Volumen 18, Número 3, 2012
¿Estabas allí? Mensaje de Pascua 2012
ERA MI PRIMER DOMINGO en mi nuevo nombramiento de Cuerpo. Cuando terminó la reunión, me enteré de que una familia, que había estado presente, se hallaba frente a la muerte inminente de su hija de 14 años. Esa mañana, ella había venido con sus padres. Desde luego que esa familia tenía la prioridad para mi visita pastoral. Así comenzó Generala Linda Bond una jornada que duró varias semanas, con visitas diarias y con el privilegio de caminar al lado de esa familia durante sus horas más oscuras. Un domingo caluroso del mes de agosto, fui a visitar a Sherry por última vez. La hallé tendida en la cama agonizando con el calor, el malestar, la sed y el dolor. Su madre solo podía mirar sin poder hacer nada. Su padre se hallaba sentado al lado de ella, de cuando en cuando sosteniéndola en sus brazos por unos cuantos minutos para darle hielo, que ella masticaba y que era el único alivio para
su sed ardiente. Se estaba muriendo. Sabíamos que estábamos compartiendo sus últimas horas. La ventana de la habitación estaba abierta con la esperanza de dejar entrar un poco de aire. Pero lo que se oía era el sonido de niños jugando. Las risas y los gritos jubilosos marcaban un gran contraste con el gemido de la niña que moría. De alguna manera, la tristeza era arrolladora y, con excepción de la pena, cualquier otra cosa parecía muy inapropiada. Pero más allá de los muros del dormitorio, la vida seguía como de costumbre. Me parece que muy a menudo somos inconscientes del sufrimiento de los demás. Nos enteramos de un juicio y los reportajes de las noticias nos informan de una determinada fecha cuando un niño ha desaparecido. Escuchamos acerca de la angustia de los padres, los detalles horribles del crimen y los meses que han pasado antes que se atrapara al perpetrador. El recordar la fecha en que el crimen ocurrió puede motivar una reflexión: ¿Dónde estuve ese día? Muy a menudo tenemos un buen recuerdo. Pero, ¿cuándo nos percatamos de que mientras la vida ha marchado bien para nosotros, ese mismo día ha terminado trágicamente para otros?
Y así fue, muchos años atrás cuando Jesús se enf rentaba con la agonizante experiencia de la crucifixión. Una canción conocida hace la pregunta de sondeo: “¿Estabas tú allí cuando crucificaron a mi Señor?” Si estamos pensando en términos de tiempo, 2000 años más tarde, nuestra respuesta será “no”. Pero, vayamos allí con nuestra imaginación. En su oración, en el jardín de Getsemaní, Jesús confiesa: “Mi alma está muy triste, hasta la muerte” (Marcos 14:34). Suda gotas de sangre. Su alma está en agonía. Él está atormentado, pero la vida continúa. Los discípulos se han quedado dormidos. Durante su arresto, su juicio, su flagelación, hay un sufrimiento que sobrepasa lo físico. El dolor de la soledad es real. ¿Dónde están
El Fin de Semana de Candidatos ‘convierte un jonrón’
se inscribieron en el nuevo Curso de Aceptación para personas que ya han postulado a él y se encuentran en proceso de convertirse en oficiales el año 2012. El Curso de Exploración ayudó a los delegados a aprender más acerca de áreas específicas del ministerio que realiza el Ejército. El Curso de Descubrimiento presentaba a los delegados inquisitivos una visión de conjunto. El Curso Railton presentaba a los delegados de entre 18 y 30 años de edad la oportunidad de convertirse en líderes de la juventud en la Escuela Railton de Entrenamiento. El Mayor A. Kenneth Wilson, el orador del viernes por la noche, presentó un mensaje tan persuasivo que, a la mañana siguiente, hasta 10 personas que inicialmente se habían inscrito en el Curso de Descubrimiento, se habían cambiado al Curso de Exploración—porque habían sentido el llamado de Dios en sus vidas. El sábado, los delegados disfrutaron las visitas que hicieron a varios ministerios del Ejército en la ciudad de Nueva York, así como a la Escuela de Entrenamiento para Oficiales y a la Escuela Railton para Entrenamiento en Suffern, Nueva
York. También participaron en sesiones especiales, en mesas redondas, y asistieron a presentaciones sobre los diversos aspectos de la vida de un Oficial del Ejército. Cada sesión contó con la presencia de un intérprete de habla hispana. Las actividades del día culminaron con un mensaje muy estimulante intelectualmente. Amena Brown, una poeta, oradora y periodista, presentó “Dios, Ton y Son”, una dramática lectura acompañada de música contemporánea y tecnología de sonido aportadas por su marido Matt “DJ Opdiggy” Owen. Emocionaron e inspiraron a los delegados. El Coronel William R. Carlson, Secretario en Jefe, presentó un agudo mensaje centrado en dos cuestiones centrales.
Warren L. Maye Tomado de Good News! “FUE UN GRAN FIN DE Semana. DESDE EL PRINCIPIO se podía sentir la presencia del Señor. Yo me he sentido encantado de participar y le doy al Señor todo el honor y toda la gloria”, dijo el Mayor Thomas Lyle, Secretario Territorial de Candidatos. La asistencia al fin de semana del Seminario Territorial de Candidatos de este año fue la más alta en número de delegados de los últimos años. “Nos sentimos satisfechos con los resultados en cuanto al número de personas que asistieron”, precisó Lyle.
Cambiar de vía—durante la noche El programa ofrecía cuatro cursos. Hasta 70 personas
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"...y [Pilato] dejó que hicieran con Jesús lo que quisieran" (Lucas 23:25).