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Nace una
estrella La extraña belleza de Paola atrapa a la cámara. Hija de chilenos, nacida en Mesa del Mar y crecida en La Laguna, ha conquistado a todos los que han visto “Óscar, una pasión surrealista” con su personal interpretación de Roma, la amante polaca del pintor tinerfeño. Es el primer gran resultado de muchos años de preparación para una chica que, a los cinco años, dijo a su padre que quería salir en la tele.
Vestido: de La Duquesa. Pendientes plata y piedras: de Zarcillo La Orotava. Fotografías: Ricardo Canino Maquillaje y peluquería: Damian Estilistas Concepto y estilismo: Amuhaici Luis 20 FAMA
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Total look: Viktor & Rolf para Electra. Broche, anillo y pendientes: de Zarcillo La Orotava. Sombrero Panamá: de Calzados Afonso, La Orotava. Gafas: Swarovski de La Duquesa.
Paola es pausada, con un timbre de voz peculiar y una belleza extraña, que se descubre poco a poco, a medida que se le observa. Hace años que rueda por el Mundo, persiguiendo un sueño que la atrapó todavía niña y que poco a poco ha ido convirtiendo en realidad: ser actriz. Hija de chilenos que encontraron en Tenerife un buen lugar donde crear una familia, se crió en La Laguna, junto a dos de sus cinco hermanos (los otros tres, hermanos de madre, crecieron en Chile). Cuenta Paola que a los cinco años le dijo a su padre que quería salir en la tele. Él, deseando complacerla, la grabó con una cámara de video. “Me llevé una gran desilusión. Yo creía que las personas que salían allí se habían vuelto pequeñitas para poder entrar”. A los siete quiso marcharse con el circo al que la llevaron sus padres, después deseó ser bailarina y, un poco más tarde, tuvo claro que quería ser actriz. Mientras, hizo todos los seminarios para actores que ofrecía la Universidad de La Laguna. “Creo que era más por todo lo que estas profesiones suponían, por la actividad que conllevan”. Con este historial, sus padres ya la veían venir y no se sorprendieron cuando anunció que se marcharía a estudiar Arte Dramático. Años de formación Con 17 años Paola dejó la Isla. Mientras cursaba COU viajó varias veces a Londres a realizar las pruebas de acceso a varias escuelas de Arte Dramático. Entre aquellas que la aceptaron eligió una en la que pasó dos años. El postgrado lo cursó en una escuela diferente, en las afueras de la ciudad. “Al principio lo pasé mal, sobre todo porque no dominaba del todo el idioma. Allí se estudia mucho Shakespeare. Lo aprendía todo basándome en la fonética. Escribía fonéticamente el texto, luego la traducción y la forma correcta. Y así con todos los papeles. El segundo año ya me las arreglaba mejor”. Tras finalizar sus estudios en Londres, quiso ampliar horizontes y no centrarse únicamente en el teatro, así que se marchó a la universidad de UCLA, en Los Ángeles, a seguir un curso de año y medio sobre cine, televisión y medios audiovisuales. Los estudiantes de esta Universidad disponen de una visa de un año tras terminar los estudios para trabajar en algo relacionado con su carrera. Paola hizo Publicidad, Doblaje y, sobre todo, Teatro en la Fundación Bilingüe de las Artes, donde se representan clásicos españoles alternando los idiomas cada semana. La vida en Los Ángeles “Al principio pensé que me quedaría a vivir allí, porque me encantó”. Tenía 21 años recién cumplidos y se encontró un mundo totalmente diferente. Conocía a muy poca gente, tenía que conseguir una casa, un coche (allí es imposible moverse de otra manera) y debía adaptarse a unas medidas de seguridad que hasta entonces no habían sido necesarias. “Recuerdo que una noche estaba viendo la televisión y oí lo que creí que 22 FAMAeran fuegos artificiales. Claro, como aquí son tan frecuentes…
Resultó ser un tiroteo muy cerca de mi casa”. Finalmente Paola pasó allí dos años y medio. Decidió que prefería el cine europeo. De vuelta a España Nunca regresó a Tenerife. Se instaló directamente en Madrid, donde sigue estudiando, porque cree que siempre hay algo que aprender. “Hago seminarios de canto, de voz, de castellano neutro… Los estudios los compagino con publicidad, trabajos en cortometrajes y castings de todo tipo”. A estos últimos no termina de acostumbrarse. “Son muy duros y se pasa muy mal. Estás en tela de juicio, te observan y te juegas mucho en una sola prueba”. Lucas Lucas Fernández le ha dado su primera gran oportunidad en el cine. A pesar de ser ambos originarios de Tacoronte, se conocieron en Los Ángeles, a través de amigos comunes. Fue él quien sugirió su nombre para dar las campanadas de Fin de Año transmitidas desde Canarias en Telecinco. Luego sería la persona que encaminase sus pasos hacia la televisión. Primero fue “Mi Tierra”, luego “El expreso”, experiencias que le resultaron muy divertidas y le dieron espontaneidad y tablas. Curiosamente, uno de sus hermanos es una gran estrella de la televisión chilena. “Pero es casualidad. Él comenzó en esto muchos años después de que yo decidiese ser actriz”. Paola conoció el proyecto cinematográfico de Lucas desde un principio. “Me iba pasando las notas y el guión. Vi desde el principio que sería algo grande y que Lucas había tenido mucho ojo al descubrir una vida de película”. El realizador tinerfeño le anunció desde un principio que tendría un papel para ella en el film. Así llegó hasta la bella pianista polaca. Roma “No se sabe casi nada de la vida de Roma, el gran amor de Óscar Domínguez. Sólo que era una pianista polaca judía y que vivía en París. Vi fotos suyas y la observé para ver qué me inspiraba. Inventé su forma de moverse, su historia familiar… Inventé su vida y preparé mucho su voz y su acento. Me dediqué a grabar a una amiga polaca que vive aquí, en Tenerife, pero que domina el castellano. Quería coger el ritmo y la dinámica del acento”. El primer día de ensayo junto al famoso actor portugués Joaquim de Almeida estaba muy nerviosa. “Pero se me pasó enseguida. Hubo mucha química desde el primer momento”. Se quedó con la pena de no rodar con el resto de actores que intervienen en la película, pero sí tuvo oportunidad de conocerlos y aprender de ellos. “Verte en los títulos de crédito junto a nombres como Victoria Abril o Joaquim de Almeida da un subidón. La primera vez que vi la película estaba muy nerviosa y, aunque soy muy autocrítica, creo que estudié todo lo que tenía que estudiar. Y el resto de los personajes me impresionaron mucho”.
“Los castings son muy duros y se pasa muy mal. Te observan y te juegas mucho en una sola prueba”
Vida inestable Paola dice tener una existencia inestable. “Sólo es estable el lugar en el que vivo y con quien me relaciono. Luego tengo épocas frenéticas y otras en las que estoy muy tranquila”. Ahora acaba de pasar por un periodo de promoción y estudia proyectos para este año. Mientras, ha regresado a la televisión presentando “Cifras y letras” y encaja con muchos nervios las críticas más que favorables a su interpretación en “Óscar, una pasión surrealista”.
Vestido flores: de Etxart & Panno. Cinta bandeau: de Etxart & Panno. Anillo: de Zarcillo La Orotava.
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