Revista 2017

León - Semana Santa - 2017

Declarada de INTERÉS TURÍSTICO INTERNACIONAL

Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

Elías Alvarez Frade Carlos Bermejo Oblanca

Avda. Lancia, nº3 - 1º Izda.

Tel. 987 25 64 08 - Fax 987 25 64 42 24004 León

"UNA SEMANA PARA LA FE Y EL ESPÍRITU" Casi sin darnos cuenta, nos encontramos ante la celebración anual de la pasión, muerte y resurrección del Señor. Sin embargo, el acontecimiento que celebramos es siempre el mismo: el misterio pascual de Jesucristo. Bajo esta expresión se alude al significado espiritual de los hechos que tuvieron lugar en Jerusalén entre el 14 y el 15 de Nisán en torno al año 782 de la fundación de Roma a juzgar por las escasas referencias cronológicas que aparecen en los evangelios (cf. Lc 3,1-2; Mc 15,42; etc.) en relación con el proceso, la condena, la ejecución y sepultura del profeta de Nazaret, como fue llamado el Hijo de Dios hecho hombre (cf. Mt 21,10; Lc 24,19). La muerte se produjo, ciertamente, un viernes y la resurrección pasado el sábado. Pero el suceso desencadenó el mayor fenómeno religioso de la historia de la humanidad, a saber: el nacimiento y expansión del cristianismo con toda su secuela del anuncio de la buena nueva de la salvación, el testimonio hasta el martirio de muchos discípulos de Jesús, la transformación de la vida, la cultura y las costumbres… La Semana Santa, primero en el ámbito cristiano y después en el resto del mundo, es hoy uno de los signos de la pervivencia de la memoria viva del galileo que dijo un día: “Destruid este templo, y en tres días lo levantaré” (Jn 2,19).

Desde entonces la Semana Santa es un período de intensa actividad religiosa y litúrgica en las distintas confesiones cristianas, que se manifiesta en los lugares de culto y aun en la vida ciudadana. En España la celebración del misterio pascual tiene un sello propio en la imaginería religiosa y en las incontables procesiones que recorren calles y plazas convocando multitudes. Entre nosotros este fenómeno está unido al nacimiento de cofradías y hermandades en el periodo barroco pero también en el siglo XX. El hecho ha alcanzado tal volumen que ya no se ciñe tan solo al aspecto religioso sino que tiene connotaciones estéticas, socioculturales e incluso turísticas.

Pero la Semana Santa posee un significado mucho más profundo para la comunidad cristiana y para los creyentes. En efecto, las procesiones, las imágenes y los pasos, las túnicas y otros distintivos de las cofradías, la música y el redoblar de los tambores, los momentos especiales, los encuentros, las reverencias, etc., son un modo de expresión religiosa y de acercamiento al pueblo, de evangelización y de catequesis más eficaz que muchos discursos y manifestaciones. En este sentido la Semana Santa -hay que estar dentro de ella para apreciarlo- es realmente “una semana para la fe y el espíritu” porque cuando se la vive, se la siente y se la ama “con pasión”, enciende la llama de la fe o la despierta si está dormida u olvidada. Que nadie dude que la Semana Santa, en su vitalidad expresiva y espiritual, alimenta lo que en cada uno hay de más valioso que es el espíritu.

Feliz Pascua Florida para todos: + Julián López Martín Obispo de León

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León, tu gran pasión

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Asistir como papón de a pie a las diferentes procesiones que inundan nuestra querida ciudad durante la Semana Santa me produce una mezcla de sensaciones. Semana en la que las calles se llenan de sentimientos que, a todos, con diferentes variantes, nos invaden el alma y que podría resumir en uno solo: León, mi gran pasión.

Porque en estos días se pone en valor lo que para miles de leoneses, mujeres y hombres, niños y ancianos, es su gran pasión: El amor desinteresado hacia su ciudad, hacia sus tradiciones, hacia sus más profundos sentimientos y creencias, hacia su centenaria historia…

Todos somos depositarios de aquello que nuestros antepasados nos legaron, nuestra obligación es mantener, engrandecer y dar a conocer esa semana de diez días que comienza con un repique de campanas en la Iglesia de Nuestra Señora del Mercado y finaliza con el jubiloso tañido de las campanas de nuestra Catedral anunciando la resurrección de Jesús.

Y entre esos dos sonidos, que anuncian comienzo y final de la Semana Santa, nuestros sentidos se embriagarán de la belleza de nuestras procesiones, del esfuerzo de nuestros papones, de los cientos de marchas interpretadas por bandas de cornetas y tambores, agrupaciones musicales y bandas de música, del olor a incienso y flor recién cortada y dispuesta en los tronos de tal manera que la imágenes que en ellos se sustentan parecen cobrar vida.

Nuestras calles se llenarán de leoneses y visitantes que buscan, entre nuestros papones, ellos y ellas, unos ojos con los que identificar a una cara amiga, oculta por el capillo hasta que llegue el Domingo de Resurrección, y poder, con una simple mirada, agradecerle el esfuerzo por mantener viva la esencia de la gran Semana en la que recordamos la Pasión de Jesús.

En este 2017 hemos querido acercar nuestras tradiciones a la capital de España. Grandes carteles con fotografías de nuestra Semana Santa podrán ser admirados en el metro de Madrid. ‘León, Ciudad de Semana Santa’ y ‘León, tu gran pasión’ serán los mensajes que en ellos aparezcan. Estoy convencido que muchos foráneos se acercarán a visitar nuestra ciudad durante esa semana de abril y así podrán comprender que para nosotros, sin estridencias, sin hacer más ruido que el que produce el raseo de un bracero, pero con un orgullo digno de aquellos que han sabido mantener en el tiempo sus tradiciones y creencias, León es nuestra gran pasión.

Os deseo unas buenas procesiones y prometo veros, orgulloso de vosotros, a pie de acera.

Antonio Silván Rodríguez Alcalde del Ayuntamiento de León

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Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

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Estimados Hermanos en Cristo:

Un año más estamos a las puertas de conmemorar la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. En la vida de todo cristiano y papón es un tiempo que vivimos con especial ilusión y devoción. La Cofradía se siente y se vive todo el año, pero en estos días de Cuaresma, preparatorios para la festividad de la Pascua, estamos deseosos de participar en esta muestra de religiosidad popular que son nuestras procesiones de Semana Santa.

Las procesiones las forman los Hermanos no los Pasos. Sois personas devotas que acudís a la llamada de la Cofradía, de la Iglesia. Sin vosotros no es posible dar esplendor ni solemnidad a nuestras misas, actos y procesiones. Son celebraciones y acontecimientos que dependen directamente de la asistencia de los Hermanos de Minerva y Vera Cruz. Os pido que acudáis no solamente por la obligación de asistir a los actos que se organicen, sino que lo hagáis porque así lo sentís. Los Hermanos de la Cofradía sois el más valioso patrimonio que tiene y sin vosotros nada es posible.

No quiero dejar pasar la ocasión de recordaros que desde el año pasado, nuestra Reliquia de la Vera Cruz se encuentra al culto en la Iglesia de San Martín, nuestra sede canónica. Creo que es un hecho muy importante el que tan preciado fragmento de la Cruz de Cristo esté expuesto para su adoración. Del mismo modo os recuerdo la Misa de la Cofradía, los domingos a la una de la tarde en San Martín.

En un año cargado de acontecimientos entorno a nuestros titulares: La Santa Vera Cruz y el Santísimo Sacramento, os solicito nuevamente vuestra asistencia y participación en todo cuanto esta Real Cofradía organice para mayor Gloria de Nuestro Señor Jesucristo.

Que Dios os guíe y os guarde.

César Benítez Bardal Abad de la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz

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Editorial El verdadero Apóstol

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Estamos al inicio de la cuaresma, preparación inmediata de la Semana Santa y la Cofradia acelera el ritmo que durante el año, si no habia olvidado, si ralentizado.

Cuentan o se atribuye al capitán araña que “embarcaba a la gente y él se quedaba en tierra”. Algo parecido, en tiempo de Jesús, hacian los fariseos no hacian lo que mandaban a los demás. Según les reprocha Jesús: dicen, pero no hacen. Lian fardos pesados y se los cargan a la gente en los hombros, pero ellos no están dispuestos a mover un dedo para empujar ( Mt. 23, 3-4). Aunque lo que mandaban no era incorrecto, pues Jesús dice a la gente: haced y cumplir todo lo que os digan; pero no hagais lo que ellos hacen, no son el ejemplo a seguir.

El ejemplo para nosotros es Jesucristo, que va por delante con su vida y su enseñanza lo que nos pide despues a nosotros. Han sido nuestros antepasados en la Cofradia que un día se tomaron en serio lo que les pedia Jesús, se han asociado (Cofradia) para mejor llevar a cabo esa tarea, y facilitársela a los demás.

Jesús no es un capitán araña, que nos embarca en algo que Él no está dispuesto a hacer. Al contrario, nos enseña y exhorta primero con su ejemplo y luego hemos sido nosotros, voluntariamente, quienes aceptamos la invitación, siguiendo el camino de los hermanos en la Cofradia. ÉL va por delante cumpliendo lo que te pide y allanándote el camino con su ejemplo. Nos advierte del peligro de la ignorancia o malicia de los fariseos. Todo lo que hacen - dice Jesús - es para que los vea la gente (Mt. 23, 5).

Ellos, los fariseos de que habla el Señor, cumplen externamente preceptos y leyes pero su corazón está lejos de lo que hacen. No buscan a Dios con sus prácticas y enseñanzas, sino que se buscan a ellos mismos. Hacen las cosas para quedar bien a los ojos de los hombres. Digamos con lenguaje de hoy, que no hacen otra cosa que postureo. Si hubiran tenido móviles, no habrian parado de subir “selfies” a las redes sociales para verse. No permitamos que en la vida cristiana se infiltre cierto postureo como el de los fariseos.

Cristo te quiere para ser apóstol suyo, el fin de la Cofradia no es otro que llevar el evangelio a todos los lugares: familia, amistades, ambiente y un autentico cofrade está en las antípodas del tal capitán araña. Porque lo que quieres hacer no es sólo algo externo que lo puede hacer alguien que sea experto en la materia. Lo que quieres comunicar tiene que ver con la vida, con el modo de vivirla y para esto necesitamos, si queremos ser creibles, escuchar a quienes nos hablan con hechos.

Tu autenticidad de apóstol es la autenticidad de tu vida. Sólo ayudaremos si eres de verdad lo que dices con tus palabras. Evitemos la superficialidad y el postureo. El peligro mayor, la falsificación mejor es la que se parece al original. Y alguien que vive pensando en quedar bien a los ojos de los demás puede llegar a proyectar la imagen que desea, en esta caso la de un apóstol, aunque no lo sea.

Mauro M. Santamarta Consiliario

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Agenda cofradía 2017 Miércoles de Ceniza Actos Centenario Virgen de la Soledad Besamanos Virgen de la Soledad Misa del Domingo de Ramos Junta General Estatutaria Procesión de la Pasión Procesión Virgen de la Amargura Exposición de pasos y tradicional saca en el patio de RR.MM. Benedictinas (Carbajalas) 13 DE Abril Vela a Jesús Sacramentado en San Martín 14 DE ABRIL Solemne y Oficial Procesión del Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo 23 DE ABRIL Misa de Acción de Gracias en el Santuario de la Virgen del Camino 3 DE Mayo Misa festividad de la Cruz de Mayo 18 DE Junio Solemnidad del Corpus Christi 23, 24 y 25 Junio Triduo al Santísimo Sacramento 25 DE JUnIO Misa y Solemne Procesión del Corpus Chico 25 DE Junio Comida Hermandad 9 y 10 SEPTIEMBRE Actos Festividad de la Exaltación de la Santa Cruz 14 DE Septiembre Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz 2 de NOVIEMBRE Misa por los Fieles Difuntos 16 y 17 DicIEMBRE Fin de Semana Solidario

1 DE 10-18 18 DE 9 DE 9 DE 10 DE 12 DE 13 DE

marzo Marzo Marzo ABRIL ABRIL Abril ABRIL Abril

DE TODOS LOS ACTOS SE DARÁ PUNTUAL INFORMACIÓN DE HORARIO Y LUGARES A DESARROLLAR

AVISOS IMPORTANTES Se ruega a todos los hermanos que cambien de dirección o cuenta bancaria, lo comuniquen a la Secretaría de la Cofradía, en el Apartado de Correos núm. 100 de León, a cualquier Seise de la Cofradía o enviando un correo electrónico a la dirección: secretario@minervayveracruz.com La Cofradía dispone de la página web: www.minervayveracruz.com a la que puedes acceder y colaborar.

La misa de 13 h. de los Domingos en San Martín es la misa de la Cofradía y punto de encuentro entre los hermanos. Haz lo posible por acudir a ella, además, siempre encontrarás miembros de la Junta de Seises para comunicarles cualquier incidencia.

Recordar la importancia de actualizar tus datos y sobre todo facilitar el número de cuenta para el cobro de la cuota anual.

Secretaría DE LA COFRADÍA Desde finales del año 2008 la Secretaría de la Cofradía se encuentra situada en el emblemático edificio del “Palacio de Jabalquinto”, C/ Juan de Arfe, 2 en el Barrio de San Martín.

Informaros que todos los jueves desde las 20:30 horas y hasta las 22:00 horas se encuentra abierta para que todos aquellos que lo deseen puedan realizar cualquier consulta o información que gustosos facilitaremos.

El teléfono de la Secretaría es el 987/21.25.52.

El correo electrónico de la Secretaria: secretario@minervayveracruz.com

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Lunes Santo

10 de Abril

Procesión de la Pasión Organizada por las Cofradías : La Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz, Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, y Dulce Nombre de Jesús Nazareno

Sale a las 20:00 horas de la Capilla de Santa Nonia, con el siguiente itinerario:

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- Jardín de San Francisco, - Plaza de San Francisco, - San Francisco, - Plaza de las Concepciones, - Fernández Cadórniga, - Plaza de Don Gutierre, - Zapaterías, - Plaza de San Martín, - Plegarias, - Plaza Mayor, - Mariano D. Berrueta, - Plaza de Regla, - Calle Ancha, - Plaza de San Marcelo, - Plaza de Santo Domingo, - Independencia, - Santa Nonia, - A capilla de Santa Nonia

Nuestra Señora de la Piedad Luis Salvador Carmona.1750

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Miércoles Santo

12 de Abril

Procesión Virgen de LA Amargura Organizada por: La Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

Sale a las 20:30 horas del Real Monasterio de Santa María de Carbajal, con el siguiente itinerario: À

- Plaza del Grano, - Calle Juan II, - Fernández Cadórniga, - Zapaterías, - Plaza de San Martín, - Plegaria, - Plaza Mayor, - Mariano D. Berrueta, - Plaza de Regla, - Calle Ancha, - Rampa de San Marcelo, - Plaza de San Marcelo, - Calle Teatro, - Calle La Rúa, - Plaza de las Concepciones, - Calle Fernandez Cadórniga, - Calle Juan II, - Plaza del Grano, - Al Real Monasterio de Santa María de Carbajal

Nuestro Padre Jesús de la Humillación y Paciencia Manuel López Bécker. 2010

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Viernes Santo

14 de Abril

Solemne y oficial procesión del Santo Entierro de nuestro señor jesucristo Organizada por la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

Sale a las 19:00 horas del Real Monasterio de Santa María de Carbajal (Plaza del Grano), con el siguiente itinerario: À

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- Plaza del Grano, - Calle Juan II, - Fernández Cadórniga, - Zapaterías, - Plaza de San Martín, - Plegaria, - Plaza Mayor, - Mariano D. Berrueta, - Plaza de Regla, - Calle Ancha, - Cid, - Plaza de San Isidoro, - Cuesta de San Isidoro, - Ramón y Cajal, - Plaza de Santo Domingo, - Independencia, - General Lafuente, - Calle La Rúa, - Plaza de las Concepciones, - Calle Fernandez Cadórniga, - Calle Juan II, - Plaza del Grano, - Al Real Monasterio de Santa María de Carbajal

Santo Cristo del Desenclavo Anónimo S.XVI

Información de la

Parroquia de San Martín Unidad Pastoral Nª Señora del Mercado-San Martín

L

La parroquia de San Martín de Tours es una comunidad de fe, con una historia de novecientos años, que, ininterrumpidamente, ha venido celebrando los divinos misterios, Eucaristías, Bautismos, Matrimonios, funerales, catequesis, etc; es decir, la misión pastoral de la Iglesia. Se trata de una Parroquia rica tanto de tradiciones como de historia, de lo cual, testifica su patrimonio heredado de los siglos pasados. Las cofradías, unas penitenciales y otras de piedad, se remontan al siglo XVI. Se debe destacar la fiesta patronal del once de noviembre, con la procesión con el Santo Patrono. El famoso Corpus Chico que organiza la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz. La procesión del Cristo el catorce de septiembre. Y el centro del año litúrgico las celebraciones de la Semana Santa y el Tridúo Pascual, llenos de solemnidad. La cofradía de Ánimas y Santo Cristo de fuera de la Iglesia de San Martín, con diferentes actos a lo largo del año.

También tiene su sede canónica en esta parroquia las cofradías de Nuestro Señor Jesús de la Redención y María del Dulce Nombre, que han cumplido ambas veinticinco años de existencia. De otra parte, la cofradía de Ntra. Sra. Del Carmen fundada en el año 1694, con su tradicional novena en el mes de Julio. Sin olvidar las nuevas realidades que han ido surgiendo última mente en la parroquia, vida ascendente, lectura creyente y una Comunidad Neocatecumenal. Todo ello, es la realidad viva de esta Parroquia. Y, desde luego, fundamental la catequesis de niños, jóvenes y adultos.

La

Piedad

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La liturgia ha adquirido, por otro lado, gran solemnidad con el Nuevo órgano y, como no, el coro que ya ha cumplido cincuenta años. Sin olvidar la Cáritas Parroquial con sus voluntarios.

El origen de la Iglesia se documenta en el año 1029, según señala el famoso historiador Claudio Sánchez Albornoz. La Primitiva Iglesia, de la que hoy no se conserva nada, se alzaba extramuros a pocos metros de la muralla romana. Posiblemente, en una zona civil y comercial “La Cannaba”. Y, en el año 1114, se habla de San Martín del Mercado.’ El artículo 46 del Fuero de León establecía el mercado en 10 17. De lo que se puede afirmar que fue siempre una Iglesia vinculada al comercio, mercado y demás actividades relacionadas y también a los gremios, carniceros, plateros, azabacheros, zapateros. De hecho, es la sede canónica de la cofradía de San Crispín, zapateros leoneses. El archivo pa rroquial aporta documentos sobre la relación con los gremios. Igualmente, el archivo conserva los libros Sacramentales desde el siglo XVI.

que, erróneamente, se había atribuido a Gregorio Fernández. Más bien, es del entono de Tomás de Sierra, escultor leonés afincado en Medina del Rioseco, realizada entre 1690 - 1700. Los retablos churriguerescos son de gran factura sobresaliendo la Anunciación del retablo de San José. El escultor contemporáneo José Luis de la Cuevas Pérez ha realizado últimamente el Cristo de la Agonía y San Martín a caballo cortando la capa.

La Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz, ha depositado en la parroquia el Lignum Crucis de su propiedad regalado en 1959 por D. Luis Almarcha, Obispo de León, procedente de la reliquia de la Cruz de Santo Toribio de Liébana.

