GARA 2015 9 17 osteguna
PAÍS: España
FRECUENCIA: Diario
PÁGINAS: 19
O.J.D.:
TARIFA: 3825 €
E.G.M.: 85000
ÁREA: 571 CM² - 51%
SECCIÓN: EUSKAL HERRIA
17 Septiembre, 2015
Euskal Herria
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Portland pierde la licencia para quemar residuos en Olatzagutia por no usarla El Gobierno de Nafarroa ha decretado oficialmente que la autorización ambiental integrada para la quema de basuras que se le concedió a la cementera de Portland ha caducado. La multinacional pierde el permiso por no haber iniciado la obra en los dos años de plazo. Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
AHORA, EL PSIS
La posibilidad de que la cementera de Portland en Olatzagutia empiece a quemar combustibles generados con basuras se aleja un poco más. El Boletín Oficial de Nafarroa recogía ayer una resolución en la que se daba oficialmente por «caducada y sin efecto alguno» la autorización para «valorizar». Ahora, la empresa debería iniciar de nuevo el proceso si quiere recuperar el proyecto y será el Gobierno del cambio quien decida. Además, en esta ocasión ya no hay un plan de residuos que avale la incineración en esa planta, ya que el anterior plan diseñado por UPN y PSN (el Pigrn) fue anulado por ilegal. La Fundación Sustrai fue quien solicitó al Gobierno navarro la caducidad del permiso en junio pasado ya que no se habí-
La pieza clave del plan de UPN y PSN para convertir la cementera en incineradora no es la autorización para quemar residuos, sino el PSIS que impulsó el Gobierno. El TSJN está deliberando sobre su legalidad y fallará en breve.
Pintada en Olatzagutia contra la incineración en la cementera.
an iniciado las obras en el plazo marcado, que era de dos años. En la resolución hecha pública ayer –y que lleva la firma de la nueva directora general de Medio Ambiente, Eva García– se indica que la propuesta de dar por caducada la licencia se puso en conocimiento de Portland y que la multinacional no hizo nada. Tenía diez días de plazo para
Iñigo URIZ | ARGAZKI PRESS
presentar alegaciones, pero lo dejó pasar. Ayer, el presidente de Sustrai, Martin Zelaia, aseguró acoger la noticia «con alegría» y aseguró que, aun en el caso de que Portland vuelva a solicitar la autorización, el Gobierno navarro «deberá esperar a que termine el nuevo plan general de residuos antes de contestar».
Zelaia recordó que todo el PSIS para quemar residuos en la cementera está judicializado por Sustrai y la Mancomunidad de Sakana, que reclaman su anulación. En breve («el mes que viene o el siguiente») deberá fallar sobre este asunto el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, ya que el caso lleva tiempo en fase de deliberación.
Sader abandonará Punta Zorrotza en 2018 con una recompensa millonaria GARA | BILBO
CONTRA LA ÚLTIMA AGRESIÓN SEXUAL DE BILBO. A convocatoria de la Coordinadora Feminista de Bilbo, la plaza del Arriaga fue escenario ayer a la tarde de una nueva concentración en la que se denunció la última agresión sexual que ha tenido lugar en la capital vizcaina, de la que fue víctima una joven en la madrugada del domingo en una zona arbolada de Bolueta. Un hombre fue detenido y liberado con cargos el lunes. Monika DEL VALLE | ARGAZKI PRESS
La empresa Sader, dedicada al tratamiento y recuperación de residuos industriales, abandonará su actual ubicación en Punta Zorrotza, en Bilbo, en el segundo semestre de 2018 y será indemnizada con 2,7 millones de euros, en virtud del convenio urbanístico que la compañía va a suscribir con el Consistorio. La compensación por el traslado de Sader será abonado por la Junta de Propietarios de Punta Zorrotza una vez se realice el proyecto de reparcelación, que deberá aprobarse en el plazo de cuatro años tras la entrada en vigor de la modificación del
PGOU, prevista para el segundo semestre de 2016. En Punta Zorrotza, considerada una zona de suelo estratégico, se proyecta llevar a cabo un desarrollo urbanístico con un 35 o 40% de actividades económicas y un 60 o 65% de uso residencial, para lo que se prevén edificar unas 2.100 viviendas. Desde Kadagua Bizirik se lamentó que los vecinos tengan que esperar hasta 2018 para «estar libres de los gases, partículas y malos olores» que emite. Además, no obviaron que es la «presión de intereses urbanísticos» y no la protección ciudadana y del medio ambiente la que motiva este traslado.