Volvo Ocean Race: Invertir en Estados Unidos

En este número

EL SIGLO DE EEUU – OTRA VEZ Página 5 CENTRADOS EN LAS TENDENCIAS DE LA MODA

Página 8 EL PLAN MAESTRO PARA LA REPARACIÓN DE BARCOS

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ESTADOS UNIDOS EN PRIMER PLANO Compendio de artículos que conmemoran el patrocinio de la Volvo Ocean Race por parte de Robeco MAYO DE 2015

ÍNDICE 3 Prólogo 4 El siglo de EEUU – Otra vez 6 Baja volatilidad en EEUU: Por qué hay que ser selectivos 8 Centrados en las tendencias de la moda 10 Un nuevo mundo financiero para valientes 12 El plan maestro para la reparación de barcos 15 Encontrando las crestas de las olas en renta variable 16 Contacto

4-11 de octubre

14-15 de marzo

Auckland

14-17 de junio

Lorient

15-19 de noviembre Ciudad del Cabo

18-19 de abril

Itajaí

19 de junio

La Haya (escala técnica)

2-3 de enero

16-17 de mayo

Newport

27 de junio

Gotemburgo

6-7 de junio

Lisboa

Alicante

Abu Dhabi

7-8 de febrero Sánya 2|

Para inversores profesionales. La información contenida en esta publicación no está dirigida a usuarios de otros países, como residentes y ciudadanos de EE.UU., donde no esté permitida la oferta de servicios financieros extranjeros, o donde los servicios de Robeco no se encuentren disponibles.

PRÓLOGO Para conmemorar la escala de Newport, nos complace publicar este séptimo número de nuestra revista, centrado en Estados Unidos y en algunas historias narradas directamente por la valiente tripulación del Team Brunel. En esta edición contamos con una entrevista doble con Jack Neele, gestor del fondo Robeco Global Consumer Trends Equities, y del navegante del Team Brunel, Andrew Cape. Ambos nos hablan acerca de cómo tienen que saber hacia dónde sopla el viento para poder invertir y navegar con éxito, respectivamente.

En otros tiempos, los marineros buscaron "el nuevo mundo". Ahora, Estados Unidos es la nación más poderosa, y Newport es un puerto de escala técnica de la Volvo Ocean Race, con una sólida tradición náutica que se remonta al siglo XVIII. La embarcación que patrocinamos, el Team Brunel, y sus cinco contrincantes que aún siguen en liza, disfrutan del último descanso antes de abordar la última y más prolongada manga a través del Atlántico, hasta Europa. Quedan tres escalas más (Portugal, Francia y, una breve, en los Países Bajos) antes de que los participantes crucen la línea de meta en Suecia.

Estados Unidos ha experimentado un cierto renacimiento en los últimos años, reestructurando su economía y creando la revolución del gas de esquisto, que ha tenido repercusiones sobre el precio de la energía en todo el planeta. Léon Cornelissen, economista jefe, nos explica las implicaciones de este fenómeno para los inversores.

En nuestro habitual apartado sobre inversión cuantitativa, Pim van Vliet nos describe la estrategia de Conservative Equities, explicándonos cómo funciona en Estados Unidos y en otras partes del mundo. Además, Chris Hart expone el modo en que busca las crestas de las olas cuando compra valores para el fondo Global Premium Equities, utilizando también técnicas de inversión por medio de los factores.

Ahora que los marineros celebran su llegada a la "tierra de las oportunidades", Patrick Lemmens nos revela de dónde toma su nombre el fondo New World Financials. No olvidemos que Nueva York se llamó una vez Nueva Ámsterdam, al ser fundada por un holandés.

Por último, en nuestro último informe de la regata, nos detenemos en el plan maestro de la Volvo Ocean Race para reparar las embarcaciones. Esta manga, iniciada en Brasil, ha supuesto un gran castigo: uno de los equipos tuvo que retirarse al romperse el mástil de su embarcación; otro sufrió la rotura de sus velas y otros tuvieron que reparar sus daños mientras esquivaban "remolinos mortales" y "wipeouts". Desde luego, la navegación no es para gente blanda.

Esperamos que disfruten con esta revista y que continúen siguiendo con nosotros esta regata.

Roderick Munsters CEO Robeco

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‘Los políticos estadounidenses no ponen trabas a la innovación en el sector del gas de esquisto, al contrario que los reguladores europeos’

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EL SIGLO DE EEUU – OTRA VEZ Léon Cornelissen China e India están progresando, pero Estados Unidos sigue siendo el actor principal del escenario económico mundial.

Aunque en términos de paridad de poder adquisitivo China pueda haberse erigido en un competidor emergente de EEUU, la mera extrapolación de las líneas de tendencia es una forma demasiado simplista de configurar una imagen realista del futuro, afirma Léon Cornelissen, Economista Jefe de Robeco.

