EL DERECHO DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS
Wichí Fueron denominados matacos. El mataco es el conocido tatú-bolita de la región chaquense. Este animal tiene la característica de que ante el peligro, se enrosca haciendo coincidir su cabeza en punta con su cola y toma la forma de una bola. Ese modo de cerrarse le permite defenderse gracias a su duro caparazón. Cuando los conquistadores trataban de obtener una información bajo tortura, nuestros wichis no hablaban, entonces les decían: “Son cerrados como un mataco”. A pesar de esto, muchos estudiosos siguieron repitiendo esa errónea denominación.
Eulogio Frites
Su número asciende hoy a unos 1100 miembros y se encuentran luchando para afirmar la plena vigencia de su cosmovisión y su despegue autogestionario, a pesar de las ataduras religiosas católicas, evangélicas y los intereses políticos de la sociedad global. Se destaca que este pueblo se encuentra desplegando un vigoroso protagonismo en Paraguay, prueba de ello es que en 1974, el presidente del Primer Parlamento Indio-Americano del Cono Sur fue el chulupí don Alberto Santa Cruz, entonces presidente del Consejo Indio del Paraguay, actual Asociación de Parcialidades Indígenas de esa República. Q´om (Toba)
Los wichí conforman un pueblo que habitó, y que sigue morando hoy, la región selvícola del nordeste argentino (provincias del Chaco, Formosa y Salta) y, además, sudeste de Bolivia y oeste de Paraguay. En Argentina, son actualmente más de 60.000 personas. Resistieron siempre a la conquista de los españoles, primero, y de los republicanos, después. Hoy se hallan desplegando su economía de caza, pesca y recolección con aportes de la agricultura y ganadería incipiente, destacándose en la extracción del algarrobo, la confección de las populares “yicas” (bolso multiuso tejido con fibras del chaguar) por parte de las mujeres y la talla de madera por parte de los hombres. Este pueblo practica su propio idioma que es el maccá y lucha para hacer respetar sus derechos a los cotos de caza y sus sagrados territorios, donde moran, no sólo ellos, sino también sus muertos. La familia es coherente con el trabajo conjunto del hombre y de la mujer, de ahí los órganos de gobierno que rigen los destinos del pueblo wichí. Es de destacar que la comunidad indígena del pueblo wichí Andrés Tolaba de Mosconi (área de Tartagal, Salta) está transitando, desde 1978, la transferencia de las tierras para 115 familias que vienen ocupándolas desde siempre y pleiteando a la empresa León y Chiban S.A., que pretendió desconocer los derechos de la comunidad, hechos que motivaron que se sustancie la información sumaria por ante el juez en lo Civil y Comercial, Dr. Aramayo de Tartagal, para que declare que por posesión veinteañal le corresponde la propiedad comunitaria a la comunidad indígena del pueblo wichí Andrés Tolaba de Mosconi. Tapiete Las comunidades del pueblo tapiete devienen de la unión entre los pueblos tupí-guaraní y wichí. Comparten el territorio con ellos en la zona actual de Tartagal. Chorotí o Chorote Es un pueblo familiar de los wichí, enclavado al margen del Pilcomayo y Bermejo, teniendo su actual hábitat en las cercanías de la ciudad de Tartagal. Tiene las mismas características que el pueblo wichí y, actualmente, son más de 2100 indígenas.
Las diferentes comunidades indígenas del pueblo Q’om, en Argentina, están en las provincias del Chaco, Formosa, Salta; también se extienden en los barrios del Gran Buenos Aires, Capital Federal, Rosario, Santa Fe y Corrientes. Hacia el exterior, esta nación se prolonga a Bolivia y Paraguay. Fue un pueblo fundamentalmente cazador, pescador, recolector y también gran artesano. Actualmente, en nuestro país, son alrededor de 90.000 en Chaco, Formosa, Salta y los barrios marginales aludidos. El pueblo Q’om es parte de la gran nación Guaykurú de cultura chaquense y es conocido como Toba por ser éste un antiguo apelativo guaraní: tobá o frente, dada la tradición masculina de raparse parte de la cabeza, y luego en lengua española se los siguió denominando “frentones” o tobas. Hoy practican la agricultura en las tierras que va recuperando. Éste pueblo ha luchado, a pesar del choque de religiones, transculturación y alienación en materia filosófica y política. En Formosa obtuvo una ley en 1984 que les reconoció derechos sobre la devolución de tierras a las comunidades y, en 1986, sucedió lo mismo en Chaco y Salta. Tuvo este pueblo un protagonismo especial en la sanción de la Ley 23.302 de política indígena y la 24.071 aprobatoria del Convenio 169/89 de la OIT, en 1992. En 1990, el pueblo Q’om del Teuco Bermejito, Chaco, obtuvo la ratificación del acuerdo realizado entre el Presidente de la Nación, don Marcelo T. de Alvear y el Gran Jefe Q’om Taygoyic en Pampa del Indio, en 1923. El 19 de febrero de 1924, se reconoció la propiedad comunitaria de 150.000 hectáreas de tierras fértiles de bosques, materializándose ese derecho gracias a la lucha de la organización Q’om Meguexosochi. En Las Palmas, Chaco, están tratando de que se respete la posesión de 30.000 hectáreas de tierras fértiles y bosques, en virtud del art. 8 de la Ley 23.302, ya que el Estado Nacional dispuso la venta de las tierras de lo que fue el Ingenio Las Palmas. En Formosa y Salta, como en los barrios marginales de las ciudades ya mencionadas, están haciendo registrar sus personerías en el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas para poder gestionar la devolución de tierras que se va logrando en forma lenta. Pilagá
En su historia se recuerda que, en 1628, se enfrentaron los hombres de Diego de Rojas con el pueblo choroti en los aledaños de la actual ciudad de Orán. Hablan un idioma derivado del wichí y conservan su propia cultura, no obstante el gran asedio político y religioso para su transculturación. Fueron desconocidos sus derechos de la tierra y de practicar su propia religión. Se les redujo el derecho a la caza, la pesca y recolección, a pesar de ser consecuentes con el ritmo ecológico. Subsisten en terrenos reducidos, carecen de créditos o subsidios; trabajan en aserraderos o elaboran hornos precarios para la producción de carbón que, embolsados en polietileno, truecan en almacenes de ramos generales de la zona. Chulupí La nación chulupí, ashluslai o nivaclé es otro de los pueblos familiar de los wichí, choroti, y tapiete guaranizados. Su núcleo principal se encuentra en el cruce de Tartagal extendiéndose hacia el este al Paraguay. Comparten las mismas características vivenciales de los pueblos selvícolas de la región. 26
La mayor parte del pueblo pilagá se encuentra en las provincias de Formosa, Chaco y Salta. Forma parte esencial en la lucha por los derechos preexistentes de los pueblos indígenas y desde la sanción de la Ley 420 de 1984, está integrado al Directorio de Instituto de Comunidades Indígenas de la provincia. A nivel nacional pude observar la descollante actuación de algunos pilagá como Andrés Madariaga. En Formosa, son más de 5000 cazadores, recolectores y pescadores, pero con avances en la agricultura, desarrollando técnicas para convertirse en artífices de su propia economía tradicional, y también moderna, sembrando, cosechando, consumiendo y mandando el remanente al mercado. Mocoví Las comunidades del pueblo Mocoví, se encuentran asentadas fundamentalmente en el sur del Chaco y en el norte de Santa Fe. 27