Sistema de drenaje digital Los nuevos sistemas de drenaje digital poseen sensores que miden el flujo aéreo y la presión intrapleural, incorporando además un dispositivo de aspiración autónomo que facilita la deambulación del paciente. CUIDADOS DE ENFERMERIA EN EL DRENAJE TORÁCICO -Las maniobras de colocación así como las de retirada del drenaje pleural han ser estériles. -El número de drenajes torácicos que porta el paciente estará en función del procedimiento quirúrgico realizado y de la vía de abordaje empleada. -Tras la colocación del drenaje torácico, se debe vigilar y comprobar que las conexiones del mismo estén estancas, así como detectar la presencia de enfisema peritubo (suele aparecer tras la inserción del drenaje pleural). -Hay que comprobar que los apósitos que cubren el peritubo estén secos y limpios. Se deben realizar curas asépticas cada 24h o cada vez que sea preciso. -En el caso en que los apósitos estén húmedos, hay que verificar la hermeticidad del peritubo y valorar si es necesario dar puntos de seda o grapas en el mismo. -Se debe monitorizar el aspecto y la cantidad del líquido drenado generalmente cada 24h, o con más frecuencia según se precise. -En el caso de colecciones líquidas hay que controlar la salida masiva del fluido por el tubo para evitar el edema pulmonar por reexpansión, llamado también edema exvacuo. No se debe drenar más de 300cc de líquido de una vez, pinzando y despinzando el drenaje torácico según indicación, hasta que la velocidad y cantidad de drenado disminuya. -Hay que asegurarse de que los tubos no estén acodados para garantizar el correcto funcionamiento del sistema de drenaje. -En el supuesto de presencia de coágulos o fibrina, habría que ordeñar los tubos para garantizar su permeabilidad. -Si ha sido necesario el traslado del paciente con drenaje torácico, hay que comprobar que las unidades no se han volcado durante el mismo, procediendo a cambiar el sistema en este supuesto. -Se conectará aspiración a los drenajes, según indicación, y se verificará su correcto funcionamiento. En el caso de unidades húmedas hay que comprobar la presencia de burbujeo en la cámara de control de presión y en el caso de unidades secas mediante la aparición del testigo visual (muelle de color naranja). -Será preciso comunicar al facultativo la aparición de fuga aérea en la cámara de sellado, tras descartar la salida accidental del drenaje y la estanqueidad de las conexiones del sistema. -En caso de salida accidental del drenaje torácico, es necesario sellar lo antes posible el punto de inserción con pomada de povidona yodada o con vaselina, taparlo con un apósito estéril y comunicarlo al facultativo. -En el caso de aparición de enfisema subcutáneo se notificará al facultativo. -El drenaje torácico no se debe pinzar, salvo indicación facultativa, o en el caso de procedimientos intrapleurales como la pleurodesis o la fibrinólisis.
Enfermería y Fisioterapia Respiratoria
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