“El siglo XXI va a ser también el siglo de Estados Unidos”, sentencia. Poco tiene esto que ver con el papel que representa el banco central estadounidense, la Reserva Federal, que en los últimos años ha dejado su impronta sobre la economía y los mercados financieros. El motivo reside en la solidez de la economía estadounidense, que nunca se debe infravalorar y que los europeos parecen no valorar en toda su extensión, según Cornelissen.

La política monetaria seguirá siendo laxa “La Fed subirá los tipos de interés en algún momento, pero Janet Yellen no tiene prisa por hacerlo. Eso está claro”, afirma. “La política monetaria es y seguirá siendo laxa. En el peor de los casos, algo menos laxa." El país ha cerrado un primer trimestre decepcionante, y no hay mucho

optimismo sobre su potencial de crecimiento estructural, indica Cornelissen. El país está sufriendo además los efectos del cambio climático. Los últimos dos años han estado plagados de inviernos extremadamente fríos, mientras que en el resto del hemisferio norte han sido más benignos.

“Las previsiones de crecimiento económico se sitúan por debajo del 3%, lo que no resulta precisamente exuberante. El impulso demográfico también es un factor importante”, afirma Cornelissen. “La población estadounidense está envejeciendo aunque, desde luego, no tanto como la de Japón o Alemania.” Pero, en su opinión, también existen factores positivos que hacen que el panorama futuro no sea tan agrio. La participación de la mujer en la sociedad sigue aumentando, y Estados Unidos es, por tradición, un país de emigrantes.

Y, lo que es más importante, EEUU sigue siendo la cuna de la innovación tecnológica. “Estamos asistiendo a interesantes avances en investigación genómica, robótica y medicina. En este sentido, es difícil ser pesimistas”, concluye Cornelissen. Pero muchos consumidores, economistas y analistas sí lo son. Y Cornelissen opina que el motivo es la lentitud con la que la malograda confianza del país se está recuperando del revés sufrido por la crisis financiera.

“Es comprensible que la recuperación esté siendo tan lenta. Se trata de una crisis excepcionalmente

profunda; la peor desde los años treinta”, explica.

“Y EEUU tiene que lidiar, además con conflictos presupuestarios, recortes automáticos del gasto y un gobierno al borde del colapso. Son todos elementos típicos del folclore americano pero, en épocas como esta, la aportación del gobierno estadounidense al crecimiento es negativa.”

Se necesita un crecimiento salarial Según Cornelissen, el punto de inflexión tiene que ser un crecimiento sustancial de los salarios, que aún brilla por su ausencia en todos los ámbitos.

“Sí, McDonald’s y Wal-Mart han subido los sueldos, y el salario mínimo ha aumentado un poco. Al mismo tiempo, el desempleo está bajando de forma constante. A largo plazo, el crecimiento salarial se recuperará. Pero todavía falta tiempo.

Y la desigualdad de las rentas también está aumentando rápidamente.”

La revolución del esquisto también está impulsando la economía, a pesar del hecho de que la bajada del precio del petróleo está conteniendo la euforia en cierta medida. Pero las empresas están bien dispuestas y tienen iniciativa, y los políticos estadounidenses no ponen trabas a la innovación en este sector, al contrario que los reguladores europeos. Y la innovación sigue siendo el medio de supervivencia más importante para un país vulnerable como EE.UU. “Las mayores empresas

innovadoras son americanas. Las mejores universidades, también. Sería ingenuo infravalorar la economía y la resistencia de este país”, apunta Cornelissen.

“Para que exista una innovación y un crecimiento reales se precisa una sociedad abierta, en la que los tambores de guerra políticos sean un signo de vitalidad. Esta es una de las ventajas de EEUU frente a otros países como China, en parte gracias a un espíritu de optimismo desenfrenado. Naturalmente, tanto China como India tienen más manos que poner a trabajar, y más baratas. Pero la agricultura barata y la reproducción de los modelos de negocio del siglo pasado no bastan para triunfar. Hace falta una clase media muy activa. Y todavía falta bastante para que aflore en las nuevas superpotencias, India y China.”

En pocas palabras, a pesar de la dirección a la que apuntan estas tendencias a largo plazo, Cornelissen está convencido de que, en este siglo, Estados Unidos va a ser el actor principal de la escena económica mundial… otra vez.

Esta publicación pretende proporcionar a los inversores información general sobre las capacidades específicas de Robeco, pero no constituye una recomendación para comprar o vender ciertos valores o productos de inversión.

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BAJA VOLATILIDAD EN EEUU: POR QUÉ HAY QUE SER SELECTIVOS Pim van Vliet El estadounidense fue el primer mercado de renta variable del mundo en el que se documentó el efecto de la baja volatilidad. El gestor de fondos Pim van Vliet explica cómo selecciona valores de baja volatilidad para Robeco Conservative Equities y por qué esta estrategia funciona en EE.UU. y en otras partes del mundo.

