Los Juicios Ejecutivos

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REVISTA JURÍDICA VENEZOLANA I EDICCIÓN

Procedimientos Civiles Especiales Los Juicios Ejecutivos Dirección General: Dr. Jesús Perozo

Diseño y Redacción: Rosmira Aguirre Peña

Guanare, Noviembre 2021

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ndice

Editorial………………………………3 Los Juicios ejecutivos……………..4 Características……………………..4 Requisitos…………………………….5 Base Legal…………………………..7 Diferencia entre vía ejecutiva y juicio ordinario………………………

Título Ejecutivo……………………..8 Preparación……………………….10 Procedimiento ejecutivo………11 Diferencia entre citación e intimación……………………13 Títulos que aparejan ejecución…. 14 Ideas finales…….15 Bibliografía……..15

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E

ditorial

Debido a lo debatido y al interés que ha despertado el tema de los juicios ejecutivos en los últimos tiempos, siendo los procesos mediante los cuales en base a un título (Documento) que contiene una obligación e identifica claramente a las partes obligadas y que además del título mismo se establezca que la obligación es actualmente exigible puede pedirse al Juez que se exija el cumplimiento de la prestación debida y en su defecto el desplazamiento de la persona que se encuentra en mora respecto de las facultades dispositivas de su patrimonio, intervención en su patrimonio y el cumplimiento de la obligación en su nombre. La presente edición está dedicada al estudio de estos importantes procedimientos empleados a instancia de un acreedor contra su deudor moroso para exigirle breve y sumariamente el pago de la cantidad líquida que le debe, de plazo vencido y en virtud de documento indubitado.

LOS JUICIOS EJECUTIVOS

ejecución de los bienes del deudor sin llevarlo a remate hasta que haya sentencia.

Características

La vía ejecutiva es un procedimiento especial en el cual se busca constreñir al demandado a que cumpla la obligación que se le exige embargando sus bienes, previa prueba de la acción mediante documento público u otro documento auténtico que pruebe clara y ciertamente la obligación del demandado de pagar alguna cantidad líquida con plazo cumplido o vale o instrumento privado reconocido por el deudor. Establece el artículo 630 del Código de Procedimiento Civil.

Un juicio ejecutivo es el procedimiento que se emplea a instancia de un acreedor contra su deudor moroso para exigirle breve y sumariamente el pago de la cantidad líquida que le debe, de plazo vencido y en virtud de documento indubitado.

Es uno de los procedimientos que existen en nuestro código de procedimiento civil, no existe un juicio puro, el legislador venezolano ordena tramitar la vía ejecutiva por el procedimiento ordinario pero acompañado simultáneamente de la

En cuanto a sus características, debe señalarse que debe iniciarse por un libelo en el cual se debe indicar de manera expresa la voluntad de accionar la va ejecutiva, por ende se trata de un proceso contencioso, en el cual el ejecutado debe ser citado y todo, con derecho a hacer la oposición respectiva y proponer las excepciones que a bien tenga.

Asimismo, se desarrolla paralelamente a la cuestión de fondo, es un procedimiento anexo y paralelo al juicio de fondo pero que opera separadamente-por cuanto admitida la demanda se ordena la apertura del cuaderno de ejecución, y en el se adelantan y sustancian el embargo de bienes, la publicación de carteles, justiprecios, fianzas para lograr la ejecución anticipada, por tanto las incidencias surgidas en el expediente sobre la cuestión de fondo, nada tienen que ver con las

actuaciones del cuaderno separado de ejecución. Lo especial de este procedimiento es que se abren dos expedientes, ya que las diligencias de embargo de bienes no suspenden ni alteran el curso ordinario de la causa.

Se suma: 1. Que por la naturaleza del juicio ejecutivo la defensa del demandado es restringida.

En el Juicio Ordinario el demandado se defiende oponiendo excepciones y contestando la demanda, en cambio en el Juicio Ejecutivo el ejecutado se defiende a través de las excepciones solamente.

La oportunidad en que se puede defender es limitada en el tiempo ya que por regla general el plazo de oponer estas excepciones es de 4 días, que se aumentarán en 8 cuando el demandado se encuentre fuera del territorio del tribunal.

La defensa del demandado es restringida porque el juicio ejecutivo es un juicio que tiene por objeto que por vía de apremio se obtenga el cumplimiento forzado de una obligación que debe constar en un título ejecutivo.