HORARIOS DE MISAS EN LA PARROQUIA Lunes a Sábado

12:00 19:30

Domingos

12:00 13:00

Cantoral

litúrgico del siglo XVI

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DESPACHO PARROQUIAL

Martes, Jueves y Sábado

En cuanto a la arquitectura de la Iglesia se destaca el ábside poligonal que es de transición del románico al gótico, posiblemente de principios del siglo XIII. Cuenta con tallas de gran calidad como la Piedad de Luis Salvador Carmona del año 1750. La Virgen del Carmen

Custodia Nave

del Corpus Chico de Fernando González

central y ábside del S. XIII

12:00 13:30

Historia, Arte y Patrimonio

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De los Ríos, ‘El Descendimiento’ y Suárez Ema Julio Cayón

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El 13 de diciembre último se cumplió el vigésimo aniversario del fallecimiento de Víctor de los Ríos, un hombre –al margen del artista- que amó y sintió a León cual si hubiera nacido en estas tierras, que aunque cántabro de Santoña le alumbraran y allí, en la bellísima Santander, a los ochenta y siete años, en 1996, quedara para los restos, jamás olvidó que en la capital leonesa, muy cerca de San Isidoro –donde tenía su inmensa y celebrada casa- fue feliz.

Ahora bien, como suele ocurrir por sistema – que es lamentable- pasados los años nadie se acuerda de nadie. Y tal olvido, a la vez, es miserable. Sin embargo, las cofradías penitenciales de la Semana Santa de la ciudad –al menos varias de ellas- deberían mantener su memoria, la de Víctor, marcada a fuego en el recuerdo y en los legajos de los archivos por lo que representó –y representa- en la escenografía pasional urbana. La de Minerva, a quien De los Ríos, con treinta y seis años, entregó una muestra indiscutible de su talento en 1945, fue la pionera en cuanto a los encargos que, después, por su gran calidad y maneras para dar formas y volúmenes a la madera, le harían –casi en cadena- otras agrupaciones pasionales de la capital del viejo Reino.

En aquel año de 1945, cuando aún la Guerra Civil era un recuerdo demasiado cercano para los españoles todos, se estrena el paso –monumental paso- bautizado con el nombre de ‘El Descendimiento’, que tanta admiración causó en la calle. La cuatro veces centenaria cofradía de Minerva firma, así, el primer capítulo –fantástico capítulo- de la producción religiosa urbana del entallador en León. ¿Y por qué se le encargó a Víctor de los Ríos un conjunto escultórico de estas características con la confluencia, en la rememoración evangélica, de siete figuras? El siempre añorado Ángel Suárez Ema, el 5 de abril de 1952, Sábado de Pasión, lo explicaba en el transcurso de una conferencia que, con su ha-

bitual maestría, pronunciaba ante un más que numeroso público. “Las cofradías leonesas –dignas de loa- no se han conformado sólo con la conservación esmerada de sus imágenes, sino que con esfuerzo de titanes –decía- han incrementado el acerbo espiritual con efigies modernas, sí, pero de esencia clásica, ya que sus artífices (se refería a De los Ríos) se han inspirado en otras obras maestras”.

Con estas palabras, Ángel Suárez prologaba lo que, a continuación, quería señalar con especial y destacado subrayado, con el fin de referirse y ahondar en el porqué del especial encargo al, por entonces, joven –y ya reconocido- escultor. “Y así – continuaba- es ‘El Descendimiento’ de la Minerva, que no fue concebido como un paso más, sino que tenía su sello de naturaleza, ya que es remuneración filástica que con el nombre de ‘El Desenclavo’ tenía lugar en la Plaza Mayor unos años atrás, a la salida de la procesión del Santo Entierro”.

Era el dato fundamental e irreversible para ir uniendo los diferentes estados que había vivido Minerva hasta ese año de 1945. ‘El Descendimiento’, por lo tanto, venía a cubrir el vacío dejado por la propia penitencial de forma errónea, y se pretendía, con ello, consolidar, de diferente manera no teatralizada o física, una representación que, por su emotividad y recogimiento, formaba parte de la idiosincrasia y mandato que alentaba el espíritu de la penitencial. La disertación de Suárez Ema en aquel abril de 1952 avanzaba así. “Existía, y aún puede verse en la subida al coro de San Martín un Santo Cristo de brazos y piernas articuladas, que para esta ceremonia del desenclavo se colocaba en su cruz”.

A día de hoy la imagen, después de dos intervenciones para fijar definitivamente las extremidades superiores e inferiores –la primera corrió a cargo de Manuel López Becker, en 1979, y la segunda,

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incluida una restauración de la escultura, en 2008 por Agustín Rilova Simón- se custodia todo el año en la nave que la cofradía posee en la llamada Rinconada de Valentín González, al lado de la muralla, en la calle Independencia. Recuperada y lesionada –eso es cierto- de su concepto original, desfila en la procesión fúnebre de Viernes Santo en los años impares –este mismo en el que nos encontraos lo es y por eso la organiza Minerva- con el nombre de ‘Santo Cristo del Desenclavo’

con la Semana Santa de León mediante la construcción del imponente ‘El Descendimiento’, uno de los santo y seña de la historia moderna de las cofradías.

Se abrió de esta forma el camino a posteriores obras como ‘La Sagrada Cena’, de la hermandad de Santa Marta, ‘La Oración del Huerto’, del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, ‘El Camino del Sepulcro’, de Angustias y Soledad, o ‘El Resucitado’ de Jesús Divino Obrero, todas ellas y alguna más magníficas y bellísimas tallas procesionales.

La narración del que fuera abad de Minerva, además de profesor, escritor, articulista, cronista oficial de la ciudad y concejal, se afianzaba con estas palabras. “La ceremonia comenzaba cuando el predicador, desde el púlpito o balcón de la Plaza Mayor, después de relatar la Pasión, mostraba el cuerpo de Cristo exánime pendiente del sagrado madero y requería del pueblo la ayuda generosa para bajar al Redentor del leño, donde tan cruento sacrificio había realizado”.

Dicho esto, de igual manera que su obra cabe recordar, porque es de ley, la figura de De los Ríos veinte años después de su óbito. Y a Ángel Suárez Ema, del que se cumplirán cincuenta años de su fallecimiento el próximo 18 de julio y del que, por herencia familiar y convencimiento, sentimos una devoción especial. Un cariño inmenso. Va a hacer un año ahora, el 21 de febrero próximo, que en el periódico La Nueva Crónica quien esto firma publicó lo siguiente: “… el 4 de abril de 1968, las cofradías de la ciudad (siete, en ese momento), colocarían (en memoria de Suárez Ema) una placa de piedra al lado de uno de los arcos de la Plaza Mayor – concretamente en el soportal que da acceso a la mítica calle de Matasiete y hace frontera, a su vez, con la, en otras épocas, muy renombrada de Santa Cruz- en la que se fija la leyenda ‘Al Ilmo. Señor D. Ángel Suárez Ema, fallecido el 18 de julio de 1967, en agradecimiento a quien fue impulsor de la procesiones de Semana Santa Leonesa’. El recordatorio, por cierto, se encuentra -indicábamos entonces- en un pésimo estado de conservación, abierto de un lado a otro, y muy sucio”. Hasta la fecha nada se ha hecho para remediarlo.

El escenario –a día de hoy recuperado en la fachada de la Basílica de San Isidoro, la tarde de Sábado Santo, por la cofradía de Santo Cristo del Desenclavo, agrupación radicada en la parroquial de Santa Marina la Real- debía ser patético. Cuenta Suárez Ema que acudían a presenciarlo –sumados a los vecinos de la ciudad- las gentes de los pueblos del alrededor, que seguían con gran fervor “las incidencias del Mandato”, al que se consideraban, por piedad y fe, muy unidos.

Ello fue el motivo, el germen, de que, después, la cofradía de Minerva –que, por dejadez, se había dejado arañar una parte de su rica historia- buscara plasmar el acto “en un auténtico paso que lo reflejara”. Y se llamó a Víctor de los Ríos, quien “tomó la idea con gran cariño y la plasmó con toda justicia y justeza de detalles, imaginando un conjunto de siete efigies en armonía y perfección”.

Queda acreditado, en fin, que Minerva fue pionera en cuanto a ensamblar a Víctor de los Ríos

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Sería aconsejable –es aconsejable, sin dudaque la cuadrigentésima Minerva, su junta de seises, como cabeza visible de la cofradía, aceptara el pequeño de reto de restaurar el recordatorio mediante la aceptación y anuencia corporativa de la Junta Mayor. En verdad se le debe a Suárez Ema. Y hay que enjugar la deuda sin mayor dilación.

La procesión de 1925

Alfonso Pastrana Fidalgo.

Hno. de la cofradía

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En el año de 1925 esta cofradía (Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y de la Santa Vera Cruz) fue la encargada de organizar la Solemne Procesión del Santo Entierro por ser año impar, y el abad Pascual Seco animaba a la religiosidad de los fieles para que asistieran con el respeto y el recogimiento que dicha procesión merece.

El día 10 de abril era Viernes Santo y todo estaba preparado para la procesión, con la novedad de que el paso del Santo Sepulcro iba a ser llevado por sacerdotes, según disposición del obispo de León, José Álvarez Miranda. A las 4 de la tarde tuvo lugar el tradicional sermón de La Soledad a

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cargo de José Alonso, beneficiado de la catedral, mayordomo del prelado y segundo maestro de ceremonias de la catedral y dos horas después salió la procesión de la iglesia de San Martín con el orden y el respeto habitual. Presidiendo iban el obispo, el gobernador civil, el alcalde Francisco Crespo Moro, los concejales Lucio García Moliner, Bonifacio Rodríguez Riego, Arturo Fraile Reñones, Dionisio González Miranda, Julio del Campo Portas, Teodoro Sainz Nava, José Robles Feo, Pedro Martín Escudero y Cristino Álvarez Martínez, junto con el secretario y el interventor del ayuntamiento; con ellos procesionaba también una representación militar formada por el gober-

nador militar y cuerpos de la guarnición. Cerrando, una compañía del 36 con banda musical dirigida con entusiasmo por el capitán Aragón.

Cuando la procesión estaba ya de retirada, ocurrió un lamentable suceso en la Plaza Mayor sobre el que no hay muchas explicaciones de lo ocurrido en ninguno de los dos periódicos provinciales de la época; tan sólo se indica que hubo un incidente poco agradable que hirió los sentimientos católicos del pueblo1.

Para saber qué fue exactamente lo sucedido debemos leer el periódico La Democracia 2, un diario con ideas republicanas y anticlericales, en el que trabajó y llegó a ser director el que fuera alcalde de León Miguel Castaño, lo que le llevó a tener grandes problemas con la iglesia y la censura. Bajo el título “La fe molesta a los clérigos”, un artículo comenta que durante todo el trayecto hombres y mujeres cantaron varias saetas con gran éxito y emoción por parte de los fieles que seguían la procesión, pero para evitar que fueran escuchadas, en cuanto una saeta iniciaba su música, los clérigos comenzaban a cantar más alto sus canciones. Esta conducta provocó las protestas del público y la procesión se vio interrumpida en diferentes puntos de la ciudad, tales como la plaza de Veterinaria, (actual plaza de Santo Martino), calle Alfonso XII, (hoy llamada calle la Rúa) y en la Plaza Mayor, pero en este punto el tumulto y el escándalo fue ya de tales proporciones que incluso una de las imágenes quedó abandonada ya que los braceros no pudieron continuar con las imposiciones descorteses de los clérigos. Como cabe esperar, con todas estas incidencias, la procesión terminó con gran desorden y alteración del orden público, pero gracias a las autoridades no hubo que lamentar nada grave y el tumulto no tuvo dimensiones más serias. Durante la Semana Santa del año anterior, varias saetas habían sido cantadas por varios andaluces al paso de las procesiones y no hubo ningún incidente aunque fueran canciones más típicas del sur 3.

de ella. Señala también que estas saetas, a las que llega a denominar “desgarrados piropos” son una manifestación sincera de amor a estas divinidades en las que el pueblo tiene depositada su fe. Y que son envidias profesionales del clero que niegan la compatibilidad de sentimientos con el pueblo creyente hacia los cánticos del pueblo afirmando que Dios nació por el pueblo y para el pueblo. Concluye este artículo advirtiendo que el día en que desaparezcan estas espontáneas y devotas saetas, habrá desaparecido la parte más sincera de la fe, convirtiéndose la Semana Santa en mera propaganda. Al final se comenta que la hoja del calendario del día 10 de abril trae la frase “El señor obispo ordena que se acaben los cantares, primero se han de acabar obispos y capellanes”.

A colación de estos hechos, una columna de El Diario de León fechada el 8 de abril de 1925 señala que el pueblo leonés es siempre correcto y devoto, con excepción del Viernes Santo, día en el que parece que esta compostura se olvida tal vez porque los que forman las filas de penitentes no inspiran con su comportamiento a los espectadores devotos y creyentes.

Y esto es lo que sucedió aquel 1925 en la noche de Viernes Santo en la que nadie pudo imaginar lo que iba a ocurrir durante su trayecto por las calles más antiguas de la ciudad.

Nos encontramos en el año 2017, han transcurrido 92 años de los hechos narrados en este artículo, y podemos observar que las preguntas planteadas sobre la fe de los siervos de la iglesia, del pueblo, el toque de atención sobre el recogimiento de los penitentes y su capacidad inspiradora sigue vigente aún en nuestros días. Esto, debería plantearnos aún más preguntas sobre la Fe en general y nuestra fe en particular.

En este periódico, La Democracia, se hace una crítica a este hecho comentando que el espíritu religioso y desinteresado siempre ha estado en el corazón de los pueblos, que son los que conservan viva una fe sencilla y limpia y que Dios nació por y para el pueblo incluso más de los que hacen oficio 1 Diario de león. Sábado 11-4-1925, pág.1 La Crónica. Sábado 11-4-1925, pág. 5 2 Democracia. Sábado-11 4-1925, pág. 2 3 DL sábado 19-4-924, pág. 2

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La Semana Santa Leonesa en el semanario: “La Lectura Dominical” Antonio Prim Alonso Morán.

Historiador y hermano de la Cofradía.

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Las hemerotecas son lugares apasionantes, túneles del tiempo que nos trasportan al pasado, al sentir de nuestros antepasados que dejaron sus pensamientos en el papel de revistas y periódicos.

Así que hagamos uso de estos magníficos lugares cargados de sabiduría y revisemos un ejemplar de la revista titulada: La Lectura Dominical. Pequeña publicación de no más de quince páginas y de tirada semanal, fundada por el jesuita Francisco de Paula Garzón y el leonés Álvaro López Núñez.

A lo largo de los cuarenta años de existencia de este rotativo, 2.073 números salieron a las calles de este país, los cuales tuvieron gran aceptación popular, pasando de una tirada de 10.000 ejemplares a 32.000 en muy pocos años.

Todos los años coincidiendo con la Semana Santa, este semanal editaba un número especial dedicado a la Semana de Pasión. A lo largo de la historia de esta revista las manifestaciones de religiosidad popular más relevantes de la época (Sevilla, Zamora, Murcia, Valladolid y León) aparecieron en sus páginas, siempre desde un punto de vista artístico.

El especial sobre la Semana Santa leonesa fue publicado en el año 1925, constaba de dos artículos: uno sobre “El Dainos” y otro sobre “La Dolorosa. Escultura de Luis Salvador Carmona”. El primero de ellos aparece sin firmar, aunque pensamos

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que pudo haber sido redactado por Álvaro López Núñez o por Herminio Novella1, autor del dibujo que aparece en la revista (imagen 1).

El segundo de ellos, en el que nos centraremos más detenidamente debido a la importancia que tiene para la de Minerva y Vera Cruz, fue titulado “La Dolorosa. Escultura de Luis Salvador Carmona” y está firmado por el leonés Álvaro López Núñez.

La crónica está estructurada a tres columnas y contiene una fotografía de la Dolorosa de Carmona que se veneraba en el Oratorio del Olivar de Madrid. López Núñez, escribía lo siguiente:

copia de otro texto que fue impreso en la misma revista el 7 de octubre de 1922. Esto nos da un primer indicativo de que por lo menos en la Semana Santa de 1921 y en las anteriores, Nuestra Señora de la Piedad participó en el cortejo procesional.

Y finalmente si esto es cierto nos plantea muchas incógnitas, ya que hasta ahora los datos con los que contábamos era que Nuestra Señora de la Piedad comenzó a participar en la procesión del Santo Entierro en el año 1939 y no queda claro que lo hubiera hecho dos años antes en la Semana Santa de 1937, según ha estudiado mi colega y amigo Gonzalo Márquez 3. Y con todo esto, nos preguntamos:

“[...]Esta imagen de la Dolorosa, o de Nuestra Señora de las Angustias, es una “replica”, con ligeras variantes, de otra que hizo también Salvador Carmona y que se conserva en la iglesia parroquial de San Martín, de León, de donde sale la noche del Viernes Santo en la procesión del Santo Entierro, alternando con otra Dolorosa, de escaso valor artístico, venerada en la capilla de Santa Nonia de aquella perínclita ciudad[...] 2”.

El contenido anteriormente trascrito es de suma importancia por varios aspectos: En primer lugar observamos que la Piedad que ahora reside en la Iglesia Parroquial de San Martín en León fue utilizada por Luis Salvador Carmona como modelo para su obra posterior.

Este hecho es muy significativo, ya que nuestra ciudad cuenta con una de las primeras obras de este escultor dieciochesco. Aunque no sea la obra más depurada de Carmona, poseer una de las primeras, y que además sirviera de modelo para otros encargos de este artista, nos trasmite lo especial e importante que fue esta imagen para este escultor. A mayores debemos decir que Nuestra Señora de la Piedad, aunque muy retocada después del incendio que sufrió, es la única que existe en la actualidad, ya que la efigie que copia de ésta y que se encontraba en el Oratorio del Olivar en Madrid fue destruida a lo largo de la Guerra Civil. (Foto2) En segundo lugar, hay que considerar que el artículo que hoy estamos analizando fue publicado el 4 de abril de 1925, y este párrafo concreto es 1 Herminio Novella fue profesor de dibujo en la Escuela Normal de Maestro de la ciudad de León a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. El Distrito Universitario: Semanario de 1ª Enseñanza. Números 865 y 1227.

2 López Nuñez. A. “La Dolorosa. Escultura de Luis Salvador Carmona”, en La Lectura Dominical. Nº 1631. Madrid, 1925, pp.167-168.

3 Nuestra Madre de la Piedad. http://seiseleon.blogspot.com.es/

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¿Qué pasó realmente? ¿Qué hay de cierto en la crónica periodística de Álvaro López Núñez?

El relato de Álvaro López Núñez, tenemos que darlo por cierto, en primer lugar porque fue una persona muy vinculada a esta ciudad, ya fuera por estar cursando estudios, por su trabajo de profesor, por los cargos que ejerció dentro de la Sociedad Económica del País de esta capital o por la visita a familiares y amigos que realizaba periódicamente. Lo que quiere decir que conocía las procesiones y tradiciones de esta ciudad.

En segundo lugar, vemos que el artículo fue reeditado en 1925 pero había sido publicado tres años antes. Si hubiera habido alguna errata en la primera publicación, los lectores de esta ciudad se lo hubieran hecho llegar, y él lo hubiera corregido en la nueva reimpresión del artículo. ¿Desde cuándo la Piedad de Carmona se procesiona en la procesión del Santo Entierro?

1922, fecha de publicación de la primera edición del manuscrito, así que podemos deducir que en los años anteriores la Piedad de Carmona participaba en el Santo Entierro.