Las acciones con baja volatilidad y baja beta consiguen rendimientos superiores, lo que puede explicarse empleando el Capital Asset Pricing Model (CAPM).

Esta anomalía, más conocida como el "efecto de la volatilidad", se documentó por primera vez en el mercado de valores estadounidense. “El mensaje de ‘menos riesgo sin menos rentabilidad’ resulta bastante sorprendente y poco intuitivo”, afirma Van Vliet. “Como inversor, uno espera que el riesgo y el rendimiento vayan siempre de la mano.”

“La estrategia Conservative Equity aprovecha el efecto de la volatilidad y trabaja en distintos mercados, ya que este es un fenómeno global”, aclara. “El efecto de la volatilidad se ha documentado en Estados Unidos, pero también en los mercados europeos, japoneses y emergentes. Los estudios realizados en estos últimos ofrecen las mismas conclusiones: los inversores de renta variable pagan en exceso por los valores de mayor riesgo.”

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Incorporación de US Conservative Equity “US Conservative Equities es la más reciente de las estrategias pertenecientes a la gama Robeco Conservative (que incluye también Global, All Countries, Emerging y Europe), a la que se incorporó en 2013. Se trata de un guiño al pasado, ya que el efecto de la volatilidad se documentó por primera vez en el mercado de valores estadounidense”, recuerda Van Vliet. “Sin embargo, ya contábamos con amplia experiencia en la selección de valores estadounidenses de baja volatilidad, dentro de la estrategia Global Conservative Equities, en marcha desde 2006.”

El universo de inversión de US Conservative incluye también valores canadienses, no solo estadounidenses. La economía de EEUU se recuperó con fuerza en 2014 y, en general, los inversores están ahora más preocupados por la valoración de las acciones estadounidenses. Al cierre del primer trimestre de 2015, el índice MSCI US tenía una ratio P/E de 19,1, cuando la del MSCI Europe era de 16,9 y la del MSCI Emerging Markets de tan solo 13,2. Además, la preocupación suscitada por las valoraciones afecta especialmente a las acciones americanas de baja volatilidad. Con un P/E de 21,9 en el índice US MSCI Min Vol, los valores genéricos de baja volatilidad resultan ahora más caros que los del índice general del mercado estadounidense.

Van Vliet remarca que el enfoque Conservative

Equities tiene en cuenta también la valoración a la hora de seleccionar los títulos de baja volatilidad.

“Cuando la volatilidad reducida es más costosa, tener en cuenta la valoración reviste especial importancia.

El P/E de nuestra cartera de acciones US Conservative es de 17,9, notablemente inferior a la de las carteras genéricas de baja volatilidad, y también a la del conjunto del mercado bursátil de EEUU.”

La historia ofrece respuestas Van Vliet considera que la historia puede ofrecer algunas respuestas sobre la efectividad del enfoque Conservative Equities en las épocas en que los valores de baja volatilidad resultan más caros, como sucede actualmente en Estados Unidos.

“La situación actual se asemeja a la vivida en los años cuarenta y cincuenta”, comenta Van Vliet.

“La recesión mundial de la década de 1930 estaba muy presente en la memoria de los inversores y, en consecuencia, existía una gran demanda de valores estables, otorgando a estos una valoración muy elevada en comparación con el conjunto del mercado.” Van Vliet ha estudiado una amplia muestra de la historia americana (82 años), que divide en dos grupos: "barato", cuando las acciones con volatilidad reducida presentaban un ratio precio/valor contable relativamente bajo, y "caro", cuando dicha ratio era elevado.

Dentro de estos grupos, se centró en un índice de mercado, una estrategia genérica de baja

volatilidad y una estrategia mejorada del mismo tipo, que tuviera en cuenta factores relacionados con el "momentum" y la valoración. “Comparé el rendimiento ofrecido por el grueso del mercado y por los dos enfoques de baja volatilidad. Los resultados de la estrategia mejorada fueron impresionantes.” “La investigación muestra que la diferencia de rendimiento entre ambos enfoques de baja volatilidad es de hasta el 6% anual de media, a favor de la estrategia mejorada de baja volatilidad.

Esta diferencia alcanza su mayor envergadura en los periodos en que los valores genéricos de volatilidad reducida resultan caros, como sucede actualmente.”

Estos resultados claramente enfatizan la importancia de aplicar un enfoque mejorado de baja volatilidad, que sea selectivo y que evite la adquisición de valores defensivos que sean demasiado caros y presenten un escaso momentum.

“Llevamos seleccionando valores de baja volatilidad, baja valoración y buen momentum desde 2006. Este enfoque mejorado ha dado lugar a sólidos resultados y a una cartera compuesta por valores de baja volatilidad que resultan relativamente asequibles”, concluye Van Vliet.

