Club Renfe Nº46

Page 28

ENTREVISTA JENNIFER LOPEZ

Salvador Llopart Periodista

Y EL OSCAR, ¿PA’CUÁNDO? En medio de la polvareda que genera Estafadoras de Wall Street (Hustlers), entre cómica y vindicativa, sobresale sin mácula el nombre de Jennifer Lopez. La actriz, como protagonista, resulta sexy, electrificante y deslumbrante, las mismas características que definen a esta mujer de cincuenta años desde que era “Jenny, la del bloque de pisos”, como se definía a sí misma en una de sus primeras canciones. Y es que a veces se nos olvida la profundidad y la fuerza de su mirada cuando la cámara la enfoca bien, como hacía Soderbergh en Out of sight (Un romance muy peligroso), que protagonizó junto a George Clooney en aquel lejano 1998. Demasiado distraídos quizá, todos, hombres y mujeres por igual, por ese trasero suyo que se llegó a decir que estaba asegurado en un millón de dólares (falso). JLo, actriz sin discusión cuando se emplea a fondo, como especialmente en Estafadoras... Y también una de las malas, muy malas, según los premios Razzie de 2009, que la nombraron la “peor actriz de la década” especialmente por su trabajo en Una relación peligrosa (2003), junto a su novio de entonces, Ben Affleck,

otro que tal. Bailarina y cantante, además, una de las reinas indiscutibles del pop mundial en los últimos treinta años. Más impresionante ahora –el éxito da un lustre especial– que cuando empezaba en los primeros noventa al lado de Janet Jackson. Debutó como solista con On the 6 (1999), y desde entonces encadena números unos, en inglés y en castellano (idioma que no domina: ella es una nativa del barrio del Bronx), como encadena novios y maridos. People la nombró, en 2011, la mujer más bella del mundo, y Forbes, al año siguiente, la consideraba una de las celebridades más poderosas del planeta. Eso, sin olvidar la revolución que causó en Google –por su causa la compañía de Zuckerberg añadió un buscador de imágenes– con su vestido verde trasparente de Versace de la gala del 2000 de los premios Grammy, busquen, busquen y verán. Jennifer Lopez, pues, una estrella total que, con Estafadoras, se reafirma como gran actriz. Uno, parafraseando El anillo, uno los últimos éxitos pop de la propia Lopez –escuchen la letra de la canción: se reirán– diría “Jenny, y el Oscar, ¿pa’cuándo?”.

que tenía que practicar sin apenas ropa, con un sostén y unas braguitas y Alex queriendo filmarlo todo y subirlo a la red. Fueron seis semanas llenas de moratones en las piernas y en los hombros. También hubo lágrimas, mereció la pena. ¿No hubo ningún momento de pánico delante de las cámaras? ¿De rubor? Tengo bastante coraje y acostumbro a separar mis personajes de mi vida pero, cuando llegué ese día al rodaje, la Jennifer que hay en mi saltó a la luz para preguntarse qué hacía ahí, con apenas nada de ropa, delante de 300 extras. Me dio un ataque de pánico. Pero, también, fue bueno para el personaje sentir esa vulnerabilidad, sentirme expuesta porque salió toda mi furia y me sentí empoderada con lo que había conseguido. No es su único logro, también es icono del poder latino en Hollywood. No nos lo ponen fácil en Hollywood a los latinos y su talento es muy grande en esta industria. Quiero crear más oportunidades, producir, dar trabajos a las minorías, a los hispanos, a las mujeres, poder contar nuestras propias historias. Y si eso me convierte en una fuente de inspiración para otros, pues esa guinda que me como.

28 CLUB + RENFE

24_RF_JENNIFER LOPEZ.indd 28

22/10/19 12:35


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.