La duda que se nos plantea es la segunda reimpresión del texto en 1925. No sabemos, si el autor desconocía que en 1923 se hubiera adquirido otra escultura para sustituir a la Piedad de Carmona o daba por supuesto que en 1925 no procesionaria la nueva imagen adquirida y sí la Piedad de Carmona, como había ocurrido en los años anteriores.

CONCLUSIONES Con la información aportada por Álvaro López Núñez, solo podemos afirmar que en el año 1921, la Piedad de Carmona participó en la procesión del Santo Entierro y que seguramente lo llevaba haciendo en los años anteriores, deducido por la explicación que he dado anteriormente.

Para finalizar quiero presentarles, dos textos más, para que se den cuenta de la complejidad de la investigación. El primer texto es del año 1859, recogido en el libro de cuentas de la cofradía de Nuestra Señora de la Angustias y Soledad y dice lo siguiente en referencia al Santo Entierro organizado por la cofradía de la Vera Cruz:

Difícil respuesta, ojalá, contásemos con la documentación que nos permitiese decir una fecha exacta, o que el autor hubiera dejado alguna pista de ello. Álvaro López Núñez, en su narración no utiliza partículas de tiempo corto como: “de unos años para acá”, “desde hace poco”, “recientemente”, “como novedad”, etc. Pero tampoco hay partículas de tiempo largo cómo: “desde la centuria pasada”, “desde tiempo inmemorial”, etc. Lo que nos puede llevar a pensar que es un hecho asentado en el tiempo pero no de largo recorrido, es decir podemos estar hablando de un periodo de décadas y no de siglos.

[...]su asistencia con insignias y banderas a la procesión del Entierro del Salvador la noche del Viernes Santo incluyendo las propinas de los trece cofrades braceros electos para llevar el Sepulcro, y efigies de Ntra Señora de la Soledad y de Angustias que también concurrieron, cuya cantidad deberá reclamarse al Sr. Abad de la Santa Vera Cruz res-

Lo que sí está claro es que el texto fue escrito en

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a La Piedad de San Martín antes del incendio de 1948.

Foto Germán Gracia.

ponsable de su pago en los años nones que a su cofradía corresponde ejecutar dicha procesión [...] 4

No se puede afirmar una fecha exacta de cuando comenzó a salir la Piedad de Carmona en la procesión del Santo Entierro.

Esto encajaría con la crónica de López Núñez: [...]Esta imagen de la Dolorosa, o de Nuestra Señora de las Angustias, (...) que se conserva en la iglesia parroquial de San Martín, de León, de donde sale la noche del Viernes Santo en la procesión del Santo Entierro, alternando con otra Dolorosa, de escaso valor artístico, venerada en la capilla de Santa Nonia [...] 5 Pero no encajaría con esta otra crónica facilitada por el Historiador del Arte Eduardo Álvarez Aller y publicada en el Boletín del Clero de 1895 que dice lo siguiente: [..]) la urna que contiene en efigie el yerto cadáver del Redentor del mundo, precedida de los atributos de la pasión y seguida de las imágenes de su santísima madre y del discípulo amado [..]) 6

Que con anterioridad a 1923 la imagen si procesionó por las calles de León, y que seguramente lo hizo en las Semana Santas precedentes.

Que cabe la posibilidad de que también participase en el cortejo procesional en el siglo XIX, pero no podemos asegurarlo hasta que avancemos más en la investigación.

Así que fuera como fuere, queda mucho por investigar y analizar sobre la Vera Cruz, una de las cofradías más complejas de la ciudad de León.

Así que animo a mis colegas y amigos: Eduardo Álvarez, Agustín Nogal, Gonzalo Márquez y a todos los historiadores interesados a que hagamos un debate serio y científico sobre este tema, y podamos entre todos avanzar en esclarecer la historia.

Esta revista puede ser un buen medio para este cometido.

Así que después de todo este análisis solo queda decir lo siguiente: 4 Nogal Villanueva, A “La Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad y la procesión del Santo Entierro de la ciudad de León en el siglo XIX”. León, 2004, p 118 .

5 Ibid. Cita 2 6 Boletín del Clero del Obispado de León, nº 15, 10-4-1895, P

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La CofradĂ­a de Minerva y Vera Cruz ante la Virgen del Camino

1938

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Imagen de la Virgen del Camino realizada por Foto Exakta.

“Y la Catedral, convertida en santuario, de una peregrinación interminable, ha oído las plegarias campesinas, y las devociones ciudadanas, y los ritos eclesiásticos y los coros infantiles, como un himno gigante”.

(Mariano Domínguez Berrueta, 1938) Eduardo Álvarez Aller

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Las cofradías leonesas siempre han gozado de cierto protagonismo en las venidas de la Virgen del Camino a la ciudad de León. La alta consideración mostrada, ya desde antiguo, en cada uno de estos rituales hizo que, por ejemplo, la Regla fundacional de Angustias y Soledad de 1578 dedicara el capítulo vigésimo quinto a todo lo concerniente a estos traslados, la estancia de la venerada imagen mariana en León y su regreso al Santuario1.

En 1938 la sociedad leonesa organizó una rogativa con el propósito de lograr el fin de la sequía, efectuando para ello el traslado de la Virgen del Camino a la Pulchra Leonina el día 29 de abril. Las actas municipales informan que una vez “entrada la Santísima Virgen en la Catedral empezó a llover, lluvia que diariamente y durante el novenario continúo sin cesar y en el día de ayer que fue trasladada a su Santuario, hizo un día espléndido” (Sesión 9 de mayo de 1938)2 . El Diario de León añadía que, junto al propósito de la rogativa, este traslado pretendía agradecer a la Virgen del Camino la protección demostrada al pueblo leonés en los difíciles tiempos que estaba atravesando el país en ese momento3 .

En aquella época eran frecuentes las ofrendas que entidades de muy diversa naturaleza realizaban ante la efigie de la Patrona de la Región Leonesa durante su permanencia en la Catedral. Estas ofrendas consistían habitualmente en una misa de oferta en cuyo transcurso se realizaba la ofrenda de cera. Así por ejemplo, la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno acudió a la Pulchra Leonina el día 5 de mayo para depositar ante la Virgen del Camino la oferta correspondiente4 . El día posterior fue nuestra Cofradía la que cumplía con idéntico ritual, anunciado del siguiente modo en la prensa: “La Cofradía de Minerva y Vera Cruz Habiéndose señalado para el viernes a las once de la mañana la celebración de la oferta que esta 1 A. ALONSO MORÁN, Transcripción de la Regla Fundacional de la Cofradía de las Angustias y Soledad de Nuestra Señora la Virgen María 1578. León, 2012, página 45 2 L. PASTRANA, Políticas Ceremonias de León. Siglo XXI. León, 2002, página 167 3 Diario de León, 29-IV-1938, página 1 4 Diario de León, 3-V-1938, página 4

Cofradía Sacramental debe hacer a nuestra excelsa Patrona la Virgen del Camino, por los favores de ella recibidos, como leoneses y como cofrades de la Vera Cruz, la Junta de Seises pone en conocimiento de las hermanas y hermanos a fin de que a todos llegue esta noticia, que deberán encontrarse ante el altar del Trascoro de la Santa Iglesia Catedral antes de dicha hora, para proceder a la colocación y distribución de la cera.

Confía esta Junta que nuestra numerosa Hermandad, genuinamente leonesa, honrará a la Santísima Virgen con su asistencia.

La Junta de Seises”5 .

La prensa recogió igualmente una breve reseña del acto efectuado en el interior de la Catedral: “La Cofradía de Minerva y Vera Cruz A las once celebrose la misa de oferta de la Cofradía de la Minerva y Vera Cruz, de la Parroquia de San Martín.

Asistió la cuasi totalidad de los cofrades, presididos por el Abad y Seises. Todos llevaban velas en las manos.

Ofició la misa el cura párroco de San Martín, Don Eladio Toro asistido por los señores Alameda y Vicente.

Al ofertorio hizo la oferta de cera el Abad de la Cofradía”6 .

Cuando la Virgen del Camino dejó la ciudad, una de las valoraciones que fueron publicadas afirmaba que “lo más digno de ser destacado, por su tipismo, ha sido el enorme número de ofertas que han venido de todos los pueblos del contorno y las que han hecho los organismos de carácter oficial o piadoso”7. Desde nuestra perspectiva del siglo XXI, podemos considerar estos sencillos actos como unas manifestaciones de piedad aderezadas de cierto costumbrismo, pues en las últimas ocasiones en que la Virgen del Camino ha bajado a la ciudad de León estos ritos han caído en el olvido.

5 Diario de León, 4-V-1938, página 4 6 Diario de León, 6-V-1938, página 2 7 Diario de León, 9-V-1938, página 1

1.

Héctor-Luis Suárez.

Bracero del Descendimiento.

La Semana Santa desconocida de la Provincia de León

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La Provincia de León es una de las más extensas en el conjunto español. Esta realidad unida a su particular historia y perfil sociocultural e identitario, han condicionado a lo largo de los siglos una variada, rica y abundante casuística en lo que se refiere a las celebraciones religiosas de la Semana Santa. Así, en toda la provincia cada primavera se repite un magnífico y sorprendente abanico de expresiones de la religiosidad y piedad popular, desconocido incluso para muchos de los propios vecinos de la localidad más cercana al evento, así como para mucho otros leoneses. Un singular y muy llamativo conjunto caracterizado por ofrecer al turista, al aficionado - cofrade o no - o al estudioso un notable interés desde distintas perspectivas, tanto de índole religiosa, como etnográfica o costumbrista asociada a ella.

A lo largo del tiempo y surgidos de una liturgia común, se han ido configurando diversos modelos o modos de proceder ante estas pietistas celebraciones tan populares en las diócesis de Astorga y León. Ambas de origen próximo al paleocristiano más remoto. Por ello, las distintas expresiones de la religiosidad y piedad popularde la Semana Santa en la provincia de León constitu-

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Artículo compendio de los textos que integran la publicación de divulgación turística “La Semana Santa desconocida de la Provincia de León”, presentada en FITUR 2017, editada por TurisLeón y la Excma.Diputación Provincial. yen un corpus muy personalizado, plagado de matices comunes y locales que se empapan de un característico tinte “antiguo” de lo más sugestivo y atrayente.

Sencillez, austeridad y recogimiento de otros tiempos, caracterizan las muy participativas celebraciones de los pueblos y localidades más pequeñas. En ellas, de modo espontáneo o “como manda la costumbre”, cada año sus gentes hacen posible la puesta de manifiesto de ancestrales herencias patrimoniales de toda índole al rezar, cantar o hacer sonar arcaicos instrumentos musicales configurando un particular entorno sonoro.

Algo que ocurre tanto en lo que se refiere a los distintos ejemplos en sí mismos, como en lo vinculado a sus modos y puesta en escena asociados.

O lo que es lo mismo, de modo contrastante, tanto cuando con júbilo las campanas voltean como en aquellos momentos donde algunos de los impresionantes e inolvidables silencios se marcan durante el transcurso de las procesiones y otros cultos.

En muchísimos puntos de las diversas Comarcas de la Provincia de León, se lleva a efecto un sinfín de pequeños y devotos cortejos. Como pe 1. Astorga. Viernes Santo, “Carrera de San Juanín”.

Foto Imagen M.A.S., gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

culiar atractivo, todos se caracterizan por la presencia de pequeños “pasos”, portados en modestas y pintorescas andas por cuatro personas, que se acompañan de vetustos pendones y pendonetas, así como de todo género de simbólicos objetos litúrgicos, de presencia hoy poco frecuente, que rezuman tradición y evocan un contrastante pasado. Esa aplastante sencillez, que esperamos no se modifique, se arropa por el respeto y silencio de sus observadores. Personas que, al final y no se sabe debido a que extraña magia basada en lo genuino, interaccionan y se integran en el acto hasta su conclusión como unos participantes más.

Precisamente en esto se halla su auténtico activo y reclamo para el que busca experiencias distintas.

Nuestras Semanas Santas provinciales plantean un todo costumbrista, tremendamente estimulador de lo sensorial, que se enmarca en un recoleto caserío y un entorno natural incomparables. Un ámbito que conforma y nos acerca a deliciosos, insospechados y únicos paisajes sonoros, musicales y naturales. Marcado por un sorprendente cromatismo en luz y color, que señala cada momento del día. Subrayan lo dicho aspectos como la tenue luminosidad de los atardeceres y amaneceres, o los diversos grados de oscuridad de la noche, en los que, todavía se respira fría la primavera en el plano climático.

A la par en las ciudades y pueblos de mayor vecindario, alrededor de sus cascos monumentales se hacen también presentes otras expresiones de la piedad popular y distintas estéticas. En ellas la presencia de asociaciones de fieles y cofradías, Lugares con celebraciones. Mapa Juan Carlos García Valverde, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

centenarias o recientes, se remarca por túnicas y capirotes de todo color y formato. Pero también por peculiares agrupaciones instrumentales convocatorias o por sonoras y numerosas bandas o agrupaciones instrumentales de diversa configuración, que acompañan una imaginería devocional de variada calidad artística y amplio programa iconográfico. Todo alrededor de un sorprendente volumen de integrantes en los actos y cortejos. Unas propuestas que configuran diversos modelos de actuación, fieles a un proceder, presente en todo nuestro país, pero aquí plural y variado, a la par que marcadamente personalizado.

Y muy característico a la costumbre de este viejo territorio provincial leonés, donde no faltan algunas aculturaciones de otras tierras y modas perfectamente perceptibles. Un todo que ha dado pie a galardones turísticos como la Declaración de Interés Turístico Internacional de León, la Nacional de Astorga y Ponferrada o la Regional de Sahagún y las provinciales de Jiménez de Jamúz y Almanza para sus dramatizaciones o para el “Santo Potajero” en La Bañeza, que corroboran lo expuesto.

Asimismo llama la atención la numerosa y variada cartelería, además de otras publicaciones como ésta, que pregonan al viajero, al cofrade o al lugareño el evento y sus actividades, cultos y procesiones. Numerosas poblaciones se preparan además para la efeméride con el adorno de sus balcones y rincones de cascos urbanos e, incluso, los escaparates de su comercio.

Paralelamente, en lo prosaico y gastronómico la provincia se caracteriza y llena también en

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2.

estas fechas de limonadas y “orujines”, bacalao preparado de distintas maneras, pulpo, escabeche “de tino” en ensalada - con cebolla y puerro - o en tortilla, aceitunas negras con cebolla y pimentón, huevos cocidos con pimentón, potajes “de viernes”, sin faltar el “cordero pascual”, torrijas y todo tipo de roscas de postre y los churros y el chocolate. En muchos, no solo de modo periférico o asociadas a la celebración de diversos cultos y procesiones, también formando parte de ellos y su protocolo previo o posterior. Ya sea participando de modo exclusivo los asistentes y devotos, así como los cofrades al cargo de la organización o bien, de carácter público y generalizado.

La cronología de celebraciones y actos arranca en cuaresma con el bañezano“Día del Triunfo”, su fiesta cofrade y correspondiente partida de chapas, tan ancestral como popular. Esquilas solitarias o formaciones de clarines y tambor, con sus sones callejeros preludian o convocan, en Astorga o Ponferrada, a todo tipo de actos cofrades o devocionales. Entre ellos los “Calvarios” o vía crucis, repletos de cantos tradicionales y rezos propios del tiempo; además, modernamente, de muchas actividades musicales de todo género efectuadas por toda la provincia.

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El fin de semana anterior al “Domingo de Ramos” arranca la dimensión cofrade de las celebraciones. En buena parte de la provincia, por tradición, este día se conoce como “Domingo Tortillero” y en él se celebran comidas familiares campestres a base de este producto. En Sahagún se realiza además la llamativa y protocolaria “subasta de los pasos”. Actividad que en otras localidades como Almanza, Castrocontrigo, Grulleros, Villaseca de la Sobarriba, Villanueva de las Manzanas o Campo de Villavidel, se llevará a efecto en otras fechas y momentos de este mismo periodo. Asimismo, el viernes y sábado de su víspera, Astorga y Puente Castro ponen sus “calvarios” en la calle, ya de modo procesional, caracterizados por la estética cofrade y su diversidad de puestas en escena y riqueza de modelos indumentarios.

Ya el Viernes de Dolores, en León, Astorga, Ponferrada, La Bañeza o Mansilla de las Mulas, arrancan los actos y procesiones de la Semana Santa. Tras un repleto Domingo de Ramos, mañana y tarde, en toda la provincia discurrirá la semana con actos y procesiones diarias, además de en la propia capital, en poblaciones como Astorga, Ponferrada, La Bañeza o Villafranca del Bierzo.

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El núcleo de la Semana se centra en el “Triduo Sacro”, del Miércoles al Sábado Santo. Un periodo en que se prodigan los lugares y la oferta de actividad, repleta de las más variadas celebraciones por toda la provincia. En estos días, hallan ubicación los efímeros “monumentos” eucarísticos, junto a sus obligadas procesiones litúrgicas, así como otras dramatizaciones de naturaleza e índole más tradicional - “tinieblas”, “encuentros”, “carreras de Sanjuanín”, “ desenclavos”, Autos de Pasión-.

2. Mansilla de las Mulas. Encuentro Domingo de Pascua, entre la Virgen y Jesús Sacramentado en la custodia, Foto Jesús Salvadores, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

3. Santa Marina del Rey. Encuentro Domingo de Pascua, entre la Virgen, San Juan y el triunfante “Niño Jesús de Praga·” o “Niño de la bola”, Foto Jesús Salvadores, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

4. Santa Marina del Rey. Procesión del Santo Entierro. Foto Jesús Salvadores, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

5. Sahagún. Desenclavo. Foto Acacio Díaz, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

6. Villademor de la Vega. Procesión Viernes Santo. Foto Ana Mª Díez, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

Expresiones de la religiosidad y la piedad popular plenas de lúgubres silencios, solo en lo sonoro rotos por los cantos populares, la intervención de todo tipo de bandas, el tambor solitario o la matraca. Algo que estará presente hasta que se preludie la Pascua de Resurrección, festiva, brillante y bulliciosa de campanas volteadas o repiqueteadas que retornan tras su prohibición temporal de uso, acompañadas de cohetes y variadas músicas festivas. Un conjunto auditivo que, en muchas localidades, rodea de modo característico el paisaje sonoro de los “encuentros de gloria”, con sus “cambios de mantos”, pendones y viejos cantos de “albricias”.

Pero la actividad de este periodo de celebración no acaba hasta el Domingo In Albis, “ de Cuasimodo”, o “ de Pascuilla”, en su “octava”, una semana después, con actos y misas de acción de gracias cofrades. Sin olvidar también en esos días de Pascua y de su octava, mención a la celebración de pintorescas y concurridas romerías. Entre ellas las de La Garandilla, con su solemne ofrecimiento de Ramos; Palacio de Torío o Santiago del Molinillo. Paradójicamente en esos días se produce también en la provincia la celebración de algunas fiestas patronales locales. Así podrá comprobarse tanto en Calzadilla de los Hermanillos, donde esto ocurre el Viernes de Dolores o, bien nutridas de público, el Domingo y Lunes de Pascua en Cacabelos.

Durante la Semana Santa, por simultaneidad de fechas se llevan también a efecto diversas actividades, celebraciones o festejos, en algunos casos propios de otras realidades, formas de confesión o pensamiento e incluso algunos surgidos del estricto ámbito del ocio y la diversión. Aunque algunas son de origen relativamente reciente, otras son antiguas y de marcado carácter tradicional e interés etnográfico. Se trata de un conjunto que, en cada caso, tiene mucho, poco o nada que ver con lo religioso propio a estos días. No obstante, su realización ha atraído y atrae igualmente intereses y preferencias de tipos de público diverso y diferente al interesado en lo procesional.