Esta publicación pretende proporcionar a los inversores información general sobre las capacidades específicas de Robeco, pero no constituye una recomendación para comprar o vender ciertos valores o productos de inversión.

‘Cuando la volatilidad reducida es más costosa, tener en cuenta la valoración reviste especial importancia’

Monte Rushmore

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CENTRADOS EN LAS TENDENCIAS DE LA MODA Jack Neele y Andrew Cape Para navegar bien hay que saber hacia donde sopla el viento, concepto que también aplica el gestor de fondos de Robeco, Jack Neele, en su fondo Global Consumer Trends Equities.

‘Durante la crisis, la gente seguía usando Facebook y Google’ Jack Neele

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“Cuando nos fijamos en las tendencias a largo plazo, lo que buscamos es saber hacia donde sopla el viento, pero con vistas al futuro”, afirma Neele. “Si estamos seguros de navegar en el rumbo correcto, logramos encontrar empresas cuyos ingresos están condicionados principalmente al largo plazo. Es lo que llamamos una exposición 'pure-play'."

viento y cuál será la climatología”, apunta Cape.

“Obviamente, en cada manga usas la misma electrónica para recopilar e interpretar los datos meteorológicos que nos envía la organización de la Volvo Ocean Race. La temperatura no importa tanto en relación con el equipamiento que se utiliza. Se trata realmente de cómo se usan los datos.”

“Tiene que ser a largo plazo, porque a corto hay fenómenos que solo duran un año o son modas pasajeras. Una tendencia es un cambio estructural que sucede en un sector y que viene para quedarse, como sucedió con los smartphones.”

Evitar las modas

Para el navegante del Team Brunel, Andrew Cape, el concepto de ‘tendencia’ es más sencillo, consiste en encontrar el viento que pueda impulsar la embarcación de forma estable y más veloz que sus competidores. En una regata mundial, las condiciones cambian enormemente, desde el calor abrasador y las aguas calmas de Oriente Medio, a las gélidas temperaturas y olas gigantes del Océano Antártico.

“Pero el problema es común, no importa dónde estés… necesitas saber hacia donde sopla el

A diferencia de un regatista, que quiere estar siempre en primera posición, Neele confiesa que su fondo prefiere aguardar para no caer en modas pasajeras. “No invertimos en valores que se ponen de moda muy al principio. Preferimos ir despacio pero seguros de que se trata de una tendencia real y que será duradera en el tiempo”, aclara.

“Por ello, nunca somos los primeros en invertir en empresas concretas. Cuando invertimos, al menos sabemos que vamos a tener cierto grado de confianza o de claridad sobre la dirección en la que está evolucionando el sector y, por consiguiente, el rumbo que seguirá la empresa. Así, tenemos también más visibilidad sobre el crecimiento de los ingresos y los beneficios, lo que implica que

podemos obtener muy buena rentabilidad con menor riesgo.”

“Si te das demasiada prisa en invertir y aciertas, los beneficios pueden ser enormes, pero las pérdidas también, en caso de error. Una vez identificamos la tendencia, buscamos muchas empresas que se ajusten a ella. Invertimos en una cesta de valores que se correspondan con la tendencia.”

Por contra, Cape tiene un horizonte a más corto plazo, impuesto por la necesidad. “Normalmente solo podemos aventurar lo que sucederá en los próximos cuatro días; solo podemos prepararnos para eso”, declara. “Solo puedes planificar lo que sabes que va a pasar con seguridad. Es, sobre todo, planificación a corto plazo. Y, aun así, hay veces que las previsiones no se cumplen y que tenemos que volver a cambiar los planes. En ocasiones, cuando llega un nuevo pronóstico meteorológico, es tarde para cambiar lo planificado y perdemos muchas millas.”

Predecir el futuro Cape cuenta con los más modernos equipos de navegación para analizar los patrones meteorológicos, pero Neele depende más de los

futurólogos que asisten a las conferencias para tratar de identificar nuevas tendencias.

“Dos veces al año, celebramos cursos a los que invitamos a estos pronosticadores de tendencias, futurólogos y demás para comentar los cambios que están observando en el mundo”, revela Neele.

“Queremos saber si las tendencias en las que estamos invirtiendo siguen siendo válidas o si es preciso introducir cambios. Hablamos con muchas empresas que invierten en nuevos productos. Si tomamos como ejemplo a Google, veremos que actualmente están invirtiendo en coches que se conducen solos y en las gafas Google Glass. Igualmente, tenemos el Apple Watch y demás. Algunos de estos productos nunca verán la luz, pero nos ayudan a saber en qué dirección se mueve el mundo.”

