
8 minute read
La arrogancia en los políticos
Mi pasión por la política nace escuchando la voz de José Francisco Peña Gómez por Tribuna Democrática. Y a la vez creció mi admiración y respeto a la trayectoria de importantes hombres y mujeres que aportaron su granito de arena para la construcción de las libertades democráticas que exhibimos en la actualidad. Cada tarde, en sus intervenciones radiofónicas, el doctor Peña Gómez se encargaba de presentar un informe detallado de la situación actual de la democracia en el mundo pero en especial de la República Dominicana.
Es importante reconocer que el profesor Juan Bosch (según la revista Rumbo) trajo ese estilo del exilio y aprovechó la hegemonía que tenía la radio para la época para educar a los dominicanos sobre la lucha de clase, utilizando términos como «Tutumpote», «Los hijos de Machepa» y «Vehículos Pecuezo Largo» para referirse a los automóviles alta gama de la época.
Advertisement
El irrepetible Peña Gómez no solo nos enseñó a conocer a grandes líderes de la Internacional Socialista. Se encargó de reconocer la valía y entrega a favor de la democracia de hombres y mujeres del Partido Revolucionario Dominicano. Y eso lo hacía todo el tiempo a través de Tribuna Democrática. Escuchando a Peña Gómez comencé a seguir la trayectoria de un joven Hatuey Decamps, que para entonces dirigía la Juventud Revolucionaria Dominicana (JRD); a Winston Arnaud, Jacobo Majluta, Antonio Guzmán, Pedro Franco Badía, Vicente, Lorenzo y Sofía Sánchez Baret. El líder vivía orgulloso del talento de Fernando Mangual hijo y del ingeniero Ramón Alburquerque. Decía que eran dos formidables técnicos que tenía el partido blanco para dirigir la Administración Pública. Esa promoción de Peña Gómez me provocó una admiración y respeto por muchos de ellos, incluyendo a la maestra Ivelisse Prats y por la doctora Mi-
VENTAS País Político
PUBLICIDAD
(809) 350-6530
EN LA WEB paispoliticord@gmail.com www.paispolitico.net
@paispoliticodr @paispoliticord Pais Politico Pais Politico
BARRICADA DE PAPEL YONI CRUZ @YONICRUZ64
¿Qué pasa con Abel?
Desde hace meses se nota un rezago en la campaña del candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

La baja se empieza a notar, y a provocar toda clase de rumores, tanto a lo interno como en las redes sociales. La pasada encuesta Gallup-RCC Media coloca al candidato morado en tercer lugar, con un preocupante 19,9%, detrás de su excompañero Leonel Fernández, que pareciera afianzarse en la segunda posición, con un envidiable 27,9 por ciento.
Cuando una encuesta no es favorable al candidato, lo que manda el librito es reaccionar con fuerza, mostrar músculos, duplicar esfuerzo y tanto en las calles como en la estrategia de comunicación, hacer lo posible por revertir, o cuando menos, atenuar los resultados que se le adjudica.
Sin embargo, no es lo que se ha notado en el caso de Abel. A lo sumo, igual que Leonel Fernández, se han limitado a intentar desmeritar la encuestadora, un jueguito conocido, pero poco eficiente, especiamente en el caso del candidato peledeísta, que tras se escogido como precandidato presidencial del PLD se dio a la tarea de posicionar un liderazago labrado en una bien ponderada gestión al frente de la importante alcaldía de Santiago, pero que poco a poco parece irse desinflando. De hecho, la encuesta Gallup-RCC Media no solo lo coloca en tercer lugar, sino que revela una tasa de rechazo de un 20,7%, detrás Luis Abinader con 26.6% y Leonel Fernández, que alcanza el mayor nivel de rechazo, con 37.3%.
lagros Ortiz Bosch. En mis 30 años de práctica periodística y como relacionador público solo he podido trabajar con la sobrina del profesor Bosch cuando dirigió la cartera educativa.
Del grupo mencionado más arriba, en la actualidad, el ingeniero Ramón Alburquerque, es el único que busca la Presidencia de la República. Alburquerque es un hombre brillante. Muchos aseguran que tiene un conocimiento por encima del promedio de los políticos dominicanos.
Alburquerque es la real enciclopedia humana.
