ROSAS

RO SAS “Abro la rosa de amor de mi corazón, para el tuyo”

ha dado al hombre,

es

Luz que alumbra lo mรกs profundo de su

Ser Prov.

20-27

Mirari: Maravillarse, admirarse o contemplar con admiracion o asombro los detalles que con amor nos regala Dios.

MARTHA ROSA VIDAL BAUTE Autor TALLER LA FÁBRICA - BEATRIZ POLO info@tallerlafabrica.com Diseño & Diagramación

RO SAS

Índice De Oruga a Mariposa de Amor Rosa a Jesús Confiar en Ti Rosa al Amanecer Carta a Jesús Herencia de Amor Rosa de Fe Rosa de Alabanza Rosa del Corazón de una Madre Rosa del Sol y la Luna Rosa de Felicidad Rosa de Paz Rosa de Admiración Rosa a María Rosa de Confianza Rosa de Ternura Rosa de Contrastes Mi Padre Cariñoso Rosa para el Alma

13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31

Rosa de Luz Rosa para Amar Rosa de la Mañana Rosa de Agradecimiento Rosa de Dulzura Rosa de Amor Rosa de Retos Rosa de Esperanza Rosa de Humildad Rosa de Pureza Rosa al Padre Nuestro Rosa de Fidelidad Bienaventuranzas a María Santísima Rosa al Comenzar el Día Rosa para terminar el día de la mano de María Carta a Jesús Salvavidas de Amor Rosa de Perdón Rosa de Sabiduría Contigo María Rosa de Fortaleza Poesía para Dios Rosa de Protección Rosa al Andar Escudo de Amor Ven a Mi

32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57

ยกUsa tu tiempo para conquistar el cielo!

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Cuando la oruga se vuelve una mariposa de Amor...

Desde hace algunos años un pequeño capullo aleteaba en mi mente y en mi corazón, y si hoy tienes este libro en tus manos, es porque Dios ha querido que esa oruga sea mariposa en esta pequeña rosa de amor de mi corazón, para el tuyo. Es mi forma de compartir contigo el regalo más hermoso que me han dado jamás; y que siendo yo solo un instrumento, quiero acercarte al ser más maravilloso, al que siempre estará a tu lado, al que no siente envidia, ni celos, ni odios, a ese AMADO que todos los días te quiere conocer más, y amar más. Él quiere acompañarte y volar contigo Ser tus ojos, tus oídos, tu luz, y todo el amor de tu corazón. Él quiere que te enamores de ¡Él sin medida!

Este hermoso sendero lo emprendí de la mano de María, la más dulce, amable y admirable hija de Dios. Y es con ella y en ella que caminaremos juntos.

En esta pequeña rosa que tienes en tus manos quise plasmar algunas oraciones que te iluminen en momentos de oscuridad, que te acompañen en momentos de soledad, que te hagan sonreir en momentos de felicidad.

Para que en cada acontecer de tu vida puedas sentir el amor de Dios; aún en los momentos más difíciles, en medio del desierto, un oasis de amor abraza tu vida.

Espero que tu imaginación te lleve a lugares inigualables, llenos de paz; que tu corazón arda al reconocer el amor y reconocerte amada...

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De Jesús con Amor Mi pequeña, “ Yo seré un Padre para ustedes, y ustedes serán mis hijos y mis hijas, dice el Señor Todopoderoso”

Segunda de C or 6, 18 Mi preciosa hija, yo soy tu Padre quien te creó, te cuida y protege todos los días de tu vida. Me deleito en ti cuando sonríes, cuando me abres tu corazón en la oración y extiendes tus manos generosas para servir, cuando te admiras con cada detalle con que adorno el cielo para ti. Eres la niña de mis ojos, la más consentida, la princesa de mis días.

Fija tus ojos en el cielo, y tráete de aquí arriba todo lo que necesitas para tu vida, para alimentar tus días; la fuerza en la batalla, la esperanza en la desolación, la bondad que venza el mal, la caridad y el amor. Recuerda: “Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo” y quiero alimentarte para que des frutos de vida y santidad.

No te sientas sola, Yo estoy contigo, en ti. Yo soy tu luz y tu fuerza. ¡Nunca te dejaré, jamás te abandonaré! Aunque intentes escaparte de mí, no lo permitiré, porque te quiero desde siempre y por siempre. Yo estoy en la puerta de tu corazón esperando por ti.

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Porque yo

EL SEÑOR

SOY TU DIOS Quien te sostiene de tu mano derecha

Y TE DICE: NO TEMAS

YO TE AYUDO Is 41-13

15

Rosa al Amanecer Amanece, el sol se oculta entre las estrellas de la noche.

El cielo se cubre de nubarrones; Las montañas se dibujan con suaves líneas irregulares, Los pájaros cantan desde sus nidos.