El crecimiento de los servicios compartidos Neele afirma que han surgido otras tendencias relacionadas con la proliferación de los servicios compartidos a través de Internet, a los que es posible acceder fácilmente desde cualquier lugar. “Muchos jóvenes no están abonados a ningún servicio de televisión de pago, porque prefieren suscribirse a Netflix o a otro similar que puedan utilizar en su portátil o tableta, y no tienen coche porque van a usar Uber. Se trata de una nueva realidad.”

“Pero también seguimos la moda. Por ejemplo, en los mercados occidentales no se está registrando crecimiento salarial, por lo que la gente busca ahorrar dinero. En Estados Unidos, las tiendas de ropa barata como Dollar General están funcionando realmente bien. Existe una dicotomía: en los mercados emergentes, las ventas de artículos

de lujo están aumentando, mientras que en los mercados desarrollados el segmento bajo es el que mejor evoluciona. El consumidor busca ahorrar dinero, cuando en otros tiempos le importaba más poder decir ‘oye, mira lo que tengo’.”

Una moda que desde luego se repite mucho en las regatas oceánicas es su dirección. Al igual que muchos recorridos alrededor del mundo, el de la Volvo Ocean Race sigue dirección Este: “Los grandes vientos suelen soplar de Oeste a Este, por eso seguimos esa dirección, para tener el viento de popa”, explica Cape. “Por este motivo, las regatas de vuelta al mundo van siempre de Oeste a Este.

Si fuéramos al contrario, tendríamos el viento en contra la mayor parte del tiempo, al igual que las grandes corrientes. Es muy incómodo, la navegación es complicada y nadie se aventura a dar la vuelta al mundo así.”

Neele apunta que el desplome del precio del petróleo no es una tendencia como tal. “La ventaja del petróleo desde el punto de vista de las rentas es más cíclica, y todavía no se ha dejado notar”, apunta. “Cuando baja el precio del petróleo, la gente ahorra dinero desde el principio, pero no lo gasta de inmediato. Los libros de economía dicen que se necesitan unos nueve meses para que la gente empiece a percibir el ahorro como sostenible y empiece a gastar dinero. Ahora que se percibe como estable el precio del petróleo, su bajada está empezando a calar en el comportamiento de los consumidores.”

La teoría cíclica La teoría cíclica se ajusta bien a su cartera, centrada en Estados Unidos y orientada al mundo digital.

Sus tres mayores inversiones son Facebook, Google y Apple. “Es un perfil muy tecnológico, pero es que estas empresas también dependen mucho menos del ciclo económico. Durante la crisis, la gente seguía usando Facebook y Google, y continuaba comprando más smartphones porque estos seguían cobrando importancia en la vida de las personas.”

Lo más importante ahora para el Team Brunel es ganar la Volvo Ocean Race. El equipo de Abu Dhabi lleva una impresionante ventaja, pero también la tenían los de Dongfeng antes de que se rompiera el mástil de su embarcación y llegaran últimos en la manga de Itajaí. “Es muy sencillo: tenemos que ganar esta manga… No hay otras tácticas, porque Abu Dhabi Ocean Racing nos saca nueve puntos de ventaja”, sentencia Cape. “Tenemos que ser los primeros en cruzar la meta en Newport. Toda la tripulación está muy motivada para salir de nuevo a la mar. Todo es posible.”

‘Toda la tripulación está muy motivada para salir de nuevo a la mar. Todo es posible.’

Esta publicación pretende proporcionar a los inversores información general sobre las capacidades específicas de Robeco, pero no constituye una recomendación para comprar o vender ciertos valores o productos de inversión.

Andrew Cape

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UN NUEVO MUNDO FINANCIERO PARA VALIENTES Patrick Lemmens Mientras los regatistas de la Volvo Ocean Race se aproximan a las costas del "nuevo mundo", el sector financiero internacional se enfrenta a su propio nuevo mundo, difícil de dominar. Las tendencias a largo plazo están cambiando la propia esencia del sector financiero, y hay inversores que pueden beneficiarse de ello. Patrick Lemmens, gestor del fondo Robeco New World Financial Equities, explica cómo.

Un inversor tiene primero que identificar, de entre los innumerables de cambios que se están produciendo, las tendencias estructurales más importantes y a más largo plazo. Lemmens ha identificado tres grandes tendencias relevantes para su cartera, a las que ha bautizado como: Aging, Digital y Emerging Finance. Estas tendencias pueden sesgar la estructura tradicional de los (sub)sectores.

En muchas regiones del mundo, la población está envejeciendo, por lo que la demanda de planificación financiera personal está creciendo. Existen sistemas de pensiones, como los denominados planes de "salario final" que se están volviendo incosteables, por lo que resulta cada vez más importante para las personas disponer de ahorros suficientes para retirarse con comodidad y estar bien atendidos. “Las empresas que ofrecen soluciones para satisfacer las necesidades de las personas en materia de pensiones, cuidados y alojamiento nos resultan interesantes”, aclara Lemmens.

