
3 minute read
«En la política las mujeres la tienen muy difícil»
La funcionaria plantea que uno de los retos que deberá enfrentar su partido está relacionado con la participación de los relevos de cara a los nuevos procesos y mantener el ejemplo de una agrupación política que apuesta a la renovación de su liderazgo.
EMELYN BALDERA @emelynbaldera Editora de MUJER & POLÍTICA
Advertisement
Gloria Reyes es una mujer que decidió a muy temprana edad que lo de ella sería la política, cuando aún se piensa en muñecas y bicicletas, ella ya jugaba a ese rol de la mano de sus padres, dos dirigentes importantes del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) de Pantoja, quienes la hicieron parte de su amor por los ideales del entonces partido blanco, José Franciscco Peña Gómez.
A los 11 años ella asistía al Congreso de la mano de sus progenitores para librar batallas que la vincularon a Pantoja, el sector donde nació, y al que su padre le entregó muchos años de luchas comunitarias en pos de conquistas como que lo declararan Distrito Municipal.
En uno de sus cuadernos del colegio guardaba el mapa que le pidió su padre para ayudar a delimitar lo que sería el distrito municipal de Pantoja, que posteriormente se logró, aunque costó muchas horas de desvelo y lucha.
Su nombre se sintió con mayor presencia luego de ganar la diputación en 2016, pero le gusta aclarar que esa conquista no llegó de la nada. Como una joven con inquietudes políticas y preocupada por las causas sociales que veía a diario en su comunidad.
«La política es muy dura, no hay espacios que se queden vacíos, tú te sales y otro lo ocupa.
Heredé de mi padre su buena reputación que me abrió puertas, la gente me recibía porque sabía que era hija de un hombre muy serio, pero no era que yo tenía una estructura política en la que me monté o que había un trabajo hecho, no fue así. Tuve que hacer todo desde cero», cuenta la directora general de Supérate quien asumió el rol de legisladora con 29 años.
Aunque en «la universidad no te enseñan a ser candidato», sí le interesaba prepararse por eso estudió derecho y luego se fue a Madrid a profundizar en temas de política. Hizo una maestría en derecho internacional en la Universidad Complutense y también una maestría en desarrollo social y microfinanza, en la Universidad de Alcalá, especialización que ha sido de utilidad para el papel que desarrolla actualmente desde el Estado.
Es una mujer competitiva, que sabe lo que le toca y cómo puede lograrlo. Cree en las alianzas, sobre todo entre mujeres y está segura que hay una crisis de representación femenina en política. No le teme a las críticas, aunque sí a la reacción que puedan tener sus seres queridos. Se estrenó como madre, apenas a meses de nacer su primogénito, ella ha tenido que salir al ruedo convencida del compromiso que tiene como funcionaria del actual Gobierno, sabiendo dejar espacio para desempeñar el rol de madre, esposa y también funcionaria. Cree en los relevos en la política y espera que su partido, (PRM), juegue el papel que le toca con relación a la participación de sangre nueva de cara a los retos que le depara el 2024.
«La meta en términos de protección social de este Gobierno no es tener más gente recibiendo ayudas, sino lograr que la gente no necesite ayudas. Ese cambio de visión ha sido determinante».
¿Cuál es la situación actual de la mujer en la política?
Hay una crisis de representación de la mujer en la política. Las mujeres salen a competir con una mochila llena de piedras en la espalda. La realidad es que esos temas solo nos interesan a nosotras, quienes estamos en esos escenarios. Hay que articular a todo el género sin importar la actividad a la que se dediquen, debemos entender que la política nos debe importar a todas. En política las mujeres la tienen muy difícil para avanzar.
¿Cómo la cautivó la política?
En mi caso, crecí en un hogar político, vi la política como parte de mi vida, desde muy niña. Con la vinculación de mis padres y de alguna manera pasó como una parte natural de mi vida, no era algo extraño. Sobre todo porque en mi experiencia, aunque no sucede así en todas las familias, la política unificó a mi familia. Yo escuchando desde fuera cómo se tomaban las decisiones.