El año agoniza. Vaya pinche año.
Mientras todo el mundo se cae a pedazos entre desastres, pandemia, elecciones gringas, y demás, este can llega a su edición cincuenta. Semejante encrucijada durante estos cuatro años; toda esta gran colección de autores y obras que hemos compilado, se queda registrada para siempre en la web. Jamás se perderá en el olvido.
Alguna vez leí que las revistas literarias son acervo cultural, registro de su tiempo; y vaya que Perro Negro de la Calle ha vivido tiempos violentos y tumultuosos; estos cincuenta números (de evolución y mejora constante), sirven de registro, de bitácora, de prueba de que el arte continuó, y que nada ni nadie pudo detenerlo, ni siquiera la tan odiada pandemia exasperante.
Pues bien, lector, he aquí la quincuagésima edición de tu perro callejero favorito, de tu revista literaria favorita. Sé parte de esta historia, como todos los que hemos dejado el alma y espíritu en estas hojas digitales a lo largo de su vida.
Amaury R. Ledesma