
1 minute read
Orfandadpalaciega
claró inaplicable la ejecutoria del máximo intérprete de nuestraConstitución.
Cuestionó a la Corte, pero recomendó permanecer en ella,pues nos ha costado mucho como sociedad insertarnos en organismos que -bien que mal- velen por los derechos humanos. En paralelo, la Cancilleríadioporterminadas las funciones del embajador peruano en Colombia por las desatinadas, infortunadas, e injuriosas declaraciones de Gustavo Petro en contra del gobierno.
Advertisement
¡Hurras! Un momento,¿en seriolohizo?Loocurridonoes nuevo, y por lo que vemos no seráloúltimo.
Primero fue con Honduras y luego México. Es cierto que las palabras de estos manda- tarios extranjeros (Xiomara Castro y Andrés Manuel López Obrador, respectivamente) fueron,cuando menos,vejatorias. No obstante,llama la atención la falta de respaldo internacional hacia la señora BoluarteZegarra.

Elusoderecursosdel Estado (US$ 55 mil) contratando empresa lobista para limpiar imagen del gobierno en los EEUU no es la vía adecuada. Por el contrario,es despilfarro. Lo que sucede es que no hay pesopolíticomásalládenuestras fronteras. Los regímenes de izquierda no quieren a Dina, y el resto de gobiernos no la conocen. O no quieren hacerlo.
Internamente tampoco va mejor.Recientementevolvióa criticarasuexjefeyamigoPe- dro Castillo con la frase de “quienes dieron el golpe hoy pretenden debilitar al gobierno”,demostrando ingratitud y haciendo leña del árbol caído, toda vez que el Poder Judicial le ratificó la prisión preventiva por 36 meses, además que su letrada afirmó que la salud mental del exmandatario está bastante debilitada. En esa misma línea, para esta semanaestápendientedevotación en el Pleno la admisión (o no) de la vacancia en contra de la señoraBoluarteZegarra.
Deestoúltimo,lomásprobable es que el Congreso rechace dicha moción (más por cálculo político de no darle el gusto a la izquierda y caviares), aunque está acrecentándose cada vez más la orfandad política en Palacio