ECOS DE LA COSTA Domingo Marte
La presencia de un faro, recientemente restaurado, despide el acantilado donde se inicia la playa de Sans Soucí, una franja de 300 metros de largo y una anchura media de 40 metros, de arena parda y de textura media. Algunos opinan que si esta playa se acondicionara podría tener un uso mayor del que tiene. El mar está separado de la desembocadura del río Ozama por una lengüeta de tierra en la parte norte y un muro artificial de piedras en la porción oeste. El conjunto formado por el mar, el puerto Don Diego, los edificios de la ciudad colonial y las aguas del río ofrece un paisaje atractivo. Pero uno de los componentes del conjunto está enfermo y puede contagiar al resto: el río Ozama es un gran colector de basura y de inmundicias, que lanzan industrias y moradores de los barrios aledaños. La restauración del río traería brillo y bienestar a la ciudad.
Playa de Sans Soucí, Santo Domingo. Página opuesta:
Desembocadura del río Ozama, Santo Domingo, D.N.
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