2. - Este procedimiento se tramita en dos cuadernos.

Se inicia con la tramitación del cuaderno principal y además se comprende el cuaderno de apremio.

El cuaderno principal se inicia con la

demanda ejecutiva una vez que ésta es declarada admisible por el Tribunal que va resolver sobre esa demanda ordenando el despacho de ejecución de embargo. En virtud de esa orden se inicia el cuaderno de apremio que se inicia como primera actuación con el mandamiento de ejecución de embargo.

El mandamiento de ejecución de embargo es una resolución judicial y en virtud de ella “se requiere de pago al deudor y si este no paga al momento del requerimiento se procede al embargo de sus bienes” y ese es su objetivo. Después se realizan todas las actuaciones que derivan de ella.

3. Dice relación con la denominada conversión procesal.

Ella opera respecto del mandamiento de ejecución de embargo, la naturaleza jurídica de esta última puede variar.

Requisitos Esos requisitos son, la existencia de un: acreedor cierto un deudor también cierto una deuda liquida plazo vencido o mora finalmente el título ejecutivo.

Los requisitos de fondo son tres: El título ejecutivo debe ser cierto, la certeza quiere decir que el juez a primera vista, con sólo leer el título ejecutivo debe quedar informado de quien es el acreedor y de quien él es deudor. La sola lectura del título ejecutivo debe suministrar los datos suficientes y bastantes. Si los datos que se necesitan para liquidar la deuda no aparecen en el título ejecutivo, entonces carece de este segundo requisito de fondo para ser considerado como título ejecutivo.

La liquidez de la obligación de la deuda, o liquibilidad, pero por medio de datos que ofrezca el mismo título ejecutivo La exigibilidad: vamos a ver en qué consiste la exigibilidad, porque nuestro código al definir el juicio ejecutivo dice que el deudor ha de ser deudor moroso. El concepto de mora en el juicio es el mismo que tenemos en los juicios ordinarios, es decir con criterios civilistas? No, no es el mismo concepto. El concepto de mora. Al deudor para colocarle en mora hay que intimarlo de previo porque la mora implica la facultad del acreedor a cobrarle al deudor moroso, daños y perjuicios, implica situación de culpa, de modo que no se confunde con el simple retardo cuando vence el plazo, no es el día el que interpela, no es el día del vencimiento del plazo el que constituye en mora al deudor, sino

que la intimación porque si se deja pasar el plazo y el acreedor no cobra hay que suponer que ese acreedor no necesita el cumplimiento de la obligación, esa es una actitud graciosa de su parte. Pues, en el juicio ejecutivo, la situación de mora se confunde con la de retardo, de modo que la deuda es exigible ejecutivamente desde que ha vencido el plazo, desde que ha sucedido la condición a la cual estaba subordinada la exigencia, el reclamo de la obligación, de modo que usted no lo tiene que colocar en estado de mora en una situación de mora previa a ese deudor para poder ejecutarlo, por el vencimiento del plazo ya es deudor moroso como dice la definición de nuestro código, es deuda exigible. Sólo en las obligaciones de hacer es que requiere la intimación del deudor para poder ejecutarlo en una situación previa de mora.

Respecto de los requisitos el artículo 630 del Código de Procedimiento Civil venezolano señala: 1.- Que se trate de una obligación de pagar dinero. 2.- Que la cantidad sea liquida o de plazo cumplido. 3.Que la obligación consista en documento público o instrumento reconocido por el deudor. 4.- Que estos documentos prueben de manera clara y cierta la obligación demandada.

Base Legal y Clases de Juicios Ejecutivos Analizando los juicios ejecutivos contemplados en el Libro Cuarto del Código de Procedimiento Civil (1986) de los llamados por el legislador procesal, "De los Procedimientos Especiales" en su título II, artículo 630 y siguientes, encontramos : "Los Juicios Ejecutivos" que comprenden: -Del Procedimiento por Intimación; -De la Ejecución de Créditos Fiscales, -De la Ejecución de Hipoteca;

determina que "cuando la pretensión del demandante persiga el pago de una suma líquida y exigible de dinero la entrega de una cosa mueble determinada..", se están cumpliendo dos de las condiciones señaladas, existiendo solamente el título ejecutivo que los contenga el cual, se conseguirá de no existir la oposición del demandado. En el caso de la tercera de tales condiciones, la misma norma establece que se "decretará la intimación del deudor, para que pague o entregue la cosa dentro de los diez días apercibiéndose de ejecución.

