El 10 de diciembre 1948, 48 países, incluida Guatemala, firmaron la Declaración Universal de Derechos Humanos. En esta declaración se incluye el derecho a la alimentación como derecho humano esencial. Desde entonces, se han creado y firmado varios otros tratados internacionales con el fin de proporcionar más detalles sobre las obligaciones que tienen todos los Estados de garantizar que se respete, proteja y cumpla el derecho a la alimentación de las personas.