Revista Observatorio Tecnológico del Tomate N11

OBSERVATORIO TECNOLÓGICO DEL TOMATE REVISTA SECTORIAL DEL TOMATE

N11

MAR2015

observatoriotomate.com

índice editorial 02 actualidad 03 el personaje 07 cifras 10 internacional 11 ctaex 13 I+d+i 16 empresas 20 innovaciones y productos 22

mancheta Centro Tecnológico Nacional Agroalimentario “Extremadura” Registro Nº 80 Dirección: Carmen González Ramos Edita: OTRI de CTAEX Registro Nº 169 Edición: José Luis Llerena Ruiz Coordinación: Ana Espejo Gutiérrez de Tena Redacción: Águeda Zarco Maestre Diseño y Maquetación: Bittacora Apoya en la financiación: Ministerio de Economía y Competitividad.

Plan Estratégico de Transferencia Tecnológica (PETRA) DEPOSITO LEGAL: BA-000679-2014

/ editorial Apuesta por la tecnología / Comienza la campaña de tomate de 2015 y todas las previsiones apuntan a un nuevo incremento de la superficie cultivada por el sector tomatero español. Ya en 2014, la campaña destacó por sus excelentes resultados. Entonces, la superficie dedicada al tomate alcanzó cifras records e importantes. Alrededor de treinta mil hectáreas en nuestro país fueron dedicadas a esta hortaliza. A estas circunstancias se unieron que España es el país que más tomate exportó en 2014 y que también el flujo del comercio internacional de tomate se incrementó.

Con estos datos, es fácil concluir que el mundo necesita tomate y que en España estamos preparados para incrementar nuestra producción. Eso sí, con las técnicas de producción más adecuadas, para que nuestro tomate sea sostenible con el medio natural.

Estas producciones son conseguidas gracias a labor de los agricultores y técnicos que están aplicando la tecnología emanada de los centros de investigación. En Extremadura se trabaja en el desarrollo tecnológico de este cultivo, dándose desde hace décadas una perfecta coordinación entre los centros de investigación y el sector, agrupados ejemplarmente en la Mesa del Tomate. En ella, sus responsables marcan las líneas de trabajo hacia las que hay que dirigir las investigaciones.

En la región extremeña se sitúa un ecosistema ideal para el tomate, pero no sólo por sus condiciones edafoclimáticas, sino también porque existen todos los elementos para una perfecta integración de la cadena de valor del subsector del tomate para industria.

Nos encontramos en un momento crucial para la investigación. El marco financiero va a posibilitar que, gracias a la Estrategia de Especialización Inteligente de Extremadura donde el sector agroalimentario es uno de sus ejes principales, circulen flujos financieros para situar la investigación del tomate en el primer nivel mundial.

José Luis Llerena Ruiz Director de la OTRI de CTAEX / @jllerenaruiz

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Temporada 2015: el aumento de la actividad se confirma / La producción en España se mantendrá en los niveles de la pasada campaña Indicadores oficiales, proporcionados por algunos países de la AMITOM y de EE.UU., concretamente del Estado de California, parecen confirmar un aumento, más o menos esperado, en cantidades transformadas de tomate para la temporada 2015.

Las previsiones apuntan aumentos de carácter menor, como los de Siria o Rusia, sin impacto notable en los mercados de todo el mundo. Diferente será el crecimiento estimado en la industria de tomate procesado turca, en la que se prevé que la producción aumente en 700.000 toneladas.

El año pasado, los procesadores turcos sólo fueron capaces de lograr algo menos del 80% de su objetivo inicial, debido principalmente a las condiciones climáticas, pero para este año están considerando el procesamiento de 2,5 millones de toneladas, lo que supondría un aumento del 39% en comparación con el resultado logrado en 2014.

Por su parte, Grecia y Ucrania también tienen previsto aumentar sus producciones. En la industria griega está previsto un incremento del 11 por ciento con 520.000 toneladas. Un crecimiento con el que este país se acerca al objetivo marcado por la industria del tomate transformado griega para el año 2017, cuando está previsto que se alcancen las 800.000 toneladas anuales. Para la industria de Ucrania, el aumento ascenderá a un 17% pasando de las 470.000 toneladas procesadas en 2014 a 550.000 previstas este año.

En lo que se refiere a Portugal, las previsiones de crecimiento en tomate transformado sólo variarán ligeramente en comparación con el año pasado. En este sentido, se prevé un incremento del 4% alcanzándose el 1,25 millones de toneladas. Mientras que países como España e Irán, mantendrán su tonelaje de producción en el mismo nivel, 2,7 millones y 2,2 millones de toneladas respectivamente, para el año 2015.

Al mismo tiempo, USDA-NASS lanzó la primera estimación de superficie y la producción en California, donde los procesadores de tomate tienen la intención de contratar 15 millones de toneladas. Esto supondría un aumento del 7 por ciento en superficie cultivada respecto a la campaña de 2014.

Fuente: Tomato News

Rusia: ¿qué nos depara el futuro para las importaciones? / Las exportaciones de pasta de tomate de al menos doce países, entre los que se encuentra España, se verán afectadas por la situación del mercado ruso.

Países productores de tomate concentrado de todo el mundo miran desde hace meses hacia Rusia y su mercado para tratar de conocer el futuro de sus exportaciones.

Según los últimos datos, el rublo, moneda oficial del país, continúa su caída libre. Entre junio y diciembre del año pasado el rublo se desplomó y cayó a mínimos sin precedentes frente al dólar (69 rublos por dólar) y frente al euro (86 rublos por euro). Un golpe económico que, según los expertos, no se había producido en los últimos quince años. Desde que comenzó 2015, el rublo ha perdido el 45% de su valor frente al euro y la mitad de su valor frente al dólar.

Las importaciones de pasta de tomate rusas afectan a un pequeño número de países, entre los que destaca Ucrania, donde el comercio con Rusia representó una parte considerable de los ingresos por ventas para este sector en 2013. De las 135.300 toneladas de pasta importada por Rusia, 25.600 toneladas provenían de Ucrania, con un valor estimado de 28,4 millones de dólares.

Esta cantidad representa casi el 91% del valor total de las exportaciones de pasta de tomate ucranianas.

Por otro lado, aunque Rusia importa cantidades relativamente limitadas de pasta de Polonia, el mercado ruso es muy importante para la industria polaca. Las 594 toneladas de pasta de tomate compradas por Rusia a Polonia representa un alto valor del total de las exportaciones polacas de este sector.

Fuente: F&H HOY

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La situación del mercado ruso preocupa también a los operadores chinos de cuyo país salieron el año pasado 75.000 toneladas de pasta a Rusia. Fuera del valor total de las exportaciones, el mercado ruso representa una fuente de ingresos importante e histórico para China.

