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Francisco Quiroz Chueca

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en sus 450 años

en sus 450 años

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circulación monetaria diferenciada, en la que prevalece la moneda de alta denominación usada por las grandes empresas mercantiles en sus transacciones y en la acumulación de riqueza. En cambio, los sectores populares no tienen acceso a la moneda, pues prácticamente no existen las monedas de reales, medios reales y cuartillos, la moneda de vellón. La economía es mayoritariamente natural y emplea “monedas” de diferentes materiales (telas, cuero, plomo, madera) y, en particular, productos (cacao, coca) y fichas particulares. Solo en las grandes ciudades se tuvo una economía mercantil, que se combinó con elementos naturales entre la población de bajos recursos. Una conclusión de Ruggiero Romano es que inclusive las ciudades no constituyen grandes polos de desarrollo, como se ha manifestado.

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Esta argumentación es difícil de refutar. No existen estudios que nos muestren el papel de las transacciones fuera de la esfera mercantil, pero todo indica que la circulación no comercializada en moneda de productos agropecuarios debió ser muy significativa. Es claro que el tiempo colonial no fue un régimen capitalista moderno, pero, de otro lado, es posible apreciarlo como una economía mixta en una extensión que solo estudios muy detallados podrían precisar, en particular, la medida en que las ciudades y las rutas comerciales alteraban la apacible vida de intercambios naturales en extensas áreas del territorio. Por lo pronto, me inclino por subrayar la coexistencia de relaciones naturales y monetarias en las que la moneda está presente al menos como unidad de medida de las transacciones por bienes, servicios y pago de remuneraciones. Es decir, una economía que podríamos llamar “sincrética” natural y monetaria.

Conquista y reestructuración

La Conquista interrumpe los sistemas de redistribución no comercial y de intercambios restringidos existentes en el Tahuantinsuyo. Sin grandes mercados ni mercaderes especializados (“profesionales”), los Andes pudieron desarrollar su economía gracias a diversos sistemas que garantizaban la circulación de bienes que incluían lo que John Murra denominara el control de un máximo de pisos ecológicos, además de un intercambio de bienes cuyo grado de mercantilización es objeto de debates entre los especialistas.

Al menos en algunas partes del territorio andino, la economía de los señoríos se complementaba con la producción desarrollada en otros pisos ecológicos. En zonas más cálidas, se sembraba coca o maíz a partir de un régimen de migraciones más o menos estables a esas áreas bajo la condición de yanas, “criados” o “indios de servicio” de los linajes dirigentes de los señoríos.4

4. Assadourian 1994: 14-15.

LA MONEDA EN EL MERCADO INTERNO PERUANO COLONIAL | 203

Es decir, no se trataba de una circulación mercantil, sino de una producción diseminada en tierras pertenecientes a los linajes señoriales andinos.

Otras dos modalidades de intercambio se desarrollan en los Andes antes y después de la Conquista. Una de ellas se refiere a los intercambios interétnicos resultado de la diversidad geográfica: los llamados “rescates” (trueque sistemático entre grupos étnicos). Así, por ejemplo, se da en los “tratos y contratos” que pasada la Conquista mantienen los chupachus con los yaros, guamalís, yachas, chinchaicochas, guánucos y mitimaes en sus “rescates” de ajíes, papa, maíz y coca por lana, charqui, ganado, sal y pescado.5 La otra modalidad es el llamado ccatu o mercadillo en pueblos, ciudades y llactas (Jauja, Quito, Cuzco). El mercadillo viene a cubrir la necesidad de intercambio cotidiano entre productores. Ccatu es una palabra quechua y aimara, lo que señala la difusión que tenía este espacio de trueque de productos básicos originados en el excedente productivo o el intercambio al menudeo por productos de amplio consumo (algodón, coca, ají y charqui). Institución al parecer preincaica, el ccatu puede ser permanente o temporal (ferias), y dada su importancia, estuvo bajo la inspección de las autoridades imperiales incaicas. El funcionamiento era simple: los productos se ordenaban por montoncitos llamados ccatuchala en mantos o llicllas puestos en el piso. Estos montoncitos sirven de medida para el intercambio, que se realiza en silencio, y muchas veces el maíz, la coca y el ají actuaban como medida de valor entre las vendedoras (conocidas ya durante los españoles como gateras). La yapa o adehala forma parte de las transacciones.