DIFERENCIA ENTRE VIA

-De la Ejecución de Prenda y

EJECUTIVA Y JUICIO ORDINARIO

-Del Juicio de Cuentas.

En todos se encuentran presente las tres condiciones previamente enumeradas.

En el caso del Procedimiento por Intimación, no se encuentra presente el título ejecutivo; por cuanto que su procedimiento o finalidad es la búsqueda del título Ejecutivo, que se produce con la falta de oposición del demandado.

Que el título contenga una condena, líquida y exigible en caso de incumplimiento, el legislador en el artículo 641 del Código de Procedimiento Civil (1986)

En principio es menester señalar que la vía ejecutiva se diferencia del procedimiento ordinario, porque en ella son procedentes de inmediato medidas ejecutivas sobre los bienes del deudor antes de la sentencia, es decir, el embargo que se decreta cuando se encuentran llenos los extremos exigidos por el artículo 630 del Código de Procedimiento Civil, es un embargo ejecutivo y no preventivo motivo por el cual no procede la oposición del deudor.

1.- En la vía ejecutiva. Desde la introducción de la demanda puede el demandante solicitar se decrete

medida de embargo ejecutiva sobre los bienes del deudor publicándose en los carteles y efectuándose el avalúo correspondiente.

En el juicio ordinario al introducirse la demanda solo puede acordarse embargo preventivo de los bienes.

2.- En la vía ejecutiva requiere que la demanda está fundamentada en el titulo ejecutivo público o auténtico y en el juicio ordinario no, cualquier título sirve.

T

ítulo Ejecutivo

El presupuesto fundamental de la va ejecutiva es la consignación de un título que tenga aparejada la ejecución, siendo que como se dejó establecido anteriormente nuestra legislación señala en forma enunciativa, que puede considerase este como instrumento público u otro instrumento auténtico que pruebe clara y ciertamente la obligación del demandado de pagar alguna cantidad liquida con plazo cumplido.

Existen tres Tipos de Títulos Ejecutivos Legales: Acarrean ejecución forzosa Convencionales.

Derivan de un contrato Judiciales: derivan de un acto de un órgano jurisdiccional. Preparación de la Vía Ejecutiva: Solo puede ser propuesta para obtener reconocimiento de un

documento privado que contenga una obligación de pagar.

Es un paso previo y necesario para convertir un documento privado negociable para que obtenga la característica de título ejecutivo y sirva para intentar el procedimiento por la vía Ejecutiva.

En su acepción amplia suele equiparse al título ejecutivo con el instrumento público o auténtico, considerando nuestra casación que es el que "pruebe ciertamente la obligación del demandado a pagar alguna cantidad líquida con plazo vencido". Ossorio (1986, p. 750).

No es bueno equipar al título ejecutivo con el instrumento auténtico o legalmente reconocido, porque existen otros instrumentos que permiten evidenciar la pretensión reclamada, por tratarse de que es la misma ley la que les da esa certeza, lo cual interpretando como segura y firme convicción de la verdad o convencimiento que adquiere el juzgador por lo resultante, de autos y que se traduce en la apreciación que hace de las pruebas, de allí que en el caso de procedimiento inductivo, el artículo 644 del Código de Procedimiento Civil (1986), considera como pruebas suficientes con certeza para poder en el proceso monitorio "los instrumentos públicos, los instrumentos privados, las cartas misivas, admisibles según el Código

Civil (1982), las facturas aceptadas, las letras de cambio, pagarés, cheques y cualesquiera otros documentos negociables, que salvo las dos primeras y las letras de cambio debidamente protestadas, solo pueden tenerse como instrumentos públicos con certeza suficientemente comprobadas pueden considerarse instrumentos públicos, mientras que los restantes constituyen instrumentos privados a los cuales les atribuye el legislador fuerza suficiente, en el caso específico del proceso monitorio, para fundamentar el demandado su pretensión y que le permiten a su vez, la búsqueda del título ejecutivo y de esa manera poder lograr la ejecución forzosa, título ejecutivo que se produce, como ya hemos dicho, si no se da la oportuna oposición del mandato intimado.