Preocupación e incertidumbre también en Portugal ante un posible colapso de las actividades de importación. Las exportaciones a Rusia representan el 6 por ciento del total de tomate transformado exportado por Portugal. La presencia del tomate portugués en el mercado ruso se ha ido consolidando con los años, por lo que de continuar los problemas, los operadores de tomate portugués tendrían que derivar alrededor de 14.000 toneladas de pasta de tomate a otros mercados. En menor medida, la situación del mercado ruso afectará a los índices de exportación españoles e italianos, aunque ambos países, España e Italia, se encuentran en la lista de los doce países más afectados por la situación del mercado ruso.

Además de esta visión general de la situación, varias preguntas sin respuesta se mantienen en cuanto al futuro de los suministros rusos de pasta. En caso de que la caída de la moneda rusa se puede detener, ¿cuáles serían las posibilidades reales de pago de los importadores rusos en los próximos meses?

Por otro lado, Rusia también importa considerables cantidades de conservas tomates (19.500 toneladas de promedio cada año entre 2011 y 2013) y de salsas (25.700 toneladas). Para la primera de estas categorías, Italia, e inusualmente, Vietnam, son los principales proveedores del mercado ruso, aunque España, Ucrania y Moldavia son también importantes jugadores en este mercado.

En conjunto, y debido a los problemas descritos, la situación podría tener un impacto de diversos grados en cerca de una docena de países, de los cuales China, Ucrania, Italia, Portugal, Holanda, Irán y España serían los más afectados.

Fuente: Tomato News

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España: el valor de las exportaciones se ha incrementado en un 14 % / La industria extremeña experimentó un aumento del 30% de su volumen de ventas en 2014 Las ventas al exterior de productos de tomate españolas han crecido considerablemente en los últimos años, especialmente desde 2012 hasta 2013, con el consiguiente aumento en el valor total de los productos exportados. El valor total de los productos de tomate enviados fuera de las fronteras del país alcanzó los 389 millones de dólares en 2013, un aumento del 14% en comparación con el promedio de los cuatro años anteriores.

Debido a variaciones en el tipo de cambio entre el dólar estadounidense y la moneda europea, la cantidad de euros obtenidos por las empresas españolas que exportan productos de tomate ascendió a poco más de 293 millones de euros, un incremento de cerca del 16% en comparación con la media de 253 millones entre los años 2009 y 2012.

Como era de esperar, las exportaciones de pasta representaron la mayor parte de este valor, 60% del total, seguidas de las exportaciones de salsa, que representaron poco más del 14% del total.

Por último, se situó el sector de los tomates en lata (pelados o sin pelar, entero o picado), para el que España ocupa el segundo lugar a nivel mundial después de Italia.

Desde un punto de vista geográfico, las exportaciones españolas buscan mercados europeos. De 2010 a 2012, estos países absorbieron el 88% de las ventas externas netas de pasta de tomate (152.000 toneladas de cada 173.000), el 98% de las ventas al exterior de tomate en lata (132.000 toneladas de 135.000), y prácticamente todas las ventas de exportación netas de salsas (aproximadamente 40.000 toneladas). Francia, Alemania, los Países Bajos y el Reino Unido, representaron la mayor parte de los puntos de venta para estas tres categorías.

El desarrollo de las exportaciones de tomate en conserva data de 2005/2006, un año crucial para este sector, que vio como los volúmenes anuales pasaron de un promedio de aproximadamente 58.000 toneladas entre 1997 y 2005, a un promedio de más de 112.000 toneladas entre 2006 y 2013. El nivel más alto se alcanzó en 2012, con casi 151.000 toneladas exportadas. El año pasado, las ventas al exterior de tomates en conserva se desaceleró ligeramente, bajando a 136.200 toneladas.

Por último, en los últimos diecisiete años, las exportaciones españolas de pasta se sometieron primero a un momento de expansión muy rápida (1997-2007), que luego fue seguido por una fase de disminución lenta. A partir de 2012 y 2013, las ventas al exterior de la pasta se recuperaron en un 6%, pero el balance comercial de pasta del año pasado, 172.300 toneladas, se mantuvo muy por debajo del récord de 2007, establecido en 223.000 toneladas.

En la ligera recuperación de las exportaciones registrada el año pasado tiene un gran peso la actividad generada en Extremadura, lo que confirma las expectativas expresadas por el Presidente ACOPAEX (Asociación de Cooperativas de Extremadura), Domingo Fernández, quien al término de la campaña explicó que la industria de tomate de la región contaba con un aumento del 30% en su rendimiento en el mercado de exportación, impulsada por la situación de los mercados internacionales, así como por los resultados excepcionales de la temporada de 2014, que, en esta región, terminó con resultados récord en términos de cantidad y calidad.

Fuente: Tomato News

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El Séptimo Congreso Brasileño del Tomate de Industria abordó los principales retos del sector / Reducir la brecha tecnológica, aumentar la productividad y mejorar la gestión de los recursos energéticos son algunos de ellos, según los expertos.

“Si quieren ser capaces de cumplir con el constante aumento de la demanda mundial, las principales regiones productoras de tomate procesado del mundo necesitan resolver cuatro problemas fundamentales”, declaró Cosme Argerich, director del INTA-La Consulta, empresa de investigación, durante su discurso en el Séptimo Congreso Brasileño de Tomate de Industria, celebrado en el municipio brasileño de Goiania.

Según Argerich, los productores deben reducir la brecha tecnológica entre ellos y el líder mundial del sector, California, así como mejorar su productividad en un 10 por ciento durante los próximos cinco años y ampliar el período de cosecha.

El estancamiento de los precios mundiales de los productos derivados de la transformación del tomate, el aumento en los costos de producción agrícola y los estrechos márgenes de beneficios, fueron tres de las cuestiones abordadas en este congreso, en donde además, se sugirió que este difícil paso para la industria podría ser superada mediante la mejora y el perfeccionamiento de la gestión de los recursos energéticos.

En este encuentro, se abordó también uno de los principales retos a los que se enfrenta el sector como es la creciente escasez de agua. Los expertos, reunidos en Brasil, pusieron de manifiesto una realidad que preocupa al sector que es la del creciente consumo de agua ante el espectacular aumento de la población en los próximos 30 años, lo que sin duda afectará al agua para riego de los cultivos. Se da la circunstancia de que los principales países productores de tomate transformado son especialmente sensibles a este problema de escasez, sin que exista en la actualidad una variedad de tomate resistente a la sequía.

Fuente: Agrocampo

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/ el pers naje

“La superficie de tomate crecerá esta campaña un 10 por ciento. Los agricultores y la industria la esperamos con alegría”/ Fernando Sanromán Plaza

presidente de la Mesa del Tomate.

Extremeño, nacido en Logrosán (Cáceres). Es Ingeniero Técnico Agrícola. Terminó la carrera con 21 años y pocos días después comenzó a trabajar en el sector del tomate en una ATRIA de las Vegas Bajas, donde se curtió en el trato diario con los agricultores. Siete años después, fue contratado por la industria extremeña Agraz, de Villafranco del Guadiana, donde es responsable del departamento Agrícola. Allí lleva 16 años ocupándose de la contratación, viendo las mejores variedades para los agricultores y haciendo el seguimiento del cultivo..

¿Qué es la Mesa del Tomate?

