54 LANRESC

Page 1

Órgano Oficial de Divulgación de la Ciencia y la Tecnología en Yucatán Año 6 No. 54 Julio 2015

siidetey

Mérida, Yucatán, México

LANRESC

Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera



siidetey Órgano Oficial de Divulgación de la Ciencia y la Tecnología en Yucatán

Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán

@ Contacto: larque@cicy.mx / malonso.aguero@gmail.com

2 3


Editorial

Los laboratorios SIIDETEY, fue una de las principales iniciativas que emergieron del planteamiento original del Sistema y que tuvo una buena acogida entre los representantes de las instituciones que integran este consorcio académico del sur-sureste del país. Todos los laboratorios que se propusieron después de ser evaluados por el comité de pares y que recibieron el voto de aprobados, recibieron financiamiento de los fondos mixtos y de otros fondos de la federación. Algunos de ellos se han consolidado y en la actualidad se encuentran funcionando, tal es el caso de la planta de alimentos, el banco de germoplasma, el laboratorio de nano y biomateriales, mismos que ya se han presentado en gacetas anteriores. Es un gusto presentar en esta ocasión el laboratorio que se ha definido como Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera, que estará ubicado en las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México en Sisal sitio histórico ubicado en la costa yucateca. Como podrá constatar el lector se trata de un proyecto fundamentalmente de Ingeniería, que de manera oportuna iniciara toda una serie de proyectos que entre otros aspectos tienen relación con el impacto del llamado cambio climático en todos los procesos de la interface tierra-mar. Ha recibido el beneficio académico de ser considerado como Laboratorio Nacional, hecho de particular importancia para la ciencia de nuestra región. Demos la bienvenida a este esfuerzo que ha coordinado la UNAM y leamos a lo largo de la gaceta lo que los académicos involucrados en el laboratorio desean compartir con la comunidad regional ¡en horabuena!

Dr. Raúl Godoy Montañez Secretario de Educación

QUIÉNES SOMOS: Gaceta SIIDETEY es una publicación mensual editada por el Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán; cuenta con un Consejo Editorial que autoriza la publicación de los artículos y fotografías, previa autorización de las instituciones y autoridades de origen. Los artículos son responsabilidad de cada autor y su utilización total o parcial debe ser autorizada por el SIIDETEY. La Gaceta tiene un tiraje

2 3

variable de ejemplares y se distribuye en los centros de investigación, universidades y tecnológicos del Sistema. Gaceta SIIDETEY tiene una paginación variable; se imprime en papel couché de 115 g y forros en 130 g; a todo color. Su impresión se realiza en la ciudad de Mérida, Yucatán. Oficinas SIIDETEY: Parque Científico Tecnológico del Estado de Yucatán, Km 5.5 Carretera Sierra Papacal Chuburná-Puerto. ISBN en trámite.


CONTENIDO CONSEJO EDITORIAL

El LANRESC en el marco del Instituto de Ingeniería de la UNAM 6

Directorio Consejo Editorial Dr. Raúl Humberto Godoy Montañez

Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera 7

Dr. José de Jesús Williams Dr. Felipe Sánchez Téyer

El proyecto de creación del LANRESC 9

Dr. Romeo de Coss Gómez

El LANRESC y el Riesgo Oceanográfico 13

Dr. Javier Rivera Ramírez Dr. Carlos Macías Richard

Hidrodinámica en playas y el LANRESC 17

Dr. Xavier Chiappa Carrara Dr. Miguel Lisbona Guillén

Morfodinámica Costera y el LANRESC 21

MAF. Manuel Canul Polanco MC. Pedro Alberto Haro Ramírez

El LANRESC y la gestión local del riesgo costero 25

Dr. José Verástegui Chávez MC. Mirna Alejandra Manzanilla Romero

El LANRESC y la hidrología 27

Dr. Tomás González Estrada Dr. Emilio Martínez de Velasco Aguirre

LANRESC y Genómica Ambiental y Salud Pública 29

COMITE EDITORIAL José Luis Andrade Torres

Cambio climático y el LANRESC 31

andrade@cicy.mx Alma Rosa Centurión

Sistemas de Información Geográfica y Percepción Remota en Ecosistemas Costeros en el Marco del LANRESC 34

almacy03@hotmail.com Ana Luisa Ramos Díaz aramos@ciatej.net.mx

El LANRESC y la energía oceánica 38

Héctor Torres Pimentel torres.hector@inifap.gob.mx Elena Ojeda Casillas EOjedac@ingen.unam.mx Manuel Baeza Bacab manuel.baeza@uady.mx Isabella Rivas Castilla isabella.rivas@utmetropolitana.edu.mx Sandra Lucía Ramírez andras00_00@cephcis.unam.mx Jairo Cristóbal Alejo jairoca54@hotmail.com Nahayelli Juárez nahahuet@gmail.com Omar Zapata ozapata@mda.cinvestav.mx Alfonso Larqué Saavedra larque@cicy.mx

Calle 34 No. 101-A, Col. García Ginerés C.P. 97070, Mérida, Yucatán, México Responsable de la publicación: Dr. Alfonso Larqué Saavedra Diseño: Ing. Magali Alonso Agüero

@ 5

17


EL LANRESC EN EL MARCO DEL INSTITUTO DE INGENIERIA DE LA UNAM

E

n el marco de la Convocatoria de Laboratorios Nacionales, el CONACyT recientemente aprobó la propuesta para la creación del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANRESC) que fue presentada por la Unidad Académica Sisal del Ins tuto de Ingeniería de la UNAM (UAS-II). En un esquema novedoso para nuestra prác ca académica, el nuevo laboratorio abordará la caracterización y el estudio del comportamiento, la variabilidad y la resiliencia de los diversos ambientes costeros y sus procesos. Pero no solo eso, sino que, con base en el liderazgo de nuestros académicos, incursionará en la iden ficación y propuesta de soluciones sustentables para la adaptación o transformación de sus sistemas socio-ambientales ante perturbaciones de diferente naturaleza, como intervenciones antropogénicas, eventos extremos, y cambio climá co. Par endo de una amplia colaboración académica, el LANRESC realizará inves gación interdisciplinaria y mul ins tucional enfocada al estudio integral de los procesos sicos terrestres, del océano y de la atmósfera que convergen e impactan las zonas costeras de México, Centro América y el Caribe. En el largo plazo se espera que el LANRESC se convierta en un referente en inves gación y formación de recursos humanos, así como en un aportador de soluciones a problemas relacionados con los sistemas costeros del país y la región, con una clara incidencia en la formulación de polí cas públicas de los tres niveles de gobierno para la conservación y el aprovechamiento sustentable de las zonas costeras. El logro de la aprobación del LANRESC, fruto de la colaboración de nuestros colegas de la Unidad Académica Sisal del Ins tuto de Ingeniería, sus contrapartes de las dos ins tuciones asociadas (Ins tuto Tecnológico de Sonora y Centro de Cambio Global y la Sustentabilidad en el Sureste), así como colegas de otras ins tuciones y dependencias par cipantes, es un paso más para consolidar nuestra presencia en el sureste mexicano. Este apoyo viene a sumarse al otorgamiento de cuatro cátedras CONACyT el año pasado, ocupadas por jóvenes doctores ya integrados al trabajo académico y de vinculación que empieza a rendir frutos. Con tan sólo 5 años de existencia, la UAS-II ha demostrado tener la capacidad de combinar la generación de conocimiento y la formación de recursos humanos, con la par cipación en la solución de problemas nacionales asociados a los ambientes costeros. En este contexto, la creación del LANRESC viene a fortalecer el plan de descentralización del Ins tuto de Ingeniería UNAM y a refrendar la per nencia de ubicarse en el sureste mexicano, una de las regiones prioritarias del país. Los ar culos que se presentan a con nuación dan una pequeña muestra de los intereses y las líneas de inves gación que cul vará el LANRESC, desde temas de sica e ingeniería de la costa, pasando por temas asociados con la ecología y biología de ecosistemas, hasta temas de manejo integral de la zona costera e impactos socio-económicos. Todos enen un enfoque mul disciplinario para estudiar la resiliencia costera, con el fin de proveer de información, metodologías y soluciones para la prevención y la mi gación, y contribuir a conservar los sistemas costeros y lograr un desarrollo y aprovechamiento sustentables de las costas mexicanas. Adalberto Noyola Director Ins tuto de Ingeniería UNAM 1 (i) Unidad Mul disciplinaria de Docencia e Inves gación de la Facultad de Ciencias de la UNAM en Sisal, Yucatán; (ii) Coordinación de Hidráulica del Ins tuto de Ingeniería, campus CU; (iii) Centro de Inves gación Cien fica de Yucatán; (iv) Ins tuto de Inves gaciones Oceanológicas de la Universidad Autónoma de Baja California.

@ 6


Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera Resiliencia 1. f. Psicol. Capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas.

