ANLAKI

Volvemos a hablar con JULEN IZKUE, que acaba de sacar “Radio Tower“, un trabajo de bedroom pop que, al igual que el anterior, nos ha encantado.

No ha pasado ni un año desde la última vez que te tuvimos por aquí y ya estás de vuelta...

Ya ves… La verdad es que ya tenía este disco bastante avanzado cuando me entrevistasteis la otra vez.

Este nuevo trabajo sale con Beauty Fool Records. ¿Es tu primera experiencia con un sello?

Más o menos, publiqué el disco AFK Nights con un mini sello que tenía un colega, Meyo Records. Beauty Fool también son un sello muy pequeño pero lo hacen todo muy en serio. La edición física ha sido un jaleo por retrasos con el envío desde Reino Unido que se quedó retenido por algún rollo del Brexit, pero lo demás muy bien. Gente muy maja y que entiende perfectamente lo que hago y son del mismo rollo, que era lo jodido.

Creemos que, aunque tiene la misma filosofía que lo anterior, este disco supone un gran avance en tu música. ¿Cómo lo ves en relación con anteriores trabajos?

El anterior EP fue algo bastante más experimental y con pocas pretensiones. Para este disco lo he querido “dar todo”. Tuve la idea general muy clara desde el principio y, aunque era mucho más ambicioso que todo lo anterior, me sentía motivado, con energía y tiempo para hacerlo. La cuarentena ayudó, la verdad. Creo que es un disco que deja muy claras mis influencias e inquietudes o gustos sonoros y estéticos. Por otro, lado creo que he sacrificado algo originalidad por hacer mejores canciones que la gente quiera volver a escuchar.

Nos ha gustado mucho “Teenage loyalty”... ¿De qué habla esta canción?

Creo que ha sido un año en el que muchas amistades se han llevado un duro golpe al ser cualquier encuentro social mucho más meditado. He estado pensando mucho en eso y en como la importancia que le damos a aspectos de las relaciones como la lealtad van perdiendo fuerza conforme nos hacemos mayores. Los últimos años he estado casi rechazando esa idea idílica adolescente de la lealtad, cansado, sobre todo, del “kuadrillismo” tan típico de Iruña. Supongo que esta situación me ha hecho reflexionar al respecto y volver a darle un mínimo de importancia a ese aspecto.

Tu propuesta tiene más seguidores fuera del país. ¿Qué te dice la gente más cercana?

Eh, pues con este disco España está siendo el segundo país donde más me escuchan, seguido por EEUU, mientras que antes rondaba el undécimo. A bastantes amigos parece que les gusta, a muchos otros no sé, imagino que les causa indiferencia.

¿Te ves cantando en castellano?

Sí, algunas de las canciones viejas que tengo en Soundcloud son en castellano y en otros proyectos creo que cantaría en castellano. Bajo el nombre Anlaki no creo.

¿A qué película te gustaría poner banda sonora?

A Paterson, de Jim Jarmusch.

Tus principales influencias son bandas de fuera. ¿Qué grupos nacionales te gustan? Triangulo de Amor Bizarro, Berri Txarrak, Vulk,

Kazkezur, Yawners, Olsen Twinz, Cala vento…

Una temporada te dio por el banjo. ¿Sueles usarlo mucho o lo tienes abandonado?

Abandonadísimo. (risas) Hay un par de arreglos en el disco, pero, bueno, ahora lo tengo colgado en la pared que, al menos, a nivel estético, pues aporta algo a mi habitación.

¿Piensas hacer algo en directo?

¡Sí! Lie a un par de amigos para montar grupo y dar un concierto en Donosti el 1 de mayo. Las baterías las lanzábamos desde un ordenador pero acabamos de conseguir batería y para finales de junio tocaremos en Barcelona y Vic como banda.

¿Cuáles son tus próximos planes?

Este año trasladar el disco al directo lo mejor posible y, por otro lado, probar cosas para otros proyectos. En 2020 he estado muy centrado en componer y grabar para Anlaki, necesito hacer algo diferente.