La Mesa del Tomate se creó en 1982 bajo el nombre de Comisión de Seguimiento del Contrato, siendo en 2001 cuando pasa a llamarse Mesa del Tomate. Es una organización de carácter interprofesional y paritaria, sin ánimo de lucro, formada por las organizaciones de productores e industrias, que tienen voto igualitario. Los cargos en la Junta Directiva van cambiando alternativamente cada año.

La principal función de este organismo es el seguimiento del cumplimento de los contratos y el control de la calidad del tomate en su entrada a fábrica. Un control que se efectúa en base a un protocolo basado en una doble criba, la del Laboratorio Agrario Regional, por un lado, donde periódicamente y durante toda la campaña se mandan muestras para comprobar que no hay restos de fitosanitarios y la del personal propio seleccionado para cada campaña que, auditado y formado en CTAEX, contribuye a verificar cien por cien la calidad.

Además, la Mesa del Tomate dispone de la Comisión Rotatoria Permanente con la que se garantiza el entendimiento entre el agricultor y la industria durante toda la campaña y se solucionan los posibles conflictos que puedan surgir. ¿Existe algún órgano parecido en otros países productores?

No. La mesa del tomate es un ejemplo mundial de entendimiento del sector y de verificación de la calidad, pues no existe en ningún otro país de la Unión Europea y tampoco en Estados Unidos.

Tanto es así, que recientemente Portugal e Italia han contactado con nosotros para conocer nuestro funcionamiento. ¿Qué características debe tener el tomate para pasar esos estándares de calidad? Háblanos del Brix.

Lo más importante de todo es que el tomate debe llegar a la fábrica sano, rojo, ni verde ni con tierra o materias extrañas, y después hay que medir su Brix, que es la medida de sólidos solubles que tiene el tomate. Cuanta menos agua tenga más elevado será el Brix y menos tendrá que concentrar la industria, por eso además, se paga mejor. Dependiendo del Brix que tenga, el agricultor puede cobrar más o menos, puede tener bonificación o penalización sobre el precio del contrato.

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¿Cómo ha sido y está siendo la Incorporación de técnicas agrícolas sostenibles a este cultivo?

Se están dando muchos pasos en este sentido dentro del sector. Dentro de dos o tres años todo el tomate será producción con técnicas agrícolas sostenibles. En la actualidad, destaca la utilización de las sondas de humedad cada vez más utilizada por los productores. Hasta ahora se regaba en base a programaciones estipuladas y ahora se pude comprobar la humedad tiene la tierra, a distintas profundidades, a través del móvil o el ordenador. Las sondas emiten unas gráficas y te avisan sobre el momento óptimo para regar.

También se ha producido una reducción importante del uso de fitosanitarios. El propio agricultor aboga ya por la reducción de productos fitosanitarios. Se están eliminando los más agresivos y contaminantes.

A su vez, y desde la Mesa del tomate, se están instalando estaciones meteorológicas por toda Extremadura y la idea es ir aumentándolas. ¿Cuáles son los principales retos del sector en Extremadura?

Tenemos que conseguir la mayor producción y la mejor calidad posible reduciendo el uso del agua, los abonos y los fitosanitarios. Mayor cantidad y calidad con lo mínimo de agua, abono y fitosanitarios.

Contamos con una ventaja para ello y es que la mentalidad del agricultor ha cambiado. Antes los agricultores trataban por sistema, ahora el agricultor trata sólo cuando es necesario y con el producto necesario, según las recomendaciones de los técnicos de ATRIAS. Es producción integrada, agricultura sostenible.

Además de todo esto, partimos con una gran ventaja competitiva como es el buen clima. Gracias a él, aquí se consigue una calidad inalcanzable en ningún otro país productor.

La campaña 2014 pasará a la historia por sus excelentes resultados, ¿qué circunstancias deben darse para obtener esos récords de producción?

El año pasado confluyeron varios factores como fueron por un lado, el hecho de que se eliminaran variedades que ya no tenían resistencias ni eran tan productivas. Las nuevas variedades dieron una producción con unos altos niveles de Brix, y el clima fue el deseado. El clima del año pasado fue más bien seco, el tomate no quiere agua, y las temperaturas poco extremas. Aunque yo diría que mejor son tres las razones: Los agricultores cada vez están más preparados, las variedades han mejorado y el clima fue muy favorable. Son los tres factores que permitieron que la del año pasado fuera una campaña récord.

La campaña 2015 A falta de datos oficiales, la contratación de las industrias en Extremadura va a subir este año un 10 por ciento respecto al año pasado. Eso, sumando el tomate portugués. Quitando las hectáreas de Portugal, en Extremadura vamos a tener 21.300 hectáreas de tomate, un 10 por ciento más que el año pasado con 19.351. En el conjunto nacional, la superficie aumentará un 13,5 por ciento, en lo que influye el hecho de que Andalucía suba más de un 45 por ciento. Los andaluces pasarán de tener 4.225 hectáreas a 6.200. En España en esta campaña habrá 32.000 hectáreas frente a las 28.200 del año pasado.

Superficie contratada 2014 (ha)

2015 (ha)

Aumento

España

28.203

32.000

13,5%

Extremadura

19.351

21.300

10%

4.225

6.200

46,7%

Andalucía

Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la Mesa del Tomate

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Dando un repaso a la contratación, la subida viene concretamente de la mano de la industria cooperativa más de que de las industrias privadas.

En el aumento de la superficie puede haber influido el acoplamiento de las ayudas, pues, con la nueva PAC, el agricultor recibirá un plus de unos 200 euros por hectárea. Pero además venimos de un año en el que todos los agricultores tenían 100.000 kilos por hectárea, con una buena producción, y eso anima a volver a hacerlo. Pero lo que más influye es que el cultivo del maíz no está siendo interesante para el agricultor y no hay stock de tomate en el mundo. Se produce menos tomate del que se consume y eso hace que las expectativas aumenten.

Este año, las previsiones apuntan de nuevo a un rendimiento de 90 toneladas por hectárea, situándonos en la media del año pasado.

Esto a falta de ver cómo será la climatología, que es la que manda siempre, pero creo que será una buena campaña. Se espera con alegría por parte de la industria y del agricultor. ¿Fernando y a ti, como te gusta el tomate?

A mí el tomate que más me gusta es el tomate fresco, en ensalada, aunque el frito también. Soy un gran consumidor de tomate. Yo y toda mi familia.

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/ c fras Volumen de exportaciones e importaciones de tomate en 2014 Según la Base de Datos sobre Estadísticas de Comercio de Bienes publicada por las Naciones Unidas (UN COMTRADE), España fue el país que más exportó y Francia el que más importó en 2014.

El volumen de tomate exportado en el año 2014 alcanzó la cifra de 1.255.737 toneladas, siendo la pasta de tomate, o tomate concentrado, el que alcanzó las mayores cifras de exportación con un total de 787.112 toneladas. Le siguieron el tomate entero, pelado o en dado con 254.409 toneladas, las salsas de tomate con 191.544 y los zumos, en último lugar, con un volumen de exportaciones de 22.672 toneladas.