L

a resiliencia es la capacidad de un sistema para mantenerse en condiciones estables independientemente de la magnitud de las perturbaciones que lo afectan. C. S. Holling1 adaptó este término proveniente de la psicología para señalar que los ecosistemas pueden tolerar ciertos disturbios y mantener constante su estructura. Sin embargo, dadas ciertas condiciones de magnitud o duración de las perturbaciones, la estabilidad del ecosistema se ve comprome da al rebasar cierto umbral y ocurren cambios estructurales y funcionales. El uso sostenible de los bienes y los servicios ambientales que brindan los ecosistemas requiere comprender los límites dentro de los cuales debe mantenerse la constancia numérica de los componentes abió cos y bió cos para asegurar el poder de recuperación del sistema o, en los términos escritos por R. Margalef, los límites fuera de los cuales el sistema no ene la capacidad de “permanecer razonablemente igual a sí mismo a pesar de los cambios”2. Resis r al cambio, en términos ecológicos, cuesta y el costo suele asumirse aumentando el flujo de la moneda de cambio: la energía o reduciendo el número de elementos presentes en el sistema. Las zonas costeras son par cularmente vulnerables por ser ecotonos únicos entre los sistemas oceánicos y los con nentales que generan altos valores de complejidad y producción biológicas. Las costas representan, para nuestro país, una importante fuente de ingresos pues se llevan a cabo ac vidades extrac vas, produc vas, comerciales y de servicios únicas; algunas de estas ac vidades conllevan al deterioro del ambiente del que depende el bienestar de las comunidades humanas por lo que el uso de los recursos costeros, invariablemente, genera cambios en la estructura socioeconómica de una región. No es di cil imaginar que la protección y regulación del uso de los recursos en las zonas costeras provocan conflictos de intereses a los que no se ha podido atender de manera holís ca y trans- sectorial. El programa de laboratorios nacionales del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología se creó para reforzar la infraestructura y el equipamiento necesario para detonar el desarrollo cien fico y la innovación en temas fundamentales. Sin duda, la costa cons tuye un tema fundamental y estratégico por lo que la implementación del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANRESC) es una oportunidad para abordar la compleja maraña de interacciones que existen entre un sinnúmero de variables cuyo origen se encuentra en procesos que ocurren tanto en escalas globales como locales y que afectan la estabilidad de los sistemas costeros. Esto es par cularmente importante para la Unidad Académica de la Universidad Nacional Autónoma de México en Sisal, cuya vocación es conocer y establecer el potencial de los ambientes costeros considerando su capacidad de resiliencia. Sin esta consideración, el aprovechamiento de los recursos bió cos puede generar u lidades económicas y sociales sin verosimilitud biológica. 1 Holling C S (1973) Resilience and stability of ecological systems. Annual Review of Ecology and Systema 2 Margalef R (1968) Perspec

ves in ecological theory. University of Chicago Press.

@ 7

cs, 4: 1-23


El proyecto del LANRESC, que estará albergado en las instalaciones del Ins tuto de Ingeniería en la Unidad Académica Sisal, ene como premisa que aprovechar, preservar y restaurar los recursos naturales requiere involucrar a los grupos sociales e incorporar sus necesidades y aspiraciones para generar esquemas de desarrollo. Berkes y Folke3 señalaron que las prác cas de ges ón de los recursos naturales deben vincular los sistemas sociales y ecológicos que, de forma indisoluble, forman el binomio necesario para mantener la capacidad de resiliencia de las costas. El LANRESC, por lo tanto, cons tuye un área de oportunidad para que especialistas provenientes de dis ntas disciplinas y aquellos formados en esquemas trans- disciplinarios converjan y se generen las sinergias necesarias para mostrar que proyectos como éste son y enen u lidad pública y pueden ofrecer servicios concretos a la sociedad. En el corto plazo, el reto será integrar dichos grupos de trabajo aprovechando los esquemas de colaboración intra- e inter- ins tucionales que incidirán, además, en la formación de recursos humanos de calidad, que es otro de los componentes que cimenta el programa de laboratorios nacionales. En la Unidad Académica Sisal se forman estudiantes de licenciatura (en Manejo Sustentable de Zonas Costeras) y de posgrado (en Ingeniería y en Ciencias del Mar y Limnología) que se verán directamente beneficiados. La consolidación del LANRESC es parte del obje vo ins tucional que persigue la Universidad Nacional Autónoma de México en su Unidad Académica Sisal para formar profesionistas comprome dos con el desarrollo humano y ambiental sustentable mediante un modelo educa vo basado en el paradigma del aprendizaje, la integración de las funciones sustan vas y la trans- disciplina como ejes rectores de las acciones que se emprenden con miras a aportar soluciones a los problemas regionales, nacionales e internacionales. Xavier Chiappa-Carrara Sisal, Yucatán, julio de 2015

3 Berkes F, Folke C (1998) Linking social and ecological systems. Management prac ces and social mechanisms for building resilience. Cambridge Univ. Press.

@ 8


El proyecto de creación del LANRESC Paulo Salles Afonso de Almeida, Alec Torres Freyermuth & Hugo Alberto Gu érrez Jurado Laboratorio de Ingeniería y Procesos Costeros Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera Unidad Académica Sisal del Ins tuto de Ingeniería UNAM Karina Esqueda-Lara Centro del Cambio Global y la Sustentabilidad del Sureste Luis Méndez-Barroso y Agus n Robles Morúa Departamento de Ciencias del Agua y Medio Ambiente Ins tuto Tecnológico de Sonora

L

a zona costera se define como la región geográfica que comprende la interface mar- erra y cuyos límites están en función de la influencia o transición que existe entre la litosfera con nental y oceánica (FAO, 1998). Dicha zona es sumamente dinámica a diferentes escalas temporales y en general muy vulnerable a eventos extremos y propensa a desastres naturales. Además, representa el fin úl mo de las cuencas con nentales, sirve de filtro de las diversas descargas terrestres y alberga un sinnúmero de hábitats naturales y ecosistemas únicos. De acuerdo a pronós cos del Panel Intergubernamental de Cambio Climá co (IPCC por sus siglas en ingles), los eventos extremos serán más frecuentes y se intensificarán, como efecto de las modificaciones en los patrones climá cos a nivel global (IPCC, 2012). Aunado a lo anterior, de acuerdo a los úl mos reportes del IPCC, se es ma que alrededor del 50% de la población mundial habita en zonas costeras y la tendencia seguirá en aumento durante los siguientes años (IPCC, 2007). Por lo tanto, el estudio y conservación de estas zonas es estratégica para el desarrollo sustentable de cualquier país, debido a su importancia ambiental, social y económica. En México, la legislación en materia de desarrollo y conservación de las zonas costeras es insuficiente y poco clara. Esta situación presenta un reto para la preservación del equilibrio natural de estas zonas, las cuales son con nuamente alteradas por perturbaciones antropogénicas y eventos climá cos extremos, a los que ahora se añaden los potenciales efectos del calentamiento global. Estos fenómenos ocasionan impactos socioeconómicos y ambientales severos y frecuentemente irreversibles cuando no se establecen medidas de adaptación y mi gación adecuadas. Por las razones expuestas anteriormente, es necesaria una comprensión más profunda de los procesos sicos y socio-ambientales que impactan las zonas costeras y su resiliencia. El término resiliencia se define como la habilidad para absorber, resis r, recuperarse, y adaptarse exitosamente a eventos adversos (The Na onal Academy of Sciences, 2012). Para conocer y comprender la resiliencia costera, así como, proponer inicia vas para conservarla y eventualmente aumentarla, se requiere del entendimiento de su funcionamiento desde un punto de vista integral, considerando la complejidad de la fuerte interacción entre los procesos marinos, atmosféricos, terrestres, y antropogénicos implicados en la dinámica costera, los cuales además se manifiestan y actúan en diferentes escalas espaciales y temporales. Es por esto, que el estudio de la resiliencia costera requiere de la conjunción de una variedad de enfoques y disciplinas para ser abordado con suficiencia.

@ 9


En este contexto surge el Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANSREC) que busca cons tuirse como una plataforma interdisciplinaria y mul -ins tucional, con sede principal en Sisal, Yucatán. Este Laboratorio Nacional se enfocará al estudio de las dinámicas océanicas, atmósfericas y terrestres, incluyendo los aspectos de carácter antropogénico, que convergen e impactan las zonas costeras de México y regiones cercanas en Centro América y el Caribe. El LANRESC se concibe como un ente generador de conocimiento sobre los sistemas costeros, desde un enfoque holís co que permi rá la integración de grupos de expertos de diferentes áreas y disciplinas, además del uso de diferentes técnicas y herramientas. Se pretende implementar una estrategia enfocada a entender el funcionamiento e interacción de los sistemas naturales involucrados y poder así establecer la línea base y desarrollar programas de monitoreo a largo plazo de los cambios asociados al calentamiento global y las alteraciones antropogénicas. Así mismo, tendrá como uno de sus ejes fundamentales la formación de recursos humanos ligados a los programas de Licenciatura y Posgrados de las Ins tuciones Asociadas y Par cipantes, con el fin de que adquieran los conocimientos y herramientas necesarios para contribuir al entendimiento de la resiliencia costera.

