’energia màgica. Veig que el pare està molt concentrat en la feina així que aprofito per escapar-‐me i buscar la Blanca.
Ja he arribat. Estic sota el foradet del sostre per on ella entra i surt cada dia. L’espero ansiosa perquè estic segura que aquest cop l’atraparé. Sempre bloquejo la porta de la cova on es troba el forat, així no s’escapa. La Blanca ja ha entrat i com de costum està donant voltes per tot arreu. Avui no la perseguiré, ara ja he après la lliçó i sé que no la podré agafar tret que ella s’aturi, cosa que mai li he vist fer. Arriba un moment que em posa tan nerviosa que crido sense adonar-‐me’n: ATURA’T!!! De sobte, la Blanca es queda quieta, flotant a l’aire, i jo, amb els ulls perplexos i bocabadada li dic amb un to tranquil i serè: M’entens quan et parlo? Aleshores, ens apropem l’una a l’altra al mateix ritme, amb calma i precaució. -‐Mai havia parlat davant teu, perquè pensava que no m’entendries. Sento no haver-‐ho fet abans. Com et dius? Tens nom?.– Li pregunto -‐No tinc nom.-‐ Diu. -‐Llavors et puc dir Blanca? Crec que és un nom molt bonic per a una criatura com tu. Per cert, què ets? -‐Jo? No sóc cap criatura. Sóc un petit raig de llum provinent del Sol. Els meus germans es propaguen en línies rectes per on el medi els deixi passar, però jo prefereixo anar pel meu compte mentre pugui fins a la nit. – M’explica. -‐El sol? Què és el sol? I la nit? – Li pregunto amb una mirada molt confusa. -‐No saps què és el sol? És aquella estrella que dóna tanta llum!-‐ Exclama. -‐Llum!!! Tu coneixes la Llum? On és? El meu poble porta buscant-‐la des de fa un segle.-‐ -‐Jo vinc del món que és a sobre del vostre. Hi ha llum, aigua, terra i arbres per tot arreu... Si em segueixes t’hi puc portar.-‐
-‐D’acord, però jo no puc volar com tu, només puc caminar. Espera que agafo la pala.-‐ Començo a excavar amb totes les meves forces. Cada gota de suor que em llisca pel front em cau als ulls i haig de suportar aquesta calor infernal perquè no tinc ni un segon a perdre. De sobte noto que la paret ja no és dura com una pedra, sinó que és massa tova. -‐És fang!-‐ Crido a la Blanca. -‐Si! Si! Ja som a prop de l’altra banda.-‐ Travesso el forat que he creat i surto a un altre lloc que encara no he pogut contemplar perquè hi ha una cosa com la Blanca, però mil vegades més gran i potent que ella, que em cega els ulls. Em fa mal la vista i no puc amagar-‐me a cap lloc perquè està per tot arreu. -‐Blanca! Què és això?! Què és això?!-‐ Li pregunto espantada. -‐Tranquil·la! Gaudeix de la llum del sol, nota la seva escalfor i contempla l’arc de Sant Martí.-‐ Amb els ulls mig oberts intento observar tot el que m’envolta. Ja em sento més segurs. No em puc creure el que veig. El sostre és blau i molt alt, hi ha animals dels que mai havia sentit parlar, unes coses tan estranyes... La Blanca m’explica que l’arc de Sant Martí es crea a partir d’un raig de llum blanca, com ella, que passa a través de les gotes d’aigua i llavors el raig es descompon en una banda de colors anomenada espectre de la llum blanca. Durant una bona estona m’explica què és el cel, la nit, la pluja... Tants anys d’excavació per no res, resulta que estàvem anant en la direcció contrària... Per últim, abans que es faci de nit i ella desaparegui, li dic: -‐Per cert, em dic Alba.
El brillante poema Se alzó Newton orgulloso y bien alto pronunció: “Además de la ley del reposo, la duda de la luz se acabó” Partículas rebotadoras, pelotitas a la par, experimentos de muchas horas solo quedaba proyectar. Y para sorpresa de la eminencia un error en la proyección. Nuevo problema para la ciencia al que Young puso solución. ¿Y si era una onda y dejaba una estela tomando cualquier dirección? Puso el joven la mano en la vela y la sombra abarcó el gran salón. Iba el joven alegre pero errado pues no era onda sino radiación y Maxwell subido al estrado puso fin a ésta cuestión.
La luz y el cielo Inmenso manto incógnito De azul nos iluminas Del reflejo de las olas Hacia tierra mal querida Te llevas los deseos Nos devuelves los lamentos Inocente y sensible Inmenso e imprescindible Viejo sabio experimentado De blancas manchas te adornas Y a la gente interesada Figuras proporcionas Nos arropas con tu imagen Nos levantas iluminado Y a veces te vuelves triste Si de gris te vistes raro La luz, tu aliada Hace de tu estampa hermosura Que con haces de luz pura De azul tiñe tu largura Efecto volteado Iluminado cielo enorme La luz tu compañera Contigo está conforme
Lit We can see an image so fast thanks to our useful eyes They as a camera act to transmit beautiful straight lights Light in vacuum can spread and energy transmit Their waves give indications of colour or polarization When a white ray of light passes through a glass prism the colours come up bright and a rainbow seem
L’ingredient de la vida
Sortint d’una gran bola de foc i calor, recorre una gran distància amb frissor. Travessant l’immens espai solitari i buit, propagant-‐se en totes direccions sense aturar-‐se A una velocitat constant en el buit, ve cap a nosaltres, per no deixar-‐nos sols. Me la imagino blanca i brillant, fugaç com un estel, poderosa com tots els Sols Miro el rellotge, arriba 8 minuts i 18 segons tard. Però no passa res pel retard, sempre serà rebuda amb amabilitat, ja que per a nosaltres la seva escalfor és reconfortant. Hi ha gent que l’espera per despertar-‐se, altres esperen que se’n vagi per adormir-‐se. Així doncs la llum és molt més que una dualitat, és l’energia que necessitem pel nostre dia a dia.
MIRRORS... Some light rhymes Flat, convexes or concaves Help the tireless light To turn left and right Spread throughout waves On shop-‐windows, glimpsing your reverse See whether you’re looking nice Stare at it more than twice You’ll look symmetric but inverse It’s not magic nor superstition All’s related to light’s transmission Viganella’s settled on a valley With ranges all around And the light cannot be carried So rays never hit the town Dark and cloudy eighty days, Citizens were in light’s chase. Hung a mirror in the proper place Therefore now the light stays. It’s not magic nor superstition All’s related to light’s transmission.
Were also used in ancient times Arquimedes a stratagem designs Beams happened to defeat And burn the sails of a whole fleet Even in myth they can be found Shame Narcis ends up drowned Once the next the pond kneels And so much love for himself feels It’s not magic nor superstition All’s related to light’s transmission. As well as in science are effective, In many issues such as perspective: With the set of mirrors in the right angle The microscope will magnify the sample So mirrors countless applications have But their success, with the light halve; Unfortunately now the story is over, And we arrived to the book’s back cover.