--------0---------La Candelaria HISTORIA DE LA VIEJA DAMA Este libro cuenta una historia que se inició hace 456 años. Y es una historia que se parece a las de amor, pues ha tenido sus momentos muy felices y también muy infelices, está plagada de infidelidades pero también de inolvidables instantes de plenitud, hay en ella motivos de risa y también de lágrimas, hay recuerdos de los buenos y de los malos. Pero lo más importante es que hay una historia que no ha sido arrasada por la codicia del dinero, ni olvidada por la incuria y la mediocridad de un país que muy poco se preocupa por su pasado y que lo desconoce, lo desprecia, lo destruye. Esta historia tiene que ver con el barrio La Candelaria de Bogotá, uno de los escasos indicios sólidos que nos quedan a los colombianos de que el país tuvo un pasado colonial y decimonónico y un siglo :xx distinto al de la electrónica, la rapacidad del dinero y la asfixia del cemento mondo y lirondo. Bueno sería saber que fue aquello que preservó de perecer a La Candelaria, que no pudo evitar, por ejemplo, el arrasamiento reciente de Santa Bárbara, hermoso barrio colonial del Centro Histórico de Bogotá, y que, también por ejemplo ,no ha servido para detener el infame proceso de destrucción que está terminando en Cartagena con el barrio de Manga. Claro que en La Candelaria no todo ha sido color de rosa. Han ocurrido muchas de esas infelicidades a que me referí al comienzo. Tal vez la más contundente haya sido la demolición del claustro de Santo Domingo para entronizar el monstruoso edificio Murillo Toro, y también están el edificio de La Salle y el condominio de Santafé ... Ha quedado, sin et:1bargo, lo suficiente para revelarse como un conjunto coherente y con personalidad, dentro de la inarmonía y la disonancia que caracterizan la estética bogotana. Es evidente que el trabajo de la Corporación La Candelaria y del Plan Centro, amén de la eficaz vigilancia de alguna alcaldesa y de la conciencia que, poco a poco, han ido adquiriendo la población del barrio y las distintas instituciones que en él tienen su sede, han contribuido a preservar no sólo las características socio-culturales de la comunidad, sino su entorno histórico y su patrimonio arquitectónico.