Este paradójico conjunto de actividades abarca desde el muy popular juego de azar “a cara y cruz” conocido como“las chapas”,hoy legal y antaño muy perseguido, hasta la ancestral “cuelga del judas”. Tradición moceril vinculada a la tarde noche del Sábado Santo que implica la cuelga de un pelele en lugar visible del pueblo, a modo de espantapájaros que evoca este personaje. Una práctica ancestral en diversos pueblos de zonas del alto Esla que, hasta no hace muchos años, era censurada por improcedente además de tachada de auténtico barbarismo a perseguir. En ella, hoy como antaño, la custodia para evitar la sustracción del “judas” por parte de los mozos de otro pueblo cercano y la consabida burla posterior es algo prioritario para poder permitir que el mismo sea quemado en la correspondiente hoguera el Domingo de Resurrección. A tal costumbre moceril, en ciertos lugares cercanos de la misma Ribera del Esla se unen en esa tarde los tradicionales ágapes de confraternidad conocidos como las “huevadas”.

En ellas, con los restos de su producto estrella, se elaboran las características “cuelgas” o ristras de “cascarones de huevo” que, con posterioridad, se colocaban en lugares significados del lugar. Asimismo, en la Comarca de La Cabrera, complementa el conjunto la celebración tras la misa del Domingo de Resurrección de alguna “mascarada”invernal, expresión marcadamente propia del carnaval. Por no olvidar mención a algunas hogueras festivas e incluso las verbenas patronales y fuegos artificiales, como sucede en La Pascua en Cacabelos.

El grupo se cierra con diversos cortejos lúdicofestivos de naturaleza absolutamente profana y aconfesional que tienen lugar y de modo muy participativo y arraigado aunque, en ocasiones, dando lugar de modo periférico a comportamientos poco cívicos por parte de algunos de sus participantes a ojos tanto de sus promotores como de sus detractores. Es el caso de los que en la noche del Jueves Santo tienen lugar en León, Llombera de Gordón o Sahagún. Manifestaciones festivas que suelen resultar de gran interés para muchos medios de comunicación más debido a la controversia social que generan que a su propia naturaleza.

35 7. La Bañeza. Procesión infantil del Santo Potajero.

Foto Norberto, gentileza La semana Santa desconocida de la Provincia de León, Turisleon.

Unas notas sobre el Descendimiento Juan Carlos Ponga Mayo

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Uno de los pasos emblemáticos de la Semana Santa leonesa y por ende de la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz es sin duda el Descendimiento, nombre con el que conoce popularmente al Paso del Descendimiento de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo.

La Cofradía, posiblemente, llevaba tiempo deseando este paso que sin duda engrandecería la Procesión del Santo Entierro. El artista, Víctor de los Ríos, presentó una maqueta o boceto del pasó que impresionó tanto a la Junta de Seises de la Cofradía que esta decidió registrar dicho boceto como propiedad para que no fuera copiado o reproducido.

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dicho registro del “PASO DEL DESCENDIMIENTO DE LA PASIÓN Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO”, por el citado agente oficial de la Propiedad Industrial que lo hace en nombre de D. Lázaro Crespo Moro, que actúa a su vez en nombre de la Cofradía de Minerva y Vera-Cruz.

En fecha posterior (el documento no está fechado) Antonio Naranjo se dirige, se supone que a Lázaro Crespo (el escrito tampoco indica a quien va dirigido, solo Muy Sr. mío) para comunicar que para legalizar una pieza artística de carácter religioso se precisa la autorización “expedida por las autoridades eclesiásticas, diocesanas o de las Órdenes Religiosas…”

Por ello en el año 1944 la Cofradía de Minerva y Vera-Cruz se pone en contacto con el agente de la propiedad industrial Antonio Naranjo Sividanes para que registre como modelo artístico el Paso del Descendimiento.

El 29 de enero de 1946, después de que el paso haya salido ya en la procesión del Viernes Santo del año anterior, todavía se sigue sin obtener respuesta del registro del modelo del Paso y Antonio Naranjo insiste en la necesidad de que se presenta una autorización expedida por el Obispado,

Según se fija en el recibo, el día 14 de marzo de 1944 a las once horas y treinta minutos se solicita

El escrito de solicitud se presentó al día siguiente y dice así:

ILUSTRÍSIMO SEÑOR: Zenón Rodríguez Gangoso, vecino de León, Abad de la Cofradía Sacramental MINERVA Y VER-CRUZ, establecida en la Parroquia de San Martín, a s.Ilma. con el mayor respeto y consideración expone: Que encontrándose pendiente de resolución en el Ministerio de Industria y Comercio, el expediente que se refiere al registro del “paso” EL DESCENDIMIENTO DE LA PASION Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, propiedad de esta Cofradía, conforme está establecido por la Dirección General de Industria con fecha 15 de Septiembre de 1944, es por lo que SDUPLICA a s.Ilma se digne dar las oportunas órdenes para que se expida la mencionada autorización.

Gracia que no duda alcanzar de su justo proceder, cuya vida guarde Dios muchos años para bien de nuestra Santa Madre la Iglesia

La autorización se extiendo en fecha desconocida porque el escrito del obispado autorizándolo no tiene fecha. Dice así: OBISPADO DE LEON De conformidad con la Orden de la Dirección General de Industria de 15 de Septiembre de 1944 y al tenor del artículo 124 del vigente Estatuto sobre Propiedad Industrial, venimos a conceder, por lo que nos toca, la debida autorización para que Zenón Rodríguez Gangoso, Abad de la Cofradía de Minerva y Vera-Cruz, erigidas en esta Capital, puede registrarse el “PASO DE LA PASION Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO” modelo artístico nº 12.913.

Lo decretó y decreta S.S. Ilma,. el Vicario General de que certifico Por mandato de S.S.Ilma.

ILUSTRISIMO SEÑOR OBISPO DE LEON.

LEON 1º de FEBRERO de 1946. El Abad A pesar de que no tiene fecha la autorización del obispado, debió de redactarse en dos días, pues el día 6 del mismo mes el abad envía una carta a Antonio Naranjo con la autorización del obispado.

El día 11 de febrero se recibe contestación del agente de la propiedad industrial acusando recibo del documento y dos días después presenta la documentación, extendiéndose el correspondiente certificado el día 14 de marzo de 1946.

No se ha podido documentar la razón por la cual la Cofradía tiene tanto empeño en incluir en el Registro de la propiedad Industrial el modelo artístico del paso del Descendimiento. Solo se puede apuntar el deseo de que no fuera copiada la composición y la idea de la escena propuesta por Víctor de los Ríos, no solo por el propio escultor, si no también por otros artistas. El Paso del Descendimiento es desde el año 1945 una de las joyas de la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz.

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Aproximación a la historia de la Santa Vera Cruz

Ricardo Ferradal Pérez Paso del “Lignum Crucis”, con la Cruz que contiene la reliquia de la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz, de León

C

Cuando decimos Vera Cruz, nos referimos a la verdadera, la auténtica Cruz en la que Nuestro Señor Jesucristo fue clavado y muerto, culminando con tan terrible suplicio la Redención de la Humanidad.

Antes de hablar de la Vera Cruz, digamos que el leño del árbol del que procedía la Santa Cruz pertenece a una especie de ciprés mediterráneo, cuyo nombre científico es Cupresus sempervirens, del que existen muchos ejemplares en Palestina y cuya longevidad ha superado en algunos casos los mil años.

Poco después de la muerte de Cristo, los primeros cristianos rindieron culto a la Cruz y a pesar de tres siglos de crueles persecuciones, trataron de encontrarla, sin resultado alguno, pero casi trescientos años después las cosas fueron mejorando, pues en 313 los dos emperadores romanos: Constantino, de Occidente y Licinio, de Oriente, reunieron en la ciudad e Milán y firmaron un documento,

conocido como “Edicto de Milán”, por el que se legalizaba la religión cristiana en todo el Imperio.

En 325, con la religión cristiana legalizada, la madre de Constantino I “El Grande”, la emperatriz Elena, que practicaba la fe de Cristo, se dedicó a la difícil tarea de encontrar, tanto la Cruz, en ignorado paradero, como el Santo Sepulcro de Jesús, cuya ubicación era desconocida.

La emperatriz, que a la sazón contaba ochenta años, llegó a Jerusalén e hizo interrogar a los judíos más sabios del país para que la dijeran lo que sabían del lugar en el que el Nazareno había sido crucificado. Uno de ellos, casualmente llamado Judas, la llevó hasta un monte que la gente llamaba “de la Calavera”, aunque también era conocido como Gólgota y Calvario. Este era un macizo rocoso, en realidad una antigua cantera abandonada a extramuros de la ciudad, aunque cerca de ella, que ya no tenía ninguna utilidad para la construcción y que los romanos habían aprovechado para usarla como patíbulo donde colocar las cruces para las ejecuciones.

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El emperador Constantino I y la emperatriz Elena

A pesar de las indicaciones de Judas fue difícil hallar Cruz y sepultura, puesto que unos cien años después de la crucifixión del Señor, el emperador Adriano (nacido en Itálica, cerca de Santiponce, en Sevilla) había mandado erigir en aquel lugar un templo dedicado a la diosa Venus, según unos historiadores o una gran estatua de la misma deidad, según otros, al tiempo que amplió la muralla.

La futura Santa Elena ordenó derribar aquello para excavar en aquel lugar y, por fin, después de arduos trabajos, se encontraron algunos clavos y tres cruces. Como era imposible saber cuál de las tres era la del Redentor la emperatriz hizo traer a un hombre muerto el cual resucitó al entrar en contacto con una de ellas. También se ha dicho que el sagrado madero curó a una mujer enferma y que Judas, el informador, al verlo se convirtió al Cristianismo, tomando desde entonces el nombre de Ciriaco.

El caso es que ya no cabía la menor duda: Aquella era la auténtica Cruz de Cristo, la Vera Cruz. Las otras dos serían las que sirvieron de patíbulo a Dimas y Gestas, los dos ladrones que le acompañaron en el suplicio.

Poco después, la emperatriz y su hijo Constantino hicieron construir en el lugar del hallazgo la Basílica del Santo Sepulcro, en la cual depositaron la reliquia aunque Elena hizo dividir la Cruz en dos trozos con el fin de dejar uno en Jerusalén y llevar el otro a Roma, que a su vez fue dividido en otros dos: Uno quedó en la Ciudad Eterna y el otro fue llevado a Constantinopla, capital del imperio romano de Oriente. De las sagradas reliquias se extrajeron muchas pequeñas astillas que recibieron el nombre de “Lignum Crucis”, que significa“Madera de la cruz” o “Árbol de la Cruz”, y se repartieron por diversas iglesias, como escribió en 348 el obispo y doctor de la Iglesia San Cirilo de Jerusalén: “Todo el orbe está lleno de los pedazos que han sido cortados del leño de la Cruz”.

Un documento excepcional, por estar escrito en el lugar de los hechos y en los años inmediatos, es el “Itinerarium” que hacia el año 383 escribió una mujer leonesa, natural de El Bierzo, llamada Egeria o Etheria, en el que relata su peregrinación a Tierra Santa y los lugares que visitó. En él afir-

mó“…la iglesia construida por Constantino se encuentra situada en el Gólgota”, detallando los actos de la Semana Santa en Jerusalén en los cuales incluyó la ceremonia de la adoración del “Lignum Crucis”, el Viernes Santo “…Entonces se coloca una silla para el obispo en el Gólgota, detrás de la Cruz, que ahora está allí; siéntase el obispo en la silla, se pone delante de él una mesa cubierta con un lienzo, se colocan en pie, en torno a la mesa, los diáconos se lleva un cofrecito de plata dorada en el que está el santo madero de la Cruz; se abre y expone y se colocan en la mesa tanto el madero de l Cruz como el rótulo. Una vez colocado en la mesa, el obispo, sentado, oprime con sus manos los extremos del sagrado madero, mientras que los diáconos situados en derredor y en pie le guardan. Y lo guardan de esta manera porque es costumbre que, uno por uno, se acerque todo el pueblo, tanto los fieles como los catecúmenos, e inclinándose ante la mesa besen el, leño santo, y pasen. Y porque cuentan que, en cierta ocasión, uno clavó los dientes y robó una astilla del santo leño; por eso ahora los diáconos, que están en pie alrededor, le custodian no sea que alguno al pasar se atreva a hacer lo m mismo.

Así pues el pueblo entero desfila, uno a uno, inclinándose todos tocando primero con la frente y luego con los ojos la Cruz y el rótulo; luego besan la Cruz y la pasan, pero nadie alarga la mano para tocarla”. *** La vida en la cristiana Jerusalén se desarrollaba dentro de la más absoluta normalidad hasta que entre los años 610 y 614 –pues aquí los historiadores no se ponen de acuerdo– el general persa Sharvaraz, en tiempos del emperador sasánida de Persia, Cosroes o Khosro II, tomó Jerusalén y tras la victoria se llevó a Persia la Vera Cruz.

En cuanto la tuvo en su poder, el soberbio emperador la puso a los pies de su trono para pisarla como símbolo de desprecio a la religión de los cristianos. Pero el año 627, Heraclio, emperador de Bizancio, derrotó a los persas en la batalla de Nínive, la actual Mosul junto al río Tigris. Posteriormente invadió Persia y recuperó la Vera Cruz, así como la lanza que usó Longinos para acabar con la agonía del Señor y la esponja con la que

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humedecieron sus labios con vinagre para mitigar su sed, que también habían sido llevadas a Persia.

EL 14 de septiembre del año 628, Heraclio entró triunfal en Constantinopla y en 629 retornó la Vera Cruz a Jerusalén mediante una majestuosa ceremonia en la que fue llevada procesionalmente a través de toda la ciudad por el mismo emperador.

Durante el trayecto ocurrió un hecho milagroso del cual dice la tradición: “El emperador, vestido con las insignias de la realeza, quiso llevar en exaltación la Cruz hasta su primitivo lugar en el Calvario, pero su peso se fue haciendo más y más insoportable. Zacarías, obispo de Jerusalén, le hizo ver que para llevar a cuestas la Santa Cruz debería despojarse de sus vestidos reales e imitar la pobreza y humildad de Jesús.

Heraclio, con pobres vestidos y descalzo, pudo así llevar la Cruz hasta la cima del Gólgota.”

que en 1870 el prestigioso arquitecto y botánico francés Charles Rohault de Fleury (1801-1875), estudió en profundidad tan controvertido tema y llegó a la conclusión de que la suma de todas las reliquias de la Cruz existentes alcanzan a un tercio de una cruz de tres o cuatro metros de altura, según publicó en su libro “Memoria sobre los instrumentos de la Pasión”.

Desde entonces y como conmemoración del rescate de los preciados atributos de la Pasión de Cristo se celebra cada 14 de septiembre la Exaltación de la Santa Cruz y cada 3 de mayo se conmemora el hallazgo de la reliquia, con la fiesta denominada Invención de la Santa Cruz.

Basílica de la Santa Cruz de Jerusalén en Roma

Hay fragmentos de la Vera Cruz en Francia, Austria y otros países, así como en la América española, donde existen algunos muy venerados en Argentina, Colombia, Costa Rica, Chile, Guatemala, Honduras, México y Venezuela.

El agotamiento derivado de las guerras entre romanos y persas (sasánidas) destruyó a ambos imperios, lo que facilitó la rápida expansión del Islam y así, los árabes conquistaron Jerusalén el año 638. Menos mal que las sagradas reliquias estaban bien guardadas y no se perdieron, pero años después, en 1009, los seguidores de Mahoma arrasaron la Basílica del Santo Sepulcro perdiéndose la pista de la Vera Cruz que no apareció hasta el año 1099, cuando los Cruzados reconquistaron Jerusalén y de nuevo pudo adorarla los cristianos.

En España existen varias reliquias desgajadas del “Lignum Crucis”, repartidas en iglesias y monasterios que albergan algunas de las más de 250 cofradías y hermandades con la advocación de la Santa Vera Cruz.

***

La otra está en León y es la que posee la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz. Procede del trozo de la Cruz más grande del Mundo, que está en el monasterio cántabro de Santo Toribio de Liébana y cuya autenticidad no admite dudas, pues un profundo análisis realizado en 1958 demostró que corresponde a la especie Cupresus sempervirensde la que se ha hablado al principio.

Con el tiempo, del “Lignum Crucis” de Roma se obtuvieron pequeñas partículas que se compartieron con varios templos y santuarios, como la Basílica de la Santa cruz de Jerusalén, en Roma, muy cerca de la Basílica de San Juan de Letrán.

Los críticos y enemigos del Cristianismo, entre ellos Calvino y la mayoría de los protestantes, dudaron durante siglos de que tan gran número de partes correspondiesen a la Vera Cruz, hasta

En la provincia de León hay dos. Una está engastada en el bello relicario de plata dorada de finales del siglo XII que, según la tradición, perteneció a los templarios de Ponferrada y se guarda en el Museo de Astorga.

Se dice que esta reliquia llegó a España traída por Santo Toribio, obispo de Astorga, el cual

40 “Lignum Crucis” de Santo Toribio de Liébana

viajó en el siglo V a Jerusalén. Los primeros años se conservó en la antigua Astúrica Augusta, pero en el siglo VIII se produjo la invasión islámica y ante el miedo a que fuese destruida o robada por los musulmanes fue trasladada, junto a los restos del obispo asturicense Toribio, a los montes de cántabros para su depósito en un lugar seguro, como era el monasterio de Liébana, donde había menos peligro al estar allí bastante consolidada la Reconquista.

Vera Cruz, tiene el privilegio de poseer un trocito de la Cruz del Redentor procedente del “Lignum Crucis” lebaniego, que llegó a León en 1959 gracias a las gestiones del entonces obispo de la diócesis D. Luis Almarcha Hernández,quien la donó a nuestra Cofradía y ésta, con legítimo orgullo,la muestra a los fieles por las calles de León en los desfiles profesionales con toda solemnidad, como corresponde a tan preciada reliquia, símbolo de la Cristiandad.

En el siglo XVI fue dividida y colocada en forma de cruz en un relicario de plata dorada y en el siglo XVII el cronista de la orden benedictina, Fray Prudencio de Sandoval, escribió: “La reliquia corresponde al brazo izquierdo de la Santa Cruz, que la Reina Elena dejó en Jerusalén cuando descubrió las cruces de Cristo y los ladrones. Está serrado y puesto en modo de Cruz, quedando enteroel agujero sagrado donde clavaron la mano de Cristo.”

Como queda dicho, la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa

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Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

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Efemérides Cruz de Mayo El pasado 8 de mayo de 2016, celebramos la Festividad de la Cruz de Mayo, por medio de una eucaristía en nuestra Iglesia de San Martín y la adoración de la Reliquia de la Santa Vera Cruz de la Cofradía.

En este acto litúrgico contamos con la participación de los niños del Grupo de Catequesis de la Cofradía que portaron una Cruz que ellos mismos realizaron con claveles.

Corpus Chico La festividad del Corpus Chico se celebró el pasado 5 de junio con la Diana Floreada anunciando la Santa misa y la Solemne Procesión, contando con las RR. MM. Concepcionistas, parroquia del Mercado y las RR. MM. Benedictinas. Así como del barrio entero que engalanó balcones al paso del Santísimo.

Al finalizar la procesión en la Plaza Mayor el Santísimo bajo palio, pisó el mosaico floral que tradicionalmente engalana la citada plaza, siendo acompañados en el transcurso de toda la procesión por la Banda Municipal del Excelentísimo Ayuntamiento de León.