El obje vo del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera es realizar estudios y proponer soluciones sustentables enfocados a generar conocimiento en la materia y que contribuyan a la conservación y adaptación de los sistemas costeros ante perturbaciones de diferente naturaleza. Específicamente, en el LANRESC se realizarán estudios enfocados a determinar los efectos y respuesta de los sistemas costeros ante (i) intervenciones antropogénicas (construcción de puertos, sistemas de generación de energía, infraestructura costera, presas y otras modificaciones en los sistemas hidrológicos superficiales y subterráneos), (ii) aportes, descargas y derrames de origen externo a la franja costera, tanto desde el lado marino como el terrestre (contaminantes, crudo, fer lizantes, pes cidas, metales pesados,…), (iii) eventos extremos de origen marino o terrestre (huracanes, tormentas, tsunamis), así como los efectos e impactos asociados al (iv) cambio climá co en la franja costera (aumento en la precipitación, incremento del nivel del mar, inundación costera, erosión de playas, intrusión salina, variación de la temperatura del agua, etc). Lo anterior se logrará mediante la observación y monitoreo de variables en campo (percepción remota e in situ) a largo plazo y con alta resolución espacial y temporal en si os representa vos y de probado interés, el análisis de muestras diversas en laboratorio, así como mediante la modelación sica y numérica de diversos procesos relevantes y determinantes de la resiliencia en zonas costeras. Un ejemplo de las líneas de inves gación del LANRESC, es la observación, caracterización y análisis de las condiciones y variabilidad del clima así como de la dinámica oceánica, lagunar, eco-hidrológica y geohidrológica. Los resultados de estos estudios serán clave para la evaluación de los impactos ambientales en la costa (erosión, inundación, intrusión salina superficial y subterránea, cambios en la temperatura en cuerpos costeros,…) que posteriormente permi rán evaluar la resiliencia y los riesgos tanto de los ecosistemas costeros como en aspectos socioeconómicos asociados a ac vidades produc vas.

@ 10


El LANRESC está conformado actualmente por las siguientes ins tuciones asociadas: · · ·

Ins tuto de Ingeniería de la UNAM (ins tución responsable) Departamento de Ciencias del Agua y Medio Ambiente del Ins tuto Tecnológico de Sonora (ITSON) Centro de Cambio Global y de la Sustentabilidad del Sureste (CCGSS)

Además, par cipan inves gadores de la Facultad de Ciencias de la UNAM (Unidad Mul disciplinaria de Docencia e Inves gación en Sisal), del Ins tuto de Inves gaciones Oceanológicas de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y del Centro de Inves gación Cien fica de Yucatán A. C. (CICY) Entre las principales líneas de inves gación del LANRESC actualmente se encuentran:

Procesos atmosféricos Hidrodinámica costera, estuarina y lagunar Ingeniería Oceánica y Costera Resiliencia y riesgos socio-económicos en ecosistemas costeros Energías Renovables Ecología Humana Ecología y Biodiversidad

Oceanografía física Morfodinámica de Playas y sistemas costeros Hidrología Superficial y Subterránea Manejo sustentable de la zona costera Genómica Ambiental Percepción de Riesgo

Cabe señalar que se procurará fortalecer gradualmente las disciplinas socio-económicas e impulsará una ac va vinculación con los diferentes sectores de la sociedad buscando la solución de problemas a través de la generación de información ú l y elaboración de talleres para los tomadores de decisiones en los tres niveles de gobierno. Como resultado de este vínculo, se contempla la formulación de polí cas públicas e inicia vas orientadas a salvaguardar la integridad de los ecosistemas y asentamientos de las zonas costeras, así como impulsar el aprovechamiento sustentable de sus recursos. Además, el LANRESC contempla la transferencia tecnológica para el diseño de soluciones a problemas puntuales y específicos por medio de la vinculación con el sector público, privado, e ins tuciones civiles nacionales e internacionales.

@ 11


Entre los productos que ofrecerá el LANRESC están:

Sistemas de monitoreo en empo real Sistemas de predicción y de alerta temprana ante eventos extremos Estudios de fac bilidad energé ca de recursos oceánicos Estudios de calidad y disponibilidad de agua en áreas de costa Detección oportuna de elementos de riesgo a la salud Asesoría para la cer ficación de playas Propuestas de alterna vas sustentables para el desarrollo costero Estudios socio-económicos y estudios sobre resiliencia ante los efectos del cambio climá co en la costa Formación de recursos humanos * Impar ción de cursos intensivos Formulación de nuevas inicia vas para la toma de decisiones que respondan a las necesidades del país

* A través de la par cipación en los Programas de Posgrado en Ingeniería (UNAM), en Ciencias del Mar y Limnología (UNAM), en Recursos Naturales (ITSON), en Ciencias en Biotecnología (ITSON), así como la especialidad en Adaptación, la Maestría en Adaptación y Sustentabilidad y la de Sustentabilidad Energé ca del CCGSS que se encuentran en condiciones de lanzamiento y elaboración. Por úl mo, el LANRESC contribuirá ac vamente a robustecer las capacidades de inves gación y formación de las ins tuciones asociadas y par cipantes por medio del intercambio académico y proyectos de colaboración. Este Laboratorio se cons tuye en 2015 y buscará consolidarse en el corto y mediano plazos como un referente a nivel nacional, regional e internacional en las líneas que cul va y en los temas que desarrolla, procurando establecer en etapas subsecuentes nuevas asociaciones estratégicas con Ins tuciones de Educación Superior y Centros de Inves gación de alto nivel, nacionales y extranjeros.

Bibliogra a Food and Agriculture Organiza on (FAO), 1998. Scialabba, Nadia (ed.). Integrated coastal area management and agriculture, forestry and fisheries. FAO Guidelines. Environment and Natural Resources Service, FAO, Rome. 256 p. Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC), 1997 - R.T.Watson, M.C.Zinyowera, R.H.Moss (Eds). Cambridge University Press, UK. pp 517. Available from Cambridge University Press, The Edinburgh Building Sha esbury Road, Cambridge CB2 2RU ENGLAND Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC), 2012 - Field, C.B., V. Barros, T.F. Stocker, D. Qin, D.J. Dokken, K.L. Ebi, M.D. Mastrandrea, K.J. Mach, G.-K. Pla ner, S.K. Allen, M. Tignor, and P.M. Midgley (Eds.) Available from Cambridge University Press, The Edinburgh Building, Sha esbury Road, Cambridge CB2 8RU ENGLAND, 582 pp. The Na onal Academies 2012. Disaster Resilience – A Na onal Impera ve. Commi ee on In- creasing Na onal Resilience to Hazards and Disasters, Commi ee on Science, Engineer- ing, and Public Policy, Na onal Academies Press, Washington, DC, 261p.

@ 12


El LANRESC y el Riesgo Oceanográfico & Tona uh Chris an Appendini Mendoza ería y Laboratorio de Ingeni Procesos Costeros

C

uando se habla de riesgo oceanográfico es normal pensar en oleaje extremo, inundaciones en la costa, tormentas y huracanes. Sin embargo, el concepto de riesgo está l de Laboratorio Naciona fundamentado en dos importantes conceptos: el peligro y la Resiliencia Costera vulnerabilidad. A grandes rasgos, se puede decir que el peligro se refiere a un evento o fenómeno con el potencial de causar daño al al del Unidad Académica Sis medio ambiente, las personas o sus bienes. Un peligro oceanográfico ía UNAM Ins tuto de Ingenier es un huracán, una tormenta o un tsunami, que son los agentes del peligro, el cual puede traducirse en inundaciones, erosión de la costa, fuertes corrientes, salinización de lagunas y acuífero costero, etc…, dependiendo de la vulnerabilidad de una zona dada a dichas afectaciones. La vulnerabilidad por otro lado se refiere a qué tan suscep ble es el medio ambiente, una persona o sus bienes, a ser afectado por la presencia de un peligro. En el caso de la vulnerabilidad costera, ésta describe las caracterís cas del sistema costero desde el punto de vista sico (relieve, topogra a, ba metría, sedimentología, geología), po de vegetación, hábitats y comunidades, así como po de infraestructura que por sí mismas y al conocer su resiliencia definen el potencial de ser dañados o afectados temporal o irreversiblemente.

El riesgo está determinado por la probabilidad de que ocurra un peligro y la vulnerabilidad que existe en un lugar determinado en el que se espera el peligro. De esta manera un riesgo oceanográfico se refiere a la probabilidad de que un evento como un huracán genere daño en la zona costera. Los dis ntos pos de peligros oceanográficos comprenden: Marea de tormenta- Son eventos en los que existe un incremento del nivel de agua y que según la intensidad y el po de fenómeno que las ocasiona puede causar diferentes pos de daños. Los fenómenos más importantes que causan las mareas de tormenta son: Huracanes - Estos fenómenos meteorológicos causan un aumento en el nivel del mar de dos pos. Por un lado, al ser depresiones tropicales que giran alrededor de un centro de baja presión (ojo del huracán) producen un aumento del nivel del mar por el efecto del descenso de la presión atmosférica, compensado con un ascenso del nivel del mar. Por otro lado, los fuertes vientos del huracán, sobre todo cuando se aproximan a la costa, generan un empuje sobre el agua superficial del mar, la cual se apila en la costa durante la duración del evento y produce un aumento temporal del nivel del mar. Tormentas extratropicales- Estos fenómenos meteorológicos de gran escala, generan mareas de tormenta similares a las de un huracán. El viento constante y de gran intensidad dirigido hacia la costa apila gran can dad de agua. En el caso del Golfo de México, las costas de cara al norte o semiencerradas como lo son bahías y lagunas costeras, son más suscep bles a experimentar mareas de tormenta de magnitudes importantes (0.8 – 1.2 m) debido a los Nortes.

