PRECURSORES, PRÓCERES, HÉROES Y… PALADINES
Pretender hacer una historia contemporánea es complicado. Si bien la inmediatez en el tiempo brinda fuentes testimoniales de primera mano no aporta la distancia suficiente para juzgar los acontecimientos. En los testimonios con frecuencia se impone el carácter autojustificatorio en el discurso de los protagonistas y su preocupación se centra más en defender "tomas de partido", que en entender los procesos sociales subyacentes. Es necesario intentar otro tipo de aproximación. NELSON MANRIQUE
La manera más común y fácil de signar y distinguir en el Perú a los precursores de los próceres, como de los héroes, para muchos escribidores oficiales de nuestra independencia es ubicándolos en el tiempo, pero ambos ajenos a los contextos sociales y su visión ideológica y su accionar político de la contienda emancipadora. Y pareciera que allí termina el problema, pero si nos preguntamos ¿de dónde y por qué vienen los llamados caudillos y los anti patriotas? Los muy ruborosamente recordados por este tipo de historia, es la que oculta o disimula el oportunismo, la codicia, el egoísmo, la intriga, la corrupción, la usura y la especulación, tan frecuentes entre los criollos, los verdaderos dueños y herederos del Perú al comenzar nuestra turbia república. Pero de los no caudillos y veraces patriotas, esta historia oficial, casi nunca se han preocupado de éstos, no porque son pocos y raros, sino por ser peligrosos y desenmascaran a los criollos respecto a su proyecto de república que necesitaban implementarla de acuerdo a sus intereses de clase. Por lo que aprovecharemos la ocasión para ensayar una historia, lo más rigurosamente posible.
“Todas nuestras naciones nacieron mentidas. La independencia renegó de quienes, peleando por ella, se habían jugado la vida; y las mujeres, los analfabetos, los pobres, los indios y los negros no fueron invitados a la fiesta. Aconsejo echar un vistazo a nuestras primeras Constituciones, que dieron prestigio legal a esa mutilación-y exclusión-. Las Cartas Magnas otorgaron el derecho de ciudadanía a los pocos que podían comprarlo. Los demás, y las demás, siguieron siendo invisibles.” (EDUARDO GALEANO)
PRECURSORES Y PRÓCERES Empezamos pues con los Precursores. Como en los otros países hispanoamericanos, eran grandes personalidades e ideólogos del siglo XVIII, que tomaban conciencia de su realidad americana, unos reclamando y accionado su descontento al interior del sistema colonial, reclamando igualdad de derechos, libertad política, reformas administrativas, e incluso separación de la dominación española. Desde fines de ese siglo prepararon el terreno para la llegada de las corrientes libertadoras. Unos eran líderes y autoridades indígenas; otros intelectuales o militares e instituciones que inician la gesta independentista. Unos provenían del interior rural campesino, con gran arraigo histórico andino. Los otros, criollos, eran los ideólogos liberales de amplia visión y acción, intelectuales o maestros que contribuyeron con sus críticas al sistema colonial y sus propuestas de cambio, pero a favor de los privilegiados, mayormente limeños, adinerados, que aspiraban todo el poder. Se consideraban los herederos naturales de las colonias. “La libertad política fue una ideología en el sentido moderno de la palabra que servía para defender intereses de personas y grupos aspirantes al poder en nombre de esa libertad. De ahí que las historias de las repúblicas latinoamericanas se confunden con la biografía de los caudillos que representaban los intereses de dichas élites políticas” (CELAM)
Los criollos reformistas sólo aspiraban reajustar ciertas normas políticoadministrativas del sistema colonial. Los otros precursores, aspiraban la separación del colonialismo hispano por otro liberal y moderno; mayormente masones, pero en general profesaban o se inspiraban en doctrinas foráneas y se adelantan a preparar los acontecimientos o hechos a base de sus ideales. Que con sus obras, enseñanzas, publicaciones y propaganda inculcaban ideales de justicia, libertad, fraternidad, igualdad, democracia, de patria. Aunque no necesariamente activaron directamente, eran sembradores de ideas y formadores de conciencia en favor de la emancipación. Trabajaron por ella pero sin conseguirla. Eso sí, crearon las condiciones necesarias para potenciar la ruptura con el imperio español y crear una nación separada de España, tomando en cuenta los graves acontecimientos del momento que pasaban las potencias mundiales. Algunos, bajo la influencia liberal jesuita, otros como masones liberales. Pero todos, excelsos precursores, incluso algunos lograron a ser