Según Cabanellas (1989, p. 105), el título ejecutivo "es aquel que trae aparejada ejecución, es decir, aquel que en virtud del cual cabe proceder sumariamente el embargo y venta de bienes del deudor moroso a fin de satisfacer el capital o principal debido, más los intereses y costos" En Venezuela, por solo citar algunos de los títulos ya estimados por el legislador como ejecutivos, podemos citar, a las escrituras públicas, a los documentos privados reconocidos, al igual que las letras de cambio debidamente protestadas

y en el caso de los denominados juicios o procedimientos ejecutivos ,en cada caso, existen instrumentos que permiten ejecutar la pretensión siguiendo el procedimiento especial y así por ejemplo como en el caso del Procedimiento por Intimación, según el artículo del Código de Procedimiento Civil (1986) como las citadas, hemos tenidos por privados y otros como públicos que permiten obtener la ejecución de la pretensión y lo mismo sucede con la Ejecución de Prenda, la Ejecución de Hipoteca, la Ejecución de Créditos Fiscales y la Vía Ejecutiva, cada uno mediante la utilización de ciertos instrumentos, que por su especial confirmación como las escrituras públicas o en el caso de los documentos privados tenidos legalmente como reconocidos ya traen aparejadas su confirmación de títulos ejecutivos y por ende su ejecución mientras; que en el caso de las facturas y otras aceptadas al igual que los vales, constituyen instrumentos como en el caso del Procedimiento monitorio, que pueden lograr la ejecución de la pretensión de inmediato siempre y cuando no se produzca la oportuna oposición de él.

La Jurisprudencia y las leyes especiales en el derecho moderno han contribuido a incrementar enormemente los títulos ejecutivos pero siempre debemos tener muy presente que un título ejecutivo constituye un instrumento que trae

aparejada su ejecución. Al analizar el artículo 523 del Código de Procedimiento Civil (1986) en su inicio, se refiere a "la ejecución de la sentencia o de cualquier otro acto que tenga fuerza de tal", y como ya mencionara debe utilizarse tal norma en la misma interpretación de la parte in fine del artículo 647 del mismo cuerpo legal, en el caso del Procedimiento por Intimación y en una otra forma en los restantes juicios ejecutivos, no produciéndose la oportuna oposición del mandato intimado "se procederá a la ejecución forzosa", por lo que el Decreto de intimación por ende la pretensión del actor, se tendrá como título ejecutivo y sólo, sí la oposición no se produce, se podrá proceder a la ejecución forzosa, o sea, que no podrá ejecutarse a nadie, sin que previamente se produzca el nacimiento del título ejecutivo bien sea como en el caso del Procedimiento Monitorio por falta de oposición o por la existencia de una sentencia definitivamente firme, pero sólo así. Se podrá ejecutar.

Según Calamandrei (1946) la importancia del Título Ejecutivo estriba en que es el derecho del ciudadano a obtener de los órganos del Estado la forma especial de tutela jurídica que constituye la ejecución forzada en su favor, es decir, la acción de ejecutiva, no nace sino para quien esté provisto anteriormente de una declaración de certeza, "dotada de determinados

requisitos sustanciales y formales siendo esencial, entre estos últimos la escritura de aquella concreta voluntad de ley que quiere hacer ejecutar".

De tal manera que todo ciudadano que aspire que el órgano jurisdiccional le produzca una ejecución forzosa debe lograrse el título ejecutivo y sin él, concluye el maestro italiano, es imposible lograrla dando lugar al proceso ejecutivo. De la misma manera, el procedimiento de congnición, en la gran mayoría de las veces está prácticamente dirigido a la conquista del título ejecutivo, o sea, la sentencia definitiva firme.

PREPARACION Según reza el Artículo 631 del código de procedimiento civil venezolano para preparar la vía ejecutiva puede pedir el acreedor, ante cualquier Juez del domicilio del deudor o del lugar donde se encuentre este, el reconocimiento de su firma extendida en instrumento privado, y el Juez le ordenar que declare sobre la petición.

