Bienestar, belleza y deporte
Hábitos que maltratan el cabello Cuando la melena pierde su brillo y suavidad, cabe preguntarse cuáles son esas pequeñas costumbres que lo deslucen. He aquí las más frecuentes Por Magaly Rodríguez Lavarlo en exceso: Si bien cada tipo de cabello tiene sus propios requerimientos, abusar de la frecuencia de lavado y de la cantidad de champú no suele arrojar buenos resultados, pues lo despoja de sus grasas naturales y lo deja áspero y opaco. Si su cabello es excesivamente graso y requiere una higiene diaria, lo ideal es usar un champú suave. Use agua tibia o fría en lugar de caliente. Retorcerlo cuando está empapado: El cabello mojado es más delicado y propenso al quiebre que el cabello seco. No es aconsejable retorcerlo para eliminar el exceso de agua ni enrollarlo apretadamente como un turbante sobre la cabeza: es mejor exprimirlo aplastándolo dentro de la toalla con suavidad, sin hacerlo girar. Para desenredarlo, use los dedos o un peine de dientes anchos. Cepillarlo bruscamente: El quiebre de las hebras puede reducirse con un cepillado suave y cuidadoso. Usar peines de dientes finos con gestos bruscos cuando la melena está enredada tiende a partirlo, lo mismo que el uso de cepillos de cerdas rígidas. Usar instrumentos calientes sobre el cabello muy húmedo: Planchas, rizadores y blowers no deben ser empleados en una melena que aún gotea. Si bien el uso del blower es aceptable sobre un cabello semi-húmedo, el de la plancha y el rizador no es recomendable si está mojado. Mayor humedad implica más tiempo de exposición a altas temperaturas y el exceso de calor tiende a resecar el cabello con enorme facilidad. Recogerlo todo el tiempo: Usar a diario colas, trenzas y moños apretados hace que las hebras sean más propensas a partirse por la tensión y también puede provocar la caída del cabello desde la raíz. Siempre que pueda, lleve el pelo suelto o recójalo con peinados f lojos. Para amarrarlo, use cintas o ligas recubiertas de tela (no de pura goma), sin uniones de metal. Descuidarlo en las vacaciones: La permanencia de sal y cloro en el cabello por mucho
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Revista Sala de Espera
tiempo le resta lustre y suavidad. Si no es posible lavarlo a fondo con champú y acondicionador después de un baño de playa o piscina, procure enjuagarlo con agua limpia. Si está teñido es aún más importante tener presentes estas precauciones, pues de lo contrario puede alterarse su color. No protegerlo del sol: Las largas exposiciones a los rayos ultravioleta no sólo pueden resecar la melena, sino pueden quemar el cuero cabelludo. Cubra la cabeza con sombreros cuando vaya a la playa o se ejercite al aire libre. Use productos para el cabello que ofrezcan protección solar. Abusar de los tratamientos químicos: El uso frecuente de desrices, permanentes, decoloraciones y algunos tintes permanentes tienden a maltratar el cabello, ya que alteran la estructura de las hebras. Cada cierto tiempo, deje reposar su cabello de estos procedimientos, o deje un espacio si lo nota pajoso o frágil.
No alimentarse bien: El cabel lo no sólo depende de condiciones externas: de la dieta también der iva que crezca fuerte y br illante. Consuma alimentos r icos en ácidos grasos Omega 3, hier ro y complejo de v itam ina B, como salmón, granos, hojas verdes, fr utos secos y huevos. No cor tar las puntas: Por m á s cu id ados que se les d ispensen, l a s pu nt a s necesit a n u n cor te per iód ico. E l i m in a r el cabel lo quebr ado en l a s pu nt a s reduce el frizz y d a l a melen a u n a specto m á s sa lud able. No acondicionarlo a fondo: Cua ndo se somete el cabel lo a secados o a l isados f recuentes, un acond icio nador común puede no ser suf iciente para que éste resista en buena for m a. Un baño de crem a quincenal contr ibuye a mantenerlo br illante y manejable.