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Efemérides Abad Honorario El pasado día 5 de junio de 2016, festividad del Corpus Chico, una vez finalizada la comida de hermandad en los salones del hotel Conde Luna, y como es tradición en esta Real Cofradía, se le hizo entrega, por parte del Abad de la misma, del título de Abad Honorario Perpetuo al Hno. Clemente Cuevas Fernández, Abad que fue de esta cofradía el bienio 2010/2011. Qué sea enhorabuena hermano.

Fin de Semana Solidario El fin de semana de nuestra Procesión del Corpus Chico, y dentro de los actos organizados por nuestra Cofradía, se llevó a cabo una comida solidaria en el patio del Palacio Jabalquinto, donde tenemos nuestra Secretaría. A ella podía acudir cualquier persona a comer en familia unos alimentos adquiridos y elaborados por miembros de la Cofradía. Se habilitó una bandeja para donativos, que con posterioridad se donaron íntegramente a la Parroquia de San Martín para su obra social.

Además, una vez concluida la comida, todos aquellos alimentos y dulces que sobraron, se donaron al Albergue de Peregrinos del Monasterio de las MM Benedictinas (Carbajalas), quienes los recibieron con gusto y agradecimiento.

Festividad de la "Exaltación de la Cruz" Los pasados 10 y 11 de septiembre tuvieron lugar los actos conmemorativos de la Exaltación de la Cruz, impartiéndose una conferencia sobre la Vera Cruz a cargo de Ricardo Ferradal y Eduardo Álvarez Aller, en el monasterio de las RR. MM. Benedictinas. El día 11 se realizó el traslado procesional de la reliquia del Lignum Crucis desde el citado monasterio a la iglesia de San Martín, celebrándose la preceptiva Eucaristía con posterior adoración de dicha reliquia. Para concluir, como es costumbre, con el tradicional vino con aceitunas en el Bar Casa Benito.

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Efemérides Festividad de San Martín El pasado 13 de noviembre se celebró la festividad de San Martín, con procesión por las calles de nuestro barrio, y posterior misa en la parroquia, asistiendo el hermano Abad y la Junta de Seises.

500 Años de las Concepcionistas El Diciembre pasado se celebraron los 500 años de la Fundación de la Purísima Concepción de León (1516-2016) con los siguientes actos en la Iglesia del Monasterio. día 15 de Diciembre Conferencia: "Vinculación entre las Concepcionistas y el santuario de la Virgen del Camino".

D. Fernando García O.P. Concierto: Coro Vegazana Día 16 de Diciembre Conferencia: "Fundación del Monasterio de León.

Fundación e Historia de la Purísima Concepción de Ponferrada".

Hº Marista José Diego Rodríguez Cubero.

Conferencia: "El Cristo de la Cruz Quemada y el Lignum Crucis" Máximo Cayón Diéguez.

Día 17 de Diciembre Clausura del V Centenario.

Eucaristía solemne.

Coral Gregoriana del Císter de Sandoval.

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Efemérides Presentación nuevo cartel El pasado Miércoles de Ceniza día 1 de marzo, al finalizar la Santa Misa en la iglesia de San Martín, fue presentado el cartel oficial de nuestra Cofradía anunciador de los actos que realizará a lo largo de esta Semana de Pasión. Es obra del Hno. José Alfonso Iglesias Rey.

Virgen de la Soledad 1917-2017 Este año 2017 celebramos como efeméride especial el centenario de la incorporación al patrimonio de la Cofradía de la imagen de nuestra Virgen de la Soledad, o “Virgen Guapa” como habitualmente es conocida en el ambiente cofrade.

La imagen, bajo palio, es procesionada en las tardes del Viernes Santo en los años en que la Cofradía de la Real de Minerva y Vera Cruz organiza la procesión del Santo Entierro cerrando el cortejo procesional, como todos sabemos, y gozando del privilegio de ser la misma portada a hombros, durante parte de su recorrido por los miembros de la Corporación Municipal, en su calidad, el Excmo.

Ayuntamiento, de Patrono Perpetuo de la Cofradía.

Con tan extraordinario motivo de su centenario se han organizado y celebrado actos conmemorativos en honor de la Virgen de la Soledad, a través de una exposición fotográfica e iconográfica de la misma en los salones del Excmo. Ayuntamiento de León, plaza de San Marcelo, Concejalía de Turismo, a quien expresamente queremos agradecer su inestimable apoyo y colaboración.

Culminan los actos con un Solemne Besamanos, en fecha 18.03.2017, celebrado para expresión de devoción en la Iglesia parroquial de San Martín, sede canónica de la Cofradía, con gran éxito de participación y colaboración que vino a demostrar el cariño y devoción que, desde la cofradía y feligresía en general, se viene demostrando hacia nuestra Virgen Guapa.

Exposición sobre la Obra de Manuel López Bécker Del 20 al 26 de marzo del 2017 se desarrolló una serie de actos organizados por la Cofradía leonesa del Cristo del Perdón, en torno a la obra de escultor Manuel López Bécquer. El eje central era una exposición de las imágenes que ha realizado no sólo en nuestra provincia, en la que estuvieron presentes las tres pertenecientes a nuestra Real Cofradía. Además se ofreció una charla el día 23 de marzo a cargo del Abad Honorario Elías Álvarez Frade sobre nuestra Cofradía y patrimonio artístico.

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Efemérides Jornadas del Santo Sepulcro en Sahagún Como en años anteriores esta Real Cofradía asistió y participó en los actos programados en las VIII Jornadas del Santo Sepulcro, que se organizaron en la localidad de Sahagún del 18 al 26 de marzo de 2017. En la exposición localizada en “La Peregrina”, se mostraron varios objetos y enseres del Paso Santo Sepulcro de nuestra Cofradía.

Minerva y Vera Cruz, el Martes Santo en Oviedo Miembros de la representación de Minerva en la procesión del Martes Santo en Oviedo, acompañando a nuestra Cofradía hermana del Silencio y de la Santa Cruz.

En Oviedo celebrando la concesión del título de "Real" Minerva en Oviedo celebracion del reconocimiento a nuestra cofradía hermana con motivo de la concesión del título de Real.

Cartel oficial de la Junta Mayor de la Semana Santa

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Este año el cartel oficial elegido por la Junta Mayor de la Semana Santa 2017 ha resultado ser una fotografía de nuestro Cristo del Desenclavo, obra de Moisés García Martínez. Qué sea enhorabuena.

“León de Intermediación y Relaciones Públicas, S.L.”

“...ponemos en relación sus intereses...”

administracion@leinter.es

VOLUNTARIADO y acción Social Comisión Benéfica de la Real Cofradía César Benítez Bardal Responsable de la Comisión Benéfica

Año de la Misericordia

E

El pasado 20 de noviembre de 2016 se cerró oficialmente el Año dedicado por el Santo Padre a la Misericordia. Ha sido un año en el que los cristianos hemos hecho un mayor esfuerzo en cuanto a humanidad y solidaridad. Y es que no hemos de olvidar que Jesús nos pidió que amásemos a los demás.

Etimológicamente el término Misericordia viene del latín “misere” (miseria, necesidad), “cor” “cordis” (corazón), e “ia” (hacia los demás). Es decir, significa tener un corazón solidario con los demás, con todos aquellos que pasan necesidad bien material o espiritual.

Parroquia de San Martín para su Cáritas Parroquial. Además hemos realizado cuatro donaciones de ropa en perfecto estado que nosotros mismos entregamos a Cáritas Diocesana, numerosos juguetes para todos aquellos niños que no pueden adquirirlos, productos de higiene y colonias, sin olvidarnos de las donaciones económicas para sufragar algún gasto de quien lo necesita.

En cuanto a la misericordia espiritual, también quiero destacar nuestro corazón solidario.

Siempre estamos dispuestos a estar con quien nos necesite, no solamente para darle ayuda material sino también compañía y consuelo. No hay que olvidar la labor de nuestro Grupo de Voluntariado que comparte tanto tiempo con personas de la Residencia de San Cayetano de la Asociación ASPACE, dándoles cariño y muestras de solidaridad.

Los miembros de una Cofradía, como miembros de una congregación cristiana han de cultivar y a la vez fomentar la cualidad de la misericordia.

Nuestra Cofradía así lo hace. Son numerosas las obras que realiza a lo largo del año para con los demás por sus propios medios o colaborando con la Parroquia de San Martín, su sede eclesiástica.

En cuanto a la misericordia de ámbito material quiero destacar la recogida y donación de alimentos que realizamos la semana anterior a la Navidad, para que los vecinos de nuestra Parroquia no pasen tanta necesidad. Se recolectaron unos 1000 kilos de comida que se donaron a la

Siempre destacamos nuestra Obra Social y Humana. Somos miembros de una Cofradía Misericordiosa, una Asociación de fieles cristianos que ayudan a los necesitados de su Parroquia, de su comunidad, de su ciudad. Y es que no hemos de olvidar que todos somos Hermanos en Cristo Jesús, y hay que amar al prójimo. Por amar entendemos el hecho de darnos, de compartir, de ayudar, pero no hacerlo por lástima.

El Año dedicado a la Misericordia ha concluido, pero la labor social y humana de nuestra Cofradía seguirá siendo una realidad, como lo ha demostrado durante tantos años.

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VOLUNTARIADO y acción Social Grupo de Voluntariado de la Real Cofradía Está formado por miembros de esta congregación cristiana. No somos un grupo muy numeroso en cuanto a miembros pero si en cuanto a nuestra labor. Las colaboraciones son por un lado con asociaciones de nuestra Iglesia, bien sea con Cáritas Parroquial de San Martín o con Cáritas Diocesana, y por otro lado colaboramos también con asociaciones leonesas de enfermos como ASPACE, ALCLES, o AFA-León entre otras.

Hemos intensificado nuestras intervenciones individuales a fin de abrir más el campo de acción de nuestros voluntarios, haciendo acompañamientos individuales o participaciones en otras actividades o eventos solidarios representando a nuestra Cofradía y a nuestra Iglesia.

Actividades destacadas de nuestro Voluntariado • Acompañamiento a chicos de ASPACE en Residencia de San Cayetano.

• Salidas culturales con miembros de ASPACE LEÓN. • Colaboración en Mesas Informativas y cuestaciones para Asociaciones.

• Colaboración en el desarrollo de festivales y certámenes benéficos.

• Donaciones diversas para varias Asociaciones como Cáritas Diocesana.

• Participación en eventos benéficos a favor de causas sociales.

• Asistencia a ponencias y cursos de formación continua.

Ejemplo a seguir Todos nuestros voluntarios dedican parte de su tiempo a colaborar con esta Cofradía a fin de realizar la acción social que tantas veces pasa inadvertida, pero que sí es valorada por quien la recibe.

Y es que ellos son un ejemplo a seguir, verdaderos Cristianos de obra que comparten su vida con los necesitados prestándoles su apoyo y cariño.

Siempre estamos ahí por si alguna asociación o causa nos requiere para prestarles nuestra colaboración. Y es que nuestros voluntarios son todo un ejemplo de solidaridad. Ellos han demostrado que viven la Misericordia, tanto material como espiritualmente. No es sentir lástima por los demás, es amarles y darnos a quien nos necesita.

Cerca de una década de existencia Al concluir este año de 2017 contaremos con diez años de existencia en el trascurrir de esta, cuatro veces centenaria, Cofradía. Seguro que otros continuarán nuestra labor solidaria en los años venideros, ya que es una acción vital en toda Cofradía. No hay Fe sin obras, y qué mejor obra que la que Jesús nos enseñó: Amar a Dios y los demás.

No quiero finalizar este artículo sin dar las gracias a todas estas maravillosas personas que representan a nuestra Cofradía a lo largo del año, y que han compartido tantas vivencias en esta década de existencia del Grupo de Voluntarios de Minerva y Vera Cruz.

El Reconocimiento Especial de ASPACE en 2016 Son numerosas las muestras de agradecimiento que recibimos tanto como Grupo de Voluntariado de nuestra Cofradía como individualmente por nuestra colaboración. Por medio de correos electrónicos, cartas o a través de sus páginas web, dan cuenta de su gratitud hacia nuestra acción solidaria.

No hay que olvidar que somos miembros de una asociación sin ánimo de lucro por lo que

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VOLUNTARIADO y acción Social Comisión Benéfica de la Real Cofradía

no recibimos gratificación económica alguna por nuestra labor. Tampoco recibimos dinero de nuestra Cofradía para nuestros gastos de desplazamiento o dietas, que son sufragados por el propio voluntario. Un simple gracias es suficiente para nosotros, o una sonrisa nos muestra que nuestra labor ha sido recompensada con creces.

En este año de 2016 que ha terminado, nuestro Grupo de Voluntariado recibió de ASPACE una mención especial por nuestra labor con ellos, que ya dura nueve años. La Cofradía es la que recibe esta muestra de agradecimiento ya que somos parte de su Comisión Benéfica, como muestra el rótulo del detalle que nos entregaron por nuestra labor solidaria y que fue realizado por los chicos de la Asociación. Todo un reconocimiento por nuestra labor.

Además, y a título individual, cada voluntario recibimos un pequeño obsequio también realizado por ellos en forma de medalla.

Han sido muchas las colaboraciones con esta Asociación a lo largo de estos años. Hemos colaborado en salidas culturales, campamentos, etapas del Camino de Santiago, y nuestra actividad de acompañamiento en la Residencia de San Cayetano.

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Seguiremos teniendo a nuestro cargo la Actividad de Acompañamiento, que como indican en sus memorias y página web, corre a cargo del Grupo de Voluntarios de la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz. Además siempre estamos dispuestos a colaborar en actividades de ASPACE como salidas, excursiones, cuidados o campamentos. Un voluntariado que ya es más una tarea en familia.

En cuanto a la Cofradía, comentar que acoge en sus actos a esta Asociación, invitándoles a participar en procesiones y eventos a lo largo del año.

El Paso Santo Sepulcro de nuestra Cofradía está hermanado con ASPACE y colabora de una forma especial con ellos.

En fin, un reconocimiento a una “Vera” Cofradía.

VOLUNTARIADO y acción Social Desde el otro lado

Arancha García Malagón

E

Estas líneas para mí son muy importantes.

Van a marcar el cierre de una etapa fundamental para mí como Responsable del Ocio y Voluntariado de ASPACE León durante ocho años.

Cuando llegué a este puesto no tenía mucha idea de casi nada: qué necesidades tienen estos chicos, cómo facilitarles espacios y actividades de ocio a partir de sus características y gustos, cómo encontrar voluntarios, qué trato darles, cómo hacerles sentir a gusto con nosotros, y un largo etc.

En el caso del voluntariado, sólo sabía lo justo y necesario que ves a través de noticias y en los apuntes de la carrera.

Aun sabiendo el papel tan tan importante que tienen los voluntarios de cualquier asociación sin ánimo de lucro, ya sea de atención mundial como Médicos sin Fronteras o UNICEF, de atención a toda la población en situación de riesgo como

Cruz Roja o Cáritas, o entidades como ASPACE León, que atiende a un colectivo menos numeroso pero igual de importante que los demás, hasta que no vives de cerca la experiencia, no te das cuenta ni sabes valorar el papel tan esencial y lo que implica ser voluntario.

Durante estos años he tenido la gran oportunidad de ser espectadora de primera fila de las historias y vínculos que se crean entre los voluntarios y las personas a las que ayudan.

No es fácil crear esos lazos ya que nuestros chicos están acostumbrados a rodearse de gente (sin contar a sus familias por supuesto) que les atiende, les cuida, les da cariño y alegría y, en definitiva, les ayuda a hacer su vida más fácil y mejor. Pero la mayor parte de esas personas están de paso y muy pocas se quedan ya que cada cual sigue su camino. Por eso es imprescindible que la

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VOLUNTARIADO y acción Social persona que se hace voluntaria sea consciente de la importancia del compromiso que adquiere y que para ello necesita dedicar algún tiempo de su vida a ello.

En el caso de ASPACE León, nos sentimos muy afortunados por contar en nuestra familia con nuestros voluntarios. El grupo que forman los miembros de esta Real Cofradía lleva ya mucho camino a nuestro lado, para ser exactos poco más de mis ocho años como responsable, dando una imagen real y seria de lo que conlleva comprometerse y dedicar tu tiempo a los demás.

Gracias a su dedicación estos años, nuestros chicos cuentan con un grupo de personas ajenas a sus familias y trabajadores de la asociación que les han llegado a conocer y querer a cada uno de ellos por cómo son, con los que saben que cuentan siempre, que les quieren, les aceptan, les dan alegría, diversión, aprendizaje, ganas de superación y, en resumen, les dan alas para llegar más lejos de lo que llegarían ellos solos.

Si preguntaras a cualquiera de nuestros chicos por alguno de nuestros voluntarios, inmediatamente sonreirían y se iluminarían sus ojos llenos de recuerdos vividos y con ganas e ilusión de las aventuras que están por llegar. También muchos de ellos podrían contar numerosas anécdotas de estas experiencias por lo que os animo a que un día nos visitéis y podáis conocer de su propia boca esas historias que os harán pasar un rato lleno de risas.

Para mí esa es la esencia del voluntario, ofrecer la oportunidad de experiencias, desde las más cotidianas hasta grandes aventuras que sin ellos no sería posible.

Como he dicho al principio, cuando me convertí en Responsable del Ocio y Voluntariado de ASPACE, mi experiencia y visión sobre la figura del voluntario era solo la plasmada en el papel, pero después de estos años puedo decir que no solo he visto y vivido lo que significa ser voluntario sino que soy muy afortunada de haber podido disfrutar de cada momento todos ellos.

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Habéis sido muchos los que nos habéis acompañado durante este tiempo desde esta Cofradía.

Algunos, por distintos motivos, han tenido que ir dejando sitio a personas nuevas, todos con gran ilusión y compromiso. También están los que desde el primer día, hace ya más de ocho años, nos han acompañado y ayudado y que, a día de hoy, siguen aportando su tiempo, cariño y alegría para hacernos la vida más feliz.

Estoy segura que sentís nuestro cariño y agradecimiento y aunque no nos pedís nunca nada, no está de más decirlo, aunque sea de vez en cuando, así que MUCHAS GRACIAS POR TODO. Y ahora llega mi momento, mi despedida como responsable del voluntariado pero no como compañera, ya que seguiré en esta familia aunque en distinto puesto y, en muchos casos, como amiga. Estoy segura de que esta nueva etapa va a ser igual de buena o mejor. Solo me queda deciros que gracias por todo lo que me habéis ayudado a crecer como profesional y sobre todo como persona en este tiempo. ¡¡Nos seguiremos viendo en el camino!!

Grupo de CAtequesis

L

La Cofradía ejerce su labor evangelizadora no solamente en sus actos de culto o procesionales, sino que lleva a cabo una actividad de catequesis infantil, destinada a niños y niñas de un máximo de doce años de edad. Los encuentros son mensuales, un sábado al mes con una duración de una hora y media. El lugar donde se desarrolla es en el Monasterio de Santa María de Carbajal, sito en la Plaza del Grano de nuestra ciudad.

Los temas a tratar en cada encuentro vienen determinados por dos aspectos: el calendario litúrgico y los actos de nuestra Cofradía. Se trabaja en el ámbito teórico, dotándoles a los asistentes de unos conocimientos de nuestra Iglesia y de nuestra Cofradía, y en el ámbito práctico realizando actividades de manualidades o representaciones entre otras.

La asistencia ha sido numerosa en la mayoría de los casos rondando una media superior a doce componentes. En total han acudido veintiún niños y niñas en este año 2016.

