E
l Tambopata es un río que pertenece a la cuenca del Amazonas. Nace por encima de los 3,900 msnm en los nevados que dominan el altiplano peruano y boliviano, y llega a la desembocadura del río Madre de Dios, por debajo de los 500 msnm. Mientras que la selva de altura se convierte en la selva amazónica baja, el río Tambopata -de aguas blancas- pasa a ser un río tranquilo, ancho y sinuoso con una longitud total de 402 kilómetros. Viajamos en balsa por el corazón de la selva amazónica primaria, con la mayor biodiversidad del mundo, sin contacto alguno con la civilización. Presenciamos la línea divisoria de las cumbres andinas y la selva tropical, y admiramos desde las llamas y alpacas en las tierras altas, hasta los miles de coloridos guacamayos en la selva baja. Una de las formas más increíbles de conocer este río es navegándolo en balsas inlables y en káyak, atravesando la selva virgen, la selva viva, observando todas las maravillas que la naturaleza de la zona tiene para que uno la pueda disfrutar. Este es un viaje que dura aproximadamente diez días, un viaje único y digno de ser repetido varias veces. LA EXPEDICIÓN
Desde muy temprano por la mañana hicimos todos los preparativos de las cosas que íbamos a llevar al viaje, mientras iban llegando el resto de los integrantes de la expedición. Salimos desde el Cusco rumbo al sur, pasando por el valle del Vilcanota y por muchas comunidades locales muy pintorescas, mientras llegamos hasta La Raya, el paso más alto de este trayecto y límite entre Cusco y Puno, a 4,338 msnm, para llegar por la noche a la ciudad de Juliaca donde pernoctamos.