Danilo De los Santos
seis dominicanos. Es la primera vez que es celebrado un discurso colectivo de tal naturaleza, con dibujos, esculturas y pinturas, donde se constatan las diferencias entre las miradas artísticas de los autores foráneos y las miradas captadoras de los artistas locales. Las señas expresivas de estos últimos, que son nativos, en comparación con los reflejos que expresan los extranjeros ofrecen modos diferentes en el hacer técnico y temático, aunque el descubrimiento de la insularidad cotidiana, paisajista y racial atañe a unos y otros. Las obras que posee el Grupo Popular, fechadas en el decenio 1940, ofrecen coincidencias, diferencias y enfoques personales de los siguientes artistas: George Hausdorf, José Gausachs, Manolo Pascual, José Vela Zanetti, Celeste Woss y Gil, Gilberto Hernández Ortega, Yoryi Morel.
George Hausdorf. (Breslau, 1894/Nueva York 1959). Es un artista de origen judío y de veterana edad cuando llega al país como refugiado, resultando un pionero al fundar en Santo Domingo su academia particular de enseñanza artística en 1939, año en el que registra primera individual dominicana, resultando uno de los docentes fundadores de la Escuela Nacional de Bellas Ares. Residió en el país durante casi diez años, recorriendo sus regiones, captando las tipicidades criollas y diversificándose como dibujante experto en grabado, pintor e influyente maestro. Celebró un gran número de exposiciones personales, fue nombre obligado de grandes colectivas y merecedor de premios en bienales. En los tesoros de arte del Banco Popular Dominicano se localizan 4 obras suyas. «Marina», óleo/tela, 8x60 cms., 1940. En formato casi cuadrado, la composición capta un paisaje costero de elevados cocotales y follajes cuya simetría establece una visión de tres franjas que cortan el mar en oleadas con horizonte pronunciadamente azul y que establece frontera entre el agua marina y el amplio cielo de nubes en movimientos tonales que incluye el luminoso amarillo. «Obreros en el puerto», óleo/tela, 59x89.5 cms., 1940. En composición asimétrica, rectangular o apaisada, cuatro hombres se mueven desde la costa marina donde yace una canoa solitaria. A un lado, el conjunto de edificaciones coronado de follajes, remarcada por un sendero portuario. Contrariamente la zona del mar confundiéndose con un amplio cielo con gaviotas en vuelo. Es una vista donde la luz impera, blanquecina espacialmente y sobre el amarillento suelo arenoso. «Marchanta», grabado/papel, 15x13 cms., s.f. En amarillento papel envejecido por el tiempo, está plasmada la escena de una mujer de espalda junto a un burro con carga. Es la estampa criolla de una marchanta en plena calle con casas vernáculas. Un borde recuadra el grabado y al pie la cursiva firma del artista. «Rostros», carboncillo y acuarela/papel, s.f., 17x20 cms. Nueve captaciones definen la suelta composición de adultos señores que parecen reunidos en una audiencia. El carboncillo define los rostros y el aguado color es remarcador fisonómico y diluyente de los medios cuerpos situados en escalas diferentes. Se conoce de la habilidad del artista para ejecutar directamente retratos grupales en reuniones privadas. Los nueve «rostros» patentizan esa habilidad del apunte dibujístico ejecutado.
José Gausachs. (Sarriá, Barcelona, 1889/Santo Domingo, 1959). Es «el pintor de mayor experiencia y conocimientos que llegó a la República Dominicana del grupo de exiliados políticos que participaron en la guerra civil española», escribe María Ugarte. Deja tras de sí su experiencia docente en Bellas Artes de 57