El Modelo Circumplejo de Olson

Revista de

Psicología Emily Núñez Evelyn Reyes Juan José Samaniego

El Modelo Circumplejo de Olson Noviembre, 2023 Universidad de la Américas Quito, Ecuador

La Familia La familia es la unidad básica de la sociedad, entendiéndola también como el primer sistema con el que la persona establece contacto. Esta se define como un grupo en el que se comparte un proyecto vital similar y en el que los miembros desarrollan un fuerte sentido de pertenencia generando así cierto compromiso basado en relaciones de dependencia y reciprocidad (Ferrer-Honores et al., 2013). A esto otros autores agregarían que su funcionabilidad dependería de su posibilidad de alcanzar sus metas asignadas por ellos mismos, por la cultura y la historia, de forma saludable; siendo capaz de mantenerse como sistema a pesar de los eventos estresantes a los que tengan que enfrentarse (Arevalo et al., 2019).

Desde la teoría de Olson, la familia sería considerada como un todo, una unidad total definida por su cohesión y adaptabilidad (Arevalo et al., 2019). Aun así, la familia debe tratarse de un grupo dinámico y funcional por lo que es posible que cambie a lo largo del tiempo ante la voluntad de sus integrantes (Sigüenza et al., 2017).

Como explica Aguilar Arias (2017), bajo el modelo de Olson la familia debe cumplir con 5 funciones. La primera función es el apoyo mutuo, el cual parte desde un entendimiento de que los roles dentro de la familia son interdependientes entre sí en sus relaciones emocionales. Le sigue la autonomía e independencia que hacen referencia tanto al cumplimiento de las metas familiares e individuales con la facilitación de la familia, como al desarrollo de una identidad individual que supere los límites de la identidad familiar sin negarla. En cuanto a las reglas y normas familiares, estas definen los patrones de interacciones desde los diferentes roles de los integrantes. En cuarto lugar está la adaptabilidad a los cambios del ambiente que explica que a lo largo del tiempo la familia deberá adecuarse a cambios internos y externos para mantener su funcionalidad.

Finalmente, la familia se comunica entre sí para que las otras funciones se cumplan a plenitud.

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El modelo El Modelo Circumplejo de Olson, de 1989, consiste en describir la distribución de las relaciones familiares en cuanto a la constancia o cambio (adaptabilidad) y la unión y desunión (cohesión) y los criterios de cada dimensión (Aguilar Arias, 2017). En función de esta distribución, las familias pueden ser clasificadas en 16 tipos que se pueden a su vez catalogar en balanceadas, medias y extremas. La movilización entre estos tipos y entre las dimensiones antes mencionadas, Olson hace especial énfasis a la importancia de la comunicación (Ferrer-Honores et al., 2013).

Dimensiones Cohesión La cohesión en el modelo se define como los vínculos emocionales entre los miembros de la familia, caracterizados por la calidad de los sentimientos, el interés entre ellos y la independencia/dependencia (Arevalo et al., 2019).

Las variables para medir la cohesión en el sistema, de acuerdo con Aguilar Arias (2017), son las siguientes: Vinculación emocional: unión de los integrantes expresada en el afecto.

Límites: la posibilidad de socializar entre los integrantes (personales y generacionales) y con agentes externos sin perder la unidad ni control familiar.

Coaliciones: fortalecimiento mediante alianzas con otros integrantes del sistema.

Espacio y tiempo: ámbitos en los que los integrantes comparten entre ellos basados en la armonía y privacidad.

Amigos: relaciones con agentes externos que son solo del individuo o de la familia en total.

Toma de decisiones: realizadas por la persona sola, por el sistema como todo o por el uno influenciado por el otro.

Intereses y ocio: los proyectos y actividades son individuales o se realizan por el grupo.

En base a las dinámicas de estas variables, se pueden identificar cuatro tipos de cohesión como los describe Sigüenza et al. (2017): 1. Desunida: baja cohesión, cada individuo es un subsistema debido a los límites rígidos, falta de espacios y tiempo compartidos y un bajo sentido de pertenencia al grupo familiar.

2. Separada: los límites entre los integrantes son semi-abiertos pero son claros cuando se requiere, moderada independencia entre los miembros, equilibrio entre los tiempos compartidos e individuales, prima el soporte en las decisiones individuales aunque se toma en cuenta a la familia.

3. Conectada/unida: limites internos claros y externos semi-abiertos, varios espacios y tiempos compartidos aunque también se busca el desarrollo del propio individuo, moderada dependencia al sistema, las decisiones más importantes son realizadas en familia.

4. Enredada/aglutinada: alta cohesión, límites difusos que hacen que se pierdan los roles de cada miembro, se detiene el desarrollo individual porque todo el interés es depositado en la familia.

Adaptabilidad La adaptabilidad familiar se define como la flexibilidad en el cambio de reglas y estructuras al enfrentar cambios, conflictos o crisis (Arevalo et al., 2019). Esto influencia los roles, las normas y el manejo de recursos dentro del sistema.

Las variables para medir la adaptabilidad en la familia, de acuerdo con Aguilar Arias (2017), son las siguientes: Poder: roles de liderazgo en la familia que usualmente pertenece a los padres. Se enfoca en la resolución de conflictos con la participación de otros integrantes.

Asertividad: libertad de expresión de los miembros o sus restricciones.

Roles: organización familiar en la partición de responsabilidades.

Reglas: normas familiares que rigen sobre el conjunto y sobre cada rol.

Por el posicionamiento de la familia en cuanto a estas variables, se las puede clasificar en cuatro categorías como describe Sigüenza et al. (2017):

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1. Rígida: baja adaptabilidad, liderazgo totalmente autoritario, roles fijos inamovibles, no existe posibilidad de cambios en la disciplina.