España el que más exportó en 2014 Entre los países que reportan datos sobre comercio de bienes a las Naciones Unidas, España destaca como principal país exportador de tomate en 2014 con un total de 476.201 toneladas. La mayoría de ellas de tomate concentrado, del que se exportaron 238.993. Le siguieron el tomate pelado con 161.140 toneladas, las salsas con 64.720 toneladas y los zumos con 11.348.

A España siguió Portugal con un total de 274.596 toneladas exportadas, la mayoría de ellas de tomate concentrado, 222.199, seguido de los zumos con 29.731, las salsas, con 29.533, y el tomate pelado, con 22.835 toneladas.

Junto a España y Portugal, otros tres países conforman la lista de los cinco primeros del ranking mundial. Son Turquía, con un total de 184.322 toneladas exportadas, Chile, con 105.143 y Grecia con 97.892.

En total, las exportaciones de tomate a nivel mundial alcanzaron la cifra de 1.255.737 toneladas, de las que 787.112 fueron de tomate concentrado, 254.409 de tomate pelado, entero o en dado, 191.544 de salsas y 22.672 de zumos.

El país más importador: Francia En lo que se refiere a las cifras de importaciones, el volumen mundial alcanzó la cantidad de 1.386.595 toneladas, de las que 501.494 fueron de pasta de tomate, 465.505 toneladas fueron salsas, 396.888, pelado, entero o en dado y 22.708 fueron zumos.

Por países, Francia fue el que más tomate compró en el año 2014 con un total de 385.446 toneladas, de las que 164.973 fueron salsas, 114.792 fueron de tomate entero, pelado o en dado, 101.143 correspondieron a tomate concentrado y 4.538 fueron zumos.

Ocupando el segundo lugar de entre los cinco primeros puestos del ranking mundial se encuentra Canadá con un total de 278.725 toneladas, seguida de Japón que importó 242.490 toneladas, España con un total de 76.656 y Suiza con 62.699.

IMPORTACIÓN EN 2014 ( TONELADAS ) 400.000 350.000 300.000 250.000 200.000 150.000 100.000 50.000 0 Francia

Cánada

Japón

España

Suiza

Fuente: UN COMTRADE

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/ internaci nal El flujo mundial del tomate se incrementó en un 15 por ciento en 2014 / El flujo mundial de tomate alcanzó el valor de 2.418.826.652 euros en el año 2014, lo que ha supuesto un incremento del 15 por ciento con respecto al año anterior, que alcanzó la cantidad de 2.111.036.436 euros.

Por especialidades, el cambio más significativo entre un ejercicio y otro se produjo en el tomate entero, pelado o dado, que experimentó una subida de un 117 por ciento en 2014 alcanzando los 484.708.736 euros a diferencia de 2013 cuando ese valor fue de 223.171.771 euros.

También el tomate concentrado experimentó una subida pasando de 1.062.194.216 euros en 2013 a 1.187.569.818 en 2014, lo que supuso un incremento del 12 por ciento.

El valor de las salsas, que pasó de 779.953.828 euros en 2013 a 721.582.857 euros en 2014, supuso un descenso del 7 por ciento. Una notable caída experimentaron también los zumos, que sufrieron una bajada del 45 por ciento, pasando de 45.716.621 euros en 2013 a 24.965.241 en 2014.

Producción toneladas

2013

4.000.000 3.000.000 2.000.000 1.000.000 0

200210

200290

200950 Tipo de Elaboración

200210 Entero, pelado y dado 200290 Concentrado y polvo 200950 Zumos 200320 Salsas

210320

TOTAL

2014

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Producción (MILES DE EUROS)

2013

2014

4.000.000 3.000.000 2.000.000 1.000.000 0 Miles de €

200210

200290

200950

210320

TOTAL

Tipo de Elaboración 200210 Entero, pelado y dado 200290 Concentrado y polvo 200950 Zumos 200320 Salsas

Subió el volumen El incremento del valor del tomate para industria en el mercado tuvo su traducción también en las cifras de producción, siendo el tomate pelado, entero o en dado el que mayor subida experimentó.

Las cifras globales de producción en 2014 alcanzaron las 2.645.991 toneladas, cantidad ligeramente superior a las 2.531.833 toneladas alcanzadas en 2013.

Por especialidades, los zumos y las salsas de tomate sufrieron una reducción pasando los zumos de un volumen total de 89.927 toneladas en 2013 a 45.677 en 2014. Un poco menos bajaron las salsas que pasaron de 792.215 en 2013 a 658.422 en 2014.

Por otra parte, también el tomate concentrado experimentó un ligero descenso de un año para otro, pasando de 1.327.830 toneladas en 2013 a 1.290.007 en 2014.

Por último, fue el tomate en dado, entero o pelado el que consiguió un notable ascenso en la campaña de 2014 cuando se alcanzó la cifra de 651.884 toneladas, más del doble de las 321.860 toneladas de 2013.

Fuente: UN COMTRADE

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/ ctae Hacia la perfección del tomate / Desde que en el año 2001 el Centro Tecnológico Nacional Agroalimentario “Extremadura”, CTAEX, abriera sus puertas, su vinculación con el tomate de industria ha sido una constante. El Centro participa desde entonces en numerosos proyectos de investigación orientados en su mayoría a la mejora del producto de cara a su transformación en las numerosas industrias de la región.

Curiosamente, CTAEX se encuentra flanqueado por algunas de ellas, algo nada extraño, dada su ubicación en las Vegas Bajas de Guadiana. Una de las zonas de producción extremeñas más emblemáticas y generosas con este producto.

El Área de Agricultura de CTAEX, que coordina y dirige la Dra. Elena Ordiales, conoce bien cómo han evolucionado a lo largo del tiempo las líneas de investigación en el tomate de industria. Desde este departamento se han desarrollado numerosos proyectos orientados a conseguir una mayor eficiencia y mejora del producto.

En la actualidad, son varias las líneas de trabajo desarrolladas en este departamento dirigidas al tomate para procesado. Entre ellas, destacan por un lado los trabajos de evaluación agronómica de variedades de tomate. Determinar qué características morfológicas y de calidad tiene de cara al producto final. Para que lo entienda todo el mundo, cuando las multinacionales tienen las semillas en fase comercial o pre comercial contratan los servicios de CTAEX “para que nosotros en campo, en condiciones no controladas por la empresa que las desarrolla, las cultivemos como si fuésemos un agricultor. Después, en base a los resultados de rendimiento, maduración y calidad del tomate obtenidos, son utilizados por las empresas de distintas formas”, explica Elena Ordiales.

En otros casos, CTAEX realiza ensayos para probar la eficiencia y resultado de diferentes productos desarrollados por empresas, orientados a aumentar el color del tomate, su grado Brix, o a mejorar su cuajado y maduración. Son productos orientados a mejorar, en definitiva, la productividad del cultivo y la materia prima.

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Asimismo, se han desarrollado trabajos para probar y optimizar la eficiencia de nuevas líneas de fertilizantes, así como ensayos de riego para ajustar las necesidades de riego del cultivo y reducir el gasto energético y de agua que conlleva su producción.

