Folleto i jornadas de pastoral

Page 22

Esta es la luz verdadera, más aún, la vida eterna: conocerte a ti, único Dios, y a tu enviado, Jesucristo. Te conocemos a ti, porque conocemos a Jesús, pues el Padre y el Hijo son uno. Ciertamente te conocemos por la fe y la tenemos como anticipo seguro hasta que te conozcamos por la visión. R/ Del seno de nuestras tinieblas… Lector 1:

Mientras tanto, auméntanos la fe, que nos conduzca de fe en fe, de claridad en claridad, como guiados por tu Espíritu, para penetrar más profundamente de día en día en los tesoros de la luz. Así se desarrollará nuestra fe, se perfeccionará nuestra ciencia y se hará más ferviente y amplia nuestra caridad, hasta que por la fe seamos conducidos a la visión y a modo de estrella nos lleve hasta nuestro guía betlemita, quien nacido en Belén apacienta a Israel y reina en Jerusalén, no en la que mata a los profetas y al Señor de los profetas, sino en aquella en la cual el Señor, causa, fuerza y gloria de los mártires, corona a los que fueron muertos. […] Lector 2:

“Levántate, nueva Jerusalén, resplandece, porque ha venido tu luz (Is 60,1).” Levantaos cuantos yacéis sentados en las tinieblas; mirad la luz que ha nacido en las tinieblas, pero que no es recibida por las tinieblas. “Acercaos a él y seréis iluminados (Sal 33,6)”, y en su luz veréis la luz, y os dirán: “en otro tiempo fuisteis tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor. (Ef 5,8).” […] Lector 1:

¡Cómo rebosa de felicidad la fe de los magos al ver reinar en aquella Jerusalén celestial a quien ellos adoraron cuando lloraba en Belén! Aquí lo vieron en un albergue de pobres, allí en el palacio de los ángeles; aquí en pañales como uno de tantos niños, allí en el esplendor de los santos; aquí en el regazo de su Madre, allí en el trono de su Padre. La fe de los bienaventurados magos mereció ciertamente ser recompensada con tan feliz visión, pues aun cuando no vio en el Niño sino un ser débil y despreciable, sin embargo no se escandalizó y no desdeñó adorar a Dios en el hombre y al hombre en Dios. Sin duda había brillado en sus corazones la “estrella nacida de Jacob (Nm 24, 17)”, el Lucero de la mañana. […] Oh Luz inmutable, oh Verbo, oh Luz del Padre inengendrado. En tu luz, en este día, en Belén, hemos visto la Luz del Padre, la Luz del Espíritu que ilumina el mundo entero. BENEDICTUS Cantores: Todos: Cantores: Todos: Cantores: Todos: Cantores: Todos: Cantores: Todos:

Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo, suscitándonos una fuerza de salvación en la casa de David su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas. Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; realizando la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán. Para concedernos que libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia todos nuestros días. Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor a preparar sus caminos anunciando a su pueblo la salvación, el perdón de sus pecados. – 22 –


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.