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MENSAJE, MASAJE, PASAJE, ULTRAJE

Escribe: Víctor López García

Muchos esperábamos que Castillo no de su Mensaje Presidencial. Porque hace tiempo que debió ser vacado por el Congreso por las muchas evidencias y pruebas que existen sobre su corrupción personal, familiar y de su gobierno.

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orque las recientes declaraciones de sus ex amistades y de su ex Secretario Privado, Pacheco, dan cuenta y confirman su inmoral condi- Pción. Porque tiene nada menos que cinco denuncias de la Fiscalía por ser el jefe de una organización criminal para delinquir integrada por sus familiares, paisanos chotanos e integrantes de los partidos de las izquierdas marxistas leninistas maoístas, mariateguistas que lo sustentan.

No imaginábamos que Castillo llegue a cumplir un año de (des) gobierno por su manifiesta, explícita e inocultable inmoralidad e incapacidad para la gestión gubernamental, tal y como lo viene demostrando lamentablemente.

El Discurso

Pareciera que estábamos escuchando un discurso de otro presidente y de otro país. Porque hablaba como si fuera un mandatario eficiente y transparente. Y se tratará de otra nación. Porque daba datos que no se correspondían en modo alguno a la realidad. Mentiras y medias verdades. Falsedades. Todo un show. Un montaje. Sin autocrítica efectiva. Culpabilizando a los demás. A los anteriores gobernantes, a los países desarrollados, a las grandes empresas. A la prensa. Que no lo dejan gobernar. El no admite ninguna responsabilidad. Con el comienza la historia. Aunque en eso no se equivoca porque nunca antes hemos tenido un presidente tan extremadamente mediocre y corrupto, junto con su familia y sus entornos amicales, espaciales y políticos más cercanos.

“Nueva clase política”

El inquilino precario de Palacio se corresponde con esta “nueva clase política” de incapaces e ineptos, de inmorales y corruptos que se han apoderado del aparato público en las últimas tres décadas, principalmente, con el discurso del fin de las ideologías, el declive de los partidos históricos, la participación de los apolíticos e independientes y demás. Con el intervalo del período de Alan García, ellos vienen gobernando en las tres últimas décadas con el concurso militante de los caviares y rojos que están en todas las gestiones públicas nacionales, regionales y municipales.

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