En campañas anteriores, explica Ordiales, “hemos trabajado para Agroseguros que quería que evaluásemos los daños producidos por la lluvia en el tomate”. Durante dos años hicimos ese tipo de ensayos en instalaciones del Centro y en otras 15 parcelas de agricultores de la región, para detectar enfermedades generadas por la lluvia y saber cómo afectaban al producto final”.

TOMATEC: Un ambicioso proyecto Pero si existe un proyecto ambicioso y destacado entre los demás ese es el proyecto TOMATEC, de la convocatoria FEDER – INNTERCONECTA del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), cofinanciado por el Gobierno de Extremadura. Este proyecto se encuentra en su fase final y se ha desarrollado bajo varias y muy diferentes líneas de investigación.

Para la responsable del departamento de Agricultura de CTAEX, lo más novedoso ha sido probar nuevos productos elicitores en las plantas de tomate. Se trata de productos naturales elaborados a partir de las moléculas extraídas de hongos, bacterias o de plantas que estimulan los mecanismo de defensa innata de las plantas haciéndolas más resistente a las enfermedades. “Al aplicar los elicitores se consigue un efecto vacuna, quedando las plantas protegidas no sólo frente a enfermedades (estrés biótico), sino también a efectos causados por condiciones climáticas adversas (estrés abiótico) Finalmente, las plantas “se convierten en plantas más productivas y con frutos de mejor calidad”, asegura Ordiales tras probar esta línea de producto.

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Otra línea agrícola de este proyecto ha consistido en el aislamiento de microorganismos autóctonos potencialmente beneficiosos para la agricultura, a partir de los cuales se puedan formular productos aplicables al cultivo en el campo, como fitosanitarios naturales, redundando en un producto final con menos residuos de pesticidas químicos, y por tanto más saludable.

La tercera parte del proyecto, una de las más extensas, así como relevante y curiosa, está enfocada a la agricultura de precisión, es decir, la aplicación de técnicas novedosas al campo basadas en las nuevas tecnologías.

En este sentido, bajo este epígrafe se han desarrollado varias líneas de investigación, una de las cuales y gracias al procesado de imagen, persigue la detección de malas hierbas en el campo para aplicar tratamientos localizados, con el consiguiente ahorro energético y económico, además del beneficio medioambiental. Por otro lado, el proyecto ha contemplado el establecimiento de varias estaciones meteorológicas para controlar in situ las condiciones ambientales y prever o estimar en base a ello la cantidad de agua de riego aplicable. En esta misma línea y en aras a la obtención de una mejor y mayor cosecha, el agricultor podrá saber también cuando es el mejor momento para la misma, lo que además le permitirá conocer si el estado del fruto es óptimo para su entrega en fábrica. En este último aspecto, también la agricultura de precisión y este proyecto, permitirán desarrollar un sistema de control de flota de vehículos para optimizar la entrega del producto a la industria. Hasta hora, las entregas no están suficientemente coordinadas, con la consiguiente merma que en ocasiones tiene para el fruto. “Con este sistema se pretende organizar la entrega de manera que la fábrica siempre tenga tomate, pero el fruto no pierda calidad mientras espera para su transformación”, explica la investigadora de CTAEX.

Hacia un tomate sostenible En la actualidad, las líneas de investigación del tomate de industria se ven afectadas por las exigencias y cambios de la normativa europea, así como de la mentalidad del productor y el consumidor, siendo este último, cada vez más exigente con la calidad del producto.

En este sentido, la investigación en esta materia apunta a la utilización de productos más naturales y menos peligrosos y a la supresión de materias activas químicas utilizadas como herbicidas, fungicidas e insecticidas. “Por ello, no queda otro remedio que desarrollar nuevas materias activas que no sean químicas, que sean naturales o biológicas y por tanto sean menos contaminantes tanto para el medio ambiente, como para las personas, obteniendo un producto final más saludable, pues los consumidores somos cada vez más exigentes”, declara Ordiales.

Menos inputs, ahorro energético, ahorro económico y un producto final más saludable.

Esos son los retos. Ese, el objetivo. Es la agricultura sostenible, la agricultura del siglo XXI también aplicada al tomate.

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/ I+d+ Objetivo 120: La tecnología rompe barreras en el tomate de industria / El tomate de industria es el cultivo hortícola más importante de la Región, con 20.000 hectáreas de cultivo y 1.8 millones de toneladas al año. Este cultivo se introdujo en las Vegas del Guadiana en los años sesenta. El incremento en la rentabilidad del cultivo en las décadas de los 90 y la primera década del presente siglo, fue debido principalmente al aumento en la producción, pasando de 40 t/ha de media regional en los años ochenta hasta las actuales 80 t/ha. Este salto ha sido posible con la mejora en las variedades (más productivas y mejor adaptadas) y en las técnicas culturales. En este sentido la extensión del riego localizado por las zonas de cultivo supuso un salto importante en la productividad del mismo. Sin embargo, la continua tendencia a la baja en los precios percibidos por los agricultores, hace que la rentabilidad dependa cada vez más de un delicado equilibrio entre producción y costes de cultivo, de forma que la eficiencia en el uso de los recursos, entendida como los medios necesarios para obtener un kg de producto, es fundamental. Por otra parte, aspectos relacionados con la calidad del tomate en un concepto amplio, que comprende no solo los tradicionales de sólidos solubles, acidez y color, sino otros relacionados con la presencia de compuestos funcionales y/o la ausencia de residuos de productos agroquímicos, pueden modificar el valor del mismo como materia prima para una industria agroalimentaria clave en Extremadura. Todo ello unido a unas condiciones de producción “sostenibles”, cada vez más exigentes en cuanto a reducción del impacto ambiental y uso racional de los medios de producción.

En este contexto, con producciones medias de 80 t/ha, podría considerarse que aún existe margen para mejorar el cultivo del tomate de industria en Extremadura. En el año 2005 la catedrática Teresa Bartolomé de la Escuela de Ingenierías Agrarias de Badajoz señalaba como objetivo 120 t/ha, que entonces pudo parecer ambicioso, pero la información obtenida en ensayos de investigación en la Región, junto con los datos medios de producción de otras zonas productoras, lo señalan como accesible y más realista que las 200 t/ha que planteaban los californianos en los años 90. Las claves para el avance serán la incorporación al cultivo de los conocimientos y tecnologías disponibles. Gracias a la investigación realizada por equipos de todo el Mundo sobre tomate, se dispone de una buena base de información sobre como afecta la forma de realizar las prácticas culturales a la producción y calidad. Esto hace posible diseñar sistemas productivos adaptados a la demanda, en función de las exigencias de los mercados. Este artículo se centrará en el riego, tratando de dar una visión sobre como puede afectar la gestión del agua a los aspectos mencionados, dando especial protagonismo a los avances obtenidos en trabajos realizados en Extremadura