La mañana es fría; y yo, desde la ventana cierro los ojos y me dejo abrazar por Dios. Me entrego confiada a su voluntad.

Le entrego el frío que siente mi cuerpo, las expectativas del nuevo día, y mi vida, toda mi vida para que su ternura y amor, me acompañen a lo largo del día.

16

Rosa a Jesús No sé como comenzar.

No sé que decir, como hablarle, como contarle de mí.

Por eso, acudo a Ella, a Tu hermosa madre para que me cuente de Ti, y para que te cuente de mí.

De mis alegrías, de mis sueños, de mis frustaciones y por qué no, de mis tristezas. ¿A quién más sino a Ti se las voy a contar? ¿Qué otro las escuchará con aquel atento corazón y estará pronto a secar mis lágrimas?

Solo Tú estarás ahí para no dejarme caer; solo Tú me tenderás Tu mano con dulzura y sin reproches. ¡Aquí estoy! Con ella de la mano, para que sea Ella quien te hable de mí. ¡Aquí estoy! Con una gran sed de Ti. ¡Aquí estoy! Con ganas de conocerte más, de amarte más y más. Me pongo en Tus manos y así confiado en Ti, descanso.

17

Herencia de Amor orque eres un ser maravilloso, eres hija de Dios; heredera del Universo, del cielo y su inmensidad, de la tierra con toda su majestad, los mares, la selva y el desierto. No hay nada mรกs importante en la vida que ese sentirse amada por Dios, hija de Dios. Tu herencia es... EL AMOR.

18

RESPLANDECER

Rosa de Fé 19

Rosa de Alabanza Alaba alma mía al Señor, ¡Alábalo todos los días de mi vida! ¡Alábalo incluso, cuando esté dormida!

20

Corazón de Mamá En una tarde tranquila, mientras veo a mi hijo jugar, bailar y cantar al son de una canción infantil... Su inocencia y ternura se asoman a mi corazón y lo estremecen; la brisa suave me acaricia, me hace sentir cómo desde el cielo me rodeas con tus brazos y me susurras al oído un hermoso “Te Amo”... Mi corazón que late fuerte se detiene por un instante y te agradece...

Levanto mi mirada al cielo para sonreirte y una vez más me dejo admirar por tu amor, al ver como las nubes forman para mí un hermoso y perfecto corazón.

21

Rosa del Sol y la Luna

La Danza del Sol y la Luna.

Arriba, muy en lo alto, cual dueños del universo, el Sol y la Luna se asoman a la tierra para contemplarnos... ¿Acaso nos envidian? ¿Acaso quisieran bajar del cielo y ser hombres por un día?

- Si yo fuera luna acariciaría a todas las estrellas y brillaría desde lo alto.

- Si yo fuese sol viviría danzando en el cielo, irradiando alegría.

- Tú humano, ¿nos envidias?

Si yo fuese humano dejaría de soñar con danzar en las nubes y convertiría mi vida en una sinfonía de luz, color y alegría, brindando amor a todo aquel que me encuentre en el día, alabando a Dios y pidiendo Su Gracia en mi vida.

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Rosa de Felicidad La felicidad esta en mí... Allí donde sólo mi corazón puede verla, allí donde a solas me encuentro con Dios.

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Rosa de Paz Hoy es uno de esos dĂ­as en los que solo con cerrar los ojos, con sonreir, solo con respirar puedo sentirte, contemplarte, amarte!!

24

Rosa de Admiración Me dejo admirar por Ti. Te contemplo en cada “pequeño” detalle que con delicadeza y dulzura pones en este mundo para mí. El sol, una flor, un amanecer, la nostalgía del atardecer.

Cada cosa hecha por Ti es un adorno para mi existir.

Me dejo admirar por Ti, mi alegría, mi dulce compañía, la ternura que abraza mi vida.

25

Rosa a María De tu mano madre mía quiero descubrir a Cristo en cada amanecer.

Ver su rostro en mi hermano, encontrar su sonrisa en el amigo, su caricia en la suave brisa y su bendición en cada “pequeño” gran milagro de mi vida.

26

?

Rosa de Confianza

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Rosa de ternura ¡Y sigo siendo niña!

La vida me ha enseñado que debemos cultivar ese niño que llevamos dentro, porque ese pequeño custodia nuestros sueños...

La infancia es un tesoro, la risa una canción.

Sueño con algún día alcanzar una estrella, con volar alto muy alto, sentirme libre y parte del cielo; con una noche morder la luna de queso, con ser aire, brisa y silencio.

Mi niño consentido, al que cuido y alimento, mi pequeño ángel que custodia mis sueños.

28

Contrastes Dicen que las olas que vienen y van nunca son las mismas.

Que lo que se fue nunca regresa.

Que las mariposas solo viven un día.

Existe en el mundo un contraste de tristeza y alegría.

