cambio hoy va en disminución como una consecuencia más del boom de colegios particulares y subvencionados. “Lo sorprendente es que fue un liceo esplendoroso con más de 1200 matrículas, actualmente hay menos de 300. El proceso de desmantelación de lo público es evidente y los alumnos están conscientes de lo discriminados que son socialmente. En Hualqui hay un liceo y es municipal, por lo que tiene muchas matrículas”, manifestó Paulo. Apropósito de los beneficios que conlleva hacer teatro, “la protagonista de la obra del año pasado terminó siendo la presidenta del centro de alumnos de su liceo, otro chico que era discriminado y carecía de habilidades comunicativas, hoy sociabiliza súper
bien y dejó de lado de la timidez. En Ronda trabajamos la confianza en ellos, que crean en sí mismos, en sus capacidades y en lo que pueden lograr”, comentó Rodrigo, orgulloso de sus alumnos y del trabajo en equipo que han llevado a cabo. Proyectos como Ronda nos invitan a pensar desde lo social en pro del bien común. Las pequeñas transformaciones locales serán el fruto de una sociedad más equitativa, tolerante, respetuosa y menos segregada. Revisa más sobre este proyecto en: FB/ Ronda, Formación en Artes Escénicas