Existe preocupación en la comunidad de la UACH y en la local, por la gestión del actual gobierno universitario. Se han presentado situaciones en el área de la gestión económica y administrativa, que pueden ser consideradas como falta de probidad y nepotismo que deben ser investigadas para su corrección, en especial teniendo en cuenta que un 63% del presupuesto de la Universidad es de origen público. Los antecedentes que se expondrán provienen de información recogida de académicos, funcionarios, ex estudiantes e incluso de personas externas a la UACH, que se muestran preocupados por la marcha de una institución de educación superior fundamental en la sobrevivencia y desarrollo del sur de Chile y se orientan a obtener una administración responsable y transparente. Existe mucha preocupación que estos antecedentes se canalicen por la vía pública, por los sindicatos y los estudiantes en cuyo caso el impacto político, económico y de imagen de la UACh sería potente, pudiendo arriesgar perder el financiamiento público en caso que tuviera que intervenir la Contraloría General de la República. Queremos contribuir al cuidado de la comunidad de la UACh sobre todo, considerando la regulación de la educación superior establecida en la Ley 20.129, que establece que las universidades: “Deben contemplar políticas de desarrollo y objetivos estratégicos, y la existencia de una estructura organizacional e instancias de toma de decisiones adecuadas para el cumplimiento de los fines institucionales”.
A. VICERRECTORÍA DE GESTIÓN ECONÓMICA Y ADMINISTRATIVA
La unidad responsable de cautelar el adecuado funcionamiento de las finanzas en la Universidad, según los reglamentos vigentes, resulta hoy cuestionable por las siguientes razones:
1. Capacidad administrativa. 1.1. El actual Vicerrector de Gestión Económica y Administrativa cuenta con tres asesores para la realización de las funciones propias de su cargo. Además del funcionario que se encontraba contratado antes de que asumiera como Vicerrector, una vez iniciada su gestión, incorporó a dos asesores adicionales, con remuneraciones brutas de $2.742.831 y $ 2.684.000, que son equivalentes a la remuneración de un profesor categoría uno. Entre