Y así se va yendo la vida... Día a día te sientes llena, vacía, olvidada, querida. Es un camino que es mejor recorrer de la mano de María, porque ella nos alcanza las virtudes de la fe, la esperanza y la alegría.

29

Mi Padre Cariñoso

“Como un padre carinoso con sus hijos, asi es carinoso el Senor con sus fieles” Sal 103, 13

Como el amor de una madre, que desde las entrañas irradia ternura por su hijo, que con paciencia soporta y perdona, que con dulzura enseña, construye, crea sueños e ilusiones; que con delicadeza abraza cada momento y lo guarda en su corazón. Con ese amor que permanece siempre, así me ama el Señor.

30

Rosa para el Alma Mi niña, mira tu alma Mírate adentro...

Te sorprenderás de verte tan llena...

De verte tan radiante, ahí en lo escondido, ahí donde nadie mas te vé, ahí estoy Yo, quien te sonrie, te bendice y te acaricia.

31

Rosa de Luz

32

Rosa para Amar El amor es una fuente innagotable de vida, de sonrisas, de caricias.

El amor es magia, dulzura, risa.

El amor todo lo vence, todo lo puede, todo lo perdona.

Ama sin medida, ama desde el fondo y hasta el fin de los dĂ­as.

33

Rosa de la Mañana Dios mío, en esta mañana quiero pedirte un corazón dócil, para aceptartar con humildad mis debilidades y flaquezas, para acoger con amor a todos los que me rodean, para ser luz en la oscuridad y calma en latempestad. Regálame un corazón humilde como el de María, para que todos mis actos y pensamientos sean para glorificarte y servirte.

Amén.

34

Destello de Amor Hoy quiero agradecer Tu amor, Tu presencia real, viva y presente en mi vida. Caminas a mi lado; tus manos fuertes me levantan cuando tropiezo, tus brazos que me cargan con fuerza hasta que logro recuperarme y me abandono confiado en tu amor para seguir.

Esas mis pocas fuerzas vienen de Ti, de Tu cruz. Tu mirada dulce, Tu voz suave que me arrulla y me calma en momentos de angustia. Tus labios que suavemente besan mi frente al despertarme, y me cuentan hermosas historias antes de acostarme. Gracias Señor.

Solo quiero pedirte que todos los días de mi vida prosperes mi fe, para que yo te pueda conocer, para que a través de mí, otros te puedan reconocer.

Amén.

35

Dulce Rosa

“Tus labios son un panal de miel “ Cantar de los cantares 4,11

Así quiero ser para ti, mi amado, dulce y suave; con un corazón agradable y dispuesto siempre a tu encuentro. Como una abeja que trabaja incansablemente por tu reino, dándole a los demás un poco de la dulzura del amor que tú me das.

36

Lm 3, 22-13 37

Rosa de Valentia Acepta los planes de Dios para tí con fe y alegría; así como María, que entregó su amor y valentía.

38

Rosa de Esperanza “En los días de felicidad, sé feliz; en los días malos, reflexiona. Unos y otros los ha hecho Dios, para que el hombre no pueda adivinar lo que le espera”

Ecle 6, 14

39

Rosa de Humildad La grandeza de tu alma no se medirĂĄ por lo que hayas acumulado en la tierra, se medirĂĄ por todas las veces que le diste paso a JesĂşs para que otros lo vieran en Ti.

40

Jesus ES EL

QUE NUESTRA ALMA

Rosa de Pureza 41

Rosa del Padre Nuestro ¡Mi dulce Jesús!

Yo quiero pedirte desde lo profundo de mi corazón que me enseñes a confiar en Ti. Tú que estás en los cielos, enséñame a pedir que “venga a nosotros Tu reino”, que se haga siempre Tu voluntad y no la mía, y que no nos falte el pan de cada día.

Dame la humildad que mi corazón necesita para perdonar a los que me ofenden; y la fortaleza para vencer la tentación antes de caer en ella. Mi dulce maestro, cúbreme con tu manto de todo mal y peligro.

Amén.

42

Rosa de Fidelidad “Yo confío en Ti, Señor, yo te digo: ¡Tú eres mi Dios!, mi destino está en Tus manos”

Sal 31, 15

43

Bienaventuranzas a María Santísima Bienaventurados los que creen en el corazón inmaculado de María, porque de él brotarán ríos de amor y alegría.

Dichosos los que buscan a Jesús de la mano de María, porque su camino es corto y en dulce compañía.

Bienaventurados aquellos que a pesar de los golpes de la vida, permanecen alegres y confiados, porque sus tristezas las consuela María y sus heridas las sana Jesús.

44

Rosa al Comenzar el Día Un nuevo comienzo cada día.

Un dulce despertar en el mar de nuestras vidas.