2. Estructurada: roles estables a veces compartidos con un liderazgo principalmente autoritario centrado en los padres pero abierto a ser repartido, control democrático, las reglas se hacen cumplir firmemente siendo pocas las que pueden cambiar.

3. Flexible: roles compartidos, liderazgo igualitario, disciplina democrática y las reglas se hacen cumplir siempre pero es posible cambiarlas ante la necesidad y decisión de todos.

4. Caótica: alta adaptabilidad, los roles no son definidos, falta de liderazgo y parentalidad, y disciplina nula o inconsistente.

Comunicación La comunicación es la tercera dimensión del Modelo Circumplejo de Olson que suele ser considerada como una variable implícita o estructural para las otras dos (Aguilar Arias, 2017). No obstante, esta es fundamental en el modelo porque es la facilitadora del movimiento de las otras dos dimensiones (Galvis Velandia et al., 2022). La comunicación en el modelo se basa en la escucha reflexiva y la empatía entre los integrantes (FerrerHonores, 2013). Es el elemento más modificable, según Olson, de acuerdo con el tipo de cohesión y adaptabilidad de la familia, aunque también es altamente influenciable por estas otras dimensiones (Arevalo et al., 2019). Por ejemplo, se puede estimar que los estados comunicacionales serán bajos cuando la familia es menos adaptativa y cohesionada, mientras que cuando las otras dos variables se encuentran en los estadios se puede esperar una comunicación óptima (Sigüenza et al., 2017).

Niveles de funcionamiento familiar Las dinámicas entre las dimensiones de cohesión y adaptabilidad dan la creación de 16 tipos de familias. Estos tipos se clasifican en tres niveles de funcionamiento familiar entre las combinaciones óptimas y desfavorables para la familia. Es importante mencionar que no existe un solo tipo familiar que es mejor que los demás de su nivel, estas opiniones serían dependientes al contexto sociocultural en el que se realicen y si en este contexto se valora más el individualismo o la familiaridad, la estabilidad o la flexibilidad.

Los niveles de funcionamiento familiar, como los describe Aguilar Arias (2017), son los siguientes:

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1. Tipo Balanceado: ambas dimensiones son centrales. Se caracterizan por un funcionamiento dinámico que puede cambiar según la necesidad. Ya sea que prime la conexión familiar o la libertad del individuo, siempre se tiene en cuenta a la familia y esta potencia al individuo. Se puede visibilizar los tipos de familias de esta categoría en el centro del círculo.

2. Tipo de Rango Medio: una dimensión es extrema y la otra es balanceada. Presenta conflictos en una de las dimensiones, posiblemente originándose por alguna situación de estrés que la familia esté atravesando.

3. Tipo Extremas: ambas dimensiones son extremas. El funcionamiento es el menos adecuado para la familia y las situaciones de estrés pueden llevar a consecuencias catastróficas para el sistema. No obstante, dependiendo del tipo de familia, algunos miembros pueden sentirse beneficiados ante una crisis en la familia.

Conclusiones El Modelo Circumplejo de Olson es un modelo multidimensional que permite identificar las dinámicas familiares en cuanto a su cohesión (vínculos emocionales entre los miembros) y su adaptabilidad (capacidad de cambio ante una crisis). Desde la perspectiva de Olson, la familia más funcional será aquella capaz de cumplir con sus roles unido a un nivel de flexibilidad ante los cambios que les permita superar la crisis, será en la que se potencie el desarrollo de la autonomía y la identidad individual desde el afecto de la familia, será una familia con comunicación clara y coherente que exprese este afecto necesario (Arevalo et al., 2019). Como una nota final, se considera de suma importancia mencionar que sin importar el nivel de funcionamiento familiar, el sistema puede funcionar mientras así lo quieran todos los integrantes, y solo se puede mejorar bajo la misma condición (Aguilar Arias, 2017).

Fuentes Aguilar Arias, C. G. (2017). Funcionamiento Familiar Según el Modelo Circumplejo de Olson en Adolescentes Tardíos [Trabajo de Titulación]. Universidad de Cuenca.

Arevalo, V., Mejía, P. & Pacheco, L. (2019). Funcionalidad Familiar en Padres de Adolescentes Tardíos Según el Modelo Circumplejo de Olson. Revista Cubana de Educación Superior, 38. https://revistas.uh.cu/rces/article/view/2246 Ferrer-Honores, P., Miscán-Reyes, A., Pino-Jesús, M. & Pérez-Saavedra, V. (2013). Funcionamiento familiar según el Modelo Circumplejo de Olson en familias con un niño que presenta retardo mental. Revista Enfermería Herediana, 6(2), 51-58. https://revistas.upch.edu.pe/index.php/RENH/article/view/1793 Galvis Velandia, L. N., Jaime Márquez, M. C. & Osorio Sánchez, E. G. (2022). Funcionalidad familiar de población en situación de vulnerabilidad, una mirada desde el Modelo Circumplejo de Olson: estudio Barrio Comoranes Cúcuta-Colombia. Revista Boletín Redipe, 11(3), 289-300. https://revista.redipe.org/index.php/1/article/view/1721/1635 Siguenza, W. G., Buñay, R. M. & Guamán, M. P. (2017). Funcionamiento familiar real e ideal según el Modelo Circumplejo de Olson. Revista Científica MASKANA, 8, 77-85. https://publicaciones.ucuenca.edu.ec/ojs/index.php/maskana/article/view/1878

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Noviembre, 2023 Universidad de la Américas Quito, Ecuador