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Las investigaciones sobre riego realizadas en la Región han sido muy diversas, inicialmente con riego por gravedad, abordando desde aspectos básicos como el cálculo de las necesidades hídricas, hasta cuestiones prácticas sobre como afectan a la producción y calidad la periodicidad y volumen de agua en cada riego, la fecha del último riego, sin olvidar propuestas técnicas para mejorar la eficiencia de riego. Como ya se ha mencionado anteriormente la introducción del riego por goteo ha supuesto un antes y un después en las prácticas de cultivo en su conjunto, además de un importante salto en la producción. El riego localizado ha supuesto un avance técnico que ha hecho posible una gestión más eficiente del agua, no solo por la evidente mejora en la eficiencia de riego que supone el sistema, sino que al facilitar el control del agua aplicada es posible adoptar programaciones ajustadas a las necesidades reales del cultivo, así como utilizar el propio riego como un elemento de control del cultivo, para potenciar aspectos que se puedan considerar favorables o propiciar un mayor ahorro de agua. En este sentido el concepto de “Eficiencia en el Uso del agua” es interesante ya que se refiere a los kilos de producto comercial que podemos obtener por cada m3 de agua aportada. Este dato puede ser muy útil para ajustar la superficie de cultivo al agua disponible o puede ser un objetivo en sí mismo si en algún momento se incentiva de forma real una producción más eficiente.

Una forma clara de mejorar esta eficiencia es adoptar lo que se conocen como “Estrategias de Riego Deficitario”que persiguen un ahorro de agua y/o influir de forma positiva en los parámetros de calidad del cultivo. Dentro de estas estrategias existen dos modalidades: el “Riego Deficitario Sostenido” y el “Riego Deficitario Controlado”. La primera de ellas es fácilmente aplicable a condiciones de riego por gravedad distanciando los riegos, consiguiéndose una mejora considerable en la calidad del fruto, valorada como concentración de sólidos solubles, pero a costa de una pérdida de cosecha, que será mayor, cuanto mayor sea el recorte de agua. Con riego localizado se puede aplicar un déficit ligero y prolongado que tenga un menor impacto en la cosecha. Dentro del segundo grupo de estrategias, estaría el corte anticipado del riego en la última fase del cultivo, aplicables también con ambos sistemas de riego. Esta práctica es más recomendable ya que está demostrando que el periodo comprendido entre final del cuajado y maduración (crecimiento y maduración del fruto), es el mas adecuado para reducir el agua aplicada al cultivo por debajo de sus necesidades hídricas, sin reducción significativa de la producción. El éxito de esta técnica va a depende de una buena adaptación del momento de corte y/o reducción de la dosis de riego al sistema de riego, pero sobre todo al tipo de suelo, evitando que el cultivo experimente una sequía severa o que el recorte sea tan ligero que no se obtenga apenas ahorro de agua y/o mejora en la calidad. Se trata de poner a disposición del agricultor una herramienta que le permita adoptar decisiones que le conduzcan a producir con menos dinero un producto de más valor.

Entrega de premios a los mejores trabajos científicos

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En los estudios realizados en la Finca La Orden se han determinado las necesidades hídricas del tomate de industria a lo largo de las diferentes fases del cultivo para las Vegas del Guadiana. Una vez que el agricultor conoce las necesidades del cultivo y la influencia del riego en los diferentes estados fenologicos, es posible establecer estrategias para mantener la productividad del cultivo, mejorar la calidad y ahorrar agua. Durante los años 2011 y 2012 se realizó un ensayo de campo para obtener la información necesaria para proponer la estrategia que compatibilizara producción y calidad evaluando dos factores: (1) el momento de aplicación del riego deficitario y (2) las dosis de riego. Un aspecto fundamental en este estudio era valorar la pérdida de producción que ocasionaba provocar una sequía al cultivo en los diferentes estados fenológicos de la planta, para señalar al agricultor las etapas en las que debe ser especialmente cuidadoso con el riego y “valorar” la incidencia de algunas prácticas “tradicionales “ en la zona. Los resultados demostraron que transplante y floración son los dos periodos más sensibles al déficit hídrico, de forma que una sequía, incluso leve, en estos periodos se traduce en una pérdida irreversible de producción, que no se llega a compensar con el incremento en el ºBrix que se produce. Sin embargo, el riego deficitario en las últimas fases del cultivo (desde el virado de color del fruto) permiten un ahorro considerable de agua (entre un 10 y un 17%), con el consecuente ahorro energético y económico, sin afectar a la producción final, mejorando significativamente la calidad. La magnitud del ahorro, así como de la mejora dependerá de lo “arriesgado” que sea el regante: recortes pequeños suponen poco riesgo y pocos beneficios, mejorando la situación para los más osados. Esto quiere decir que estas prácticas entrañan “peligro”, que se puede minimizar con la utilización de medios técnicos. Medidas rápidas de efectuar, como el potencia hídrico foliar y la evolución de suelo sombreado pueden ayudar a detectar la falta de agua en fases sensibles y a ajustar la dosis correcta en las más tolerantes a la sequía desde el punto de vista productivo. Estas medidas son sencillas y se dispone de tablas de referencia para poder interpretar los valores obtenidos y realizar los ajustes correspondientes.

Trabajos recientes (2011-2014), financiado por el INIA y cofinanciado con fondos FEDER, han servido para dar un paso más en estas estrategias y valorar la incidencia de las mismas no solo sobre la producción, sino también en la calidad organoléptica y funcional, determinando como afectan al contenido de compuestos antioxidantes y aromáticos. De los resultados obtenidos en este proyecto se deduce que el estrés hidrico puede ser utilizado como una herramienta de gestion para manipular los componentes del sabor de los frutos existiendo un aumento de los niveles de azucares, acidez valorable, vitamina C y aromas volátiles.

Toda esta información que “a priori” puede ser muy útil para la programación del riego, cuando se traslada a una parcela real de cultivo se convierte en “cuestionable” y la primera pregunta que surge es como responde el cultivo frente a una determinada cantidad de agua aplicada con el sistema de riego: ¿Queda todo esa agua disponible para las plantas?¿Se aprovecha por igual en todas las zonas de la parcela? A lo que hay que unir otras cuestiones como si la dosis que hemos programado en base a cálculos teóricos satisface las necesidades reales de las plantas en ese momento. Factores meteorológicos, la variedad, la heterogeneidad del suelo dentro de la parcela y la falta de uniformidad del sistema de riego, pueden hacer variar las necesidades y disponibilidad de agua para el cultivo en el espacio (dentro de la parcela) y en el tiempo (diferencias entre necesidades estimadas y reales). La consecuencia es que tendremos cierta incertidumbre respecto de si estamos regando bien o no y por otra parte, en una misma parcela nos podremos encontrar con zonas sometidas a déficit y sobrerregadas. La buena noticia es que existen tecnologías al alcance del agricultor, que permiten saber el estado hídrico de las plantas en un determinado momento, y en las diferentes zonas de la parcela.