@ 13


Mareas astronómicas: Estas son generadas por la atracción de la gran masa de agua (océano) por la luna y el sol. En general no son un peligro. Sin embargo, si algún otro peligro se presenta durante una marea alta, el efecto destructor del peligro aumenta, ya que al exis r un nivel del mar alto, el peligro tendrá mayor alcance sobre la erra. Tsunamis: Los tsunamis se generan debido a un evento sísmico, donde el desplazamiento de la erra es reflejado sobre el nivel del mar, generando una onda de pequeña altura pero muy larga. Al llegar a las zonas costeras donde la profundidad del fondo marino disminuye, dicha onda se acorta y su altura aumenta de manera muy importante, pudiendo alcanzar incluso alturas de 10 m. En erra, el tsunami se manifiesta como una gran masa de agua que se desplaza sobre la superficie e inunda todo a su paso con efectos devastadores. Oleaje no rompiente: Este peligro normalmente se asocia a un nivel del mar alto, donde por ejemplo una estructura refleje el oleaje incidente, generando erosión al pie de la estructura y causando su colapso. Oleaje rompiente: Sin duda este oleaje es el que representa mayor peligro, pues al impactar sobre las estructuras puede ocasionar graves daños, así como socavar las cimentaciones, lo cual puede llevar al colapso de grandes construcciones. Por otro lado, ene importantes repercusiones sobre el perfil de la playa, generando erosión extrema, como se describe más adelante. Vientos intensos Las zonas costeras, por su localización junto al mar, están expuestas a vientos que se desplazan sobre el mar sin ningún obstáculo ver cal. Esto es especialmente crí co en el paso de huracanes cuando la velocidad del viento puede levantar escombros que se convierten en proyec les. A esto se añade, otro efecto importante que es la presión que ejerce el viento sobre las estructuras y que puede hacer que estas se colapsen. Además de la inundaciones mencionadas anteriormente, uno de los procesos más evidentes y de mayor impacto asociados al peligro oceanográfico en planicies costeras es el rela ve a la erosion costera, par cularmente en zonas con sediment no-cohesivo. En efecto, las playas son una zona muy dinámica y la arena que la conforman está en constante movimiento debido al oleaje, las corrientes e incluso el viento. Este movimiento de arena genera ciclos anuales, donde la playa crece en verano como respuesta al oleaje suave que ende a acumular arena y se erosiona en invierno, debido al oleaje más energé co generado por las tormentas locales y vecinas. Por otro lado, debido a la presión que con nuamente ejerce el ser humano en las costas, en par cular con construcciones sobre la duna, es también común que la erosión sea gradualmente irreversible en invierno (o durante las tormentas), haciendo que las playas no se recuperen en verano y se vayan perdiendo poco a poco, año con año. De esta manera se puede hablar de erosión a corto plazo, la cual ocurre durante un evento de tormenta y conlleva la erosión del perfil de playa, dañando la duna natural y/o socavando las fundaciones de estructuras, permi endo que las inundaciones tengan mayor alcance erra adentro y finalmente generando daños muy fuertes en la infraestructura aledaña. Por otro lado existe la erosión a largo plazo debida a la falta de arena por el transporte a lo largo de la playa, y que es muy común en las playas con fuerte presencia de infraestructuras (puertos, espigones, marinas, etc.) que interrumpen o modifican el transporte, causando un déficit de arena en la playa.

@ 14


Figura 1.- Erosión de playas en la costa Norte de Yucatán . Las proyecciones a futuro por el calentamiento global y cambio climá co no son muy alentadoras, e incluso considerando la cero emisión de gases de invernadero se espera un incremento en el nivel del mar y en la intensidad de las tormentas. Esto, aunado al incremento esperado de la población en las zonas costeras, hace que el peligro oceanográfico aumente. Por ello, es importante adoptar medidas que por una parte regulen el desarrollo y por otra, creen estrategias para el manejo del riesgo oceanográfico. El LANRESC ene como parte de sus obje vos mejorar el conocimiento de los peligros y la creación de planes de manejo en conjunto con las autoridades, para buscar una mayor resiliencia de la zona costera de México.

@ 15


Se buscará que las estrategias del LANRESC para el manejo del riesgo oceanográfico incluyan: · un mejor conocimiento de los peligros · planes de manejo de riesgo para que las autoridades y las comunidades sepan qué hacer en caso de un peligro · la op mización de comunicaciones entre los diferentes actores involucrados · asegurar que los planes implementados funcionen

Figura 2.- Índices de vulnerabilidad a la erosión e inundación del estado de Yucatán causados por eventos de oleaje.

@ 16


Hidrodinámica en playas y el LANRESC uth & Alec Torres Freyerm ayoral Gabriela Medellín M ería y Laboratorio de Ingeni Procesos Costeros

L

as olas del mar son generadas por el viento y sus caracterís cas (altura, dirección, y período) están en función de la dirección e intensidad del viento que las genera. Una vez generado, el oleaje l de se propaga largas distancias, alejándose de la zona de generación, sin Laboratorio Naciona sufrir cambios importantes en sus caracterís cas hasta acercase a la Resiliencia Costera costa. La reducción de la profundidad ocasiona cambios drás cos en al del las caracterís cas del oleaje debido a su interacción con el fondo. Por Unidad Académica Sis ía UNAM ejemplo, los cambios en la dirección y la altura de ola estarán Ins tuto de Ingenier relacionados con la disminución de su velocidad conforme se propaga en aguas poco profundas. Por otro lado, la altura de ola se incrementa al aproximarse a la costa hasta que ese crecimiento se ve interrumpido por uno de los procesos más complejos y admirables de la naturaleza, la rotura (Figura 1).

Figura 1.- Transformación del oleaje cerca de la costa. La dirección del oleaje cambia de acuerdo a la orientación de la línea de costa. La disminución de la profundidad induce la rotura del oleaje caracterizado por la presencia de espuma.

@ 17


La zona de rompientes se conoce como aquella región cuyo límite mar adentro está definido por la rotura del oleaje inducida por la profundidad y se ex ende hasta la cara de la playa. En esta zona el movimiento organizado del oleaje se transforma en movimientos de diferentes escalas de empo que van desde procesos con escalas de fracciones de segundos, como la turbulencia, hasta las corrientes que conforman el sistema de circulación en playas. Las caracterís cas del oleaje en rotura son fundamentales para predecir la dirección y magnitud del transporte de sedimentos y la cota de inundación en playas.

El estudio de la hidrodinámica en playas en el marco del LANRESC es fundamental para estudiar el transporte de sedimentos e inundación en playas. La eco-ingeniería se basa en el uso de vegetación para alterar la hidrodinámica cercana a la costa y aumentar la depositación de sedimento, contribuyendo a crear costas más resilientes. Durante condiciones de tormenta la energía del oleaje induce corrientes con dirección hacia mar adentro, las cuales generan un transporte de sedimento costa afuera. El transporte transversal provoca una disminución de la pendiente y el ancho de la playa, lo cual cons tuye un mecanismo natural para disipar la energía del oleaje de manera más eficiente. La disminución de la energía del oleaje durante condiciones medias permite la recuperación de la playa después de una tormenta, transportando hacia la costa el sedimento depositado costa afuera. En algunas regiones, el transporte de sedimento a lo largo de la playa puede ser importante y está en función del ángulo y altura del oleaje en rotura. Bajo condiciones medias de oleaje la disminución del ancho de playa generalmente está asociada a la presencia de estructuras perpendiculares a la costa que interrumpen el transporte de sedimento corriente abajo. Este efecto es evidente en la costa de Yucatán donde la presencia de los Puertos de Abrigo ha provocado un aumento del ancho de playa en el lado oriente y disminución en el lado poniente de cada puerto (Figura 2). Más recientemente, estudio del efecto de la vegetación en la hidrodinámica es importante ya que permite reducir los impactos relacionados al cambio climá co.

Figura 2.- Fotogra a área de la playa de Sisal, Yucatán. El transporte de sedimento predominante (de este a oeste), genera el crecimiento del ancho de playa en el lado este y la disminución en el lado oeste.

@ 18


La hidrodinámica en la zona cercana a la costa ene también implicaciones importantes para la inundación de playas. El oleaje en rotura produce un incremento en el nivel medio del mar que es máximo cerca de la línea de costa. Aunado a ello, el ascenso y descenso de las olas individuales contribuyen al incremento de la cota de inundación. Por lo tanto, para es mar la vulnerabilidad de la playa se compara el incremento del nivel del mar debido a la presencia del oleaje con la elevación máxima de la playa (ej. cresta de la duna). Adicionalmente, la hidrodinámica es la responsable del transporte de larvas y contaminantes cerca de la costa. El conocimiento de la hidrodinámica en playas es importante para el diseño adecuado de estructuras en la costa y la prevención de riesgos.

Figura 3.- Mediciones de la hidrodinámica en la zona de rompientes en playa (panel superior). Resultados numéricos de la modelación de la zona de rompientes en playas (panel inferior). La altura de ola disminuye debido a la rotura del oleaje inducida por la reducción en la profundidad.

@ 19


En el LANRESC, el estudio de la hidrodinámica en playas se llevará a cabo a través de mediciones directas e indirectas en el campo, modelado sico, y modelado numérico- Se estudiará la hidrodinámica en zona costera bajo dis ntos escenarios incluyendo eventos extremos, intervenciones antropogénicas directas, y el cambio climá co. Las mediciones en el campo ofrecen una fotogra a de las condiciones naturales en un ambiente complejo (Figura 3, panel superior). Por otro lado, el modelado sico permite el estudio de procesos bajo condiciones controladas de laboratorio con limitaciones en el escalamiento de algunos procesos como el transporte de sedimento. Finalmente, los modelos numéricos son la herramienta que permite simular diferentes escenarios presentes y futuros (Figura 3, panel inferior). El uso de todas estas herramientas es complementario y todas ellas presentan ventajas y desventajas.

