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| día de la tierra | modelo
tierra
Pilar Schmitt se llenó las manos de barro y después fue esparciéndose el espeso bálsamo por el cuello y la cara. Con lentitud y con un placer nuevo, que le llegaba del olor untuoso y las manos colmadas de tierra húmeda, la presentadora del Canal Caracol se cubrió el cuerpo hasta que se apoderó de ella la sensación de vitalidad que le transmitía el barro mismo. A pesar de la gruesa capa de lodo, sintió una frescura proveniente de los minerales y del agua, aunque luego de unos minutos vivió en carne propia lo que afronta el planeta a un paso acelerado: el viento comenzó a secar la capa de humedad sobre su piel y el lodo se convirtió en una segunda epidermis, árida y de costra frágil, que se desmoronaba a medida que ella se movía. Así como la tierra, desprotegida y sin capa vegetal por la desertificación inducida por el hombre, la periodista vivió en su piel lo que sufren más de 250 millones de personas en el mundo. En medio de la angustia de saber que apenas el 3 por ciento del mundo tiene suelo inherentemente fértil y de que más de 6 mil millones de personas dependen del alimento cultivado en el 11 por ciento del planeta, posó para nuestra revista en su compromiso por hacer un llamado contra la desertificación. Vital y bella, unida a la Tierra en piel y alma, Pilar Schmitt clama por ella, a propósito de su día. | abril - mayo 2010 |