INTEGRACIÓN EN LOS ACTOS DE LA COFRADÍA – CATEQUESIS COFRADE En cuanto a los actos propios de la Cofradía, el Grupo de Catequesis ha colaborado en engrandecerlos, a lo largo del año: h En Mayo colaboraron en la realización de una Cruz adornada con claveles, que portaron en la Eucaristía de la Fiesta de la Cruz de Mayo. h En Junio confeccionaron unas banderas con los símbolos del trigo y las uvas, para adornar balcones y la balaustrada de San Martín en la Eucaristía del Corpus Chico. También se realiza una Cruz con claveles rojos que llevan en la Procesión Sacramental. h En Septiembre colaboran realizando la Cruz con claveles que portarán hasta la Iglesia de San Martín para celebrar la Exaltación de la Cruz.

h En Octubre hacen dos carteles del Domund para San Martín y para las Carbajalas. h En Noviembre confeccionan la tarjeta de Navidad de la Cofradía. h En Diciembre colaboran con el Fin de Semana Solidario, cantan villancicos y hacen una función de Navidad en el certamen benéfico para Cáritas Parroquial de San Martín.

CATEQUESIS RELIGIOSA Además de una formación cofrade, realizamos una enseñanza religiosa, que nos acerque a la vida de Jesús y a la Iglesia. Así en este año destacamos en cuanto a enseñanza religiosa: h Vida de Jesús: Nacimiento, vida, obra y milagros.

Pasión, Muerte y Resurrección. h Año Litúrgico: Durante el año hemos desarrollado los periodos correspondientes al ciclo litúrgico, con enseñanzas y tareas como la corona de adviento, la función de Navidad, tiempo ordinario con la vida de Jesús, Cuaresma y Pascua en torno a nuestra Semana Santa como representación de la Pasión del Señor. h El Sacramento de la Eucaristía en torno al culto al Santísimo. Procesión del Corpus. h El culto a la Cruz. Enseñanza en torno a la Cruz como símbolo de todos los cristianos, y las Fiestas de la Invención y la Exaltación de la Cruz. El Vía Crucis. h Vida de Santos, a lo largo del ciclo litúrgico. h Las Misiones y el Domund. Evangelización.

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Fin de Semana Solidario

Los días 17 y 18 de diciembre, se celebró nuestro Fin de Semana Solidario. Este se realiza siempre la semana anterior a Navidad, con el especial motivo de que todo lo que se logre recaudar se destine a la obra social que realiza Cáritas Parroquial de San Martín.

El sábado 17 de diciembre se realizó en la jornada matutina una recogida de juguetes en el Monasterio de las MM Benedictinas (Carbajalas), que con la ayuda de nuestros niños de catequesis, se trasladaron a la Iglesia de San Martín para des-

tinarlos a todos esos niños y niñas que no tienen posibilidad de recibir un regalo en Navidad. Todos los artículos, bien sean muñecos o juegos, se encuentran en perfectas condiciones.

Esa misma tarde se celebró un Festival Solidario en la Iglesia de San Martín, nuestra Sede Canónica, a fin de recaudar unos fondos para Cáritas Parroquial. La entrada era libre y se habilitaron unas bandejas para que las personas dejaran unos donativos para la obra social de la Parroquia. El Festival contó con las intervenciones de nuestros niños y niñas de catequesis, quienes interpretaron una función de Navidad y cantaron unos villancicos, y con la participación especial de la Coral Torreblanca de

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nuestra ciudad, que acudió desinteresadamente a colaborar con nuestra Cofradía de nuevo en esta ocasión. Todo lo recaudado, se donó al párroco de San Martín para ayudar a Cáritas Parroquial.

El domingo 18 re realizó un año más por nuestra Cofradía, una recogida de alimentos por nuestro Barrio de San Martín para donarlos a su Iglesia. Durante más de dos horas se recorrieron nuestras calles, que con anterioridad se había carteado y colocado carteles anunciadores, y con unos carros de un establecimiento colaborador, se fue-

ron recogiendo alimentos para los necesitados de la Parroquia. Contamos en esta ocasión con la colaboración de la Agrupación Musical de la Cofradía del Cristo del Gran Poder y con nuestros niños de catequesis que interpretaban villancicos durante el recorrido. Al finalizar el recorrido en la Iglesia de San Martín se hizo entrega de todo lo recaudado al Párroco y al secretario de Cáritas Parroquial. Este año se superaron los mil kilos de alimentos, y múltiples productos de higiene.

Una vez concluido la recogida y donación de alimentos, se llevó a cabo una comida solidaria ofrecida por nuestra Cofradía a todos los asistentes, en los salones parroquiales.

Jóvenes Papones de León... ¡Solo nos faltas TÚ!

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El pasado mes de octubre un grupo de jóvenes papones tuvimos la oportunidad de acercarnos a Palencia con motivo del IV encuentro de jóvenes de cofradías y hermandades.

Allí pudimos comprobar la realidad de la juventud en la mayoría de ciudades que tienen a la semana de pasión como un referente no solo turístico si no como medio de incentivar a los jóvenes durante todo el año mas allá de la procesión que realiza cada hermandad.

Con una serie de mesas redondas en las que hubo representación leonesa, nos hablaron de las diferentes iniciativas para que los jóvenes puedan integrarse y ser participes en hermandades de Jerez de la Frontera, Motril, Getafe, Sevilla, Alicante, Lorca, Tarragona, Córdoba y Cartagena, Desde la mirada de miembros de bandas, directivos, sacerdotes, “papones de acera” y comunicadores pudimos comprobar que la juventud no es el futuro, es el presente.

Es por ello que desde hace unos meses se está gestando en León un grupo de jóvenes papones

en el que todas las cofradías estén representadas y que puedan acercarse a la realidad de cada cofrade y cofradía, realizando una serie de actos en los que todos sin distinción podamos disfrutar de lo que nos une como papones, nuestra Semana Santa.

Tenemos los medios y las ganas, solo nos faltas tú, es por ello que te invitamos a contactar con tu cofradía y que puedas ponerte en contacto con el coordinador que ha designado para que, esto solo sea el comienzo de una gran aventura como Jóvenes Papones Leoneses.

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Colaboraciones, Sentimientos

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Un proceso buscado Ángel Suárez Corrons Hno de la cofradía

C

Con frecuencia pasa desapercibido el hecho de que la consumación de la historia de la salvación que estos días celebramos adoptase la forma de un proceso judicial en el sentido más estricto de la expresión, y sin embargo Jesús de Nazaret no llegó a él por casualidad.

La multitud de seguidores con los que contaba en todas las clases sociales, los prodigios que se le atribuían y, por encima de todo, el contenido de su predicación, provocaron la preocupación de las autoridades judías desde el primer momento de su vida pública, y por ello adoptaron enseguida medidas tendentes a su investigación y enjuiciamiento.

El Gran Sanedrín de Jesuralén era el máximo órgano de gobierno del pueblo judío, y en él estaban presentes los tres pilares en los que residía la identidad judía del siglo I: los ancianos, representantes de la aristocracia y del poder económico y social, los sumos sacerdotes, depositarios de la legitimidad teológica asentada en el Templo, y los escribas, juristas expertos en la Ley de Moisés y en la tradición. El proceso de Jesús de Nazaret comenzó como una averiguación policial a instancia de este Sanedrín, que envió escribas a investigar las actividades y el contenido de la doctrina del galileo. Esta especie de persecución policial acompañó a Jesús durante la práctica totalidad de su actividad pública, como atestiguan Mc 12,13, “Y

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envían hacia él algunos fariseos y herodianos para cazarle en alguna palabra”, o Lc 20,20, “le enviaron unos espías para que fingieran ser justos, para sorprenderle en alguna palabra y poder entregarle al poder y autoridad del procurador”. Jesús fue siempre consciente de su presencia y de sus intenciones, pero no eludió las trampas que le tendían ni evitó entrar en debate con ellos, como prueban episodios como el del tributo al César,entre otros muchos de sobra conocidos.

Nicodemo, un rico fariseo, escriba y maestro de la ley, miembro del Sanedrín, fue uno de estos comisionados, y en el ejercicio de su misión investigadora mantuvo con Jesús el interesantísimo

diálogo que recoge Jn 3,1ss. Posteriormente, en una de las sesiones en las que el Sanedrín trata el problema del galileo, concretamente la de Jn 7,45-

52, es precisamente Nicodemo, a quien se identifica como “el que había ido anteriormente a Jesús”, quien reclama un proceso justo para el acusado: “¿Acaso nuestra ley juzga a un hombre sin haberle antes oído y sin saber lo que hace?”.

La actitud de Nicodemo no sólo pone de manifiesto su prudencia como magistrado y la impresión que las palabras de Jesús habían causado en él como jurista y como recto judío, su exigencia de un proceso tiene relevancia por cuanto el delito del que se acusaba a Jesús entraba dentro de los que legalmente podían ser sancionados con la pena de muerte sin juicio previo. La pena de karet, en efecto, permitía la ejecución, generalmente por lapidación, de quien fuese sorprendido en flagrante comisión de determinados delitos de especial gravedad. Tenemos un famoso ejemplo de tentativa de aplicación de la pena de karet en el caso de la adúltera a la que el mismo Jesús salva (Jn 8,1ss.).Se trata de una forma de justicia popular que no es extraña en el mundo antiguo, ni siquiera en la civilizada Roma, en la que se permitía la ejecución impune en casos de adfectatioregni, es decir, de quien pretendiese reinar en contra de la constitución de la república romana. Fue la institución que enarbolaron como justificación los asesinos de Julio César en los idus de marzo del 44 a.C. Ahora bien ¿Cómo casa el que los judíos pudieran aplicar la pena de karet en tiempos de Jesús con el llamado iusgladii, es decir, con el derecho exclusivo del prefecto romano a ejecutar la pena de muerte? La explicación es que la injerencia del imperio invasor en territorios como el de Judea se limitaba a la política exterior, la recaudación de impuestos y el mantenimiento del orden público, de forma que las cuestiones propias del tejido social del pueblo ocupado quedaban únicamente en manos del Sanedrín y de las leyes judías. La ejecución de una adúltera o de un blasfemo con arreglo a estas no preocuparía a la autoridad romana en tanto no fuese susceptible de causar disturbios públicos. La ejecución de Jesús, sin embargo, dada su relevancia social e implicaciones políticas, y con Pilato instalado en Jerusalén para la Pascua, no habría sido posible sin el consenso de este.

La predicación de Jesús, en cualquier caso, derivó en las acusaciones más graves que podía contemplar un sistema teocrático como el judío.

Para el delito de incitación a la idolatría se preveía en el libro del Deuteronomio la ejecución inminente (Dt 13,10), y por eso Jesús fue objeto de varias tentativas de karet. Las palabras “Yo Soy” en Jn 8,58, y “Yo y el Padre somos uno” en Jn 10,30, entraron de lleno en el tipo penal y por ello provocaron sendos intentos de lapidación de los que Jesús escapó milagrosamente: “entonces tomaron piedras, pero Jesús se ocultó y salió del Templo”

(Jn 8,59), “se les escapó de las manos” (Jn 10,39b), o “Al oír estas cosas todos los de la sinagoga se llenaron de ira y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad y le llevaron a una altura escarpada del monte (…) para despeñarle, pero él, pasando por en medio de ellos, se marchó” (Lc 4,28-30).

En conclusión, desde el punto de vista histórico es evidente que Jesús, tanto como rabbi con un profundo conocimiento de la ley como por los conatos violentos vividos en carne propia, sabía que su predicación le llevaría a un final cruento.

Desde el punto de vista de la fe, se diría que la Providencia no quiso que ese sacrificio adoptase una forma que, por más respaldo jurídico que tuviese, pudiera ser interpretado por los siglos venideros como una suerte de linchamiento, sino que, por el contrario, fuese el resultado de un proceso lo más riguroso posible, en el que el Siervo de Yavhé fuese juzgado con plena libertad tanto por las autoridades, sacerdotes y juristas de su pueblo elegido, como ante los representantes del imperio que se encontraba en la vanguardia de la civilización y del derecho.

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Queridos Hermanos en Cristo Juan Antonio Rodríguez-Pládano Rodríguez Hermano Mayor de la Ilustre Hermandad de la Santa Vera-Cruz de Gijón

P

Permitidme que me presente, mi nombre es Juan Antonio Rodríguez-Pládano, Hermano Mayor de la Ilustre Hermandad de la Santa Vera-Cruz de Gijón y que a la vez exprese mi más sincero agradecimiento a nuestro Abad César Benítez y al conjunto de la Junta Directiva de Minerva y Vera Cruz por la oportunidad que me brindan para, a través de estas líneas en vuestra revista, haceros una pequeña semblanza de la Hermandad que humildemente presido y de la Semana Santa de Gijón.

Si Hermanos, en Gijón también tenemos Semana Santa… y Cofradías… y Hermandades Penitenciales y la Vera Cruz es una de ellas.

Gijón no es una ciudad “fácil” en estos menesteres, ya que aunque nadie duda de la presencia y arraigo de la fe cristiana en nuestra Villa, si parece que está mal visto y hay cierto recelo a mostrarla públicamente, un temor reverencial a ser señalado y sobremanera en estos tiempos tan convulsos que nos tocan vivir parecen ser causa suficiente para quedarse en casa y renunciar a vivir abiertamente una de nuestras tradiciones más antiguas…

Nuestra Semana Santa es humilde, parca en recursos y en ayudas tanto económicas como institucionales, con todo ello dos Hermandades, la Ilustre Santa Vera Cruz que data de 1642 y la Ilustre Santa Misericordia fecha-

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da en 1784, junto con la Ilustre Cofradía del Santo Sepulcro creada en 1942, todas ellas con sede canónica en la Parroquia Mayor y Principal de S. Pedro, conforman la Junta Mayor de Gijón y son las encargadas de organizar los actos públicos de fe en la ciudad.

Como todo en esta vida las propias Hermandades y Cofradías ha gozado y sufrido también los avatares del paso del tiempo, con momentos gloriosos y pujantes que se han alternado con otros más sombríos y devastadores.

La Guerra Civil, además de la inmensa tragedia humana que fue en sí misma, también supuso para la Semana Santa Gijonesa un completo desastre por la destrucción, en su totalidad, del rico patrimonio iconográfico del que disponía, tronos e imágenes desaparecieron pasto del fuego entre las ruinas de las diferentes iglesias del término municipal de Gijón de las que tan solo se salvó una, el santuario que acogía a la patrona de la Villa, Ntra. Sra. de Contrueces.

Grupos escultóricos como ”La Oración del Huerto”, “La Coronación de Espinas”, “Los azotes en la Columna”, “El Nazareno”, “La Dolorosa” y tantos otros se perdieron para siempre….

Es en este punto donde volviendo la vista al año 1938

donde hemos de recordar con inmenso agradecimiento como la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz cedió para aquella ocasión parte de su patrimonio escultórico para poder retomar en las calles las procesiones, a Gijón acudieron con La Piedad, San Juan y El Cristo Yacente en su Sepulcro traídos desde León a donde retornaron dejando para el recuerdo de tal gesto en nuestra Villa una calle con el nombre de la ciudad de León.

dicha Cofradía permitió que las tres entidades que la integraban recuperasen de nuevo su identidad y autonomía de la que hoy día gozan.

Esta fue la semilla que contribuyó a la posterior recuperación tanto humana como patrimonial con la adquisición de nuevas imágenes que trataron de paliar la ausencia de las ya desaparecidas. En su punto más álgido la Ilustre Cofradía del Santo Entierro y de La Misericordia, que aglutinaba bajo ese nombre todas las anteriores, llegó a sobrepasar los 4.000 HermanosCofrades, recuperando antiguas procesiones y costumbres que perduraron hasta 1973, año en el que se pudo contemplar la última de las manifestaciones públicas de fe.

Participamos de todas cuantas procesiones salen a las calles durante la Semana Santa, comenzando el Domingo de Ramos en la Procesión de la Borriquilla, organizando las procesiones del Martes y Miércoles Santo, “La flagelación” o procesión del Silencio y la ”El Encuentro Camino del Monte Calvario” respectivamente, el Jueves Santo en el “Vía Crucis del Sto. Cristo de la Misericordia y los Mártires”, el Viernes Santo en la solemne procesión de “El Santo Entierro de Cristo”, “La Soledad de María” en la mañana del Sábado y en “El Encuentro de Resurrección” que tiene lugar el Domingo de Gloria, es durante esta última procesión del programa oficial, donde tiene lugar uno de los momentos más vistosos y a la vez emocionantes que protagoniza el “Paso de San Pedro” porteado sobre los hombros de mujeres y hombres de la Vera Cruz, el paso al completo realiza tres genuflexiones, rodilla a tierra, de forma consecutiva que represen-

De “travesía por el desierto” se puede calificar este periodo que concluye en 1995, cuando un grupo de entusiastas rescata del sueño de los justos la Cofradía del Santo Entierro y de la Misericordia para poner de nuevo la Semana Santa ante los ojos de los ciudadanos de la Villa de Gijón, así fue hasta 1998 en que tras una reforma estatutaria de

En la actualidad la Ilustre Hermandad de la Santa y VeraCruz de Gijón registra entorno a los doscientos Hermanos entre adultos y jóvenes, formando estos últimos una incipiente banda de tambores orgullo de la Hermandad.

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tan la súplica de perdón de San Pedro al Jesús Resucitado por el agravio que le infligió cuando aquél le hizo las tres negaciones.

Son patrimonio de la Hermandad las siguientes imágenes,

“Jesús Nazareno con la Cruz a cuestas” que data del año 1941 del Imaginero valenciano Ballester Vilaseca, es esta imagen El Titular de la Hermandad.

Este paso fue concebido inicialmente como una Vera Cruz desnuda, de la que pendía únicamente el lienzo usado para el descendimiento de Cristo al que acompañaban los atributos de la pasión, la lanza, el hisopo, las escaleras….se completó en 2005 con la adquisición del grupo escultórico de María con el cuerpo de Jesús en sus brazos y se convirtió por su belleza y dimensiones en el paso más espectacular de cuantos procesionan.

“La Verónica” (Morón de la Frontera 2008) también del anterior autor. Paso exclusivamente llevado por mujeres desde 1995.

“Las Lágrimas de San Pedro” (Valencia 1943) de Ballester Vilaseca.

“El Prendimiento” (1950) de Antonio Borrego.

“La Santísima Trinidad” (sin datar)

“La Flagelación” o “Jesús atado a la Columna” (Gijón 1957) de José de Seoane.

“La Piedad al pie de la Cruz” (Morón de la Frontera 2005) del prestigioso imaginero Manuel Marín Nieto.

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Fuera ya de la propia Semana Santa tenemos encomendada la organización de la Procesión de Nuestra Sra. de El Carmen, en el mes de julio, la de Ntra. Sra. de La Soledad, Patrona de los marineros de Gijón y muy vinculada a los orígenes de la Hermandad por ser en su capilla donde esta tiene su sede canónica y el besapié de El Cristo de Medinacelli de gran devoción en la Villa.

Para nosotros como Hermandad supuso un hito histórico y a la vez un reto organizar en el año 2006 la XXXIII Peregrinación Nacional de Hermandades y Cofradías de la Vera Cruz de toda España, en la que se dieron cita unas 700 personas venidas

a nuestra ciudad de toda la geografía española, todo un éxito en boca de la Confraternidad Nacional de Hermandades de la Vera Cruz de España en la que desde hace 4 años tenemos la responsabilidad de coordinar la Zona Norte de España.