@ 20


Morfodinámica Costera y el LANRESC

Almeida Paulo Salles Afonso de doza Ponce Ernesto Tona uh Men ía y Laboratorio de Ingenier Procesos Costeros

L

a morfodinámica costera se refiere a la interacción entre los procesos hidrodinámicos y eólicos (oleaje, mareas y corrientes inducidas por el viento) y la morfología del terreno en la costa, sea Laboratorio Nacional de este permanentemente emergido, sumergido o con una elevación que Resiliencia Costera lo hace intermitente emergido (intermareal). al del Es uno de los procesos de primer orden que afectan directamente la Unidad Académica Sis UNAM zona costera, en virtud de que determina las caracterís cas fisiográficas Ins tuto de Ingeniería de la interfase entre el mar y la erra, su ajustes y consecuentemente su equilibrio. Está directamente asociado con la movilización, transporte y depositación del material con el que está compuesta la costa (arcilla, limo, arena, grava, guijarros, rocas,…). La morfodinámica costera en una región dada puede ser poco o muy intensa, dependiendo de una serie factores propios y externos, naturales o antropogénicos. En par cular, depende de: 1. Caracterís cas propias: (i) po de costa (mar abierto, bahía, fiordo, desembocadura,…) y consecuente exposición a los forzamientos y aportes externos; (ii) caracterís cas y disponibilidad del material suscep ble a ser erosionado y transportado (tamaño, forma, densidad); (iii) pendiente de la playa y la topogra a erra adentro (desde playas disipa vas a reflejantes y desde planicies costeras a acan lados y costas montañosas). 2. Factores externos: (i) nivel de energía presente en el sistema: oleaje (altura, período, dirección), corrientes (magnitud y dirección), mareas (amplitud, componentes principales, fases), aportes de ríos y acuíferos (agua y sedimento), precipitación, viento (dirección e intensidad); (ii) Variabilidad de dichos forzamientos externos y remotos, en escalas de días a meses (brisas, ciclo lunar, clima de verano vs clima de inverno más energé co,…); (iii) ocurrencia de eventos extremos (tormentas, nortes, tsunamis,…), y (iv) efectos del cambio climá co (aumento del número y/o intensidad de tormentas, aumento del nivel del mar). 3. Can dad de material aportado a dicha región, sea por transporte litoral (paralelo a la costa) de zonas costeras aledañas, por aportes de ríos, aportes desde la plataforma con nental, transporte eólico o una combinación de los anteriores 4. Grado de antropización que experimenta la región de interés: (i) urbanización de la costa (puertos, desarrollos industriales, marinas,...), presencia de estructuras en la playa (rompeolas, escolleras, diques,…) o sobre la primera duna (edificaciones), extracción de material (minería en la playa) y agua (ríos, acuífero); (ii) presencia de vegetación que fija de manera eficiente el terreno (emergido y sumergido) y mi ga su erosión; (iii) grado de contaminación de suelo y agua en la costa, lo cual puede llegar a afectar la estabilidad del terreno en la zona costera. 5. Grado de desarrollo de las polí cas públicas en materia de preservación, conservación y desarrollo sustentable en la costa, y del cumplimiento y aplicación de las leyes y reglamentos en la materia.

@ 21


El LANRESC estudiará los procesos mencionados anteriormente, lo cual es fundamental para adquirir la capacidad de predecir los posibles efectos y afectaciones en la zona costera, mi gar o restaurar zonas afectadas así como prevenir dichas afectaciones a través de propuestas de conservación y recuperación. En el caso par cular de México, con más de 11,500 km de litoral en ambas ver entes, una parte importante de la costa está compuesta por playas de arena, por lo que el dinamismo de su morfología es elevado. Si a eso le sumamos el cambio climá co, es decir el aumento e intensificación de las tormentas así como el aumento del nivel del mar, y el hecho de que vastas extensiones de territorio enen elevaciones bajas por debajo de los 10 metros (Tabla 1 y Figura 1), es evidente de que hay que redoblar esfuerzos para lograr rever r la tendencia de degradación de la franja costera.

Tabla 1. Superficie del Territorio Nacional (km²) por debajo de las cotas especificadas (en metros sobre el nivel medio del mar, msnmm). Cortesía: Marisol Mancera Cedillo, Ins tuto de Geogra a, UNAM.

Cota (m.snmm) 0.5 1.5 2.5 3.5 4.5 5.5 6.5 7.5 8.5 9.5 10.5

Superficie (km2) 5,876 12,771 20,693 29,302 38,250 47,271 56,035 64,558 72,739 80,502 87,799

@ 22


Figura 1. Superficie del territorio por debajo de los 10 m (cortesía: Marisol Mancera Cedillo, Ins tuto de Geogra a, UNAM )

A modo de ejemplo, la morfodinámica de la costa se puede expresar como (i) la erosión o acreción de playas, con las consecuentes pérdidas de hábitat y afectación de los ecosistemas costeros, la pérdida de territorio y posible afectación de estructuras, (ii) la apertura o cierre de desembocaduras en lagunas costeras, con la consecuente afectación en la calidad ambiental del cuerpo de agua, (iii) el azolve en puertos y canales de navegación. Lo anterior puede ser una afectación temporal o intermitente, pero también puede ser irreversible, llegando a causar, en conjunto, inundaciones costeras, la pérdida del equilibrio costero, el aumento de la vulnerabilidad y la disminución de la resiliencia en general. La Figura 2 muestra un ejemplo de cierre parcial y gradual de la desembocadura en la laguna costera de La Carbonera en el Noroeste de Yucatán, donde claramente se puede ver el crecimiento de un brazo de arena al Este de la boca, el cual presenta zonas vegetadas (consolidación incipiente) y también zonas donde se han presentado eventos de rebase de agua durante tormentas. Dicho cambio morfodinámico ha generado erosión en las playas al Oeste de La Carbonera, la pérdida del camino vehicular, pero sobre todo una modificación en la hidrodinámica de la laguna al hacer más ineficiente el canal de entrada, lo cual puede tener consecuencias graves en los ecosistemas lagunares (aumento en el período de recambio de agua, variación en la salinidad y temperatura del agua interior,...).

@ 23


Figura 2. Boca de La Carbonera en noviembre 2011 (panel izquierdo) y en febrero 2015 (panel derecho). Fuente: Google Earth Pro.

El LANRESC estudiarรก la morfodinรกmica de playas y desembocaduras en lagunas costeras y buscarรก evaluar la resiliencia de sus diversos ambientes y ecosistemas, tanto en la parte marina como interna.

@ 24


El LANRESC y la ges ón local del riesgo costero

dez. Dra. Laura Vidal Hernán UMDI-Sisal. UNAM

Creación de Capacidades para disminuir la vulnerabilidad social y económica ante con ngencias ambientales en la costa

L

a subsistencia y bienestar de las comunidades humanas costeras dependen del estado de las zonas y ecosistemas circundantes, y son cruciales las decisiones gubernamentales y de la sociedad (ges ón) que se toman para su uso y protección.

Las costas mexicanas son periódicamente expuestas a diversas amenazas hidrometeorológicas y geológicas lo que, desde hace décadas, ha incrementado su vulnerabilidad sica debido a los altos niveles de erosión litoral, a inundaciones persistentes de la planicie costera y al deterioro de ecosistemas costeros (deforestación, relleno de humedales, urbanización sobre las dunas costeras, destrucción de arrecifes). La consecuencia más evidente de este proceso ha sido la pérdida de bienes materiales, pero los efectos sociales y económicos han sido escasamente analizados y menos aún la creación de capacidades para disminuir la vulnerabilidad social y económica ante el riesgo costero como un reto ambiental. El riesgo es resultado de una relación entre una condición de amenaza, exposición y vulnerabilidad. La amenaza o peligro es un factor externo a un sistema expuesto con una probabilidad de ocurrencia y el potencial de causar daño. La vulnerabilidad, por su parte, puede ser sica (fragilidad para soportar la acción de fenómenos peligrosos) o social (la condición o grado de preparación que se gesta, acumula y permanece en una sociedad para prever, enfrentar y responder ante un evento desastroso) (Cardona 2009, Lein 2004, Piers 1996). Según Cardona (2003) la vulnerabilidad social está vinculada ín mamente con el nivel de desarrollo de las comunidades, con sus aspectos culturales y polí cos, y surge como resultado del nivel de marginalidad y segregación social de los asentamientos humanos y sus condiciones de desventaja y debilidad socioeconómica. El mismo autor, considera también que en los países en vías de desarrollo la vulnerabilidad social es la causa de la vulnerabilidad sica. Si bien la atención al riesgo costero se ha dirigido a analizar sobre todo las amenazas y a diseñar Atlas de riesgo en función de patrones conocidos y escenarios proyectados, la comprensión del concepto de riesgo requiere de la integración mul disciplinaria de conocimientos para lograr su ges ón efec va (Cardona 2003). El mismo autor y Maskrey (1994) coinciden en que la ges ón del riesgo colec vo incorpora: · · · ·

la iden ficación del riesgo a través de la percepción individual la representación social y la es mación obje va la reducción del riesgo a través de la prevención y la mi gación el manejo de desastres que a ende a la respuesta y la recuperación ante la amenaza.

Esta necesidad de información ha impulsado el surgimiento de la Protección Civil que, aunque no garan za que las vidas y propiedades queden a salvo de los impactos de amenazas, sí puede enfrentar el desa o de reducir la vulnerabilidad de las sociedades ante el peligro y con ello aumentar su sobrevivencia.

