Inspiración ARTÍCULO TORACOSTOMIA CERRADA: MANEJO, CUIDADOS Y PROCEDIMIENTOS DE ENFERMERIA EN EL DRENAJE ENDOTORACICO Ana Isabel Ramajo Pavo DUE Unidad de Cirugía Torácica y Neumología. Hospital Infanta Cristina. Badajoz Santiago García Barajas Jefe de Servicio de Cirugía Torácica. Hospital Infanta Cristina. Badajoz
INTRODUCCIÓN La pleura es la serosa que recubre el pulmón, diafragma, mediastino y pared torácica, sin solución de continuidad entre dichas regiones. La pleura visceral tapiza al pulmón en su integridad, estando unida íntimamente al parénquima subyacente. La pleura parietal recubre interiormente la cavidad torácica, subdividiéndose en costal, diafragmática o mediastínica. Entre ambas hojas pleurales se delimita la cavidad pleural, que es un espacio virtual en condiciones fisiológicas, en cuyo interior existe una mínima cantidad de líquido seroso que facilita el deslizamiento entre ambas hojas pleurales durante el ciclo respiratorio. La pleura tiene capacidad de trasudación y de reabsorción, de tal forma que en condiciones fisiológicas existe un equilibrio entre ambos procesos para impedir la acumulación de líquido libre. La afectación de la pleura parietal por cualquier proceso inflamatorio o tumoral provocará un aumento de la capacidad de trasudación y una disminución de la reabsorción. De igual manera, los procesos que comprometen el drenaje linfático pulmonar condicionan una disminución de la capacidad reabsortiva de la hoja visceral y, por tanto, el acúmulo de líquido pleural. Las enfermedades pleurales que cursan con ocupación de la cavidad pleural se manifiestan clínicamente por el síndrome de compresión endotorácica. Se produce cuando la cavidad pleural es ocupada por aire ( neumotórax ), líquido ( derrame pleural ) o ambos a la vez ( hidroneumotórax ). 12
Enfermería y Fisioterapia Respiratoria