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Trabajos actuales en el CICYTEX, inciden sobre el desarrollo y puesta a punto para su uso por parte del agricultor de métodos rápidos de diagnóstico del estado del cultivo, tanto a nivel de suelo como de planta, como apoyo a una toma de decisiones, que permita adoptar las más adecuadas para el conjunto de la parcela, de forma que incida en la producción e ingresos del conjunto de la explotación. Así, sensores de humedad de suelo facilitan el seguimiento del movimiento de agua en el suelo, interesante en cualquier sistema de riego, pero fundamental cuando se adopta riego enterrado. La utilidad de estos sensores depende de la correcta ubicación y de la interpretación de los datos que proporcionan de forma continua, para lo que es necesario desarrollar los protocolos de instalación adecuados para el cultivo, así como los criterios para adoptar niveles “críticos” de suficiencia y falta de agua. Las tecnologías de informática y telecomunicaciones están jugando un papel fundamental para hacer que estos sistemas sean útiles: facilitan el procesado de los datos para poner la información a disposición, en formatos fácilmente interpretables para la toma decisiones. La oferta comercial de estos equipos es cada vez mayor, con diferencias en cuanto a los tipos de sensores, así como en la obtención y procesado de los datos. Desde el CICYTEX se ha trabajado con diferentes tipos de sondas de humedad lo que ha permitido hacer una valoración objetiva de las ventajas e inconvenientes de cada uno de los sistemas.

Los sensores de planta se centrar en utilizar la propia planta para diagnosticar el estado en que se encuentra respecto a la disponibilidad de agua, ya que es importante no solo saber que el agua está disponible, sino si la está utilizando correctamente. Esta información puede ser una gran herramienta de gestión, permitiendonos adelantarnos a situaciones de estrés por falta de agua en el cultivo antes de que pueda ser demasiado tarde para poder actuar sobre el mismo sin provocar una perdida de producción o ajustar nuestras dosis de riego al desarrollo real del cultivo. El enfoque es tan sencillo como obtener valores numéricos de la situación de la planta, que comparados con unos valores tabulados nos permita diagnosticar si el estado es correcto con tres posibilidades: exceso, correcto, deficitario. Se utilizan desde sensores tan simples como una cámara de fotos o un termómetro, que miden el tamaño de las plantas y/o el color o la temperatura de la cubierta; hasta otros algo más complejos como una cámara de presión para determinar estado hídrico a través de medidas en hojas. Estas medidas determinan si el desarrollo de la planta está siendo el esperable y si experimenta o no sequía. Desde el CICYTEX, este tipo de medidas se han integrado ya en modelos sencillos para corregir programaciones de riego basadas en el cálculo de las necesidades hídricas, como las que se facilitan para tomate de industria en la página web del Servicio de Asesoramiento al Regante del Gobierno de Extremadura (REDAREX).

Los sensores de refectancia miden el color que refleja las plantas, trabajando tanto en zonas del campo visible como el infrarrojo, indicándonos matices de cambios de tonalidades de color antes de que puedan ser apreciados por el ojo humano. A través de la combinación de las distintas bandas del espectro (verde, Rojo e infrarrojo) pueden indicarnos una situación de menor desarrollo del cultivo y con lo cual una situación de estrés, índices como el NVDI (índice que combina las radiaciones en el rojo y en el infrarrojo) y NVDIG (índice que combinan las radiaciones en verde y en infrarrojo), se están poniendo a punto en la Finca La Orden para determinar situaciones de deficiencias. Aunque en este caso resultan más adecuados para estudios de estado nutricional, también permiten detectar zonas con menor desarrollo de cultivo por falta de agua, así como para predecir la productividad del cultivo antes de la cosecha. Estos equipos, al igual que las cámaras térmicas, tienen el gran atractivo de que al ser sensores que miden sin contacto y de forma muy rápida, se puede complementar con tecnología GPS para elaborar mapas del conjunto de la parcela. Este avance es importante para transferir información desde parcelas experimentales hacia parcelas comerciales, detectando y cuantificando la heterogeneidad. En esta línea se incide también con técnicas de mapeo de suelos con sensores de conductividad aparente y pH para obtener, entre otras cosas, mapas de textura de suelo y de agua útil para el cultivo. Las medidas se pueden efectuar, desde el suelo, utilizando la propia maquinaria agrícola o bien con sistemas aerotransportados (drones, vuelos tripulados, satélites de alta resolución, etc.).

Actualmente podemos decir que tenemos herramientas para saber cuanto agua tenemos que aplicar al cultivo del tomate para una mejor productividad del cultivo: disponemos de estrategias de riego diferentes que pueden ayudarnos a mejorar diferentes parámetros de calidad de nuestro cultivo según las exigencias del mercado, y por ultimo tenemos diferentes sensores que van a ajustar las dosis teóricas a situaciones concretas de cada parcela de cultivo. El siguiente paso, en el que ya se está trabajando en varios proyectos, es establecer modelos de gestión de riego o modelos de cultivo que permitan integrar todos estos conceptos que nos lleven a una mayor automatización de nuestro sistema de riego y rapidez en el control y toma de decisiones en el cultivo del tomate. La clave para que todos estos avances rompan realmente la barrera de las 80 tn/ha está en el proceso de adopción por parte de las explotaciones: la tecnología debe ser útil, debe estar al alcance de los usuarios y debe dar lugar a avances claros, que mejoren de forma apreciable las cuentas de la explotación, de forma que se justifique la inversión económica y esfuerzo que supone la implantación.

Carlos Campillo Torres y Henar Prieto Losada Investigadores de Grupo de riego y nutrición del CICYTEX

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SYNGENTA: en el cultivo de tomate de industria / Syngenta, empresa biotecnológica implantada en decenas de países de todo el mundo, vuelve a poner su foco de innovación en el tomate de industria. Fruto de ese empeño es su nuevo programa de investigación de variedades de tomate de procesado. Pero ¿cuáles son las características de nuestro programa y qué ventajas nos aporta para Iberia?

Sobre el programa desarrollado por Syngenta en España y Portugal, se ha trabajado en el desarrollo de nuevas variedades en los últimos cuatro años y el año pasado se comercializaron las primeras variedades GAMLEX, IFOX e IBIX. A nivel europeo, y concretamente en Italia, el programa se empezó a trabajar unos años antes y actualmente Syngenta cuenta con una cuota de mercado cercana al 10%. Por todo ello, en Syngenta sabemos que contamos con un programa con potencial de crecimiento.

Sobre el programa de investigación de tomate de industria de Syngenta, la empresa trabaja en el desarrollo de una gama de variedades con un amplio rango de fechas de trasplante para cubrir todos los ciclos de plantación, desde ciclos tempranos a los más tardíos.

Sobre la arquitectura de planta, destaca el hecho de que son plantas generalmente vigorosas, forrajeras, que proporcionan una buena cobertura de los frutos. Son plantas rústicas con una buena adaptabilidad a diferentes tipos de terrenos.

Asimismo, a pesar del vigor, las variedades cuentan con un buen cuaje con altas temperaturas, lo que ofrece una buena producción.