Sin embargo, en 1998 se inmortalizó junto a una popular frase, que está patentizada en el vocabulario político dominicano. Seguro que el último fin de semana fue tendencia por haber abandonado abruptamente una entrevista en un famoso canal de televisión dominicano. El «sabio de Ramón Alburquerque» la inteligencia emocional lo traicionó. O quizás estaban de vacaciones como las musas de Serrat.
Para un candidato que a mitad de camino hacia las elecciones muestra signos de depresión, las posibilidades de repunte pasan por cosas propias de los milagros. No será el caso de Abel, todavía. Pero de continuar el panorama que se percibe, en poco tiempo se afianzará en la percepción del electorada la idea de que es un candidato de tercera, importante solo en segunda vuelta, si la hubiera, pues tanto desde las vocerías del gobernante PRM, como de la Fuerza del Pueblo, no solo se habla de ganar, sino de hacerlo en primera vuelta. El mismo candidato presidencial del PLD ha reconocido «la lentitud con que marcha» su proyecto presidencial hacia los comicios del próximo 2024, atribuyéndole responsabilidad a su equipo y a los voceros de esa organización que no comunican las actividades que realiza ni sus recorridos.
La situación de la campaña de Abel, marcada desde el principio por el abandono del partido de numerosos e importantes dirigentes de su organización, especialmente de Santiago de los Caballeros y cercanías, ha llegado incluso al punto en que algunas voces sugieren su renuncia, mientras otros consideran que debía llegar a un acuerdo con su otrora compañero Leonel Fernández.
Suele escucharse siempre la frase de que «aún queda mucho camino por recorrer» hasta las elecciones del próximo año. Pero el tiempo vuela, especialmente en política. Un descuido y de pronto a cualquiera se le puede hacer «tarde para ablandar habichuelas». Crece a lo interno del PLD la idea de, como dice la vieja Fefa en un pimentoso merengue, «o te menea, o te apea». Y eso si es peligroso para una candidatura en construcción.
De cualquier manera, Abel es un hombre que no se amilana ante retos y ha demostrado capacidad de trabajo, y de maniobra. Toca esperar en las siguientes semanas una reacción, un cambio de estrategia, acciones contundentes para provocar el repunte de la candidatura. Las encuestas se están cosiendo, y que en ls próximas encuestas no se revele una mejoría, y en cambio se mantenga la tendencia, sería muy desfavorable para el activo alcalde de Santiago y aspirante presidencial.
Cuando los partidos políticos aprueban y presentan las candidaturas, dejan libres las puertas para que la ciudadanía se envuelve de forma activa en la campaña electoral, proceso que siempre está antecedido por los conflictos internos generados por las aspiraciones de sus dirigentes, miembros y simpatizantes.
De ahí que se hace necesario el compromiso de las fuerzas políticas, para desarrollar una campaña electoral programática, austera y pacífica que contribuya a dignificar la política y fortalecer nuestro sistema democrático y de partidos.
Las campañas electorales constituyen desafíos para las candidaturas y partidos, en aspectos que envuelven no sólo a esas organizaciones, sino, también a la ciudadanía, la cual es necesario entenderla en estos tiempos heterogéneos y espinosos al momento de iniciar el torneo que marca el tono de las promociones que hacen los oferentes o aspirantes a obtener el favor del electorado.
Estos aspirantes, en sus slogans tratan de transmitir un mensaje diferente al elector que, no siempre, representa solucionar las necesidades del pueblo; sin embargo, constantemente sectores de la sociedad, organizaciones sociales y ciudadanos conscientes, piden a los partidos políticos y candidatos superar el clientelismo y que en sus propuestas predomine, como base fundamental de sus campañas, el respeto a la dignidad de la persona, el debate de las ideas y programas de gobierno.
NUESTRO TIEMPO NURYS PAULINO » @NURYSPAULINO

El programa de trabajo debe ser conocido y ordenado por los candidatos y políticos, en base a lo que la gente ambiciona, para poder incluir soluciones que respondan a esas necesidades, un reto que enfrentan y que deben superar en lo inmediato. Los partidos, agrupaciones y movimientos políticos tienen la responsabilidad de propiciar un certamen en el que predomine un ambiente que favorezca al debate de ideas y la discusión de los temas fundamentales que le preocupan al país y no los ataques y agravios particulares; Se hace urgente que nuestros políticos ofrezcan en sus propuestas acciones inspiradas en el fortalecimiento de la democracia, la mesura, el respeto a los derechos humanos y al civismo.
