El vaciado de la forma

EL VACIADO DE LA FORMA

Profesor: Francisco Rodrigo Alumna: Inma Alzinas

En esta optativa desarrollaremos habilidades y destrezas manuales, observaremos y aprenderemos a ver los elementos en 3d y las formas en el espacio.

Trabajaremos la escayola como material fundamental Y construiremos nuestra propia pieza, en este caso un caballo.

1. Analisis En primer lugar con los ojos cerrados dibujamos nuestra primera idea de un caballo.

Al ser totalmente libres a la hora de dibujar, no conocer perfectamente la musculatura de un caballo y no habiendo entrenado la mano sin que la guíen nuestros ojos, el dibujo es bastante primitivo.

Después de esta práctica nos ponemos a elegir el perfil de un caballo el cual nos guste su musculatura, expresión corporal y su movimiento.

Una vez elegido lo imprimimos en tamaño A3 y lo calcamos, en mi caso opte por un caballo Holandés por su esbeltez y elegancia y varié en el movimiento ya que debía apoyarse al menos en 3 patas.

Una vez elegido separamos las partes del caballo para posteriormente recortarlas y pegarlas encima de trozos de polietileno expandido.

2. Vaciado Para preparar el vaciado de la forma , una vez recortadas las partes del caballo las pegamos individualmente encima de poliestireno expandido y las recortamos con la máquina de cortado, en la cual hay que tener bastante precisión para no desviarnos de la forma que queremos obtener para nuestro vaciado . Las piezas de poliestireno no hace falta que sean muy grandes, no han de sobrepasar demasiado la imagen recortada.

También cortamos una base del mismo tamaño que nuestra pieza de poliestireno para poder tapar el agujero y poder volcar el amasado de escayola.

Antes de volcar el amasado cortamos un alambre y lo colocamos en el hueco de tal manera siguiendo la forma del dibujo y sobresaliendo del poliestireno en los casos que la pieza se tenga que unir.

Y por último le damos una capa de cera para que el alambre no se oxide y sea fácil despegar la escayola del poliestireno.

En todas las piezas seguimos este procedimiento menos en el cuerpo del caballo en el cual dejaremos un trozo de poliestireno en el medio de la mezcla de la escayola teniendo así una mayor resistencia .

3. Mezcla de escayola

3. Mezcla Dentro de un envase de plástico vertemos agua y vamos echando poco a poco la escayola del tipo E-35 hasta que no se hunda más en el agua y removemos hasta que no queden grumos y tenga consistencia.

Listo lo vertemos en nuestras piezas y dejamos que se seque un par de horas y cuando este seco retiramos el poliestireno y nos ponemos a trabajar nuestra pieza.

Para esculpirla necesitaremos herramientas como una raspador para yeso, un cúter, limas de diferente dureza y espátulas.

4. Tallado Con ayuda de las herramientas y dibujando las vistas del caballo de las diferentes partes en nuestra pieza de escayola, vamos tallándola hasta que nos quede una forma sugerente.

En mi caso decidí optar por darle un aire distinto de la forma clásica del caballo y apostar por planos desiguales que no distorsionaran mucho la silueta.

Al incidir demasiado en el tallado llegue a tocar el alambre y algunas partes se quebraron pero con un poco de mezcla de escayola se pudieron volver a adherir.

Al tener planos intenté que estos se repitieran en el otro perfil del caballo y que tuvieran relación cada una de las partes para una perfecta unión de las piezas.

5. Sellado Terminadas todas las piezas señalamos el lugar de unión y hacemos un agujero incidiendo en la escayola.

Primero colocamos el cuerpo del caballo en una base y la apoyamos con plastilina para que no se nos mueva y vertemos mezcla de escayola , en este caso bastante dura , en el interior del agujero, y con una espátula añadimos más mezcla alrededor de toda la unión para tener un perfecto sellado.

Después de unir las patas uniremos la cabeza y la cola del mismo modo.

6. Últimos retoques Terminadas las uniones del caballo, creamos una cajita de cartón pluma donde verteremos la mezcla de agua y Álamo 69-fuerte, un preparado que es bastante resistente y una vez hecha apoyamos nuestro caballo y miramos que todas las vistas estén bien y dejamos que seque.

Seca la pieza acabamos los últimos retoques con limas con poca dureza para no incidir demasiado y que se nos rompa en las superficies que han quedado rugosas .

7. Pintado Para pintar la pieza me he inspirado en arlequines de la edad media y en el pintor Marc Chagall cuyas obras son bastante coloristas y muy expresivas.

Para pintar el caballo use acuarelas para no teĂąir demasiado el material y quedarĂĄ un efecto de Fresco.

8. Conclusión Para finalizar nuestro análisis inicial hicimos un nuevo dibujo a ciegas.

Al haber observado con cautela las formas del caballo, en este segundo intento nos queda una mejor figura.

Esta asignatura nos ha servido para aprender el tratamiento del material, como domarlo; a tener una visión más amplia del volumen en su espacio; para observar las proporciones entre las partes y la armonía entre ellas y conocer la evolución de nuestra percepción de la idea de un concepto.