De hecho, tal como señala Las Casas, este instrumento tiene
cohoba, aunque hasta el presente no ha aparecido ninguno
una bifurcación en uno de sus extremos que se introducía en
con incrustaciones de oro laminado.401 También hay aspirado-
las fosas nasales para aspirar los polvos alucinógenos desde
res de barro, aunque estos no poseen la calidad artística de
el plato o escudilla colocado sobre la cabeza de los grandes
los de madera o hueso. Las investigaciones arqueológicas han
cemíes de madera. Algunos de estos inhaladores todavía se
localizado cazuelas y ollas pequeñas con dos boquillas tubula-
conservan. La mayoría son de madera y de hueso, y muestran
res que pudieron ser utilizadas en la inhalación de sustancias
fantásticas figuraciones tanto antropomorfas como zoomorfas
alucinógenas.
alusivas a las visiones que se producían en un estado alterado de conciencia. Uno de los inhaladores más representativos es de madera y tiene tallada una dramática figura de cabeza zoomorfa con el cuerpo fragmentado en hábiles abstracciones. Fue encontrado en la isla Gonaive, República de Haití, y en la actualidad pertenece a la colección de los señores Ana y Antonio Casanovas. Otro aspirador nasal de gran calidad artística está realizado en hueso con una figura antropomorfa masculina cuyas extremidades superiores suben hasta la parte posterior de la cabeza,
TAÍNOS, ARTE Y SOCIEDAD
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mostrando una posición contorsionada bajo los efectos psicotrópicos de la cohoba. Las manos sostienen el nacimiento de los muslos para hacer posible la flexión de las piernas. La perforación que se usa para aspirar los polvos comienza en el ano, bifurcándose hacia arriba en forma de «Y» para desembocar en las plantas de los pies. Este objeto arqueológico de sugestivo aspecto se exhibe en la Sala de Arte Prehispánico de la Fundación García Arévalo, en Santo Domingo. En algunos casos los aspiradores representan figuras en trance meditativo o actitud expectante ante el poder y la fuerza vital de los espíritus invocados, al ser la cohoba el vehículo de comunicación con los dioses y la realidad del más allá. En el inventario de objetos reunidos por Cristóbal Colón a través del rescate o intercambio comercial con los indios, menciona «quatro perfumadores de narices con once pintas de oro». Estos perfumadores debieron ser inhaladores de la
Inhalador tallado en hueso con una bifurcación funcional en forma de «Y». (FGA)