Cenote Chucumaltik Para los amantes del buceo de altura, Chucumaltik es el lugar ideal. Cenote de 200 metros de diámetro y casi 70 de profundidad. azufre, un evocador altar de la Virgen de los Dolores, un yacimiento de cuarzo y cavernas. Parador Museo Santa María En medio de un paisaje sorprendente de llanos, lagunas y montañas, se levanta el casco de esta antigua hacienda del siglo XIX, convertida actualmente en parador museo. Cada una de sus habitaciones posee muebles antiguos que crean atmósferas evocadoras. La capilla alberga un museo de arte sacro con una colección de los siglos XVII al XIX. Las Nubes lo largo de su curso forma varias cataratas, una de las cuales es de las más espectaculares bellezas del sureste mexicano. La abrupta topografía de la región por donde el río hace su recorrido forma la caída de agua que origina la brisa en forma de una densa nube, que le da el nombre al sitio: Las Nubes.
La Trinitaria La Trinitaria se sitúa a 17 km de Comitán, en lo alto de una colina. Destaca el templo de la Santísima Trinidad, que pertenece a la categoría estilística de iglesia de “pueblo de indios”, como lo demuestra su planta de una sola nave, su artesonado y su fachada con espadaña. Lagos de Colón Sistema lagunario ubicado a 68 kilómetros de Comitán. Son de aguas cristalinas y de baja profundidad, interconectados entre sí por canales en una superficie de 350 hectáreas, donde se encuentran 44 hermosos lagos que permiten apreciar las diversas tonalidades en azul ultramar. Zona Arqueológica Lagartero Es una zona arqueológica de gran relevancia histórica por su desarrollo como centro cívico, religioso y cultural dentro del área maya en una cuenca superior del río Grijalva, con un particular estilo arquitectónico en piedra tallada. Tzimol A 13 km de Comitán, es esta una población singular por su posición dentro de una cuenca kárstica, pero también por su disposición urbanística de casas y huertas que alternan con los cañaverales y por la conservación de su arquitectura tradicional. En las orillas del poblado se encuentra el Parque La Rejoya y el río San Vicente forma albercas naturales, bordeado por soberbios ejemplares de sabinos o ahuehuetes.