La digitalización financiera Como sucede en el resto de los ámbitos, el sector financiero también se está digitalizando, y esto está transformando el entorno competitivo. En primer

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lugar, los sistemas de pago están cambiando en todo el mundo: los consumidores cada vez hacen menos pagos en efectivo, prefieren hacerlos con tarjeta o por medios electrónicos. En segundo lugar, los sistemas de pago por móvil están proliferando con rapidez. En consecuencia, son cada vez más las entidades financieras que están externalizando sus operaciones informáticas, incluso las de interacción directa con el cliente. “Puesto que no nos restringimos al sector financiero tradicional, podemos aprovechar también las oportunidades que ofrece el sector de las teconologías de la información”, afirma Lemmens.

La tercera y última de las citadas tendencias es la que se refiere al crecimiento de la clase media a escala mundial. En los mercados emergentes es donde más rápido está proliferando, aunque la penetración de los servicios financieros sigue siendo muy escasa. En los mercados desarrollados, Lemmens busca empresas financieras cuyo crecimiento se base en la prestación de servicios básicos pero de forma innovadora, o con competencia limitada.

“Estas tres tendencias están integradas por muchas subtendencias”, explica Lemmens. “Buscamos

tener una buena exposición a cada tendencia, para poder sacar provecho de su crecimiento cuando se produzca, pero también queremos tener cierta protección para el caso contrario, por lo que invertimos en múltiples tendencias independientes.

Un ejemplo de subtendencia es la búsqueda de rentabilidad absoluta. Invertimos en gestoras patrimoniales con exposición a activos alternativos, como KKR, Blackstone, Carlyle u Oaktree. La creciente demanda de soluciones ‘smart beta’, que se basan en índices capaces de aprovechar las ineficiencias sistemáticas del mercado, y los fondos cotizados (ETF), conforman otra subtendencia, que se refleja en nuestra inversión en WisdomTree.”

La diversificación es esencial En el sector financiero, resulta crucial contar con una amplia diversificación. “Este sector presenta factores únicos, como su escasa predictibilidad o la influencia de los organismos reguladores, así como el riesgo y los efectos de las cuestiones legales”, afirma Lemmens. “Por otra parte, es imposible controlar plenamente y poder predecir la evolución de los balances y flujos de efectivo de la mayoría de las financieras en las que invertimos. Ninguna

revela totalmente sus datos y, aunque lo hicieran, sería imposible realizar un estudio completo de due diligence sobre la totalidad de un balance de, por ejemplo, 1 billón de euros.”

Lemmens muestra gran optimismo hacia los bancos y aseguradoras de los mercados emergentes. “La regulación sigue ejerciendo una influencia muy importante sobre la banca y las aseguradoras, pero esperamos que su relevancia se atenúe en los próximos seis meses”, explica.

También nos resultan interesantes las empresas con exposición a servicios de pago electrónicos y por móvil y servicios de tecnologías de la información de tipo financiero. Para los próximos 12 meses, prevé un rendimiento algo superior al diez por ciento.

“Y, si los tipos de interés a largo plazo comienzan a subir gradualmente, el potencial de crecimiento del sector podría incluso aumentar”, concluye Lemmens.

Esta publicación pretende proporcionar a los inversores información general sobre las capacidades específicas de Robeco, pero no constituye una recomendación para comprar o vender ciertos valores o productos de inversión.

‘Queremos tener cierta protección

en caso de no lograrse el crecimiento previsto, por lo que invertimos en múltiples tendencias independientes’

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EL PLAN MAESTRO PARA LA REPARACIÓN DE BARCOS Tom Touber La Volvo Ocean Race ya ha impuesto un gran castigo: más de la mitad de las embarcaciones han sufrido daños, dos de ellas tan graves que han tenido que abandonar. Es lo que tiene una regata oceánica, según el Director de Operaciones de la prueba, Tom Touber.

El equipo chino de la regata, el Dongfeng, tuvo que abandonar cuando se rompió el mástil de su embarcación 200 millas náuticas al Oeste del Cabo de Hornos. Al equipo femenino SCA se le rasgaron las velas, y sufrió además problemas con el equipo de navegación. El Team Brunel también tuvo complicaciones con el mástil que obstaculizaron sus progresos. Además, el Team Vestas danés no pudo recuperarse tras colisionar con un arrecife en el Índico.

“Se trata de la regata oceánica más dura del mundo, y que se rompan cosas es parte del juego”, afirma Touber, responsable de mantener el curso de la regata, a menudo con muchos elementos en contra. “La clave es la gestión de riesgos: tenemos recambios, planes de contingencia y todo tipo de sistemas para reducir riesgos, pero estos siguen existiendo.”