Respecto a los frutos, destaca la calidad de los mismos en cuanto a color rojo intenso, un buen nivel de ºBrix y una buena dureza y conservación. En lo que se refiere a su forma, trabajamos con frutos redondos y cuadrados destinados principalmente para concentrado, salsa, triturado y dados, aunque el programa cuenta también con líneas de tomate alargado que abarca otras posibilidades como es el pelado.

Destaca a su vez, el bajo nivel de defectos y problemas físicos, como pueden ser la podredumbre apical; un alto porcentaje de frutos partenocárpicos o el rajado de frutos, entre otros.

Finalmente, en cuanto a resistencias, destaca un amplio abanico de enfermedades del suelo, como verticilium, fusarium, los problemas causados por los nematodos o las bacterias, como es la resistencia a la pseudomonas tomato. Importante es también las resistencias a los virus, como son el TMV y bronceado o spotted.

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Además de las variedades ya comerciales, como son Gamlex, Ifox e Ibix, Syngenta lanzará esta campaña una nueva batería de variedades para completar su catálogo comercial: Murphy, para trasplantes tempranos, Simplex, para medio-temprano y medio, Suomy y NPT119, para trasplantes medios y medio-tardíos.

Syngenta cuenta con un programa de tomate de industria competitivo, con expectativas de crecimiento, con variedades que aportan soluciones integradas al productor a nivel de ciclos, resistencias y mejor cobertura de frutos. Destacan por último, la existencia de variedades selecciones y testadas para cubrir las necesidades y aportar soluciones a las demandas de la industria para los distintos procesados.

Syngenta es una de las principales empresas biotecnológicas del mundo. Cuenta con más de 27.000 empleados en más de 90 países, que ofrecen soluciones a medida de las necesidades individuales de los agricultores de decenas de países y que trabajan bajo un mismo propósito.

Rafael Salinas Responsable de Tomate Iberia.

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/ innovaciones y product s 01. Nuevos plásticos biodegradables inspirados en la cutina vegetal / La conservación medioambiental y la gestión de residuos demandan nuevos envases biodegradables que sustituyan a aquellos que son contaminantes tanto en su proceso de síntesis como en su posterior desecho. Además, en el caso de la industria alimentaria, deben ser seguros y no conllevar riesgos de salud pública como es el caso de los plásticos y resinas formuladas con bisfenol A (BPA).

Objetivamente se puede decir que las plantas superiores, como el tomate, han desarrollado una cutícula o piel para “envasar” sus frutos. La réplica de esta cutícula vegetal en el laboratorio permitiría disponer de un material optimizado por el proceso de evolución natural y que reúne dos características ideales de un envase plástico alimentario: la biodegradabilidad y la inocuidad.

Fuente: Revista Alimentaria

02. El lixiviado de vermicompost mejora el crecimiento de plantines de tomate / En todo el mundo las condiciones de sequía, temperaturas extremas, y suelos con alto contenido de sales, tienen efectos negativos en los cultivos de tomate. Estos procesos naturales reducen el contenido de nutrientes en el suelo y el ciclo de vida de las plantas, afectando así el crecimiento de las mismas y el rendimiento, lo que finalmente se traduce en una baja rentabilidad para los productores de tomate.

Como una alternativa para las prácticas agrícolas insostenibles como el uso de fertilizantes sintéticos, los agricultores están buscando mejoradores del suelo amigables ambientalmente, tales como el lixiviado de vermicompost, un líquido orgánico producido a partir de heces y de material digerido por lombrices de tierra, que se genera durante el proceso de vermicompostaje.

“Las heces de las lombrices de tierra presentes en el vermicompost contienen proteínas, vitaminas, y micro y macronutrientes como nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, y magnesio”, explicó Johannes Van Staden, autor principal de un estudio reciente publicado en HortScience. agriculturers.com. Van Staden y sus colegas Mayashree Chinsamy, y Manoj Kulkarni, del Centro de Investigación para el Cultivo y Desarrollo Vegetal de la Universidad de KwaZulu-Natal Pietermaritzburg, Sudáfrica, estudiaron los efectos del lixiviado de vermicompost (LVC) en plantines de tomate sujetos a varias temperaturas y niveles de estrés hídrico.

Fuente: eurekalert.org

03. Tratamientos de ácido abscísico pueden prevenir la podredumbre apical en tomates / Las plantas están sujetas a numerosos estreses ambientales, sequía, temperaturas extremas, y exceso de luz, los que pueden afectar el crecimiento y calidad de las mismas. Buscando métodos para mejorar la calidad de las plantas de tomate, investigadores de la Universidad de Tennessee se volvieron hacia el ácido abscísico, una fitohormona conocida por ayudar a las plantas a aclimatarse a estos tipos severos de estrés ambiental. Los resultados de la investigación y las recomendaciones para agricultores fueron publicadas en HortScience.

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De acuerdo al autor del estudio Carl Sams, el ácido Abscísico (ABA) tiene un efecto positivo en los flujos de nutrientes que ocurren en las plantas. Por ejemplo, puede promover la captación de calcio en plantas de tomate. Los niveles adecuados de calcio en tomate tienen efectos positivos en la calidad de la fruta -especialmente en la firmeza- mientras que una captación y movilidad insuficiente de calcio en la planta puede dar por resultado un desorden llamado podredumbre apical. agriculturers.com. La podredumbre apical, ocurre por lo general en plantas que tienen un suministro adecuado de calcio, pero que son cultivadas en condiciones ambientales desafiantes, como alta humedad, alta intensidad de luz, y altas temperaturas, las que inhiben el transporte del calcio hacia el tejido distal de los frutos, que se encuentra en rápido crecimiento. La podredumbre apical también puede ocurrir cuando las plantas experimentan una demanda mayor de calcio en las primeras etapas del desarrollo de los frutos.

Fuente: Agriculturers

04. Crean tomates modificados por ingeniería genética para eliminar el colesterol / En un experimento de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), se ha logrado obtener, por ingeniería genética, tomates que producen un péptido que al comerlos elimina al colesterol malo, emulando las acciones del colesterol bueno (colesterol HDL, de lipoproteínas de alta densidad), que es conocido por su papel al eliminar de las arterias al colesterol malo (colesterol LDL, de lipoproteínas de baja densidad).

Un equipo de los doctores preparó por ingeniería genética los citados tomates y, en forma molida y liofilizada, los agregó a la dieta rica en grasas, típica de los humanos en las naciones industrializadas, con la que se alimentó a unos ratones que no poseían la capacidad de eliminar el colesterol malo de su sangre y que inexorablemente desarrollaban inflamación y aterosclerosis cuando consumían una dieta rica en grasas.

Los investigadores constataron que los ratones que comieron los tomates enriquecidos con el péptido, los cuales representaron el 2,2 por ciento de su dieta rica en grasas, tuvieron una acumulación significativamente menor de placa aterosclerótica, menores niveles de inflamación, mayor actividad de una enzima antioxidante asociada con el colesterol bueno, niveles más altos de colesterol bueno, y menores niveles de un ácido promotor de tumores que acelera la acumulación de placa en las arterias de modelos animales.

Fuente: agroinformacion.com

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