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sobresaturado; está inseguridad
R. No, no hay forma, porque el contrato no establece ninguna penalización, simplemente, el aeropuerto se reserva el derecho de rescindir el contrato por el motivo que quiera y solo tengo que avisar 30 días antes. Este aeropuerto no tiene para dónde crecer, entonces qué se ha hecho, puros laberintos, ha ido alargándose. Las dos terminales están saturadas. Nosotros ya no tenemos espacio para más, si ahorita viene una nueva compañía le decimos ‘no’, si quieres operar aquí tienes que ser después de las 22.00 horas y hasta las 5.00 de la madrugada. Ya en estos niveles de saturación, es inseguro ya, esto ya está tocando los límites de la inseguridad. Por eso estamos tomando medidas, que no puedo adelantar, pero que buscan resolver este problema.

P. Con esta batería de medidas, ¿cuánto prevén reducir la presión de saturación en el AICM?
R. Aproximadamente, buscamos bajarle unos 10 millones de pasajeros anuales. Ojalá y se pueda.
P. ¿Qué riesgos habría si no consiguen reducir en esta cifra la saturación?
a Madrid, a Japón, a Australia. Hemos tenido varios aseguramientos muy importantes y vamos a intensificar las inspecciones porque hay droga que está saliendo y nos alertan internacionalmente y ahora que ya se va en la carga al AIFA (Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles), pues vamos a descansar un poco, porque de ahí salía mucha droga hacia el mundo, vía carga.
P. La congestión en el AICM sigue siendo una asignatura pendiente. ¿De qué sirvió el decreto de saturación publicado desde 2004?
R. Para nada. El año pasado hicimos una reducción de slots (horarios de aterrizaje y despegue) de 61 a 52, con el único objetivo de reducir la saturación. Pero qué hicieron las aerolíneas, metieron aviones más grandes y, entonces, no funcionó, ni siquiera se corrigió, empeoró y este año, posiblemente lleguemos a 52 millones de personas. El año pasado fueron 46 millones y ya no puede soportar esta terminal tanta gente y por eso se están tomando medidas al respecto.
P. Una de estas medidas fue rescindir los contratos de Aeroméxico en la terminal 1 para que se mudaran a la terminal 2
R. Ellos tienen su terminal, la terminal 2, eso va a ayudar un poquito porque esas posiciones que tenía Aeroméxico las vamos a cerrar indefinidamente a partir del 1 de septiembre.
P. ¿La compañía se quejó por esta decisión?
R. Ya hay riesgo y si sigue creciendo, hablo de no tener mucha capacidad de reacción para movilizar a tanta gente. Cada vez tenemos que contratar a más gente para que sea más seguro y limpio el lugar y ya no se puede más, no tenemos el recurso. Es un aeropuerto, para mí, sobresaturado y las aerolíneas no cooperaron.
P. Si México recuperara en los próximos meses la categoría 1 de seguridad aérea y con ello hubiese oportunidad de abrir más rutas a EE.UU. ¿supondrá un nuevo desafío para el AICM?
R. Ya no puedo dar más slots porque estamos saturados, puedo otorgarlos en los horarios no saturados. Lo que pueden hacer las aerolíneas es pedir el cambio de ruta a la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
P. ¿Qué otras medidas tienen en el horizonte?
R. La única medida que puedo adelantar es que el Aeropuerto de Toluca también va a pasar a la Secretaría de Marina, pero como un aeropuerto para aviación privada, no para aviación comercial. Entonces Viva Aerobus y Volaris, que tienen vuelos allá, ya no podrán operar allá y aquí tampoco pueden venir porque ya no hay cabida, entonces tendrán que buscar dónde colocar sus vuelos.
P. Tendrán como única opción el mudar esos vuelos al Aeropuerto Felipe Ángeles...
R. Ojalá, mientras más se lleve el Estado de México, el AIFA, nosotros felices.
P. ¿Cuándo ocurrirá este cambio de vocación en el aeropuerto de Toluca?
R. Como en unos tres meses, primero tiene que concretarse el proceso de que la Secretaría de Marina tome posesión en Toluca y pues saldrá con esa especificación.
P. En paralelo, la Semar también tendrá su propio Grupo Aeroportuario, Casiopea y de hecho el AICM estará en esta entidad, ¿cuál es el avance de esta reorganización bajo el mando de la Marina?
R. Va a ser un grupo aeroportuario con ocho aeropuertos. En su momento, dejará de llamarse el Grupo Aero- portuario de la Ciudad de México y será Casiopea. Los aeropuertos que lo conformarán serán Ciudad de México, Toluca, Colima, Ciudad del Carmen, Matamoros, Loreto, Guaymas y Obregón.


P. ¿Cuál es su prioridad para lo que resta del año en el AICM?
R. Consolidar y mantener el paso. Nada nos ha salido mal, hemos dado golpes espectaculares y medidas que nadie se esperaba, pero no hemos actuado con prepotencia.
P. Pero siguen sin acabar con la saturación de pasajeros y esto vulnera la comodidad y seguridad de la terminal, ¿es su mayor pendiente?
R. Se tomaron medidas, le quitamos los vuelos ilegales a las compañías y eso les pegó durísimo, los metimos a horarios, y metimos a Profeco con nosotros.
P. En este balance de poco más de un año de su gestión, ¿cuál ha sido su mayor desafío?
R. Los tres primeros meses, porque la situación era muy difícil en todos los aspectos administrativos, de seguridad, de servicio, con todas las autoridades. Pero el presidente López Obrador me dio mucho apoyo, entonces el darme toda la responsabilidad mejora mucho las cosas y yo estoy en todo.
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