Mejora del plan logístico “En esta edición, hemos construido barcos más fuertes, y hemos mejorado el plan logístico.

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Por ejemplo, cuando se rompió el mástil de la embarcación del Dongfeng, contábamos con mástiles estratégicamente situados en distintos puntos del mundo, para que el coste de su reparación no fuera demasiado elevado.”

El mástil del Dongfeng se reparó en Ushuaia, ya que el puerto argentino de la punta de Sudamérica se encontraba demasiado lejos como para que lo recibieran en un plazo razonable. “No era la primera vez que íbamos a Ushuaia; conocemos bien al capitán del puerto y a la gente de allí”, aclara Touber. “En todas las ediciones de la Volvo Ocean Race ha habido algún problema con algún barco que hemos tenido que llevar a Ushuaia. Siempre ha formado parte de la regata.”

Gestionar problemas durante las 24 horas del día supone a menudo pasar noches en vela. “Ser parte de la prueba supone que te despierten en mitad de la noche con algún desastre y, siempre que pasa, lo primero que piensas es que es el fin del mundo”, confiesa Touber. “Pero cuando nos reunimos con la dirección, siempre acabamos por encontrar una solución. Siempre hay un plan de contingencia.”

“Contamos con gente muy diestra y creativa, capaz de lidiar con todo tipo de problemas. Es similar a lo que sucede en el mundo de los negocios. Por

ejemplo, el mercado de valores puede reaccionar exageradamente a un hecho, pero los especialistas saben lo que en realidad está pasando y pueden evaluar mejor las posibles repercusiones de cada situación. A nosotros nos pasa igual.”

A veces, tratar con todos los interesados – incluso familiares asustados – puede ser un problema mayor que arreglar el barco, según Touber. “La mayoría de las veces no tenemos problemas para arreglar una embarcación, o resolver una incidencia técnica; lo más complicado suele ser tratar con los patrocinadores, los equipos de relaciones públicas, los medios de comunicación o los familiares y amigos que son presa del pánico. Esos aspectos suelen ser los más complejos.”

Sobrevivir a "remolinos mortales" y "wipeouts" Así pues, tras siete meses y 20.000 millas náuticas de navegación, ¿cómo soportan la presión los barcos? Algunos de los peligros a los que se enfrentan las tripulaciones son los "remolinos mortales", cuando el viento hace que la embarcación se incline hacia un lado, arrastrando la vela mayor por el agua, o los "wipeouts", que son olas gigantes que engullen completamente a la embarcación. Son fenómenos muy peligrosos, que pueden hacer que la tripulación caiga al agua o, en el peor de los casos, que la embarcación vuelque.

“Los barcos de la VOR están funcionando realmente bien”, afirma Touber. “Algunos han sufrido wipeouts en esta regata, pero la mayoría no. Hay dos factores que influyen en ello: la experiencia y las ganas de asumir riesgos. Algunos equipos cuentan con amplia experiencia, pero van más allá del límite.

Es decisión del equipo y del patrón cuánto riesgo se quiere asumir para tratar de ganar la regata.”

“Robeco puede enorgullecerse del Team Brunel, ya que han encontrado un buen equilibrio. No han tenido ningún problema, salvo algunas cuestiones menores de mantenimiento, pero es que no han hecho nada que ponga en peligro a la tripulación, cosa que se ajusta muy bien al perfil de su patrocinador.”

‘La clave es la gestión de riesgos: tenemos recambios, planes de contingencia y todo tipo de sistemas para reducir riesgos’

El astillero de ItajaĂ­ (Brasil)

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VOLVO OCEAN RACE Hechos y cifras – Ésta es la duodécima edición de la regata y la quinta bajo el nombre "Volvo Ocean Race" – Países Bajos y Suecia (país de origen de Volvo) ostentan el mejor historial de la regata en términos de número de equipos y regatistas participantes – En esta edición toman parte siete equipos, incluido el primer equipo íntegramente femenino (de Suecia) en más de diez años – Cada embarcación cuenta con ocho tripulantes y un reportero de a bordo – Los patrocinadores de la regata y los distintos equipos invitarán a unos 22.000 huéspedes corporativos a las distintas escalas y a otros eventos de cortesía – Se calcula que el público televisivo será de 1.650 millones de personas, a la par con las Olimpiadas o el Mundial de Fútbol Los equipos de la competición son: – Países Bajos: Team Brunel – Abu Dhabi: Abu Dhabi Ocean Racing – China: Dongfeng Race Team – Suecia: Team SCA (íntegramente femenino) – América/Turquía: Team Alvimedica – España: Team España – Dinamarca: Team Vestas Wind Otros patrocinadores del Team Brunel son: – Brunel: gestión de proyectos, transferencia de personal y asesoría – Schouten Global: formación y desarrollo – Moduleo IVC: suelos de vinilo de alta calidad – Patrocinadores secundarios: Gaastra (equipación); Ernst & Young (contabilidad) 14 |

‘Nuestra cartera no es temática, ni se atiene demasiado a factores macroeconómicos’ Boston

ENCONTRANDO LAS CRESTAS DE LAS OLAS EN RENTA VARIABLE Chris Hart Se dice que, cuando la marea sube, suben todos los barcos, pero según Chris Hart, el secreto de la gestión activa de su categoría de fondos consiste en encontrar la cresta de cada ola.

