La enfermedad crónica y la enfermedad terminal Psic. Erika Lorena González Franco Mayo, 2011 (II Seminario para la Atención Integral del Paciente con Enfermedad Crónica o Terminal y su Familia)
Cuando la enfermedad llega a la vida de una persona, rompe con el equilibrio y con el mundo conocido y ordenado hasta ese entonces, y afecta no sólo al que la padece sino también a todos aquellos que lo rodean, en especial a las personas con las que guarda una estrecha relación. Cuando se trata de una enfermedad crónica (y peor aún cuando es terminal), con el diagnóstico llegan también una serie de reacciones normales en las personas afectadas y en no pocas ocasiones comienza un largo peregrinar entre médicos, laboratoristas, curanderos, herbolarios, chamanes, brujos y santos. Esto puede hacer que las personas tomen o accedan a tratamientos no eficaces para la enfermedad y permitir así que el curso natural de dicha enfermedad avance. A partir de este momento se cambia la percepción de la vida y de la muerte. Existen factores que influyen en la enfermedad Edad Tipo de enfermedad Personalidad Nivel socioeconómico Creencias y valores Enfermedad crónica: Conjunto de los trastornos orgánicos o funcionales que obligan a una modificación en el modo de vida del paciente, y que ha persistido o es probable que persistan durante un largo tiempo. Sus características: Son permanentes e irreversibles Son multicausales y se deben de afrontar desde una perspectiva multicausal Requieren el entrenamiento específico del paciente y de su familia para asegurar su cuidado y de la colaboración de ambos con el equipo de salud. Precisan largos periodos de cuidados y tratamiento para su control y para paliar los efectos de la enfermedad. Conllevan sentimientos de pérdida como componente predominante. Obliga a un cambio en el estilo de vida Genera grandes gastos económicos. Una clasificación de enfermedades crónicas es la propuesta por Kiely (1985): Enfermedades que provocan un intenso sentimiento de pérdida o amenaza física Enfermedades de mal pronóstico: oncológicas y no oncológicas (IRC, SIDA, etc)