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LIFESTYLE: ARQUITECTURA
Paola Moure:
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Desde m+ dirige su estudio de arquitectura y diseño, de carácter multidisciplinar y en donde colaboran: ingenieros, paisajistas, artistas y diseñadores para la ejecución de proyectos y obras.

Paola es arquitecta por la Universidad Nacional de Asunción con posgrado en intervención en el patrimonio construido, diseño aplicado y gestión. Es además docente y miembro fundador de diversos grupos de difusión de arte y cultura.
Muchas de sus obras fueron publicadas en medios nacionales e internacionales, mereciendo su trabajo distinciones y reconocimientos. Aquí, nos permite conocer más acerca de su pasión y de su aguda visión a través de la arquitectura.
¿Por qué apasiona la arquitectura? Ver cómo podemos cambiar la vida de la gente a partir de lo que hacemos es una experiencia que te marca profundamente.
Descubrí que todo depende de cómo interpretamos las características del lugar y las condiciones del encargo. Es allí donde reside la oportunidad de “aportar algo más” al proyecto que nos solicitan… y es en esa mirada, en la traducción de las ideas guiadas por la intuición, donde reside la clave. Poder trabajar desde este lugar, haciendo lo que me gusta, es un privilegio.
¿Cómo definirías tu filosofía o premisa en la profesión? Encontré que, para mí, la arquitectura es una forma de vida.
Desde el punto de vista ideológico, puedo asegurarte que ver la vida a través de los ojos de la arquitectura es sumamente estimulante, ya que hace que nuestro cerebro esté siempre atento, observando lo que funciona y transformando lo que no… Es una profesión que nos obliga a sacar lo mejor con mucha creatividad, a leer entre líneas los pedidos, a empatizar con la gente y a entender sus sueños para poder traducirlos a un espacio…
Desde la práctica, en el estudio promovemos un trabajo de calidad desde todas las escalas, así que a la
“inspiración” le sumamos esfuerzo, perseverancia y mucha autocrítica.
Y como nada de esto se consigue caminando sola, la clave está en el equipo que empuja el carro y aporta su cuota de conocimiento, juventud y entusiasmo: Fabiola, Marianna, Miguel, Carlos, Gretta, Paula, Romina, Dahiana y Belún, son, según el lugar que les toca, los pilares y el corazón de m+. A ellos y a todos los que les precedieron, y que han colaborado conmigo a lo largo de estos años, les debo los logros del estudio. ¿A quiénes admiras o te inspiran con sus obras arquitectónicas? Miro con mucha atención la producción de mis colegas. Valoro el coraje con el que experimentan nuevas alternativas de materialidad, así como la creatividad con la que sortean las limitaciones y resuelven los problemas, demostrando mucho esfuerzo y reflexión en las propuestas. Por supuesto que también me inspiran las grandes obras de arquitectura, y como de mi padre heredé el amor a los viajes, estos siempre fueron asumidos como un peregrinaje en busca de esas obras, como una oportunidad de aprendizaje y de descubrimiento.

¿Tenés algunos materiales con los que te guste más trabajar hoy? ¿Por qué? Me gusta mucho el ladrillo artesanal porque tiene la capacidad de contar la historia de quién lo hizo, y según la textura puede decirnos de dónde viene… es el elemento más económico con el que contamos y, sin embargo, es capaz de trascender a piezas sumamente complejas. Por último, supongo que lo que más me gusta de él es la honestidad con la que envejece.
El hormigón también es muy importante para nosotros porque no solo es sostén, sino que aporta materialidad y carácter según sea el planteamiento estructural de la obra, también el vidrio, el metal, la madera y la piedra… nos gusta decir que usamos también la luz, la sombra y los reflejos, que aportan a las obras una atmósfera particular. Pero en concreto siempre elegimos los materiales de acuerdo con el tipo de proyecto que tenemos que hacer, valorando su aportación a la especificidad de la obra en la que estamos trabajando. ¿Cómo describirías la importancia de la arquitectura en estos tiempos? La arquitectura siempre ha sido importante en la vida de las personas por la capacidad de ser cobijo, de generar ciudad y de expresar los ideales de las diferentes épocas, además de reflejar el pulso de su tiempo traducido en obras… basta solo recordar a las grandes pirámides, los templos griegos o las catedrales.
Cada época tiene su impronta, y pienso que hoy tenemos que aprender a dar el giro necesario para adaptar nuestros proyectos a una manera sustentable de construir, con modelos más responsables, respecto al impacto y a la huella de carbono que generan nuestros edificios.
Transformar nuestras ciudades a través de la recalificación del espacio público y el mejoramiento de la calidad del transporte, con mecanismos alternativos y menos contaminantes, es también algo urgente.

Un anhelo profesional que te gustaría cumplir o un sueño arquitectónico para la ciudad o el país.
…Sueño con tener una ciudad con espacios públicos de calidad para todos, ya que es ahí donde nos encontramos y nos reconocemos como ciudadanos que somos, y en este momento Asunción deja mucho que desear.
…Quiero una ciudad en la que tengamos una calle o una plaza donde salir a caminar y sentirnos seguros, empezando por las veredas y terminando con la violencia.
…Quiero recorrer una costanera que nos recuerde nuestra profunda relación con el agua, por más que seamos mediterráneos. Un servicio de transporte público eficiente, que entienda que primero está la gente.
Quiero más aroma a jazmín, y menos suciedad… también una sociedad más comprometida, y para esto debemos empezar a invertir en educación. Necesitamos volver a creer y volver a motivarnos. Pienso que si cada uno aporta lo mejor desde el lugar que le toca, entre todos, este sueño es posible.
Para los futuros arquitectos que todavía están en la universidad. Me gustaría decirles a los jóvenes, futuros arquitectos que todavía están en la universidad, que se mantengan flexibles… que se vuelvan a enamorar de los libros de cualquier tipo, porque la literatura tiene la capacidad de mantener encendida nuestra imaginación. Les recomendaría leer sobre filosofía, porque hay preguntas que necesitan respuestas. En tiempos de pospandemia y sumando a todo el caos, esta nueva guerra absurda… preguntarnos sobre el sentido de la vida y saber hacia dónde queremos llevar el futuro, merece respuestas urgentes. Y les diría que luchar para cambiar el mundo sigue siendo un buen plan, y utilizar la arquitectura como medio, es una de las maneras más nobles que conozco.