La resistencia del deudor a contestar afirmativa o negativamente dar fuerza ejecutiva al instrumento. También producir el mismo efecto la falta de comparecencia del deudor a la citación que con tal objeto se le haga; y en dicha citación deber

especificarse circunstanciadamente el instrumento sobre que verse el reconocimiento. Si el instrumento no fuere reconocido, poder el acreedor usar de su derecho en juicio. Si fuere tachado de falso, se seguir el juicio correspondiente si el Tribunal fuere competente, y de no serlo, se pasarán los autos al que lo sea.

PROCEDIMIENTO Ejecutivo El tribunal competente es el tribunal del domicilio del deudor y también puede ser el del lugar donde se encuentre el deudor. La citación, si se trata del reconocimiento, evidentemente que la citación debe ser una citación personal, sin embargo, la jurisprudencia ha establecido que la firma puede ser reconocida por el mandatario siempre que este tenga facultades expresas para efectuar dicho reconocimiento.

La actuación jurisdiccional del derecho pasa por dos fases La cognición y la ejecución, coordinadas y complementarias entre sí, en aquella primera sirve de preparación y de premisa a la segunda.

En el caso de las acciones declarativas y constitutivas, la ventaja económica que el actor busca en el proceso se puede considerar alcanzada solamente con la cognición, es decir, el caso de

que si el interés se considera alcanzado con el pronunciamiento de la sentencia que produce la certeza o determina el cambio jurídico deseado, pero no siempre el interés del vencedor en una ulterior intervención de los órganos jurisdiccionales queda agotado con la sentencia de condena, por cuanto que no siempre, la obligación que impone la prestación que dicha sentencia impone al demandado se cumple voluntariamente por el solo hecho del mandato contenido en dicha condena por el obligado y en aquellos casos en que dicha sentencia, no tiene la virtud de inducir al condenado a la ejecución voluntaria, la fase de cognición le asegura al vencedor, en lugar de la satisfacción inmediata y final de su derecho, un medio para pasar a una fase procesal ulterior en la que se sustituya a la ejecución voluntaria por obra del Estado, la ejecución forzada.

En estos casos, la fase de la cognición es fin en sí misma, y es por lo que el ciudadano le pide al Estado la sentencia, porque sabe que podrá después, a base de la misma, solicitarle una ulterior prestación jurisdiccional que constituye la ejecución forzada y precisamente por ello, es que afrontada y provoca el juicio, porque sabe que éste le procurará con la sentencia, el título ejecutivo, sin el cual no le sería posible lograr contra la voluntad la ejecución practicada de su derecho.

De esta forma la fase cognoscitiva se orienta hacia la búsqueda de la preparación e instrumentación en cuanto a que la misma sirve para construir un título ejecutivo.

Ahora bien, de acuerdo al Código Procesal Civil (1986) que la ejecución forzosa no puede producirse sin haber previamente llevado la fase cognoscitiva, sino que en forma análoga, solamente expresa que a dicha etapa, solo puede llegarse en virtud "de un título ejecutivo", de manera que la fase de cognición representa una premisa necesaria y fundamental a la fase de ejecución sólo en cuanto dicha fase constituya el fundamental a la fase de ejecución sólo en cuanto dicha fase constituya el medio indispensable para la construcción del título ejecutivo.

Siendo de imposible cumplimiento que se produzca una ejecución forzosa, sin que previamente exista aunque sea una mínima fase cognoscitiva, aún en el caso de Intimación, no pudiendo darse un procedimiento monitorio puro que prescinda totalmente de dicha fase para pasar en una sola vez con los recaudos presentados por el demandado a la fase ejecutiva.

Sin embargo, Calamandrei (1946, p.

21) opina que existe la posibilidad de que un proceso ejecutivo se inicie en forma autónoma sin estar precedido por una fase cognoscitiva, manifestándose en la forma más típica, en aquellos casos en que la

ley atribuye la eficacia de título ejecutivo a declaraciones de certeza de carácter no jurisdiccional, como ocurre para citar por ejemplo, con aquellos contratos otorgados por ante notario o funcionario público autorizados por la ley, como en el caso de los créditos fiscales. En estos casos al igual que en las legislaciones italianas y francesas nuestra ley les da eficacia jurídica inmediata pero es bueno tener muy claro, que en nuestro derecho, no encontraremos ningún procedimiento, especial ejecutivo, donde no exista la fase cognoscitiva aunque sea en su mínima expresión, por cuanto que de alguna manera, estará presente y aún en el caso de la Vía Ejecutiva a la Ejecución de Hipoteca o en el mismo Procedimiento por Intimación siempre se hará necesario dicha fase y no podrá el actor, tal como sucede en, algunas legislaciones donde existe el Procedimiento Monitorio, presentarse ante el juez para solicitarle una ejecución de inmediato.