Una larga lista de palabras quechuas y aimaras referidas a oficios, intercambio, pesos y medidas evidencia la práctica de intercambios entre comunidades y en el interior de las comunidades en el Perú anterior a la presencia europea.6 Todo esto nos podría hacer pensar que el mundo andino antes de la llegada de los europeos pudo tener una economía mucho más dinámica en intercambios de lo que habitualmente se ha pensado, y esto podría estar relacionado con la rapidez con que la población andina se introduce en las relaciones mercantiles hasta el día de hoy, como lo hacen ver recientemente Jürgen Golte y Doris León (2014).

Tras la Conquista, el reordenamiento del territorio restringe las posibilidades de continuar usando áreas de diferentes características productivas por un mismo grupo étnico, obligando así a recurrir a nuevos tipos de intercambio. La experiencia de los lupaca del altiplano es ilustrativa. Con una economía basada en el ganado (camélidos andinos), pescado, quinua y tubérculos (papa, oca), los lupaca continúan usando su abundante ganado (incluyendo

5. Ibíd., p. 65. 6. Espinoza 1992. Sobre el ccatu, I: 103-106, 112-115.

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lanas y charqui) para intercambiarlo por productos de la costa de Arequipa y Moquegua, del Cuzco y Chuquiabo, de la yunga de Larecaja. Sin embargo, en 1567 “rescatan” plata y ropa hecha en los siete pueblos de la etnia, con una treintena de comerciantes españoles que intermedian en las redes españolas y andinas, y que pagan a los curacas en barras de plata. Este comercio obliga a enviar indígenas a trabajar en las villas y ciudades, y en el trajín de arrieros.7

Se crea una economía andina que es, digamos, sincrética, donde conviven relaciones no monetarias con el “trueque” indígena-español, el “rescate” donde la mercancía-coca se trocaba a su vez como mercancía-dinero.8

Obligaciones coloniales y mercado interno

Potosí actúa como el eje dinamizador de la economía andina, pues buena parte de la economía gira en torno al cerro rico, y, de otro lado, la plata circula en el país ampliamente antes de salir para España.9 No solamente se trata de que a Potosí debía llegar el azogue o mercurio desde Huancavelica, lo cual desde ya activaba una economía significativa en la ruta Huancavelica, Pisco, Arica y Alto Perú. También se establece una amplia red de vinculaciones comerciales que atraviesan tanto el sur andino como el norte. Cuzco, Arequipa, La Paz, La Plata, Cochabamba y Oruro son las grandes ciudades que activan la economía macrorregional, y cada una de ellas incluye su propia red de ciudades medianas y grandes, que juntas significan un mercado que demandaba variedad de productos y a su vez producía mercaderías para otras ciudades de la zona. Lo mismo sucede en otras partes del virreinato. Aunque sin grandes ciudades, en el norte, Trujillo, Saña, Piura, Cuenca, Loja y Quito establecen redes permanentes de intercambio.10

El comercio era variado, pero esto no significa que no hubiese productos clave para la dinamización del intercambio. La coca cuzqueña, los vinos de la costa y el ganado del altiplano recorren todo el territorio del sur andino.11 Cada ciudad y villa tiene talleres artesanales y establecimientos comerciales de pequeñas y medianas dimensiones que se encargan de producir y distribuir productos entre los sectores populares que de todas las razas y condiciones culturales las pueblan. Pulperías y chinganas, chicherías y bodegas compiten con las numerosas

7. Assadourian 1994: 67-71. 8. Glave 1989: 89. 9. Tandeter 1992. 10. Aldana 1999. 11. Jacobsen 2013: 75-76. A fines del siglo XVI, Potosí consumía unas 50.000 botijas de vino, 40.000 llamas y alpacas y unos 60.000 cestos de coca (Glave 1989: 58, 83-86).

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