También supuso motivo de orgullo la edición y publicación del libro “La historia de la Ilustre Hermandad de la Santa Vera Cruz, 1642-2014”, recopilada por nuestro Cronista Oficial D. Miguel Dongíl y Sánchez Profesor de Historia en la Universidad de Oviedo tras una ardua labor de investigación documental.

Obras sociales varias y campañas de ayudas junto con otro tipo de colaboraciones y actividades lúdicas completan la agenda que se desarrolla a lo largo de todo el año, sirviendo nuestra Hermandad de elemento dinamizador de todos sus miembros.

Solo me resta invitaros de corazón a visitar nuestra ciudad y disfrutar también en alguna ocasión de nuestra Semana de Pasión así como agradeceros de nuevo esta oportunidad que habéis brindado para abrir una pequeña ventana y poder así presentaros nuestra humilde pero a la vez ilusionante Semana Santa y también a la Hermandad que con mucho orgullo represento.

Os deseamos desde Gijón una muy feliz Cuaresma y Semana Santa.

Cuando León rescató la Semana Santa de Gijón en 1938 Miguel Dongil y Sánchez

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Este es el título del libro, de reciente aparición, que supone el resultado de mi investigación sobre la Semana Santa de la ciudad asturiana de Gijón del año 1938.

El interés por esta cuestión vino suscitado por los lazos de amistad de la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz y la Ilustre Hermandad de la Santa Vera Cruz, de Gijón, de la cual soy hermano cofrade.

En aquella Semana Santa de 1938 hunden sus raíces las buenas relaciones entre las cofradías de León y Gijón, bajo la advocación de la Santa Vera Cruz. Además del recuerdo lejano de la colaboración en aquella Semana Santa apenas había información sobre los sucesos ocurridos y, mucho menos, un relato detallado sobre los mismos.

Por el deseo de reconstruir los hechos acaecidos en aquel lejano año y celebrar la larga amistad de las dos cofradías, por parte de ambas corporaciones se me propuso (dada mi profesión de escritor, profesor e historiador especialista en Historia de la Iglesia) la tarea de realizar varias conferencias sobre esas Semana Santa tan especial. Dada la magnitud de la investigación y de los resultados obtenidos propuse a ambas Juntas de Gobierno la idea de publicar los resultados de mis pesquisas en formato de libro, el cual serviría como un gran y simbólico homenaje a esas buenas e históricas relaciones.

Mi propuesta contó con el visto bueno general y se sustanció con el apoyo material de la edición del libro a cargo de la Minerva y la Santa Vera Cruz de León y con el apoyo simbólico de la Santa Vera Cruz de Gijón al haber ofrecido a un servidor, como Cronista de la Hermandad, para su redacción.

Quisiera aprovechar este contexto para detallarles que en este pequeño libro, editado este año 2017, relato con todo lujo de detalles el desarrollo de aquella Semana Santa gijonesa de 1938.

Desde el parón de las procesiones de Semana Santa, por el inicio de la Guerra Civil española, la primera que pudo volverse a celebrar con normalidad en esta ciudad asturiana fue la del año 1938. El problema se encontraba en que Gijón no contaba con las históricas Imágenes, propiedad de la Hermandad de la Santa Misericordia, ya que ardieron en el incendio provocado de la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol en el año 1936.

Escritor y Cronista de la Ilustre Hermandad de la Santa Vera Cruz, de Gijón La hermandad junto con la municipalidad de Gijón tomaron la determinación de que era muy importante para los gijoneses contar con las tradicionales y queridas procesiones de Semana Santa por lo que había que encontrar una solución a esa pérdida de las Imágenes. La solución que se encontró, ante la falta de tiempo para encargar la confección de nuevas tallas, fue la de encontrar una cofradía o hermandad española que pudiesen prestar a la ciudad temporalmente sus Imágenes, algo que era muy difícil. Lo normal es que las cofradías salgan en procesión todos los años sin excepción, pero la Divina Providencia que todo lo puede hizo que el Ayuntamiento de Gijón fuese informado de que existía una Cofradía en León (La Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y Vera Cruz) que podía prestar sus Imágenes.

Una comitiva oficial del Ayuntamiento de Gijón se presentó en León el día 11 de abril de 1938 para solicitar el préstamo de alguna de las Imágenes de aquella cofradía, obteniendo el visto bueno por parte de su Junta de Gobierno.

El día 12 de abril las Imágenes de El Cristo yaciente, La Soledad y La Piedad fueron enviadas a Gijón, a bordo de una ambulancia. Gracias a este honorable gesto Gijón contó con las procesiones del Viernes y el Sábado Santo.

Una vez terminadas, las Imágenes fueron enviadas de regreso a León, y el Ayuntamiento de Gijón agradeció públicamente su agradecimiento a la cofradía leonesa.

Años después, en 1941 el ayuntamiento acordó dar el nombre de León a una calle de la ciudad por los hechos acaecidos en la Semana Santa del año 1938. Desde entonces, la calle León es un vestigio de aquel agradecimiento sincero de los gijoneses a la Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y Vera Cruz, de León.

Lo que les acabo de narrar es un breve resumen del contenido de este libro, por lo que les emplazo a que puedan conseguirlo y leerlo, además de aportar un pequeño donativo a cambio del mismo para colaborar con las obras asistenciales de la Minerva y Vera Cruz, de León.

Quiero concluir no sin antes declararles que desde el mismo momento en que redacté este libro, lleno de responsabilidad por la importante tarea que se me encomendaba, me siento un leonés de corazón.

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En la Plaza del Grano

Fernando Serrano

J

Juan iba por primera vez a ver la salida de la procesión del Santo Entierro en León. Era de fuera, venía desde Asturias para pasar la Semana Santa con sus primos. Iba contento, cantando y silbando agarrado de la mano de su padre para no separarse en medio de la multitud de turistas, devotos y curiosos que estaban en los alrededores de la plaza del Grano.

“Como es año impar a los primos les toca salir en la procesión del entierro”, le había dichos su madre a la pregunta de adónde iban Jaime y Luis. Juan sabía que sus primos eran papones, pero no les había visto nunca vestidos de negro, con sus túnicas, cruces y el capillo doblado en el cíngulo. Le había divertido la estampa de sus dos primos vestidos así.

Hacía frío, iba con el plumas cerrado hasta la barbilla y la mano a veces se le resbalaba por el guante, en un par de ocasiones estuvo a punto de soltar la mano de su padre. Ya en la plaza del Grano miraba con curiosidad como se arremolinaban los papones, que así les llamaban, en torno a otro papón, pero este llevaba capa y un capillo diferente.

Su padre le había explicado que ese era el seise, la persona que dirige y coordina el paso. Para Juan todo era nuevo, ya que en Asturias la Semana Santa es muy pequeña y casi siempre estaban de vacaciones en ciudades donde no había casi procesiones.

Juan de repente se llevó un susto, sonó una corneta y un tambor. Toda la calle se hizo el silencio y las miradas se dirigieron hacia la zona de la carpa. Su padre le dijo que había comenzado la pro-

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cesión. Juan contuvo la respiración al ver pasar los primeros papones. Aunque en su mayoría parecían tener su edad, imponían por su atuendo, inspiraban respeto y seriedad.

Lo primero que le llamó la atención fue el silencio y el recogimiento que se formaba al llegar los papones a su altura. Pero también le causó cierta impresión el olor a incienso que había. Su padre le había explicado hace unos años que ese olor era característico de esa época, de la Semana Santa.

De repente, mientras estaba ensimismado en el incienso empezaron a sonar las notas de una corneta y tras un breve silencio, las cajas de los tambores retumbaron. Jaime saltó del susto, no se esperaba ese trueno de música. Giró la cabeza hacia el sonido y vio que se movía el primer paso de la procesión. ¿Cuál es papá?,- preguntó Jaime.

Se trata del Lignum Crucis. - Respondió su padre, - se llama así porque lleva un fragmento de la Cruz donde murió Jesús. ¡Hala! ¿Y eso? ¿Hay más trozos de la Cruz por otras ciudades?,- preguntó Jaime asombrado.

Claro que sí, cuando se descubrió la cruz donde murió Jesús se partió en trozos y se distribuyó por todo el mundo conocido, de tal manera que los cristianos pudieran venerarla. Y a veces se hacía una procesión con el relicario como está pasando ahora.

Jaime se quedó sorprendido, no esperaba poder ver un trozo de la Cruz en mitad de la calle y

menos en una noche como esta. El paso cruzó la plaza meciéndose al son de la música. Detrás del paso iban unos pocos de papones y de vez en cuando se podía ver al seise dando indicaciones. Justo mientras observaba al seise, volvió a sonar otra corneta, pero en esta ocasión en vez de continuar las cajas, fueron el resto de cornetas las que prosiguieron la melodía. Jaime se fijó en el paso, se trataba de un cristo. Era un cristo sin vida, pero no por ello era triste, sino que transmitía paz. En clase el profesor de religión les había explicado que Jesús murió en la cruz y posteriormente resucitó para salvar al hombre del pecado y además hacernos hijos de Dios.

Jaime vio pasar el cristo en silencio, moviendo el pie al compás de la melodía y apretando fuerte la mano de su padre. Cuando el trono pasó por delante se giró con curiosidad hacia la carpa para ver cuál era el siguiente paso. Se trataba de otro crucificado, preguntó a su padre y este le contestó que se trataba del paso del Desenclavo. La diferencia con el anterior era que en este además del Cristo hay una tela y una escalera, su padre le explicó que eso simbolizaba como José de Arimatea y algunos discípulos consiguieron el permiso del gobernador romano para desenclavar a Jesús de la Cruz y poder enterrarlo.

Su padre le dijo que se fijase en el siguiente paso, ya que podría ver la escena completa. Jaime se sorprendió de todas las figuras, pero sobre todo le impresionó como la figura de Jesús descansaba en los brazos de san Juan ante la mirada del resto de figuras. También le sorprendió como todas las miradas del resto de figuras se dirigían a Jesús yacente.

Al paso del trono y mientras oía cómo sonaban solo las cajas contuvo la respiración.

El siguiente paso le llamó mucho la atención, se trataba de la Virgen con su hijo en brazos.

Papá, ¿por qué la Virgen tiene a Jesús en sus brazos?, - preguntó Jaime.

Pues, después de que le bajasen de la Cruz, Juan pensó que la Virgen debía despedirse de Jesús, justo antes de enterrarlo. Antes de que lo pusiesen en el Sepulcro. Imagínate como estaría la Virgen María. Creo que hay un paso de la procesión que lo muestra. Pero si no me lo invento es de los últimos.

La Virgen salió de la plaza del Grano y Jaime se dio cuenta de que empezaba a hacer más frío y que había gente que salía de la plaza. Le preguntó a su padre y este le contestó que seguramente eran familiares de papones de los primeros pasos y que irían a ver la procesión en otras calles.

Volvió a sonar otra melodía, esta vez la banda era un poco más grande. Además de cornetas y tambores había más instrumentos de viento y plati-

llos. A Jaime le hacía gracia que alguien se dedicase a tocar ese instrumento, solo ese. Pero eso sí, siempre lo reconocía que era el que más destacaba en la melodía. Después de la banda iba el paso, en esta ocasión le sorprendió que fuese una urna, donde estaba Jesús muerto.

Este es el Sepulcro, - le dijo su padre. - Quiere representar el lugar donde fue enterrado Jesús. En verdad fue una cueva, pero el paso está representado así para que podamos rezar y verle. Además, imagínate si fuese una cueva, cómo de grande sería el paso. ¡Bua! Tendría que ser enorme, - exclamó Jaime con cara de sorpresa imaginándose las dimensiones de la talla.

Shh, Jaime baja un poco la voz, - le regaño su padre sin dejar de sonreír por la reacción de su hijo.

Ya llevaban mucho tiempo de pie en la calle, pero Jaime parecía no cansarse.

Ni el frío le hacía mella en la curiosidad que le despertaba ver el siguiente paso. En este caso se sorprendió, pues se esperaba otra cosa diferente. De repente enfiló la plaza un paso con la figura de un joven. ¡No tenía ni barba!, pensaba Jaime, no sabía quién podía ser.

Papá, ¿quién es el que está en ese paso?

Es San Juan, ¿sabes por qué es tan importante en los momentos de la muerte de Jesús?

Nooo, ¿qué pasó?

Fue el único apóstol que estuvo al pie de la Cruz en el Calvario, en el monte donde murió Jesús. Estuvo acompañando a la Virgen durante todas esas horas tan duras para ella, consolándola y apoyándola.

Justo decía esto cuando el paso pasaba por delante de ellos. A continuación pasaron más papones y después dos pasos más. En este caso la que más le sorprendió fue el segundo y último paso, su padre le dijo que se llamaba la Soledad, conocida en León como la Virgen Guapa.

Papá, ¿se llama Virgen de la Soledad así por qué está sola y triste por la muerte de Jesús?

Si, Jaime. La Virgen está triste hoy, pero esa tristeza le durará poco, ¿y sabes por qué? ¡Claro! Porque Jesús revivirá el domingo. Que eso nos lo dijeron en clase de reli el otro día.

Su padre sonrió ante la respuesta y no dejó de sonreír en todo el trayecto a casa. Mientras Jaime iba pensando en todo lo que había visto y en que el año que viene quería participar en la procesión junto a sus primos y así acompañar a la Virgen en esos momentos tan duros.

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¡Ya va a salir La Amargura!

Soledad de soledades, Custodiada por las Madres Con venerable dulzura, Se arrodilla la Amargura Con las manos enlazadas Y un dolor en su mirada Que te parte el corazón.

Sabe bien el que es papón Y además es su bracero, Que no hay amor más sincero Ni devoción sin quebranto, Que verla el Miércoles Santo, La más bella entre las bellas Bajo su palio de estrellas.

Miradla con devoción, Que aquélla que va llorando Lágrimas de compasión, Es una Madre afligida Con el alma tan herida Por una cruz y un tormento, Que para ella no hay ungüento Que alivie su desazón.

Viste tus calles, León, Con sudarios de luz pura Y llantos de plañidera, Que es noche de primavera Y va a salir La Amargura.

Manuel Jáñez Gallego

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El paso de los niños Guillermo Cuesta Alonso Así llamaban al Lignum Crucis durante décadas, se conocía a uno de los titulares de la cofradía así por ser escuela, de lo que significaba ponerse por primera vez en contacto con una almohadilla, de la mano de nuestros padres y en muchos casos abuelos, se abría la gran ilusión, hacía que en nosotros despertara el verdadero significado de la puja, imitábamos a nuestros mayores a poner de manifiesto sin saberlo la tradición y el gran significado que tiene ejercer de Leones pujando un paso

Y asi empezó todo...

Y si avatares nos brinda la vida, el devenir de nuestro paso no podía ser menos, hemos sufrido momentos tristes, hermanos que ya no están entre nosotros, discusiones, inexperiencias, falta de interés por parte de quien debería mostrarlo y como no también alegrías y verdadera hermandad, todo ello al cobijo de El Triunfal Madero Santo, el crujir del trono la voz de arriba hermanos, el respeto con que nos conjuramos para dar siempre ejemplo de saber estar y procesionar.

Hay otros pasos...

Si efectivamente hay otros pasos cargados de historia también de la devoción y el cariño de los hermanos que lo pujan, muchas fueron las tentaciones para abandonar este querido paso, muchos los ofrecimientos, pero quien se niega a soñar, a vivir a hacer de este nuestro paso lo más bello que se puede procesionar, “si es solo una Cruz” Mi cruz Nuestra cruz, el batidor que abre las procesiones de nuestra querida cofradía, efectivamente hay otros pasos pero nada comparado a la gran familia en la que nos hemos convertido.

Gracias

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Y por último agradecer a todos y cada uno de vosotros hermanos, vuestra presencia en vuestra almohadilla, aportando ilusión, juventud, alegría y entusiasmo a la hora de pujar.

Una Cruz que quiso ser grande Tomás Mínguez Haro Bracero Nº1 del Lignum Crucis

C

Cuando eres jovencito, tu ilusión es desbordante. Llega un momento en tu vida en el que crees que ya eres mayor para muchas cosas, y en nuestro caso, el de los papones, es cuando decides que lo de llevar la bandera o los incensarios ya se te queda pequeño.

Así que por mucho que lo intentábamos, en aquellos años 90, repletos de nubes de papones, ser suplente era una ardua tarea, y por mucho que te empeñases en que con el capillo no se te iba a notar la edad y que había “viejetes” de la misma estatura que tú… no conseguías engañar a nadie y hacerte con la tan ansiada almohadilla. Que ingenua es la juventud…

De manera que todos acabábamos apuntándonos por razones similares en aquel paso de la cruz, que lo portaban los niños, e intentar así ir por el camino “legal” con el fin de pegar unas tiradinas.

Aquellas procesiones, llenas de rizos asomando por el capillo, papones sin bocamangas morados, o con emblemas sin la corona -el cual se había sustituido tan solo unos años antes- discurrían entre tropezones y pisotones, giros y curvas mal trazadas y calles que parecían imposibles de pasar. Siempre venía el seise de turno a gritar ¡no bailéis el paso!

Pero como niños que éramos, no se nos podía permitir privarnos de ese satisfactorio aplauso, que aunque desde fuera el espectáculo fuese lamentable, nosotros sacábamos pecho de lo buenos que éramos.

Los años pasaban, y la gente igual. Cuando dejabas la niñez camino de la adolescencia, ser bracero del Lignum Crucis no era un motivo de alardeo en tus cuadrillas de amigos/as semanasanteros, incluso yo siempre decía, yo soy bracero del Lignum, pero paso lista y me voy a la Amargura con mi padre (cosa que era mentira). Con nosotros, casi no querían ir ni las bandas, ya que en alguna ocasión fuimos la procesión entera a golpe de tambor, incluso recuerdo que nos acompañaba la banda de las Siete Palabras un cachito, porque luego tenían que ir a

su procesión, quedando el Lignum Crucis huérfano de música. Incluso los escoltas nunca eran los más elegantes los que salían con nosotros. Eran otros tiempos…

Pero esos tiempos cambiaron, y cambiaron gracias a gente con orgullo y con amor hacia lo suyo, con ganas no de cambiar ellos a otro paso, sino cambiar lo que había. Convertir al paso del Lignum Crucis en lo que es y nadie valoraba. El titular de la Cofradía.

Y lo han conseguido, el Lignum Crucis hoy por hoy, me parece un auténtico ejemplo en todo, desde el primer paso, que es la reunión de braceros, hasta al tallaje concienzudo que se ha hecho año tras año para que todo vaya bien. Y ya el día de la procesión, en el momento de pasar lista, te das cuenta que este paso es diferente, no es un paso cualquiera. Es el mejor. Porque desde la experiencia puedo decir que es en el que se hacen las cosas de la mejor de las maneras, de principio a fin. La puja es una puja elegante, perfecta, la complicidad entre sus braceros es ejemplar. Y el bracero mayor (ese al que me refería antes con la gente con orgullo y amor a lo suyo) es la persona más sobresaliente que podía existir en esta función.

Así que gracias hermanos, gracias Aitor, gracias a los seises que confiaron en nosotros y gracias a esa cruz dorada que hace unos años andaba renqueante por la Plaza del Grano. Hoy por hoy se levanta con orgullo de titular nuestra sagrada Veracruz, soñando con una realidad que es llenar de esplendor nuestras calles de León.

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La séptima palabra Hno. Miguel Llamazares Palanca

E

Era próximamente la hora de sexta, y Cristo agonizaba en el madero de la Cruz.