En estos casos de los denominados procesos ejecutivos, la oposición del deudor puede hacer necesaria una declaración de certeza sobre la actual existencia de la acción ejecutiva y provoca así un verdadero proceso de cognición insertado en la ejecución. pero en tal hipótesis opina Calamandrei (1946, p. 23) "la cognición, en lugar de dar vida al título ejecutivo (ya nacido

contractualmente fuera del proceso) tiende solamente a establecer la certeza de que el pretendido título ejecutivo es meramente aparente, y por consiguiente, ineficaz".

En estos casos de actos contractuales inmediatamente ejecutivos, no se requiere de fase cognoscitiva con la finalidad de preparar el título ejecutivo, lo que aparentemente parece justificado, porque se busca no retardar a través de una previa declaración de certeza, la rápida satisfacción de un crédito, "consagrado en un acto público ya de por si acompañado de particulares garantías de certeza".(Calamandrei, 1946,23) En aquellos otros casos donde no existan crédito con verdadera naturaleza ejecutiva como en el caso de los instrumentos públicos (caso Vía Ejecutiva y de Ejecución de Hipotecas), y que el crédito requiere de ejecución no tiene otra vía que la de recurrir para obtener la satisfacción de su derecho en una verdadera y propia declaración jurisdiccional de certeza, el ordenamiento jurídico , considerando que para el acreedor la cognición es sólo un instrumento cuya finalidad basta la ejecución, toma en cuenta a veces el interés que tiene en alcanzar dicha finalidad con la menor dilación menos lento el instrumento.

Diferencia entre Citación e Intimación

Se entiende por citación aquel acto por el cual un Juez o Tribunal ordena la comparecencia de una persona, ya sea parte, testigo, perito o cualquier otro tercero, para que se presente en el Juzgado para un acto procesal, o para oír una providencia, presenciar un acto o diligencia judicial que puede perjudicarle, o bien a prestar una declaración. Por el contrario la intimación es la orden judicial para el cumplimiento de una obligación de dar, hacer o no hacer y que casi siempre lleva implícito un requerimiento, bien sea la orden de cumplir una obligación procesal, o hacer saber una cosa, especialmente con autoridad o fuerza para ser obedecido.

La diferencia esencial, pues, entre citación e intimación, es que mientras la primera es una orden de comparecencia, la segunda es una orden de cumplimiento. En la citación el Juez dice: “Comparezca ante éste Tribunal a...”, en la intimación, en cambio: “haga esto” o “no haga esto la intimación tiene

un carácter ejecutivo, la exigencia de una prestación que generalmente es un mandamiento de pago.

Títulos que aparejan Ejecución Es requisito para que proceda el empleo de la vía ejecutiva que el acreedor presente instrumento público o auténtico, o bien vale o instrumento privado reconocido judicialmente por el deudor.

Estos documentos son los únicos que en nuestro Derecho procesal aparejan ejecución, y son por ello títulos ejecutivos, que también se denominan guarentigios, porque la autenticidad suple en ellos la antigua cláusula guarentigia, según la cual se daba poder a los Alcaldes y Justicias para hacerlos cumplir y para ejecutar al obligado como si obrase contra él un fallo pasado en autoridad de cosa juzgada.

IDEAS FINALES Después del recorrido investigativo realizado por los juicios ejecutivos puedo concluir que los títulos de ejecución son aquellos documentos de los que se deduce que el acreedor tiene derecho al despacho de la ejecución y en el que se apoya una demanda ejecutiva.

Asimismo, los títulos ejecutivos son aquellos que deben existir para aparejar ejecución, por la que entendemos desde ahora únicamente, el proceso que, prescindiendo de la etapa previa de conocimiento, permite hacer efectiva una obligación por vía especial de apremio.

REFERENCIAS

Títulos ejecutivos. Disponible en: https://es.slideshare.net/GabrielGon zlez50/escuelas-criminologia170137049 Consultado: 2021, Noviembre, 12.