Encuentro 17
¡Hosanna! Bendito el que viene en nombre del Señor. Referencia: https://issuu.com/ppceditorial.mexico/docs/191066_alianza_g3_ issuu_0b72ecbc8dfa57
Público objetivo: Adultos: Padres de familia, Padrinos, Abuelos, Catequistas y otros responsables de la formación espiritual de los niños. Proclamar a Jesús rey de nuestras familias.
¿EN DÓNDE ESTAMOS? z Como familia, ¿qué actitudes o acciones demuestran que Jesús reina en nuestra casa?
¿Podrían otras personas o familias descubrir que somos discípulos de Jesús solo por nuestro modo de vivir? z ¿Hemos participado en alguna procesión o peregrinación? ¿Qué sentido ha tenido en
nuestra vida familiar y de fe?
PARA REFLEXIONAR Escuchamos el Evangelio según san Juan 12,12-15 Tomaron ramas de palmera y salieron a recibirlo, gritando: “¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor, el Rey de Israel!”.
Compartimos z Las ramas de palma eran un símbolo de nacionalismo judío desde el tiempo de los
Macabeos. La multitud veía a Jesús como un salvador político y nacional, pero no tanto como un salvador espiritual. Lo recibieron como un rey, aunque ignorantes de la naturaleza de su realeza. Actualmente contamos con muchos signos que nos identifican como cristianos, pero ¿realmente dejamos que Jesús sea quien reine en nuestros pensamientos, deseos y acciones? z El grito “Hosanna” significa “salve ahora,” y ese día la multitud recibió a Jesús como
un Mesías triunfante. Jesús es a quien el pueblo de Israel esperaba para ser liberados
Jesús me invita a su mesa
Objetivo de la Cápsula:
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de toda opresión. Porque el pecado es la fuente de toda injusticia y abuso, y Jesús ha venido a liberarnos de él. z Jesús entra en un burro, animal que normalmente no era utilizado por una persona
guerrera sino con propósitos pacíficos. Era el animal de un hombre de paz, un sacerdote, un comerciante, etc. Esta acción de Jesús nos recuerda que él ha venido a establecer un reino de paz. z La entrada de Jesús a Jerusalén nos recuerda también nuestro caminar hacia Dios,
todos somos peregrinos hacia la casa del Padre. Cada peregrinación que realizamos hacia un santuario nos recuerda justamente que nuestro destino es encontrarnos con Dios en su morada santa.
TIEMPO EN FAMILIA z Como familia, ¿de qué nos gustaría que Jesús nos liberara? z Nos proponemos en familia identificar los signos cristianos que tenemos en casa y
darles un uso adecuado para que cumplan su función de recordarnos cómo vivir en paz practicando la caridad entre nosotros.
ORAMOS Jesús, rey de reyes, ven a nuestros corazones y transforma nuestros pensamientos, sentimientos y acciones, para vivir según tu voluntad. Amén.