Los escribas, fariseos y la chusma cruel lejos de mostrar compasión alguna, pasaban por delante del sagrado madero insultando, blasfemando y maldiciendo al Divino Rabí.

Mientras, las almas nobles no pudiendo permanecer insensibles ante los continuos y terribles tormentos que se hallaba sufriendo Jesús, manifestaban solemnemente la inmensa pena y dolor que les producía la prolongada agonía del Señor.

De pronto, el sol recogió los rayos de su luz, la tierra tembló con fuertes sacudidas, el velo del templo se rasgó de arriba abajo en dos partes, y Jesús declarando el natural sentimiento que padecía su alma bendita al separarse de su cuerpo y que tenía poder para alargar o acortar el momento de su muerte, con voz terrible y clamor válido, mirando al cielo, exclamó: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”; e inclinando ligeramente su sagrada cabeza, expiró.

Sus labios quedaron cerrados para besarnos, su cabeza caída para perdonarnos, sus brazos y corazón abiertos para abrazarnos, sus manos y pies clavados para no castigarnos; todo Èl, inclinado hacia nosotros, porque todo se nos ha dado.

78 Santo Cristo de la Agonía Amando Fernández 1973

La vidriera emplomada www.facebook.com/GRISALLAS Abad Fundador de la Cofradía del Cristo Yacente de La Santa Urna de Benavides de Órbigo.

Mario Rodríguez González

D

Desde siempre la magia del vidrio y el arte con vidrio ha cautivado al ser humano. Su transparencia, colorido y fragilidad características propias de tan sutil elemento han despertado gran interés incluso fascinación. Si ha eso añadimos el valor estético del que le dotan los artistas y artesanos obtenemos un resultado difícil de superar.

La vidriera emplomada como tal es un conjunto de vidrios de color o coloreados unidos mediante una red de plomo soldado entre sí que le aporta la sujeción necesaria. Por otra parte, la rigidez entre los vidrios y el plomo se consigue con la aplicación de la masilla que una vez seca une todos los elementos, conformando un conjunto.

A través de los años han surgido nuevas técnicas como las vidrieras de cemento, de siliconas, de resinas, o la técnica de fusing o vidrios fundidos mediante calor.

En mi vida se reflejan dos vertientes, una como vidriero de la empresa Grisallas y otra como amante de la Semana Santa, pasión que se ha traducido en el trabajo desplegado con la creación de la Cofradía del Cristo Yacente de la Santa Urna de Benavides de Órbigo, de la que soy Abad Fundador. Me considero afortunado de poder aunar estas dos pasiones cuando tengo que realizar algún trabajo sobre la Pasión de Cristo.

La fabricación de la vidriera emplomada es unos de esos oficios artesanos que no ha variado mucho a través de los años, en realidad la parte principal se sigue haciendo de la misma manera desde hace siglos.

Una vez que se ha elegido la idea, tras la realización del boceto, se pinta el cartón, que es el dibujo que plasmaremos en el vitral. Seguidamente pasaremos a marcar las líneas de plomo, lo que marcará el corte de las piezas del vidrio. Sacaremos plantillas de todas esas piezas para poder cortarlas en vidrio y que ajusten perfectamente unas con otra. Una vez cortadas todas las piezas empezaremos con la parte de la pintura al horno. El primer paso es perfilar los contornos de las figuras o motivos a dibujar, tras lo cual se irán dando capas de pintura con el fin de conseguir un mayor efecto de volumen. Tanto el perfilado como el sombreado se consiguen aplicando grisallas cocidas a 590 grados. También existen esmaltes vitrificables para aplicar colores al vidrio, estos

pueden ser opacos o transparentes, también se puede aplicar amarillo de plata para conseguir un amarillo intenso.

Una vez que se han finalizado todos los trabajos de pintura se procede al emplomado, que es la colocación de los vidrios entre la tiras de plomo. Las uniones del plomo se sueldan con estaño. Cuando ya la tenemos emplomada y soldada, se aplica una masilla hecha con blanco de España, aceite de linaza, negro de humo y secante. Se levantan las alas del plomo y se aplica la masilla de una consistencia espesa para que penetre entre los vidrios y el plomo. Esta masilla, una vez que va endureciendo, da consistencia al conjunto de la vidriera.

La limpieza de esta masilla se realiza con serrín y aporta el lustre final a la vidriera.

Este es el proceso de elaboración de una vidriera emplomada, explicado de una forma muy esquemática.

Si bien toda vidriera lleva una elevada carga artística, el vitral religioso conlleva un especial significado.

Para profundizar en este tema recomiendo la lectura del libro de D. Máximo Gómez Rascón sobre las vidrieras de la Catedral de León: “El simbolismo de la luz”.

En mi experiencia como maestro vidriero, dos obras me han llenado plenamente, entre las muchas vidrieras religiosas que hemos realizado en Grisallas: el Viacrucis para los Faroles procesionales de la Cofradía del Cristo Yacente de la Santa Urna de Benavides de Órbigo y La Ultima Cena de Nuestro Señor Jesucristo de la Iglesia parroquial de Sobradelo de Valdeorras. Los primeros son faroles en plata con vidriera emplomada iluminada, que representan las catorce estaciones del Calvario de Cristo y que el año pasado salieron excepcionalmente en la noche de Miércoles Santo en la procesión “Virgen de la Amargura” invitados por la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz. La segunda es una vidriera a escala real, con más de 8 metros, en este vitral todo parte de la figura central de Cristo en el momento de partir el pan para todos los Apóstoles.

Quiero agradecer a la Real Cofradía Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz la posibilidad de explicar brevemente algo del mundo del vitral, ocasión que aprovecho para desear una Semana Santa vivida plenamente a todos sus cofrades.

Faroles en la procesión "Virgen de Amargura" Última Cena en la iglesia de Sobradelo de Valdeorras

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El Capillo Fernando Sahagún Prieto Debajo del capillo todo hacemos el mismo esfuerzo, idéntica penitencia, a todos nos cuesta respirar con él, y también es el trozo de tela que nos permite ocultar las lágrimas que afloran en alguna esquina en la que ya no está nuestro padre o nuestro abuelo viendo cómo pujamos su paso.

En estos momentos en que todo es banal y relativo, en que se da más importancia a aparentar que a trabajar, en los que parece que lo único importante es figurar, y no estar, quiero reivindicar el cada vez más denostado capillo, aditamento sin el cual nadie puede llamarse papón.

Quienes creen que el capillo es un estorbo o un anacronismo olvidan que ese trozo de tela con dos agujeros en la zona de los ojos, permite al penitente mantener su anonimato, y junto con la túnica y el emblema de la Cofradía, son nuestros signos distintivos, al amparo de los cuales nos llamamos hermanos y son garantes de la igualdad que preconiza nuestra Cofradía, con independencia de nuestra situación en la sociedad.

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Cuando era un crío, me enseñaron que levantar el capillo en procesión era una total falta de respeto al resto de hermanos, un desprecio a sus creencias y a su sacrificio, y que a una procesión no se iba a lucir, sino a sufrir, voluntariamente, porque, esto no debemos olvidarlo nunca, a nadie nos han obligado a ser hermanos de nuestra Cofradía; nuestra adscripción a Minerva y Vera Cruz es voluntaria, basada en nuestra Fe ; quien cree que lo mejor de las procesiones es que te vean y que debe quebrar el derecho al anonimato que nos permite el capillo, ignoran el hecho religioso que justifica y fundamenta nuestra existencia como Cofradía.

Cierto que falsos profetas preconizan desde hace años que determinados esfuerzos exigen

una indumentaria que excluya el capillo, pero, como todos sabemos, su proposiciones están motivadas, por su ignorancia, o porque sus ambiciones personales no han sido satisfechas, y sus argumentos son simples pataletas porque no se les dio la importancia que creían merecer o porque se les dio demasiada para luego descubrir que sus teorías eran simples falacias.

Ningún HERMANO de Minerva y Vera Cruz va a las procesiones para que le vean, sino a sufrir; ninguno queremos “adornarnos”, sino recordar la Pasión de Nuestro Señor, y también a aquellos que, por desgracia, nos faltan.

Yo sí conocí la Semana Santa anterior al año 1992, y añoro la seriedad, el respeto y el silencio de aquellas procesiones, donde lo importante no era que te vieran, sino el estar, con compromiso, esfuerzo y humildad.

Quien no crea en estos valores, ni es papón, ni puede estar bajo el emblema de Minerva y Vera Cruz.

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In Memoriam

D. Enrique García Centeno Manuel Santos Fláker Labanda Párroco de San Martín.

H

Hablar de Don Enrique en estos momentos no es fácil, pues afloran los sentimientos y el dolor por su fallecimiento, apenas hace tres días. Ha sido mi párroco de toda la vida, por lo que son muchos los recuerdos y vivencias que he compartido con él. Me acuerdo que de niño lo miraba con mucho respeto, pero poco apoco fui descubriendo que detrás de esa figura de autoridad y de recio carácter se escondía un alma de niño, y niño según el Evangelio. Don Enrique García Centeno nació el 8 de marzo de 1935 en la populosa y afamada villa de Valderas. Era el segundo hijo de tres que tuvieron el matrimonio de sus padres, labradores con buenos recursos. Desde niño el manto de la Virgen del Socorro lo cubrió con su sombra. Entró en su infancia al seminario de San Mateo, que la diócesis de León tenía en Valderas. Siendo ya un adolescente fue trasladado al Seminario Mayor San Froilán de León, donde terminó Teología. Todavía seminarista, pero viendo sus superiores las capacidades intelectuales que tenía fue enviado a completar estudios a Salamanca. Allí fue ordenado sacerdote, uno de sus compañeros de ordenación fue el hoy cardenal Rouco, arzobispo emérito de Madrid. Regresa a León y tras unos meses en su pueblo, viene a la parroquia del Mercado como Vicario parroquial. Es decir cincuenta y siete años de ministerio en la parroquia del Mercado. Comentar también

que era muy conocido incluso fuera de León, en su funeral concelebraron sacerdotes venidos de Oviedo y Valladolid.

El mismo cardenal arzobispo de Valladolid, Don Ricardo Blázquez, presidente de la conferencia episcopal, llamó para expresar su pésame por la muerte de Don Enrique. Igualmente el obispo auxiliar de Santiago Don Jesús Fernández expreso su cercanía y cariño.

Para mí fue como un Padre en mi vida de Fe, pues gracias a que tenía una visión pastoral adelantada a su tiempo abrió en el año 1974 en la parroquia el Camino Neocatecumenal, que es un itinerario de iniciación cristiana que está dando tantos frutos en la Iglesia. Gracias a él y a está experiencia de Catecumenado de adultos, he madurado en la Fe y en la vocación al sacerdocio. Se aventuró incluso a venir a Colombia para Mi ordenación sacerdotal de la que fue mi padrino, ¡cuántos momentos entrañables vividos juntos¡ Ha muerto como un pastor, cuidando de su rebaño.

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In Memoriam

D. Victorino Morala In memoriam Elías Álvarez Frade

Y

Y allí estabas tú. Siempre que tu Cofradía solicitaba ayuda… allí estabas tú.

Siempre que alguien te necesitaba allí estabas tú. En todas las procesiones, en todas las representaciones, en todos los actos, porque amabas la Semana Santa y sobre todo amabas a Minerva y Vera Cruz, tu queridísima Cofradía de la que habías sido Abad orgulloso y plenamente identificado con tu papel máximo; yo mismo, de ti recogía la vara de Seise del San Juan a quien tanto y tanto quisiste; recuerdo que no me entregaste ninguna lista de braceros... ¡para qué! les conocías a todos, sabías perfectamente de quién eran hijos, nietos, quienes eran sus papones cercanos y además, ellos lo eran gracias a ti. No hacia falta nunca preguntar por ti, allí estabas siempre, ayudando y poniendo a disposición de todos tus conocimientos cofradieros, tu ilusión, tu empeño y tus ganas de hacer...Cuántos caramelos repartiste a los niños en el Corpus Chico, cuantas flores en los Altares, cuánta lotería vendiste, cuantos carteles pusiste, cuantos repartiste... todos eran pocos para ti porque todo el mundo acudía a ti... porque tú eras la Minerva entera.

Amabas tu barrio de San Martín porque allí habías nacido y allí pasaste toda tu vida; en ese viejo lugar de León tenías a todos tus amigos que eran legión... porque lo conocías todo y porque no necesitabas más... qué ibas a necesitar si allí estaba tu mundo entero.

Habías sido zapatero vendedor y de oficio... y también amabas tu profesión... y cómo no! habías sido también Abad de la Cofradía de San Crispín; cuántas veces, allí en tu tienda te vi con las manos teñidas de tinte negro, cepillando algún zapato inundado y rodeado siempre de todos ellos...; ¡Cuánto luchaste VICTORINO MORALA! Tú fuiste la encarnación perfecta del papón de a pie, del papón de Minerva de esos que dan mucho y que nunca piden nada. Gracias Hermano, gracias Abad, has sido un ejemplo para todos; descansa ahora en Paz y que San Juan te haya guiado a conocer la Luz que tanto buscaste... te lo merecías.

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Recuerdo y reflexión Fidel Casas González Viceabad de la Cofradía

E

El 31 de Marzo de 2016 fallecía el hermano Victorino Morala Mata, Abad Honorario de nuestra Cofradía. Y hasta parece que hubiera esperado a que pasara la Semana Santa para reencontrarse con el Padre y no interferir en ella. Así era Victorino, discreto, sin ánimo de molestar e intentando siempre pasar desapercibido. Un papón de los de verdad, trabajador incansable y con un amor desmedido por su Minerva.

Ahora, cuando en la Semana Santa y en las cofradías recalan personajes de todo tipo y condición, cuyo único interés es figurar y medrar y su único bagaje la ignorancia y el desconocimiento, con comportamientos que colisionan con su propia naturaleza, al hilo del recuerdo a Victorino, quiero reivindicar, para que sirva de ejemplo, la figura de aquellos papones que únicamente tenían y tienen como referente el compromiso, el trabajo y la dedicación desinteresada, siempre lejos de protagonismos. En suma, el amor por la Cofradía y por la Semana Santa como principio de todos sus actos, que desemboca ineludiblemente en el amor por los hermanos. Pues una cofradía, no es más que una asociación de fieles cuyo único fin es dar testimonio del amor a Cristo y de nuestra fe. Un amor que lo abarca todo.

Y es que como dice una hermosa canción litúrgica de Cesáreo Gabaráin: “Al atardecer de la vida me examinarán del amor”. No me preguntarán por éxitos, medallas, cargos, beneficios o rentas, sino cuánto amé y si de verdad me comporté con los demás como un hermano.

In Memoriam Torino Luis Rodríguez Pérez Sacerdote

C

Como me gustaría que los mas jóvenes de la cofradía, aquellos cuyas cartas de pago todavía tienen la tinta fresca, le dedicaran siquiera un par de minutos, a leer este pequeño homenaje a uno de nuestros cofrades más entrañables. Porque para los demás, para los que compartimos con él tantas cosas, sobran las palabras, vasta el recuerdo. Hay historias y personas que son así.

Si cierro los ojos me parece que la estoy viendo, tal cual estaba la última vez que la vi. Una pequeña zapatería en el centro de la calle Santa Cruz, una de esas tiendas de barrio que con el paso de los años hemos ido viendo desaparecer. En el interior había un inmenso revoltijo de zapatos, algunos en sus cajas otros sin caja... recuerdo el mostrador del que salió el emblema de la cofradía que tan orgullosamente lucí en la procesión el año que la cofradía empezó a llevar el titulo de real. Cuántos emblemas saldrían de aquella tienda aquel año. No os penséis que lo digo por decir, esa pequeña tienda fue la oficina de la cofradía mucho antes de que existiera la nave de Independencia o la secretaria del palacio de Jabalquinto. Este era el fortín de nuestro querido Torino o como todo el mundo le conocía Mórala. Recuerdo vívidamente unos días antes de una boda, que mi madre me había llevado a comprar unos zapatos para el traje que iba a estrenar, y a Torino convenciendo a mi madre de que el chico tenía que hacerse de la cofradía, vamos de Minerva, y cuando Torino se proponía que alguien entrara en la cofradía... menudo. Date una vuelta antes de que salga la procesión de la Amargura, por poner un ejemplo, preguntando a los hermanos a cuántos los animo Torino a entrar en la cofradía, te sorprenderá el resultado.

Lo que quiero decir es que mi madre salió de la tienda, como quien dice, con la carta de pago debajo del brazo, bueno y dos excelentes zapatos negros que yo pude estrenar unos días después.

Me gustaría decir tantas cosas de Torino, podría llenar todas las páginas de esta revista, pero el espacio es limitado. Quizás baste decir que lo fue todo en la cofradía. Me permitiréis que haga especial mención a su entrañable relación con el paso de Lignun Crucis. En

los últimos tiempos siempre venía antes de comenzar la procesión a darnos ánimos. Cuánto se echa de menos su presencia, siempre activa y vitalista. Y por supuesto la parroquia de San Martín, que siempre sintió como su casa.

Torino era de esa clase de cofrades siempre dispuestos a hacer lo que hiciera falta por la cofradía, ninguna tarea le parecía gravosa, al contrario siempre lo hacía todo con una sonrisa, sin darle importancia, ya fuera preparar los caramelos para el Corpus Chico o salir de representación de la cofradía siempre que hiciera falta.

Jóvenes lectores si habéis aguantado hasta aquí, una cosa muy importante tengo que deciros; Torino fue una persona que jamás dijo nada que no fuera oportuno y constructivo, era una persona que no le gustaban las críticas y mucho menos los criticones, él siempre se mantenía al margen de todo eso y lo decía claro “yo eso no”. Ahora que lo recuerdo me parece que era un hermoso ejemplo de cómo debemos vivir la fraternidad, nosotros que nos llamamos, y no sin razón, hermanos.

Quizás sea ese su mejor legado, ese y un consejo que me dio en cierta ocasión “perseverancia, lo más importante de todo es la perseverancia”.

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IN MEMORIAM

A las aladas almas de las rosas del almendro de nata te requiero, que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma, compañero.

Miguel Hernández

RELACIÓN DE HERMANOS FALLECIDOS Victorino Morala Mata Gerardo Gonzalez Arnaiz Antonio Medina López

Jose Luis Bayon Astorgano Miguel Angel Diez Pedrero Luis Carlos Martinez Perez Vicente Prieto García

.. y al resto de hermanos fallecidos y que esta cofradía no tiene conocimiento

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QUE SUS ALMAS Y LAS ALMAS DE TODOS LOS FIELES DIFUNTOS POR LA MISERICORDIA DE DIOS DESCANSEN EN PAZ.

Hospedería Monástica Plza. de Santa María del Camino, 11 comunidad@benedictinas.org Telf. 987 34 44 93 Fax: 987 26 31 37 24003 - León (España)

Edita: Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz

Coordina: José Joaquín Díez Vélez, Ángel Díez Pertejo

Fotos: José Alfonso Iglesias Rey, Javier Quintana, Estudio Rúa, Verónica Iglesias, César Benítez, Miguel Ángel Carrasco, Motorines, César Cifuentes, Diego Méndez Panadero, Foto Bengofer, Pablo Zapico, Fidel Redondo, Pilar Baños y archivo de la cofradía.

Foto cartel y portada de revista: José Alfonso Iglesias Rey

Diseño editorial y Publicitario: Gráficas Cuevas

Imprime: Gráficas Cuevas

Depósito legal: LE – 229 - 14 La cofradía no se hace responsable de las opiniones expresadas en los artículos publicados en esta revista. Prohibida la reproducción total o parcial de la misma.