Su fondo Global Premium Equities busca empresas que reúnan tres características (o "círculos") clave: valoraciones atractivas, fundamentales sólidos y buen momentum. Cuando detecta en su "radar" una empresa que reúne estos tres "círculos", estudia si invertir en ella.

Así, puede construir una cartera basada puramente en empresas idóneas, en lugar de limitarse a hacer lo mismo que el resto del mercado. Afirma que, en general, las acciones se han beneficiado de la flexibilización cuantitativa practicada en los mercados occidentales, pero el reto sigue siendo aislar a las empresas que son capaces de destacarse del resto.

“Al final, esto trata de valores concretos”, afirma Hart, desde su despacho en Boston. “Nuestra cartera no es temática, ni se atiene demasiado a factores macroeconómicos. La cartera se construye acción por acción, individualmente, bajo el prisma de los tres círculos, de modo que su posicionamiento es fruto del análisis ascendente (bottom-up).”

“Es similar a navegar posicionándose para aprovechar la cresta de la próxima ola. Se trata de una serie de decisiones tácticas, particulares de cada valor, destinadas a lograr una cartera firmemente sustentada en los tres círculos que nos permita llegar a la línea de meta.”

La búsqueda del crecimiento en los beneficios “Lo primero que miramos es que la acción no sea cara; después nos fijamos en los fundamentales y en el crecimiento de los beneficios. No nos sentamos y decimos ‘vamos a comprar tecnológicas, o industriales’, o ‘vamos a invertir en Europa o en Japón’. Si nos gusta una empresa de energía, vemos cuál de las que ya tenemos nos resulta menos atractiva y, si resulta adecuado, la vendemos.”

Las operaciones que realiza en su cartera suelen derivarse del hecho de que una empresa adquiera o pierda una o varias de las características reflejadas en los tres círculos, pero la decisión de vender depende de distintas variables. “La mitad superior de la cartera suele mantenerse estática, ya que se trata de valores que reúnen plenamente los tres círculos y presentan sólidas ganancias y valoraciones favorables y estables, mientras que la mitad inferior está formada por empresas cuyas valoraciones se encuentran más saturadas y tenemos que

venderlas. Suelen ser acciones cuyo perfil riesgo/ rentabilidad impone que sean objeto de venta.”

Cambiar el rumbo cuando varían las corrientes subyacentes ha favorecido a esta cartera. “El éxito que hemos tenido este año comenzó en realidad el año pasado, cuando reposicionamos el fondo apartándolo de las empresas estadounidenses de gran capitalización y orientándolo a entidades europeas y asiáticas de capitalización media”, afirma. “El cambio más importante que se introdujo fue la reducción de nuestra exposición al sector de salud, debido a que la evolución de las empresas de servicios de atención sanitaria de Estados Unidos pasó a asemejarse bastante a la del sector de bienes de consumo básico, compuesto por empresas bastante estables y de gran calidad, pero con una valoración elevada.”

“Por ello, redujimos la exposición de la cartera al sector de la salud del 20% al 11%, dispersando el capital resultante fuera de EE.UU., en Europa, Reino Unido y – lo que resultó más interesante – Asia, que ha ofrecido una buena rentabilidad en los últimos dos meses. Así, actualmente somos mucho más eurocéntricos que en todo el año anterior, aproximadamente.”

El tamaño importa Es importante también escoger el peso adecuado

para cada posición: si inviertes demasiado, el fondo se expone a un riesgo importante en caso de que la empresa no alcance sus objetivos de beneficios. “El arte de la gestión de carteras se basa en ponderar el tamaño y el posicionamiento”, sentencia Hart. “Al final, se trata del grado de apoyo de las valoraciones y del grado de discrepancia de las valoraciones en cada inversión concreta. Así, la cuestión es cuanta confianza tenemos en los fundamentales de la empresa.” ¿Y qué nubes de tormenta se divisan en el horizonte? Hart no presta mucha atención a los factores macroeconómicos, pero es cierto que estos pueden afectar al conjunto del mercado.

“Intentamos encontrar los nichos en los que exista discrepancia en las valoraciones, y las empresas europeas de gran capitalización reflejan la mejoría de los beneficios que se deriva de la QE, pero no hemos observado mejoría fundamental alguna en los beneficios subyacentes que justifiquen sus valoraciones.”

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