@ 25


En México, la atención de desastres se ha desarrollado principalmente a nivel federal: el Centro Nacional de Prevención de Desastres incen va la inves gación para disminuir la vulnerabilidad sica y genera un Atlas Nacional de Riesgos y el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) monitorea amenazas, diseña programas de capacitación y programas de acción preven va. Si bien, el Sinaproc procura trabajar bajo un esquema de ges ón que empieza desde el municipio afectado, seguido por el Estado y finalmente con el apoyo del gobierno federal, los desastres costeros en México casi siempre rebasan las capacidades de respuesta local. Desde 1985, la Secretaría de Gobernación en México solicitó a cada En dad Federa va contar con Comités de Prevención de Seguridad Civil contra desastres y Leyes de Protección Civil; sin embargo, poco se sabe de su conformación y operación para la atención de riesgos costeros. Por su parte los usuarios de la costa y los actores clave de ac vidades produc vas contribuyen de una manera muy importante en la atención del riesgo costero a través de su capacidad de prevención y uso de estrategias para incrementar su resiliencia (Becker & Caldwell 2015, Myers et al. 2012). Tampoco se ha explorado cómo los usuarios y sectores económicos en las costas de México contribuyen a la protección civil en caso de riesgos costeros.

En el marco del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANRESC) se realizará inves gación cien fica interdisciplinaria sobre la condición de vulnerabilidad social (gubernamental incluida) y económica de los pobladores costeros de Yucatán (empezando con esta zona como estudio piloto). Se u lizarán herramientas tecnológicas de vanguardia para la ges ón y el manejo de riesgo costero y se buscará promover la construcción de capacidades locales para su adaptación y resiliencia.

Referencias A .Becker & M. R. Caldwell (2015) Stakeholder Percep ons of Seaport Resilience Strategies: A Case Study of Gulfport (Mississippi) and Providence (Rhode Island), Coastal Management, 43:1, 1-34. O. D. Cardona A., La necesidad de repensar de manera holís ca los conceptos de vulnerabilidad y riesgo “Una crí ca y una revisión necesaria para la ges ón”. Interna onal Work-Conference on vulnerability in Disaster Theory and Prac ce , 29-30 junio 2001. Disaster Studies of Wageningen University and Research Centre, Wageningen Holanda, 2003 O. D. Cardona A., in: Andrew Maskrey (Ed.) Los desastres no son naturales La Red, Red de estudios sociales en prevención de desastres en América La na. 2009 Disponible en h p://www.desenredando.org/public/ar culos/2003/rmhcvr/index.html A. Maskrey, in: Allan Lavell (Ed.), Viviendo en riesgo: comunidades vulnerables y prevención de desastres en América La na, LA RED Tercer Mundo Editores, Bogotá, 1994. S.A. Myers, M.J. Blackmore, T.F. Smith y R.W. Carter. 2012. Climate change and stewardship: strategies to buil community resilience in Capricorn Coast. Australian Journal of Envirormental management Vol. 19, no. 3: 164-181 J. K. Lein, Integrated Environmental Planning, Blackwell Science. UK. 2003. Piers Blaikie, Ferry Cannon, Ian David, Ben Wisner, Vulnerabilidad, El entorno Social, Polí co y económico de los desastres, primera ed., La Red, Red de Estudios sociales en Prevención de desastres en América La na. 1996. Disponible en h p://www.desenredando.org/public/ar culos/2003/rmhcvr/index.html h p://www.proteccioncivil.gob.mx/es/ProteccionCivil/home


El LANRESC y la hidrología Acuña Dr. Adrián Pedrozo eña Naranjo Dr. José Agus n Br ería, UNAM Ins tuto de Ingeni

E

l impacto del cambio global y las ac vidades humanas en la hidrología de zonas costeras es uno de los principales retos para la sustentabilidad de dichas regiones, las cuales albergan más de la mitad de la población mundial. En efecto, la degradación y sobre-explotación de cuerpos de agua superficial y subterránea en zonas costeras implica una mayor presión en los recursos hídricos y puede llegar a crear una competencia entre el ser humano y los ecosistemas. En el caso de México, existen regiones costeras cuyas fuentes principales para el abastecimiento de agua son los acuíferos, los cuales son altamente vulnerables a la intrusión salina que se da como resultado de dos factores principales: (a) el aba miento de los niveles freá cos erra adentro por sobreexplotación y la consecuente “importación” de aguas marinas y (b) el aumento del nivel del mar (temporal y no permanente por la incidencia de tormentas sobre la costa, o gradual y constante por el descongelamiento de casquetes polares y glaciares, sobreexplotación de acuíferos e incremento de la temperatura del mar). La vulnerabilidad de los sistemas hidrológicos en zonas costeras debido a este po de problemas, no solo incide de manera nega va en la can dad y calidad de agua disponible para sa sfacer la demanda hídrica, sino también pone a prueba la sustentabilidad hidrológica así como la resiliencia ecológica de una región. A nivel global, estudios recientes han es mado que el impacto por intrusión salina en los acuíferos costeros, se deberá en mayor medida al aba miento de sus niveles freá cos y no tanto al incremento en el nivel del mar (siendo la excepción aquellos acuíferos costeros con gradientes hidráulicos pequeños y/o en zonas costeras remotas con poca extracción). En un contexto de un clima que está cambiando, además de este po de escenarios, es necesario considerar los cambios previstos en el régimen de precipitación de la zona que se an cipa modificarán la dinámica de la recarga de agua subterránea. De esta manera, se definen las medidas de mi gación capaces de contrarrestar (escenario de mayor recarga) o acelerar (escenario de menor recarga) la intrusión salina.

Una de las misiones del LANRESC consiste en caracterizar, analizar y predecir la dinámica acuífero-océano en las regiones costeras de México de tal manera que se determine la vulnerabilidad del recurso hídrico a mediano y largo plazo asociada al cambio climá co y las ac vidades antropogénicas. Además, se contempla la inves gación de la respuesta del cambio hidrológico (precipitación/recarga, almacenamiento del acuífero) en la resiliencia de los ecosistemas terrestres.

@ 27


Para llevar a cabo dichos obje vos, se cul varán varias líneas de inves gación enfocadas a desarrollar nuevas herramientas que permitan estudiar el cambio global de los sistemas hidrológicos costeros desde una perspec va holís ca.

Figura 1.- intrusión salina en función de la demogra a y del po de acuífero. Adaptado de Ferguson y Gleeson (2012)

@ 28


LANRESC y Genómica Ambiental y Salud Pública

ena Or z y Dra. Ma. Le cia Ar Carrara Dr. Xavier Chiappa s de Ciencias, lta UMDI-Sisal, Facu UNAM

E

l estudio de los ecosistemas y los procesos globales requiere de métodos que integren dis ntas disciplinas y que aporten elementos para el conocimiento y entendimiento del ambiente en el que habitamos. En el caso par cular de los microorganismos, que son fundamentales para la vida, se han ido refinando durante décadas los métodos para hacerlos visibles: desde las observaciones al microscopio hasta el estudio de la composición de las comunidades microbianas a par r de su ADN.

En el marco del LANRESC, uno de los obje vos es el estudio de la distribución de las comunidades microbianas, sus interacciones ecológicas, y las capacidades metabólicas del microbioma costero, así como el estudio de cómo responden y se afecta su estructura gené ca ante cambios ambientales, información que aporta al conocimiento que permite entender el estado de los ecosistemas costeros. El monitoreo de la composición gené ca de los microorganismos que habitan el agua, el aire y el suelo en los sistemas costeros, y sus cambios ante fluctuaciones ambientales, y ac vidad humana es parte de los datos que el LANRESC podrá proporcionar. Adicionalmente, como en el resto del país, en la zona costera, las enfermedades diarreicas y las enfermedades respiratorias, en menor medida pero de igual importancia, así como las intoxicaciones por el consumo de productos del mar contaminados durante los eventos de marea roja son importantes problemas de salud pública.

@ 29


Contar con la posibilidad de conocer de forma confiable y oportuna la presencia de microorganismos potencialmente patógenos, en muestras de aire, de agua dulce, de agua de mar, de agua salobre y en alimentos, representa una valiosa contribución para la salud de las comunidades en las costas de México. El estudio del papel que juegan las comunidades bacterianas en el ambiente ha incen vado la revolución de nuevas tecnologías. La técnica de microarreglos es una técnica de ADN ampliamente u lizada en el mundo por su sensibilidad y por la importante can dad de información que puede ser analizada en cada ensayo. En el marco del LANRESC, nuestro grupo u lizará esta técnica para la detección oportuna de los agentes causantes de las enfermedades mencionadas en muestras de aire, de agua dulce, de agua de mar, de agua salobre, en alimentos y en superficies inertes. El obje vo final es (i) conocer los flujos de dispersión y dinámica poblacional de las bacterias ambientales de importancia para la salud pública, (ii) tener la posibilidad de alertar a las autoridades correspondientes en el caso de detectar riesgos a la población y (iii) evitar brotes.