Concentrar la cruzada en la figura del candidato, convierte la campaña electoral en una lucha de imagen, sin que exista una propuesta, pues «el candidato» es la única oferta. Quien -en la mayoría de los casos- es exhibido como el «salvador o Dios» sin el cual resulta imposible la solución de los problemas nacionales y haciendo énfasis en su propaganda y en la descalificación del adversario, a quien se le atribuye propiciar la crisis y problemas nacionales.
Es necesario, que los candidatos tengan claro que una elección se gana, además de la suma de sectores de la sociedad que aprueben una propuesta o se identifican con un candidato, se debe tener claro un programa de trabajo que responda a las necesidades fundamentales del pueblo, una campaña que proporcione ideas
EL ENFOQUE POLITOLÓGICO
JOSÉ A. GELL » @JOSEAGELL

y un argumento que permita al candidato obtener la mayor cantidad posible de votos para poder ganar la elección.
Asimismo, deben gestionar los mecanismos que eficienticen los altos gastos de campaña, reducir su acostumbrado derroche de recursos económicos, el uso de las propiedades del Estado y eliminar las prácticas clientelistas que corrompen al ser humano y menoscaba la calidad del sistema político dominicano.
Una campaña basada en el fortalecimiento de las instituciones democráticas, que garantice la libertad y el respeto a los derechos básicos de la ciudadanía, la institucionalidad y comprometerse a promover en dirigentes, militancia y simpatizantes la no-violencia, evitar la agresividad en cualquiera de sus manifestaciones, ya sea verbal o física y mensajes violentos, deshonrosos, irreverentes o antojadizos, a fin de propiciar un clima de entendimiento, el diálogo e integración de las personas en el proceso democrático. Finalmente, entiendo que la campaña electoral para cualquier elección, debe efectuarse en un ambiente de paz, que propicie el debate de ideas y discusiones con fundamentos y no, únicamente, que promueva las imágenes de candidatos que agreden, ensucian calles, paredes, árboles, contenes sin más propuesta que no sea la imagen o su foto. La celebración de la contienda electoral, debe transformarse en la base para la concertación entre los distintos agentes, a fin de alcanzar el desarrollo integral de la nación y el sistema de partidos.
La lujosa coronación de un rey
El sábado pasado fue coronado rey Carlos III quien fue anteriormente el Príncipe de Gales, hijo mayor de la fenecida Reina Isabel II.
Éste será el monarca coronado con más edad en toda la historia de Inglaterra o el llamado Reino Unido.
Precisamente, la otrora poderosa nación imperial es históricamente «el punto» de partida de la Monarquía Parlamentaria (de carácter democrático).
Ello es una larga tradición en el referido país, a pesar de la vieja expresión de que «el rey reina pero no gobierna».
Es que en el sistema político parlamentario, quien detenta el poder gubernamental es el primer ministro o Jefe del Gobierno.
De forma que el rey es una figura simbólica con escaso poder político.
Conforme con el sistema en cuestión, el rey o monarca es el Jefe del Estado y el Primer Ministro es el Jefe del Gobierno.
Empero, quien tiene «la batuta» de mando es el Primer Ministro, electo por los diputados (Cámara de los Comunes).
Es bien sabido que los reyes no son electos por nadie, y la trans- misión de mando en la tradicion monárquica es por la vía hereditaria.
Pero no todo el mundo en Inglaterra está de acuerdo con el régimen monárquico, y muchos abogan por la República, la cual es el régimen donde no existe la figura del rey.
¿Sale muy caro un rey? Sin duda. Preservar esta tradición medieval le sale caro al Estado, quien recauda impuestos para financiar la monarquía.
De resultas, que Carlos III fue coronado para vivir, según se dice en el argot popular, como «un verdadero Pachá».
Las escenas de violencia sin fin se repiten una y otra vez. No hay manera de detener la horda enardecida de fieras s los organismos internacionales que no se inmutan para hallar una solución. No les interesa y temen a las bandas enardecidas que pululan en Haití. No es para menos, pero deben actuar de inmediato porque la situación empeora. La solución del vecino país no debe pasar más por territorio dominicano.
El pueb