medieval, la bella ciudad de Tours, situada en el corazón del Loira, enseña hacia el centro la fascinante catedral de Saint Gatien, una maravilla del arte gótico. A alturas del camino hacia Potiers nos topamos con algunos bicigrinos (peregrinos en bicicleta). Era regocijante y agradable poder compartir experiencias e identificarnos por el mismo sueño de llegar a Santiago… Y sin importar su idioma, se repetía el infaltable “Buen Camino”.
Rumbo a España En nuestro tramo final por Francia, sobre
Por medio de espigas eléctricas se genera parte de la energía de estos países aprovechando la fuerza del viento… energía verde.
la frontera con el País Vasco, se llega a la región de Aquitania, donde tras el aroma de un Cabernet Sauvignon o, por qué no, un Malbec, llegamos a la Capital del
A la salida de Chantilly las señales nos mostraban que ya estábamos a unos cuantos kilómetros de París, una de las ciudades más bellas del mundo.
Vino, la increíble ciudad de Bordeaux, región bañada por los más grandes viñedos del mundo. En nuestro recorrido encontramos destacados monumentos, entre ellos la Puerta de la Grosse-Cloche, la Puerta de Bourgogne y su imponente catedral. Por un recorrido de interminables hectáreas de bosques destinadas a la producción de madera pedaleamos entre las poblaciones de Hostens y Dax, camino que nos condujo a los pirineos, región montañosa que sirve
del Camino Francés, la ruta predilecta por los peregrinos del ca-
de frontera entre Francia y España.
mino de Santiago. Nuestro siguiente paso sería reclamar el pasa-
Después de dos semanas de atravesar
porte que nos acreditaría como peregrinos, para así disponernos
el inolvidable país de Francia llegamos a
a realizar una de las más interesantes y duras jornadas: el paso de
Saint Jean Pied de Port, punto de partida
los Pirineos del Atlántico hacia Roncesvalles, ya en España.
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