@ 30


Cambio climá co y el LANRESC Ruth Cerezo Mota & Chris an Appendini ería y Laboratorio de Ingeni Procesos Costeros

A

lgunas precisiones son importantes al hablar sobre cambio climá co: clima es el promedio de estados del empo, que l de Laboratorio Naciona resultan de la interacción entre la atmósfera, el océano y la Resiliencia Costera superficie terrestre, en diferentes escalas (espaciales y temporales). Pero cuando se habla de qué tan caliente o frío o lluvioso o seco al del Unidad Académica Sis estará el día, se está hablando del empo. En la prác ca esto se ía UNAM Ins tuto de Ingenier traduciría de la manera siguiente: al hacer un viaje se prepararán las maletas de acuerdo al clima del lugar a visitar, es decir la ropa que se espera usar; sin embargo, cuando ya se está en el lugar, el empo es lo que determinará realmente el po de ropa necesaria para ese día. La variación que se presenta en el empo, de día a día y de año a año, se llama variabilidad climá ca, mientras que los cambios en los promedios de empo, es decir, del clima durante varios años, se denomina cambio climá co. Cuando se habla de cambio climá co es importante conocer qué son los gases de efecto invernadero. Estos gases, a pesar de estar asociados con el calentamiento global y consecuente cambio climá co, no sólo enen efectos nega vos. De hecho, sin la presencia de estos gases la vida en el planeta no se hubiese podido dar o hubiese evolucionado de otra manera, ya que estos gases forman la atmósfera y regulan la temperatura de la superficie terrestre, filtrando la radiación solar entrante y la radiación saliente (reflejada de la superficie terrestre). El vapor de agua es el más abundante de estos gases en la atmósfera, le siguen (en abundancia) el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el ozono (O3). Para que aquella atmósfera primigenia y tóxica (rica en CO2 y nitrógeno), que se creó como consecuencia de la ac vidad volcánica en la Tierra recién formada, llegara a transformarse en la atmósfera actual tuvieron que pasar millones de años que permi eron alcanzar un equilibrio. Los seres humanos, en menos de 250 años, hemos alterado ese delicado balance arrojando al ambiente toneladas de dióxido de carbono y de metano (entre otros). La consecuencia es que se ha modificado el balance radia vo (la radiación solar que entra y la radiación emi da por la Tierra) y ha aumentado la temperatura y por ende incrementado la evaporación y modificado la can dad de vapor de agua en la atmósfera. En un esfuerzo por parte de la comunidad cien fica de tratar de entender estas intrincadas relaciones y de predecir cómo al alterarlas se estará modificando el clima, se sabe ahora que las ac vidades antropogénicas han incrementado a nivel global la concentración de los gases de efecto invernadero a par r del año 1750 (es decir, a par r de la Revolución industrial): el CO2 ha aumentado en un 40% (principalmente por la quema de combus bles fósiles) y el metano en 151% (por la agricultura) y estos a su vez han modificado el balance radia vo y generado el incremento de temperatura a nivel global. En el caso par cular de México se ha observado que, en promedio en casi todo el territorio nacional, la temperatura superficial ha incrementado 0.85 °C (a par r de la década de 1960); también se ha observado una disminución en la frecuencia de días fríos y un incremento en la frecuencia de noches cálidas, así como un aumento en las temperaturas invernales (como lo indica la Fig. 1.)

@ 31


Fig. 1. Tendencias en temperatura superficial (la barra de colores indica temperatura en grados Celsius por década, para verano (JJA, Junio-Julio-Agosto), panel de la izquierda y para invierno (DEF, Diciembre-Enero-Febrero), panel de la derecha. Los puntos de malla con significancia estadís ca están indicados por un punto (tomado de: UK Met Office (2011). Climate: Observa ons, projec ons and impacts. Summary factsheet Mexico. Devon, UK,Met Office.Pp. 149. Disponible en: h p://www.metoffice.gov.uk/media/pdf/c/6/Mexico.pdf)

A nivel global las proyecciones climá cas, usando los escenarios más conserva vos, indican una tendencia a que la temperatura siga incrementando así como un aumento en precipitación en las regiones donde llueve mucho y un decremento en zonas donde llueve menos. A nivel nacional estas proyecciones son muy inciertas porque muchos procesos locales (atmosféricos-oceánicos) que modifican el empo y el clima aún no están del todo entendidos. Por otro lado, existe incer dumbre en los efectos del cambio climá co sobre otros procesos como son la frecuencia e intensidad de las tormentas, las cuales a su vez pueden repercu r sobre inundaciones y erosión de playas, por mencionar algunos efectos.

En el LANRESC se realizarán estudios de cambio climá co regionales (generando escenarios climá cos de alta resolución) que permitan reducir las incer dumbres en las proyecciones climá cas gobales y mejorar el entendimiento de los procesos locales, con repercusión sobre el desarrollo de las zonas costeras.

Por ejemplo en lo que se refiere al clima, la Península de Yucatán ene dos marcadas estaciones: la de lluvias en verano, asociadas al paso de sistemas tropicales convec vos (e.g. huracanes, tormentas tropicales) y la de secas, asociada a una atmósfera más estable en invierno. Con los estudios del LANRESC se podrá determinar si estas tendencias se mantendrán o si serán modificadas, lo cual proveerá información para el desarrollo de polí cas públicas que permitan aumentar la resiliencia. También, con estos estudios se podrá estudiar el clima marí mo y evaluar sus efectos en la zona costera, el efecto del cambio climá co sobre la erosión de las playas, así como la intensificación de tormentas, en par cular Nortes y huracanes (Fig. 2).

@ 32


Fig. 2. Oleaje extremo en las costas de México representado por el percen l 99 del clima de oleaje generado por ciclones tropicales en el Pacífico (panel izquierdo) y el Golfo de México (panel derecho).

De esta manera, el LANRESC a ende una necesidad real de la sociedad por conocer un futuro incierto que tendrá repercusiones en la manera en que vivimos y por lo cual es necesario prepararnos, empezando por conocer mejor la naturaleza.

@ 33


Sistemas de Información Geográfica y Percepción Remota en Ecosistemas Costeros en el Marco del LANRESC sillas Dra. Elena Ojeda Ca (Ins tuto de Ingeniería)

Pérez Dr. Joaquín Rodrigo Garza ) ias (UMDI-Sisal, F. Cienc

L

os estudios de la zona costera deben ser integrales, especialmente cuando se pretende determinar la capacidad de los sistemas naturales y sociales de mantener su estado ante diferentes perturbaciones (ej. huracanes). La percepción remota permite obtener y analizar a distancia, mediante el uso de dis ntos disposi vos, información de grandes extensiones de la costa durante largos periodos de empo con costos rela vamente bajos y aplicaciones muy diversas.

Dr. Rodolfo Rioja Nieto (UMDI-Sisal, F. Ciencias)

Aplicaciones de sensores remotos. Iden ficación sistemá ca de áreas prioritarias de conservación. Las Áreas Naturales Protegidas (ANPs) son la herramienta más efec va para la conservación de la biodiversidad. Recientemente, su diseño y establecimiento se ha beneficiado por el uso de métodos espacialmente explícitos, a través de las cuales es posible establecer un proceso sistemá co que permite la iden ficación de obje vos claros de conservación para el funcionamiento y persistencia del ecosistema. Esto es par cularmente importante para las ANPs marinas y costeras de Yucatán, dado que al igual que en otras regiones del planeta, la población mexicana presenta un importante desplazamiento hacia la costa, lo cual ha resultado en la rápida alteración y pérdida de los ecosistemas.

Como parte de las ac vidades de inves gación que se llevan cabo en la UMDISisal, Facultad de Ciencias, UNAM, en dad par cipante en el LANRESC, se u lizan datos obtenidos de sensores remotos (ej. imágenes satelitales, fotogra a aérea) acoplados a Sistemas de Información Geográfica (SIG) para el diseño, evaluación y establecimiento de ANPs. Estos mapas sirven como base para el cálculo de dis ntas métricas y generación de otras “capas” que proporcionan información sobre la vulnerabilidad, conec vidad y forma de los parches que conforman el hábitat, datos fundamentales sobre los procesos ecológicos que man enen la biodiversidad del ecosistema. A la par, se caracteriza el uso de los recursos por parte de las comunidades humanas locales. Los datos obtenidos son posteriormente integrados en un mapa compuesto (fig. 1) que permite iden ficar de acuerdo a las caracterís cas ecológicas y de u lización, aquellos si os prioritarios de conservación. La aplicación de este método permite hacer más eficiente el uso de los pocos recursos económicos y humanos disponibles para la conservación, limitando las afectaciones a las comunidades humanas locales que dependen de éstos y asegurando que las ANPs cumplan con su principal obje vo, es decir la persistencia de la biodiversidad.

@ 34


Áreas Prioritarias de Conservación en la Reserva Estatal “El Palmar” Nivel de prioridad Muy baja Baja Media Alta Muy Alta Sin datos

Figura 1. Priorización sistemá ca de la Reserva Estatal “El Palmar” basada en el po de hábitat, métricas del paisaje y u lización de los recursos (Proyecto SEP-CONACyT No. 153599).

Aplicación de los sensores remotos satelitales óp cos para la es mación de indicadores de estado de condición en arrecifes coralinos. En el marco de la creación del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANRESC), la UMDI-Sisal, Facultad de Ciencias, colabora a través del Programa de Inves gación Espacial en Ambientes Costeros y Marinos (PIESACOM, h p://redoctober.sisal.unam.mx ), en inves gaciones enfocadas a brindar información cien ficamente validada para el soporte a la toma de decisiones en manejo de arrecifes coralinos.