Confiando en las promesas de Dios, nuestras fuerzas se renuevan para ser consumidas durante las aventuras del día.

En el mar de la vida... Con días calmados de aguas cristalinas; otros de tormenta y unos de alegría. El mar en el que nos pasamos la vida, esperando tocar puerto para abrazarte algún día.

45

Rosa para Finalizar el Día Virgen María, madre admirable, a ti entrego esas peticiones que guarda mi corazón. En tus manos pongo todo lo que necesito, lo que anhelo, todo eso que estoy pidiendo, para que Tú que si eres digna de ver a tu hijo, de hablarle, la del inmaculado corazón, se las entregues.

Háblale de mi, dile cuanto lo necesito, háblale con dulzura de mis sueños, de mis tristezas, de mis miedos.

Y así con la certeza de haber sido escuchada, con el corazón llenito de amor, con la maleta vacía de preocupaciones y cargas del día, me despido, diciendo: Padre nuestro que estas en lel cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.

Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal, Amén.

46

Carta a Jesús Señor Jesús: Creo firmemente que estas aquí; creo que tu presencia me acompaña en todo momento, tengo la certeza de que tu amadísima madre siempre me cubre con su manto y te cuenta al oído dulces historias de mí. Te pide por mi vida y mis necesidades; siento el aleteo galante del Espíritu Santo, que como hermosa canción me llena de alegría el corazón.

Por eso te entrego este día, que hoy comienza con sus horas, minutos y segundos, con sus altos y bajos, con sus alegrías y tristezas. Todo Señor Jesús lo pongo a tus pies, con la certeza que cada vivencia será parte de tu plan divino de salvación en mi vida.

Gloria al Padre Creador Gloria al Hijo Redentor Gloria al Espíritu Santo, santificador.

Amén.

47

Salvavidas de Amor Señor, Tú me rescatas porque me amas.

Porque sabes que soy frágil.

Que si no vienes en mi auxilio y renuevas mis fuerzas, me pierdo, ¡me pierdes!

Me rescastas con ríos de dulce amor, le das vuelcos a mi corazón.

Me abrazas con tus brazos de ternura y amor. ¡Es tan grande tu amor! por eso alma mía, alaba al Señor.

Dale gracias todos los días porque es eterna su misericordia y su amor.

Amén.

48

Rosa de Perdón Dios no guarda rencor.

Su misericordia y perdón son como las olas que tocan las playas, borran lo que esta grabado en ellas y renuevan la arena. De eso que perdonó el Señor, no queda huella.

49

Rosa de Oro 50

Contigo María Mi Dios, de la mano de María, te pido me lleves a recorrer los caminos de este mundo. Contigo María, como fiel soldado. Sé tú la luz que llega con el día; ven y guía mis pasos todos los días de mi vida.

51

Bendición del Hogar Señor bendice este hogar como la casita de Nazareth: con Jesús, María y José cuidando siempre de él.

52

Poesía para Dios ¡Y así, descubrí en Ti, el verdadero amor! ¡Y así, llenaste mi mundo de vida y de ilusión!

53

Yo el Señor,te escudo te habito

te amo ,

Yo estaré por siempre

Rosa de Protección 54

Tempo “Todo tiene su momento y cada cosa su tiempo bajo cielo.

Tiempo para nacer y tiempo para morir.

Tiempo para llorar y tiempo para reir.

Tiempo para odiar y tiempo para AMAR�

Ecl 3: 1,2,4,8

55

Rosa al Andar Que curiosos son tus caminos mi Dios. Tan llenos de silencios y no siempre tan calmados. Con giros inesperados.

Siempre siempre, van cambiando.

Nos sorprendes con cada amanecer, nos arrullas con cada anochecer.

Te escondes, te encontramos; Nos llamas y no siempre te escuchamos. SeĂąalas un camino y nosotros lo cambiamos.

Pero TĂş no te cansas de buscarnos.

56

Escudo de Amor Bajo tu sombra me guardo.

Bajo tus alas me escondo.

Con tu sonrisa mi alma vibra, tu mirada me cuida.

Bajo tu amparo me escudo y sĂłlo ahĂ­ me siento segura.

57

Ven a Mí Ven Jesús, pasa por mi vida.

Ven, llámame... Mándame ir a Ti. Ven, encuéntrate conmigo.

Deja que tu amor sane mi corazón. ¡Barro en tus manos soy.

Ven, quédate en mi vida y renúevame cada día!

58

Amor Incondicional “El amor es paciente y bondadoso; no siente envidia, ni orgullo ni arrogancia.

No se irrita ni es rencoroso; no se alegra de la injusticia, sino que encuentra su alegría en la verdad.

Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor nunca pasará”

1 Cor 13, 4-8

59

La felicidad

esta en mí

Allí

donde solo mí corazón allí donde a solas me encuentro con

Dios