@ 35


Se emplean datos colectados en campo a través de técnicas de caracterización y evaluación de arrecifes coralinos, para definir el estado de condición del arrecife de interés y se u lizan indicadores modernos como el Índice de Estado de Condición (IEC), propuesto por la ONG Healthy Reefs, que brinda en un solo número un valor de referencia para comparar estados de condición de un arrecife a través del empo o de arrecifes similares al mismo empo. La aplicación novedosa de esta propuesta es la espacialización de este índice, no solo a si os discretos de monitoreo en el arrecife, o el promedio de los valores es mados para definir la condición de un arrecife completo, sino a toda el área de interés de un arrecife sin la necesidad de visitar y evaluar todo el arrecife. Esto se logra a través de la aplicación de modelos estadís cos predic vos y los resultados de estos modelos predic vos se aplican sobre imágenes de satélite de alta y súper alta resolución. Estas representaciones espacialmente explícitas de atributos del ecosistema (¡mapas!, fig. 2) son herramientas gráficas invaluables, tanto para el soporte a la toma de decisiones en manejo, como para la educación y la concien zación ambiental debido a que la información es presentada de manera fácil de entender para el público en general.

Índice de Estado de Condición, Año 2000 Arrecife Akumal, Q. Roo México

Figura 2. Mapa predic vo del índice de estado de condición para el año 2000 en el arrecife de Akumal (Proyecto SEPCONACYT, 2011 clave: 0165791).

@ 36


Aplicaciones sistemas de videomonitoreo Los sistemas de video monitoreo se basan en una serie de cámaras localizadas en un punto alto de la playa y conectadas a un servidor que se encarga de la adquisición de datos, su procesamiento y su ver do en internet. Las imágenes se toman, como mínimo, cada hora y la toma se hace a una frecuencia de al menos una imagen por segundo durante 10 minutos. Mediante el uso de puntos de control localizados en el campo de visión de las cámaras, se pueden unir las vistas de varias cámaras y georec ficarlas, logrando obtener una imagen similar a una fotogra a aérea con coordenadas conocidas, es decir, sobre las que se pueden realizar mediciones de la playa (figura 3).

Figura 3. a) Promedio de 10 minutos de imágenes de las cinco cámaras de la Estación de Videomonitoreo de Sisal (Yucatán) con los puntos de control usados para la georec ficación de la imagen; b) Imagen obtenida tras la unión y georec ficación de las imágenes en (a). c) Imágenes instantáneas con línea de píxeles para muestrear a alta frecuencia (recuadro amarillo); d) serie temporal del remonte del oleaje obtenida a 7.5 imágenes por segundo.

Este po de sensores remotos fijos se usan en una variedad de aplicaciones como el estudio de la variación de la morfología de la playa, su respuesta a las tormentas, los cambios en el perfil intermareal, la respuesta de la playa a la construcción de nueva infraestructura, a los dragados o a las regeneraciones ar ficiales, y las condiciones de oleaje y corrientes.

Como parte del LANRESC, la Unidad Académica Sisal cuenta con una estación de videomonitoreo costero de 5 cámaras localizada en una torre de 45 m en la playa de Sisal, Yucatán y una estación móvil de 12 m de altura usada para campañas específicas. La estación de Sisal se encuentra en funcionamiento desde agosto de 2012 y sus imágenes están disponibles en la web: h p://tepeu.sisal.unam.mx.

@ 37


El LANRESC y la energía oceánica & José López-González pinoza Es aro Bernardo Figue ería y Laboratorio de Ingeni Procesos Costeros l de Laboratorio Naciona ra Resiliencia Coste al del Unidad Académica Sis ía UNAM Ins tuto de Ingenier

Una de las líneas de inves gación del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera (LANRESC) es el estudio de la energía oceánica; entre las tareas más relevantes, destacan los estudios para determinar posibles zonas de aprovechamiento de la energía oceánica por medio de mediciones de campo, de diferentes parámetros oceanográficos, implementación de modelos numéricos y experimentación.

E

n el océano la energía se manifiesta de diferentes maneras, una de las más comunes y ampliamente conocida de energía marina es el oleaje, llamada energía undimotriz. Así mismo, otras energías disponibles son la energía de las mareas (energía mareomotriz), de las corrientes ( dal energy), del gradiente de temperatura (OTC), el gradiente de salinidad, la energía eólica y la biomasa (Figura 1).

Figura 1.- Principales pos de energía oceánica.

@ 38


Existen diferentes formas de aprovechar la energía del oleaje y los disposi vos se pueden clasificar en (Figura 2): 1) boyas inerciales, que u lizan el movimiento rela vo de dos partes de una estructura flotante para mover un generador o generar presión en un fluido de trabajo, 2) columna de agua oscilante (OWC), que usan una cámara que comprime aire con el ascenso y descenso de la ola para mover una turbina, c) de rebase, que u lizan una estructura para concentrar la energía del oleaje aumentando de esta manera su alcance y altura, que se aprovechará para llenar un estanque a una mayor elevación que el nivel del mar; este diferencial se u lizará para mover una turbina hidráulica.

Figura 2.- Principales pos de disposi vos undimotrices 1) boyas inerciales, 2) columna oscilante, 3) de rebase

Debido a que las caracterís cas del oleaje determinan el po de disposi vo y tamaño del mismo asi como la can dad de energía disponible, el conocimiento del clima marí mo es esencial para el aprovechamiento de la energía undimotriz. Existen varios estudios enfocados a la caracterización del potencial energé co en varias regiones del mundo. Por ejemplo, se ha caracterizado la energía undimotriz que existe en el Golfo de México y Mar Caribe a través de una base de datos de 30 años de oleaje, donde se observa que la energía promedio anual para el Golfo de México es de alrededor de 6 kW/m (Figura 3). Por lo tanto, los siguientes estudios deberán estar encaminados a determinar el po de disposi vo y el mejor sistema para su aprovechamiento.

Figura 3. Energía undimotriz promedio anual (kW/m) Golfo de México y Mar Caribe

@ 38


La energía mareomotriz o la energía contenida en las mareas existe debido a la configuración del terreno y los fenómenos de resonancia y asomeramiento produciendo mareas de varios metros de altura como en la bahía de Fundy (16 m) y el Golfo de California (6 m). En estos si os, se puede aprovechar la energía de las mareas como se hace en una hidroeléctrica. Este po de aprovechamiento no es nuevo y existen varias centrales mareomotrices en el mundo; la más conocida es la Mareomotriz de la Rance en Francia, la cual ha estado operando desde 1966, donde el rango de marea es del orden de 8 m. En México, el único lugar que cuenta con marea de amplitud importante es el alto Golfo de California con mareas de hasta 6 m. En el laboratorio, se ha estudiado una configuración de maremotriz que consiste en dos embalses (Figura 4) en el cual uno de ellos (embalse A) acepta agua cuando el nivel del mar es mayor al nivel en este embalse mientras que el otro (embalse B) solo saca agua cuando el nivel del mar es menor a este embalse; la generación de energía eléctrica se realiza del embalse A al embalse B. La ventaja de este sistema, es que se puede producir energía de manera ininterrumpida.

Figura 4. Maremotriz con esquema de doble embalse

Otra de las fuentes de energía oceánica, son las corrientes marinas las cuales pueden ser de dos pos: a) generadas por el ascenso y descenso de las mareas e incrementadas por la topogra a (local y regional) y b) debidas a gradientes de temperatura y salinidad (globales y regionales). La corriente del Golfo es un claro ejemplo de corriente global. La manera de aprovechar este po de energía es muy similar al aprovechamiento de la energía eólica. La diferencia fundamental es la velocidad y densidad del fluido. En el LANRESC se estudiarán y modelarán estos procesos con la finalidad de conocer el potencial energé co de las corrientes marinas. Adicionalmente, en el laboratorio se diseñan, modelan, construyen y experimentan disposi vos de conversión. Por el momento, se cuenta con un disposi vo denominado hidrogenerador IMPULSA surgido dentro del proyecto IMPULSA IV “Desalación de agua de mar con energías renovables” el cual es un disposi vo de eje ver cal, flotante y flujo conducido que ha demostrado su funcionalidad y está en la etapa de mejoramiento para aumentar su eficiencia (Figura 5).

@ 40


El aprovechamiento de las energías oceánicas en el LANRESC contribuirá a la disminución de los gases efecto invernadero y diversificará las fuentes de energía.

Figura 5. Hidrogenerador IMPULSA

En los úl mos años, la energía eólica ha mostrado un claro crecimiento. Tan solo en los Estados Unidos, la capacidad instalada se duplicó de 2007 a 2010. En México existen algunos lugares donde el viento es más intenso que el promedio, como es el caso de La Venta en Oaxaca, donde existen parques eólicos que generan aproximadamente 85 MW de energía eléctrica. En el caso par cular de la península de Yucatán, el LIPC ha llevado a cabo un estudio experimental del potencial eólico efec vo usando una torre meteorológica de 50 m que ha permi do conocer las caracterís cas del viento (velocidad y dirección), así como el perfil de velocidades y la intensidad turbulenta, parámetros que pueden influir en el desempeño de los aerogeneradores. Adicionalmente se están llevando a cabo experimentos con un pequeño aerogenerador elaborado con materiales locales colocado sobre el edificio del laboratorio (Ilustración 6). Se ha es mado el desempeño del mismo usando tanto simulación numérica como mediciones de campo.

En el LANRESC se considera q u e e l e s t u d i o y a p rove c h a m i e nto d e l a s energías renovables es fundamental para cumplir con los obje vos de contribución c i e n fi c a , fo r m a c i ó n d e recursos humanos y vinculación con la sociedad. La energía oceánica es una de las fuentes renovables con gran potencial, sin embargo, aún se Ilustración 6. Aerogenerador experimental sobre el edificio del LIPC enen muchas interrogantes por resolver tanto en el ámbito cien fico como técnico para su correcto aprovechamiento y es necesario implementar programas de estudio y polí cas económicas y energé cas para impulsar su desarrollo.

@ 41





Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.